Capitulo 4
¡Hola! Aquí su escritora que se pierde un rato y luego regresa. Una disculpa pero es que este cap nada mas no quería cooperar, no podía terminarlo por mas que le daba vuelta.
Gracias por la espera y espero les guste.
Seguimos con Barcode. ¿Cómo creen que le esta yendo?
Disfruten su lectura.
.
.
.
Capítulo 4
Muy probablemente Porchay lo ahorcaría, muy probablemente Jeff estaría muy celoso y probablemente este era uno de los lugares, si no el que, el más seguro donde podía estar ahora mismo.
Acostado en una cama cómoda, mientras Kim lo rodeaba con sus brazos.
No supo en qué momento dejo de llorar, pero fue cuando sus sollozos pararon que Kim lo alzo en brazos y lo llevo a la cama, Barcode sabía que en ese momento tenía que soltarse, pero al final no pudo, su miedo y desesperación lo llevaron a que se aferrara a su abrazo, por lo que el menor de los hermanos no tuvo más que recostarse a su lado.
Las lágrimas por fin se habían acabado, se sentía mucho más tranquilo, parecía que todo estaba bien en ese momento, pero sabía que todo también estaba terriblemente mal. Aun así, permitió quedarse en ese lugar donde se sentía cómodo y seguro, pero no pudo dormirse.
Después de todo Kim no era Jeff. Por lo que dentro de su corazón no estaba del todo cómodo, a pesar de saber que lo protegería y que amaba al dueño del cuerpo.
—Duerme ángel —murmuro Kim mientras acariciaba su cabello suavemente —Necesitas descansar un poco.
—Lo intento —murmuro Barcode sin moverse de su lugar —Pero mi mente aún está muy intranquila.
—No tienes que preocuparte, lo resolveremos todo —aseguro Kim —No volverá a pasarte nada.
—Eso espero —dijo antes de suspirar.
—No te pido que confíes en mi —comenzó a decir Kim —Pero si en mi capacidad. Te aseguro que esta vez no pasara nada.
—Creo... —dudo un poco, claro que confiaba en Kim, aunque Porchay no lo hiciera, Barcode si confiaba en Kim, pero sabía que no tenía que hacerle saber eso, se supone que las cosas entre ellos están muy mal y la desconfianza era un punto fuerte en todo su asunto, por lo que pensó que una respuesta adecuada —Lo intentare...
—Con eso me basta —dijo Kim después de suspirar aliviado, casi podía sentir una sonrisa de su parte —Supongo que tendré que investigar algunas cosas —murmuro Kim sin dejar de jugar con su cabello.
—Crees... ¿Crees que podría mudarme cerca de esta habitación? —pregunto por fin alzando el rostro, sus ojos conectaron con los ajenos, que le miraban ligeramente sorprendidos.
—¿Quieres mudarte aquí? —pregunto Kim mientras miraba como se enderezaba un poco.
—No precisamente a tu antigua habitación —comenzó a decir sin dejar de mirarlo —Pero si más cerca de tu zona del complejo, creo me sentiría más seguro en tu territorio que en el de mi hermano.
—Pensé que ibas a mudarte a la zona donde esta tu madre —dijo Kim todavía un poco extrañado. —Khun estaba muy molesto por eso...
—Bueno... —murmuro Barcode son saber que decir ¿Cómo que iba a mudarse con su madre? Sabía que tenía que ir a terminar de leer ese maldito diario.
—Ángel, claro que puedes mudarte aquí, incluso tomar esta habitación si lo deseas —dijo con una sonrisa mientras acariciaba su mejilla —Te daré todo lo que me pidas.
— ¿Lo que sea?
—Claro ángel, tu dime que necesitas y te lo daré.
—¿Puedes acompañarme a la casa donde crecí?
—...
—Se supone que me iban a asignar un guardaespaldas para que ya pueda salir del complejo, pero no sé porque aún no tengo uno —comento regresando a recostarse con Kim, este suspiro.
—No te lo han asignado porque no se ponen de acuerdo —explico Kim moviendo las sábanas para cubrirlos mejor —Y más porque tu madre, parece muy interesada en tu seguridad y no está de acuerdo con la gente que han propuesto para cuidarte.
