Hoy es el último entrenamiento del año. Vamos a terminarlo líderes de la Liga y de nuestro grupo de Champions. Este año no nos para nadie. Yo incluso me veo mejor que la otra temporada, con más fuerza y con más ánimo. Ayuda también que tengo a  Maya conmigo y que voy a ser padre. Joder, es que cada vez que lo pienso no puedo evitar sentir que soy muy feliz. 

Ayer le hicieron la primera ecografía a Maya y pudimos ver a nuestro bebe. Fue una sensación maravillosa. Aún es pronto para saber el sexo, pero lo importante es que está bien. Tiene las medidas y el peso perfecto y no paraba de moverse. Pudimos escuchar su corazón y nos emocionamos muchísimo. Es una sensación increíble saber que está creciendo dentro de Maya.

Ella también está bastante bien. Ya no vomita tanto por las mañanas y lo está llevando fenomenal. Lo único es que la ginecóloga le ha dicho que tiene que comer más porque está un poco baja de peso, aunque es normal por los vómitos. Así que me estoy volviendo súper-pesado con el tema de la alimentación.

El míster da por finalizado el entrenamiento y todos aplaudimos y gritamos ¡Feliz Navidad!. Me acerco a Marco y a Isco que van camino del vestuario. El malagueño lleva unos días de bajón y lo veo un poco serio. Me acerco a él y rodeo sus hombros con mis brazos.

- Magic Isco -le digo revolviéndole el pelo- ¿Qué te pasa?

- Nada, ¿por? -contesta sin protestar por lo del pelo con lo que le molesta que le haga eso

- Es que llevas unos días muy serio, a ti te pasa algo

- No, no es nada...

- Sí que lo es -le dice Marco- te conozco y no te encuentras bien

Enfilamos el pasillo y nos paramos los tres en un aparte donde no pasa nadie. Marco para a Isco con su brazo para que no siga andando.

- Venga niño, ¿Qué te pasa? -le pregunta Marco

- No sé tío -contesta Isco llevándose la mano a la cara- es que últimamente estoy planteándome mi vida

- ¿Y eso?

- Pues porque os veo a todos que sois o vais a ser padres...tú, Nacho que está a punto, Marcos y yo me veo con 28 años y como que me quedo atrás

- A ver Isco -le digo- eres joven, no creo que te estés quedando atrás. Si lo normal es tener hijos más tarde

- Sí, claro -dice Marco riéndose- los anormales y asaltacunas somos nosotros

- Ya, pero me dais envidia sana tíos -dice Isco con algo de tristeza en su voz- Sara y yo llevamos 5 años saliendo, vivimos juntos y no sé...cómo que me gustaría ser padre

- ¿Y ella que dice? -le pregunta Marco rascándose la barbilla

- Ese es el problema -contesta Isco apoyándose en la pared y suspirando apesadumbrado- que creo que ella no quiere. Siempre que saco el tema me dice lo mismo...que aún es muy joven y que quiere centrarse en su carrera

- Bueno -le digo con cuidado- puede que ella tenga razón, ya te digo yo que aún eres joven Isco

- Lo sé -contesta él- pero tengo la sensación de que ella no quiere tener hijos, ni ahora ni nunca

- Pues eso es algo que tenéis que hablar hermano -le contesta Marco dándole una palmada en la espalda

- Ya, ¿y si no quiere? -pregunta Isco

- Pues eso lo tienes que decidir tú...si quieres más ser padre o a ella...

26 de diciembre

Hemos llegado a Londres hace media hora. El piso de Marcos es una pasada. Está cerca del estadio del Arsenal. Dice que lo compró pensando que se quedaría aquí los 5 años de contrato cuando lo ficharon. Es un ático de 3 dormitorios con cocina americana, 2 baños y una terraza enorme. Dice que se lo había alquilado a un compañero, y que ahora mismo lo tiene vacío. Tiene amistad con uno de sus vecinos, y él es quien se encarga de limpiarlo y de mantenerlo el resto del año.

