*Graciela Ferrer*

Cuándo llegué a casa ya era dé noche estoy cansada —Emily, me duele todo él cuerpo gracias Por acompañarme porqué no té quedas a comer algo. 

—Me encantaría pero ya es tardé y tengo qué llegar a casa tú entra y descansa un poco qué todavía no té ves muy bien.  

—Gacias Emily, por  acompañarme hasta aquí.

—Para eso son las amigas para estar en las buenas y en las malas.

Le  di un besó y  bajé del taxi.

Al entrar a la casa están mis Padres y David, los padres de Eliot, el señor y la señora Hamilton,  ¿Qué están haciendo aquí?. Todo éste día no puede ir peor sólo quería darme una ducha eh irme a dormir es mucho pedir un poco dé tranquilidad, maldita sea intento poner buena cara pero sé qué es todo lo contrarió. 

—Pero qué hacen todos aquí no pude evitar él tono amargó sé qué mis padres sé dieron cuenta dé eso.

—Hija, hasta qué por fin llegás nos tenías preocupados.

—Lo siento mamá estuve ocupada y sé me pasó él tiempo volando no fue un buen día. 

—Te estábamos esperando para cenar mi amor té quería dar una sorpresa dice Eliot, y me da un besó en los labios.

—Bueno yo me voy a dar un baño, y bajó para cenar con ustedes. Al dejar a todos en la  sala subí las escaleras lo más rápido posible por que Eliot, está aquí no lo quiero ver al entrar en mí habitación entró a la ducha y me relajó un poco hoy no fue un buen día no dejó dé pensar en él en sus palabras, en su mirada penetrante, cuando me pregunto por las margas en mí cuerpo no le puedo decir la verdad nadie  sé puede enterarse de nada. Tengo tanto miedo de que le haga daño a mí familia después dé salir dé la ducha me puse un vestido azul marino y unas zapatillas color negro me maquille un poco, me Sequé él peló y bajé a la sala

—Mi amor té ves hermosa a poco no tengo una movía muy linda. Odió qué me toqué siento Ascó.

—Gracias Eliot, en ése momento entra mí madre para avisarnos qué ya podemos pasar a cenar, pasamos todos al comedor. Todos  hablan en la comida muy animadamente , dé negocios y otras cosas qué no les prestó mucha atención sólo me concentró en comer un poco me duelen las costillas, tengo qué tomar los medicamentos para él dolor.

—Graciela, éstas bien no has probado casi la comida y éstas muy callada.

—Si papá  estoy bien sólo un poco cansada hoy no fue un buen día. —Entiendo mi amor me da una sonrisa.

—Si, no  les importa quiero tomar un poco dé Aire, con permiso. Al salir a la terraza dé la casa me sentí tranquila es como volver a mí infancia miro a mi alrededor y está todo igual los columpio , él Árbol donde tantas veces trepamos David,  y yo jugando a las escondidas él trampolín,. Tantos recuerdos tan bonitos cómo me encantaría volver él tiempo atrás . En ése momento siento qué me rodean con los brazos y sé qué es Eliot, no soportó qué me toqué y empieza a besarme él cuello.

—Eliot, para por favor . Me jala del cabello para qué lo miré a los ojos y no me gusta lo qué veo en ellos veo rabia , furia estaba molesto.

—¿Qué es lo que coño te pasa?. Graciela, eres estúpida o té hacés tú a mí no me dices qué hacer,  tú eres mía y  yo hago contigo lo qué me dé la gana, haz entendido.

Me suelto dé su agarré. No quiero que me toqué .

—Qué es lo qué quieres dé mí basta estoy harta dé tus maltratos, de tus golpes, Eres un maldito. Maldigo el día en qué té conocí cómo pude ser tan estúpida al creer en tú amor .

—Cállate eres una zorra, no digas una palabra más o te vas a arrepentir Graciela,.

—O si no qué me vas a pegar en mi casa vamos hazlo, así sé entera mí familia y sé acabé toda está farsa dé una maldita ves.

—Esto es lo que quieres, pero no lo voy hacer té vas a arrepentir dé todo lo qué has dicho.

—Graciela,  Eliot, están allí.

—Si cuñado ya vamos.

Después dé despedirnos de los padres de Eliot, por fin me puedo relajar un poco voy a la cocina y tomo un basó de agua, y me voy a mí cuarto a descansar cuándo estoy por quedarme dormida tocan a mí puerta.

—Hija puedo pasar.

—Si mamá, qué pasa estaba por quedarme dormida.

—Disculpa por despertarte no era mí intención.

—No, importa mamá. ¿Qué pasa?

—Quería hablar contigo sobre tú y Eliot.

Lo qué me faltaba dios, éste día no puede ir peor.

—Mama no comprendo a qué viene éste tema él y yo estamos bien no entiendo tú pregunta. 

—Él nos contó qué tú éstas distante qué ya no eres la misma qué haz cambiado. Hoy en la cena no hablaste estuviste muy distante con todos.  —¿Qué es lo qué te pasa.?

—Mama, no me pasa nada de verdad solo no tuve un buen día y no quería estar con nadie. Eso es todo están exagerando  las cosas.

—Esta bien Graciela, no quería qué te alteraras cálmate solo te estoy pidiendo que seas comprensiva con Eliot, eso es todo.

Me dio un besó en la frente y se fue dejándome sola, maldito por que me haces esto. Ahora resulta que yo no lo eh tratado bien ya no quiero pensar sólo quiero descansar y dejar dé pensar en las amenazas dé Eliot,.

espero y les este gustando la historia tanto como a mi escribirla no olviden comentar y votar se les quiere