—Ya veo —murmuro Barcode mordiendo sus labios, sabía que la madre de Chay estaba poniéndole trabas, pero no sabía hasta qué punto y como, ahora estaba más seguro de que no podía confiar en esa mujer. Lo que no sabía era como iba a tratar con ella.
—Puedo hablar con mis hermanos y sacarte un rato o simplemente sacarte a escondidas —dijo Kim con ligera diversión en su voz, el tono de Kim le hizo reír un poco.
—Eso suena divertido —aseguro con una risita.
—Creo que sería lo mejor por ahora —dijo Kim acariciando su cabello de nueva cuenta.
—Si... Creo que será lo mejor que no nos relacionen tanto aun —estuvo de acuerdo antes de dejar salir un bostezo. Ambos se quedaron en silencio por largo rato, hasta que por fin el menor comenzó a cerrar los ojos, por fin dejando que el sueño lo dominara —Kim...
— ¿Si ángel?
—Avísame... —murmuro antes de empezar a quedarse dormido —Si te vas...—susurro mientras dejaba que su mente se despejara un poco.
...
"Uno que quiere ayudar y nada más la gente no se deja" pensó con fastidio Barcode al encontrarse solo en la habitación, resoplo un poco antes de abrir el armario buscando que ponerse después de salir de la ducha, así como podía ayudar a Kim si el muchacho no ponía de su parte ¿Qué le costaba dejar una nota?
Paso las muchas prendas que había en el lugar, un poco sorprendido por la cantidad, después de todo se suponía que Kim no vivía en el complejo ¿Por qué tenía tanta ropa entonces? Después de buscar un rato es que encontró algo que le gusto y que probablemente le quedaría mejor, después de todo Kim era una o dos tallas más grande que Porchay, más ahora que aún no tenía el peso saludable que debería tener ese cuerpo, se miró en el espejo que tenía el armario mientras se vestía, tenía varias cicatrices que estaban sanando y otras que sabía que se quedarían allí, no sabía de donde venían o porque estaban, solo sabía que existían, desde la primera vez que se miró en un espejo después de una ducha, tenía la costumbre de pasar sus dedos por algunas de esas marcas, esperando algún día saber su historia.
Mientras se vestía escucho la puerta abrirse, se quedó quiero esperando identificar quien era.
— ¿Ángel? —la voz de Kim lo tranquilizo, pero luego recordó que se fue sin avisar y volvió a molestarse, por lo que no le respondió y siguió cambiándose, aun así, hizo ruido para que Kim supiera que estaba dentro del vestidor. Se tomo todo su tiempo para arreglarse antes de salir para ver a Kim. —traje el desayuno —dijo con voz calmada mientras acomodaba todo en la mesita de cristal que tenía, Barcode suspiro antes de acercarse.
—Gracias —dijo mientras se sentaba frente a Kim, miro el desayuno.
—Khun dijo que estas bajo una dieta un poco estricta, pero que no te prohibieron nada.
—En realidad la dieta es para subir de peso y combatir la anemia que tengo —dijo mientras acercaba un plato hacia el —No me prohibieron nada, simplemente me dieron alimentos que, si o si debo comer, sus porciones y las veces en el día.
—Ya veo —Barcode noto como la mirada de Kim cambiaba al tener esa nueva información, incluso se le hizo tierno, Kim estaba muy preocupado por Porchay, se notaba demasiado. ¿Por qué tenía que ser tan torpe y tierno? Así no podía estar enojado con él.
—Quita esa cara Kimhan —dijo llamando la atención del mencionado —No es como que no tenga secuelas todo lo que pasa. Además, esto se cura comiendo bien y siguiendo las indicaciones del médico —agrego mientras tomaba un coco con una sonrisa, lo bueno de tener anemia, es que tenía una excusa para beber agua de coco sin problemas, después de todo era buena para el cuerpo, por lo que estaba estrictamente indicado que debía beberla seguido.
—No recordaba que te gustara tanto —comento Kim mientras lo miraba, Barcode le miro un poco extrañado —Khun dijo que es tu bebida favorita, pero yo sé que no.
—Bueno ahora lo es —dijo Barcode mirándolo con desconfianza.
— ¿Por qué? —pregunto Kim —Solo te gustaba la nieve de coco y ahora pareces ser un fiel aficionado del coco.