La Navidad ha sido increíble. Cenamos en Nochebuena en casa de sus padres. Había como 30 personas y me encantó el ambiente. Conocí a un montón de primos, tíos y a sus abuelos. Me he sentido desde el primer momento parte de su familia. Al final tuvimos que decirles que estaba embarazada a todos y la alegría que se llevaron fue impresionante. Me encanta su madre. Me llevo muy bien con ella. De hecho solemos hablar muy a menudo, o nos mandamos mensajes todos los días. Es un encanto. Y me recordó la conversación que tuvimos en los baños de París. Al final tenía razón.

- ¿Cómo estás? -me pregunta Marcos mientras me abraza. Estoy en la terraza mirando los edificios y el paisaje

- Bien, con hambre -le digo dándome la vuelta para darle un beso

- Ya, me lo imaginaba. ¿Te parece que demos un paseo para que veas todo esto, y luego vamos a comer?

- Vale. Tengo muchas ganas de ver Londres, ¿sabes? Es mi primer viaje fuera de España

- Pues tendré que hacer que sea inolvidable -Marcos me besa el cuello y yo me rio de las cosquillas que me hace

- Pues quiero ver un montón de cosas.

Y mientras cogemos las chaquetas para irnos le digo a Marcos que quiero ver Nothing Hill, la abadía de Westminster, el Big Beng...él se ríe y me dice que no me preocupe que lo veremos. Mañana iremos al Parque de Harry Potter, es lo que más ilusión me hace ir. Marcos y yo vamos por la calle abrazados. Hace bastante frio en Londres, pero a pesar de eso, me encanta. Damos un paseo por las calles cercanas al Emirates Stadium, el cual vemos por fuera. También es una pasada. Es un estadio bastante moderno, acorde con los edificios de alrededor.

Marcos me lleva a comer a un restaurante indio. Me explica que aquí en el Reino Unido, este tipo de restaurantes son como los Restaurantes Chinos en España, que hay un montón. Entramos en uno de ellos. Me cuenta que casi siempre pedía a domicilio de este sitio porque tiene una comida muy buena.  Es un restaurante familiar. Hay pocas mesas y nos sirven enseguida. Pedimos algunos entrantes, arroz, Pollo Korma para mi y Cordero jalfrezzi para Marcos porque dice que le apetece algo más picante. Lo acompañamos con Nan de coco.

- ¿Cómo estás preciosa? - me dice Marcos cogiendo mis manos y besándome los dedos uno por uno

- Hambrienta, pero muy contenta. Todo esto es precioso

- Me alegro que te guste. Me apetecía mucho venir contigo y que vieras donde pasé 2 años de mi vida.

- Lo que es una pena es que tengas vacío ese pedazo de piso

- Si, si que lo es, pero no quiero venderlo, me trae buenos recuerdos, y no sé...quiero dejarlo como un sitio donde poder venir cuando queramos desconectar

- Si, me parece perfecto -le digo mientras el camarero nos trae la comida. Mientras hablamos, me echo arroz con pollo y lo pruebo- ay, dios, que bueno está esto...

- Se te ve en la cara que te gusta... 

- Que ganas tengo de ir mañana al parque, Marcos. Me pienso comprar un montón de cosas y comportarme como una fan loca, te aviso

- Contaba con eso Maya -me contesta él riéndose- si fueras un personaje de Harry Potter, ¿quién te gustaría ser?

- Uno de los gemelos Weasley. En los libros  me hacían reír muchísimo

- Pues yo sería...

- ¡Draco Malfoy! -no dejo terminar la frase a Marcos cuando grito el nombre de mi crush. Él alza una de sus cejas y me mira divertido- es que me recuerdas a él cariño

- Bueno, abejita. Luego si quieres te hago un par de hechizos -Marcos me guiña uno de sus ojos y yo acabo riéndome

- Seguro que son sexuales -Marcos asiente divertido- bueno, si algo se te da bien es romper bragas con la mirada...