—Kim ¿Qué tiene de malo? Todos cambiamos de gustos —Barcode le miro serio, bien retiraba lo dicho de que Kim era tierno cuando se preocupaba ¿Cómo te atrevía a cuestionar su gusto por sus cocos? Si no se pareciera tanto a Jeff ya la hubiera arrojado su coco vacío por la cabeza.
—Porchay, la gente no cambia de la noche a la mañana —dijo Kim ligeramente frustrado —Y tú lo hiciste...
—Bueno he aprendido del mejor —respondió con frialdad —Digo, jugaste conmigo, me dejaste tirado en vuelto en lágrimas frente a la puerta y luego de repente sales con que me amas... ¿No crees que es un gran cambio también?
—Chay yo... —dudo Kim en seguir hablando —Estamos preocupados por ti Chay, sabemos que esto no es normal en ti... Solo quiero ayudarte y yo...
—No Kim, no —alejo tomando otro coco que estaba en la mesa —Me rompieron, me hicieron pedazos y luego me botaron, así que no critiquen la forma en la que YO solo estoy juntando mis pedazos, no se metan en la forma en la que yo estoy eligiendo como reparar algo que alguien más rompió. —dijo de forma molesta.
Barcode no sabía que pasaba, pero su boca de movió sola y comenzado a decir cosas, sintió sus ojos llenarse de lágrimas sin razón aparente ¿eran reflejos del cuerpo? ¿Qué significaba eso? ¿acaso estos eran los sentimientos de Porchay? Sin saber cómo o porque su preciado coco se safo de sus manos, cayendo al suelo y derramándose en la alfombra, fue algo insignificante, algo pequeño, pero sin poder controlarlo comenzó a llorar.
—Ángel lo siento —dijo Kim rápidamente poniéndose en pie para acercarse, pero Barcode no podía de dejar de llorar.
—Mi coco... —murmuro entre hipidos, no sabía porque carajos estaba llorando con tanto sentimiento, y más por algo como su agua de coco derramada. Solo sabía que su cuerpo temblaba, que sus sollozos se hacían más fuertes y que las lágrimas bajaban sin control por sus mejillas.
—Te comprare más, tranquilo —dijo Kim que no sabía que hacer, por lo que Barcode solo fue para abrazarlo y seguir llorando. ¿quizás era todo lo que el cuerpo de Porchay tenía acumulado? ¿quizás era parte de todo el dolor que cargaba? Porque a pesar de estar el llorando era como si el dolor no fuera solo suyo, como su fuera de alguien más. —Comprarte todos los que quieras... Pero ya no llores ángel, lo siento.
— ¿Lo prometes? —pregunto con voz suave y pequeña tratando de frenar sus lágrimas.
—Si ángel, todos los que quieras —aseguro Kim rodeándolo con sus brazos, Barcode solo se apoyó en su pecho dejando que un torpe chico le consolara, sonrió un poco cuando escucho suaves ruidos que provenían de Kim, seguro en un intento por calmarlo, por lo que Barcode siguió lloraron con fuerza por un largo rato, sin entender bien el porqué.
—Tienes que reponerme el que tire por tu culpa —dijo Barcode después de que por fin pudo calmar su llanto, siguió abrazando al mayor mientras este los balanceaba ligeramente, su corazón dolió ante eso, ¿Cuántas noches Chay deseo esto? Cuanto tuvo que llorar Porchay solo en su habitación y si Porchay sufría de esos ataques de ansiedad o pánico que se desarrollaban con llanto incontrolable...
—Claro que si ángel —aseguro Kim presionando un beso en su cabello —Te comprare todos los que quieras.
—Bien —murmuro mientras seguía sin moverse de su lugar, poniendo en funcionamiento su mente y cuerpo, con lentitud se separado de Kim, que lo miraba muy preocupado, permitió que le limpiara los rastros de lágrimas antes de ayudarlo a sentarse para terminar su desayuno.
Kim estuvo pendiente suyo durante el resto del desayuno, Barcode algo somnolientos después de comer y haber llorado mucho es que camino de regreso a la cama, Kim le siguió en silencio y lo arropo, dejándose llevar por el sueño.
...
—Me sorprende más que Chay se refugiara en ti —Barcode escucho la voz de Khun, algo cerca pero también lejana, de seguro porque aún no se despertaba del todo. Recordaba que se había ido a dormir con Kim sabrá hacia cuanto, también recordaba el ataque de llanto que tuvo por largo rato, sentía sus ojos irritados y le dolía mucho la cabeza, lo más seguro que era acusa de que había llorado mucho.
—Yo también estoy sorprendido —dijo Kim antes de suspirar —Pero estoy feliz de que me deje estar a su lado.
— ¿Qué harás entonces? —escucho como Khun se ponía serio, algo no muy común en el mayor de los hermanos, pero Barcode sospechaba que podía ser serio cuando las situaciones lo ameritaban.
—Me quedare con el —respondió el menor de los hermanos —Ya me alejé de su lado dos veces y miren lo que ha pasado. No voy a dejarlo más —aseguro Kim fríamente. —No permitiré que exista una tercera vez.
Lo poco o mucho que escuchaba significaba que los 3 hermanos estaban hablando sobre él, imaginaba en estaban sentados en el sillón que estaba del otro lado de la habitación, que daba la espalda a su cama, escuchaba los pasos de alguien, que casi aseguraba que era Kim quien caminaba.
—Solo si Chay te quiere aquí —dijo Kinn ligeramente serio —Además Porsche va a querer asesinarte cuando sepa todo lo que has hecho con su hermano.
—No me miren así —dijo Kim molesto.
—Por supuesto —dijo Khun con ligera diversión. —Mi terrón de azúcar es muy dulce e inocente, así que más te vale que no le haya puesto tus manos sucias manos encima.
—A diferencia de Kinn yo no he tocado demás a Porchay sin su permiso —señalo Kim en tono seco —Jamás pasamos de besos suaves. Chay y yo tenemos una relación vainilla.
—Aja.
—Jamás he tocado a Chay. Tengo mis límites con él.
— ¿Tu hablar de limites? —cuestionó Kinn algo extrañado, mientras que Khun comenzó a reírse.
—Mira de lo que nos venimos a escuchar.
—No sé porque tengo que dar explicaciones de como llevo mis asuntos. —gruño Kim, algo que hizo sonreír a Barcode.
Le recordó un poco al sermón que los hermanos de Jeff les habían dado cuando les contaron que habían comenzado a salir de forma romántica, Jesse les hizo mucha burla sobre el tema de la edad y que Jeff debía ser cuidadoso con él, no corromperlo demás, enseñarle muchas cosas... Esa tarde se había sonrojado como nunca antes, ni siquiera cuando habían hablado con sus respectivos padres.
—Por que tu asunto, implica al hermano del novio de tu hermano ¿será por eso?
—No es como que le pusiera mucha atención ¿sabes? —rebatió Kim sin dejar el tono frio de lado —Ya vimos que Chay no solo está mal por mi culpa, también por la suya.
—Kim...
—Atrévete a decir que miento,
—No peleen —dijo Khun —Lo que importa ahora es ayudar a Porchay, no ver de quien es toda la culpa. Además, si Porchay está tolerando a Kim es por algo.
—Está bien —esa fue la voz de Kinn, lo escucho resoplar.
—Así que no heches a perder lo que sea que Chay intenta hacer contigo a su lado —advirtió Khun seriamente.
—No lo hare.
—Perfecto —celebro el mayor de los hermanos —Ahora, el foque es como convencer a Porsche de que Chay se mudara a la zona del complejo que le pertenece a Kim.
—Mas bien, como explicarle que su hermano no quiere irse con su mama, si no con el hermano de su pareja, que se supone tiene poco que se conocen —dijo Kinn resoplando pesadamente —Porsche no se va a creer cualquier cuento.
—Pues van a tener que pensar en una buena mentira —dijo Khun ligeramente fastidiado —Aunque no creo que sea difícil, ya vez que nuestro hermano bebe es un experto en eso.
—Khun... —dijo Kim con voz amenazante, Barcode se mordió los labios para no reírse, escucho la risa de Kinn y un gruñido por parte de Kim, que solo le hizo sonreír.
¿Hermano bebe? ¿enserio? Khun y sus tan ocurrentes apodos.
—Sabes que Porsche va a pedir acceso a tu seguridad privada —dijo Kinn después de un rato en silencio —Se trata de su hermano, no le va a hacer nada de gracia que se mude a una de las zonas más privadas del complejo, donde el personal tiene sus límites también.
—Porque es más privada, es más segura para Chay —dijo Kim —además Arm tiene toda la información, no tengo problema con que se lo comparta a Porsche y estoy dispuesto a ceder si eso hace que Chay se quede bajo mis ojos.
—Hay cosas de las que Porsche se debe enterar —dijo Khun en tono serio — ¿Estás seguro de querer abrirte con él?
—Mas bien ¿están seguro que es confiable? —interrogo Kim —Porque bien puedo mandar a Porsche a la mierda y solo darle los accesos a Chay, estoy tomando en consideración a Porsche porque es pareja de Kinn y hermano de Chay.
—Porsche es confiable Kim —aseguro Kinn —Eres mi hermano, así que respeto tu privacidad y todos los secretos que tenemos entre nosotros, por lo que dejo a tu consideración que tanta información sobre tus asuntos, le puedo revelar a Porsche.
—La suficiente para que este seguro que no hay nadie mejor que yo para cuidar de Porchay. —aseguro Kim seriamente.
—De acuerdo.
—Bien, ahora que nos hemos puesto de acuerdo, tendré que moverme, su nuestro caramelito se va a mudar a tu zona debo acondicionar este lugar, después de todo este lugar ha estado abandonado por un tiempo. Necesita un poco de vida —dijo Khun emocionado —Tengo tanto por hacer...
—Habla con Chay, nos veremos mañana en la cena para conversar de esto con todos —dijo Kinn.
—Bien —acepto Kim.
—Y piensa en una buena excusa.
Barcode escucho varios pasos antes de que la puerta se escuchara, siguió quieto en su lugar aun fingiendo dormir, escucho como Kim regresaba sus pasos, por suerte el sonido de un teléfono sonó, lo suficientemente cerca y alto como para poder fingir un sobre salto, escucho a Kim suspirar y quitar el ruido, que aparentemente era de su celular, por lo que comenzó a moverse un poco tapando su rostro con las sábanas.
— ¿Quién...? —murmuro con voz suave.
—No importa —dijo Kim acomodándole las sábanas, por lo que Barcode en un acto de valor le abrió las sábanas, en una invitación silenciosa.
—Me arrepentiré —advirtió cuando vio que Kim no se movió se lugar, antes de cerrar las cobijas es que Kim las tomo para unirse a él en la espaciosa cama, dejo que Kim lo abrazara debajo de las sábanas.
— ¿Cómo te sientes ángel?
—Todavía quiero mi coco —respondió hundiendo su rostro en el pecho del mayor, sintió más de lo que lo escucho la risa.
—Pediré que te sirvan mucha agua de coco para la cena ¿de acuerdo?
—De acuerdo —acepto Barcode de buena forma. —Si tienes que irte... Está bien —murmuro mientras alejaba sus brazos de Kim, rápidamente sintió como Kim hundía su rostro en su cabello y lo apretaba más contra su cuerpo.
—No me iré ángel —aseguro Kim presionando un beso en su frente —No sin asegurarme que tu alrededor es seguro.
— ¿Qué hay de tu carrera como Wik? —pregunto alzando el rostro.
—Bueno, mi equipo de trabajo, quería unos días de descanso, así que puedo tomarme unos días —respondió el mayor besando su frente —No te preocupes tengo todo bajo control.
Y Barcode sabía que una gran parte de esas palabras era verdad, Kim era muy capaz y muy fuerte, si podía tener todo bajo control, por lo que solo asintió en respuesta, ambos se quedaron en silencio por un largo rato, simplemente acostados en esa cama entre los brazos del otro, si Kim sintió las lágrimas de su ángel no dijo nada y solo acaricio su cabello, el menor por más que trato de frenar las lágrimas no pudo hacerlo, extrañaba a su familia, a su novio, quería estar en entre sus brazos, que le diera algo, por más que Kim era cálido, no se comparaba a los brazos de Jeff, jamás. Algo se sentía mal en su corazón.
— ¿Y tus obligaciones como el menor de la familia? —pregunto después de un rato.
—No piense en eso —respondió Kim —Ahora lo importante eres tú y tu tranquilidad.
— ¿Crees que mi hermano se enoje porque quiero mudarme? —se animó a preguntar.
—No lo sé, pero va a querer una buena explicación —aseguró el mayor mientras acariciaba su espalda con cariño.
—Supongo que podemos empezar con el hecho de que eres Wik —dijo Barcode sin moverse de su lugar —Técnicamente, según mi hermano eras mi crush. Tenía un altar de ti en mi habitación y todo.
— ¿Sabes que sabia?
—Por supuesto —dijo el menor suspirando —Si fuiste los suficientemente listo para dar conmigo investigando a mi hermano, después de cambiar ligeramente cuando me pediste una canción de amor... No fue tan difícil descubrir que tú sabias de mi crush por ti y solo le sacaste provecho a eso.
—Ángel yo...
—No, sigo pensando que eres un bastardo y un mentiroso —interrumpió sin alzar la voz ni nada —Y no tengo intenciones de escuchar tu confesión y arrepentimientos que tienes por hacerme mucho daño. No estoy listo para eso. —agrego Barcode mientras suspira pensadamente, no es que no estuviera listo, si no que esas palabras no eran para él, si no para Porchay, él era quien tenía que escucharlas, quien tenía que perdonar a Kim.
—Está bien... —murmuro Kim apretando mas sus brazos a su alrededor. —Pero no creas que esta vez vas a poder alejarme Ángel.
—No te estoy pidiendo que te vayas —murmuro regresándole el abrazo.
...
Barcode sabia que las cosas se iban a complicar en cuanto llego al comedor, noto como su madre intercambiaba miradas con su dama de compañía y esta le daba una sonrisa extraña cuando se sentó a un lado de su madre, por lo que solo pudo fingir que no se dio cuenta, le dio una mirada a Kim que para su alivio este entendió y miro de reojo a esa mujer, sintió un ligero toque en su pie que lo tranquilizo un poco. Agradecía que al menos el padre de Kim no estaba presente en esa ocasión.
Kim unos momentos antes le había asegurado que tenía todo bajo control, que confiara un poco en él, en que podría llevar la situación de una manera favorable para ellos y que lo mantendría a salvo, llevo su mano a sus labios recordando que antes de que Kim se adelantara al comedor, se había inclinado con todas las intenciones de besarlo, pero Barcode había puesto su mano sobre los labios de Kim deteniendo la acción, aun así solo le sonrió y negó con la cabeza, por lo que Kim capto el mensaje y solo beso su frente antes de salir por la puerta, para que unos minutos después apareciera uno guardaespaldas y lo guiara.
Barcode había notado como la zona de Kim si era muy solitaria, se mantenía en silencio y no había personas caminando, sin contar la bonita acústica que todo el lugar tenia, le recordaba un poco al condominio privado que tenia su novio, tranquilo, silencioso pero armonioso, miro la espalda del guardaespaldas, por lo que Kim le dijo todas las personas que entraban a la zona de Kim eran investigadas por el, incluso las mujeres encargadas de la limpieza. Se detuvo en el asesor antes de entrar acompañado por el joven.
—Gama... —fue lo único que dijo el hombre cuando sintió la mirada de Barcode sobre él.
—Gracias Gama —dijo mientras se perdía en sus pensamientos, recordando su conversación con Kim.
...
— ¿Qué quieres decir con seguridad especial? —pregunto Barcode mientras ponía su mano en el lector que tenia una de las puertas.
—Esta la seguridad central ángel —dijo Kim mientras presionaba unos botones que estaba en el lector —Y la que cada uno de mis hermanos tiene por su parte, en sus zonas.
—Oh...
—Desde niños siempre hemos sido blanco de múltiples ataques, y después de una o dos malas experiencias es que decidimos hacer nuestra propia seguridad —comenzó a explicar Kim —Tanto mi padre, como mis hermanos añadimos cosas a la seguridad principal del complejo, pero te aseguro que en nuestros propios pisos tenemos una seguridad interna que solo nosotros controlamos.
—Pero ¿Qué pasa si te ocurre algo? ¿Cómo acceder?
—Tenemos una prevención claramente ángel —aseguro Kim tomando su mano —Además mis hermanos saben cómo acceder, así como yo con ellos, tenemos la suficiente confianza en que no harán una tontería con esa información. Sin contar que tenemos una segunda persona que podría acceder al sistema.
—Entonces Porsche puede acceder, porque vive con Kinn ¿no es así?
—Correcto, así como Top tendrá el control del sistema de Khun en su momento —Kim le miro fijamente mientras tomaba ambas manos —Y tu tendrás el mío ángel.
—Kim...
—Yo confió en ti —aseguro mientras besaba sus manos —Y espero que algún día tu puedas volver a confiar en mí. —sintió sus mejillas calentarse por la intensa mirada de Kim sobre su persona, si tan solo fuera su Jeff ya lo hubiera llenado de besos.
—Lo intentare —comento Barcode con una sonrisa suave.
—Supongo que solo puedo esperar y demostrarte con mis acciones que soy digno de confianza.
—Si, ahora te toca a ti esperar —comento el menor con una ligera risa, que hizo sonreír a Kim de igual forma.
—Por ti esperare el tiempo que sea necesario.
—Me parece bien
...
Lo primero que hizo una vez miro la mesa es toma el coco que estaba cerca suyo y comenzó a beberlo, tratando de ignorar a todos los que estaban a su alrededor, tenia que mantener la calma.
—Chay... —le llamo el hermano de Porchay, por lo que rápidamente dirigió su vista hacia él.
—Dime Hia —comento con una leve sonrisa, sin soltar del todo el popote entre sus labios.
—Recuerdas lo que hablamos, antes de tu percance —comenzó Porsche con cuidado —Sobre mudarte de habitación.
—Oh si —dijo Barcode entretenido con la fruta frente suyo, esperando que su hermano se calmara —Estuve pesando y recordando todas las zonas el complejo que conozco —empezó a decir.
—Bebe, ya habíamos hablado sobre a donde mudarte —dijo su madre con calma.
—Que yo recuerde terminamos discutiendo sobre ello —dijo Barcode llevarse un trozo de fruta a la boda.
—Bueno si hermanito, pero yo...
—Encontré un área con una acústica preciosa —comenzó a decir con ánimo, le dio una mirada a Kim y después golpeo su pie bajo la mesa.
— ¿Enserio? —pregunto su hermano más relajado, Barcode sabía que Porsche siempre estaba tenso conversando con él, por lo que había investigado tenían tiempo que siempre que hablaban terminaban discutiendo. Por lo que pensaba que su Hia quería evitar el conflicto lo más posible.
—Si, la parte donde estuve descansado, después del... —apretó los labios, fingiendo recordar algo malo, agradecía realmente que no había visto nada, pero el solo recordar el sonido del disparo le ponía los pelos de punta —...Incidente.
—Lo siento por eso —se disculpó Porsche. Negó suavemente antes de darle una leve sonrisa.
—Es un gran lugar, aunque todas las demás puertas estaban cerradas... —hizo un pequeño puchero antes de llevarse a la boca el popote y seguir tomando su agua —Así que no sé qué tan buena esa... Quería llevar mi guitarra para revisar.
—Oh, esa parte que le pertenece a Kim —comenzó Khun con una sonrisa. —Esa muy bien ambientada para los gustos de Kim.
—La acústica en esa zona es excelente —comento Kim dándole una leve mirada —Puedo dejar que pases a mi viejo cuarto de ensayos.
— ¿Tienes cuarto de ensayos Phi? —pregunto fingiendo emoción y curiosidad.
—Claro que lo tiene, ¿Cómo crees que inicio mi hermano? —pregunto Khun siguiendo su conversación —Debe estar solo llena de instrumentos, tendrás que escombrarle si dejaras que mi caramelito entre a ese lugar.
—Khun, mis instrumentos son preciados, no los tengo solo arrumbados —discutió Kim ligeramente serio —Ese lugar está perfectamente ordenado y listo para usarse.
—Si tú lo dices.
—Entonces... ¿Phi Wik me dejara practicar en su sala de música? —pregunto con genuino entusiasmo.
—Si eso quiere Nong, por mi está bien —aseguro Kim.
— ¿Desde cuándo son cercano? —pregunto Porsche un tanto extrañado.
—Hia ¿Le has puesto atención a Phi? —pregunto Barcode con una ligera risa —El hermano de Phi Kinn, es Phi Wik, el artista que sigo desde hace un tiempo.
Mira como Porsche se le queda mirando a Kim por un rato examinándolo, hasta que parece reconocerlo, luego mira en su dirección antes de regresar a ver a Kim, para luego mirar a su novio y este solo le sonríe un poco.
—La primera vez que te conocí, sabía que te conocía de algún lado —dijo Porsche después de observarlo por un rato —No sabía que conocías a mi hermano.
—Lo conocí en un evento —dijo Barcode rápidamente —Gané una foto y unos momentos para conversar con Phi.
—Después nos encontramos aquí —dijo Kim alzando los hombres —No iba a ignorar a un fan.
—Dijiste que te había decepcionado —soltó su madre de pronto.
Barcode volteo a verla, ella se miraba muy seria, algo que le molestaba era que no sabía que tanta información tenía la madre de Chay sobre su relación con Kim ¿Lo sabía todo? Empezó a entrar en pánico ¿y si lo sabia todo? ¿y si Chay le había contado a su madre de su historia con Kim? ¿Qué tanto sabia ella? Quiso mirar a Kim para encontrar calma, pero seria obvio su lo hacía, ni siquiera quiso ver a Porsche ¿Qué debería decir?
—Mama...
—No apruebo que se cerca de ti —dijo ella mirándolo fijamente.
—Pero mama...
—No dejare que mi bebe vuelva a llorar por un chico —aseguro su madre, Barcode se mordió la lengua, tenia que pensar en algo antes de que todo se fuera a la basura. Sintió la mirada de su hermano sobre su persona. Tenia que arriesgarse, ya que no sabía que tanto podría saber su madre, rezaba porque no supiera toda la historia.
— ¿Llorar? —cuestión Porsche antes de mirar a Kim.
— ¿Te hice llorar Nong? —la pregunta de Kim le hizo voltear a verlo, se miraba confundido. Quiso sonreír vaya que Kim era un gran actor, se miraron a los ojos y pudieron entenderse. Bien si Kim iba a arriesgarse por ese lado, tenía que seguirle la corriente por lo que esperaba que funcionara bien.
— ¡MAMA! —exclamo Barcode poniéndose de pie, esperando verse muy apenado.
A su mente trajo el recuerdo de ver a Kim con el cigarro y recordar a Jeff, esa camisa blanca, como se movía esa tela cuando se estiraba, recordar los músculos y el pecho de su novio, fue suficiente para sentir calor en su rostro. ¿Por qué Jeff Satur tenia que ser tan atractivo?
—Bebe...
— ¡Eso te lo conté en confianza! —exclamo, para su fortuna la expresión de su madre fue la mejor, ya que parecía que, si había dicho algo que no debía, la vio llevarse unos segundos su mano hacia su boca y como se quedó un tanto desubicada, iba por buen camino, por lo que rápidamente se cubría el rostro, dándola una mirada rápida a Kim — ¿Qué va a pensar Phi Wik de mí?
—Nong...
—Chay, ella no quiso... —trato de decir Porsche, pero Barcode no iba a desaprovechar la oportunidad.
—No Hia... No... —comenzó a decir completamente apenado — ¡Qué vergüenza! —exclamo antes de irse del comedor a toda prisa.
— ¡Chay espera! / ¡Bebe no quise!
Barcode siguió caminando hasta que subió al asesor y fue allí donde comenzó a reírse suavemente, claro que, sin levantar el rostro, ante la cámara debía parecer que estaba llorando, una vez llego al piso indicado, corrió rumbo a su habitación buscando con prisa el diario de Chay por lo te tomo esa y otras cosas, tomo la mochila y huyo con rumbo al asesor, donde se encontró a Porsche. Por suerte reacciono antes y pudo presionar el botón de cerrar.
— ¡Chay espera! —grito deteniendo las puertas, pero eso le dio tiempo suficiente para salir corriendo hacia las escaleras.
Las subió lo más rápido que pudo y para su fortuna en el piso indicado estaba Gama esperando en el pasillo, por lo que rápidamente fue a su encuentro, siendo guiado de nueva cuenta a la habitación de la cual había salido hace rato, por lo que solo suspiro aliviado una vez que estuvo en la habitación.
—Eso... Creo que salió bien... —murmuro con una risita dejándose caer a la cama. —Ahora sí, vamos a leerte completo. —agrego mirando el diario en sus manos. Realmente esperaba encontrar algo que le ayudara.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro