capitulo 4
*Graciela Ferrer*
Al despertar no sabia donde estaba todo en la habitación era blanco estaba totalmente confundida.
—Graciela al fin despiertas me tenias preocupada te sientes bien, verdad no te duele algo
—Estoy bien gracias mucho mejor.
Al ver que no esta sola en sus brazos tiene un Niño de unos dos años de edad, tiene el pelo rubio y unos ojos color verde.
—Y este bebé de quien es, es muy lindo.
— Él se llama Damián, vino con nosotros cuando te desmayaste lo recuerdas estaba con el doctor Miller,.
—Y qué edad tienes Damián,.
—Tengo dos años.
Se acerco a la cama y me estiro sus brazos para que lo cargara.
—esta bien.
Le Sonreí, y le dije que si y sin que yo me lo esperará me abrazó.
—Oye Damián, gracias por preocuparte por mi y le di un beso.
En ese momento tocaron a la puerta y era el se ve tan guapo cuando sus ojos me miraron sentí que me miran de una manera que no se que es pero me siento segura.
—Hola veo que ya despertaste como te sientes.
—Estoy bien gracias mucho mejor solo un poco cansada cuando me puedo ir a mi casa.
—te podrás ir dentro de poco solo dejame llevar a Damián, con mi hermano para poder hablar contigo para que te puedas ir a casa y darte unos medicamentos.
—Papi, me quiero quedar con ella.
—No, te puedes quedar Damián, tu lo sabes te vine a buscar para que vallas con James, por un helado quieres.
—No
En ese momento siento como me rodea el cuello para que no lo alejara, de mi quede impresionada al igual que Emily, y el doctor Miller, en ese momento lo aparto un poco de mi para poder habar con el.
—Oye Damián, te prometo que cuando me valla yo te busco para despedirme de ti si.
—Me lo pometes.
—Te lo prometo me dio un beso y bajo de la cama con ayuda de su papá.
—Bueno yo ya regreso voy a dejar a este pequeño, con mi hermano y regreso para que hablemos.
—Esta bien gracias adiós Damián, nos vemos dentro de un ratito.
Al salir de a habitación, nos quedamos en silencio hasta que Emily, decidió romperlo.
—Oye Graciela, de verdad te sientes mejor.
—Si de verdad estoy mejor no te preocupes.
—Bueno cambiando de tema vi como te miraba el doctor verdad que esta como para comérselo.
En ese momento suelto una una carcajada. — Qué cosas dices Emily,.
—¿Qué? pero si es la verdad.
En ese momento tocan a la puerta y es el al mirarlo no pude evitar sonrojarme, y quedarnos en silenció hasta que decide el romperlo.
—Bueno Emily, te importaría dejarme a solas con la señorita Ferrer,.
—Llámame Graciela, por favor.
—Ok entonces tu llámame Aarón, esta bien.
—Ok yo los espero afuera.
Al dejarnos solos el se acercó y se sentó en la silla que estaba a mi lado izquierdo y me miro muy seriamente.
—Pasa algo malo doctor Millar, perdón Aarón,.
—Graciela, te realizamos unas tomografías y tienes una costilla fracturada, tienes moretones en tu abdomen, como te paso eso Graciela,.
Me puse nerviosa no me percate de los golpes, y moretones que tenia en mi cuerpo no pude seguir mirándolo porqué sabia qué iba a llorar y no quería que se enterará nadie lo puede saber.
—No, me pasó nada me caí por las escaleras eso es todo.
—Y si eso es lo que paso porqué no me miras, porque desvías la mirada.
—Mírame Graciela,.
Al mirar sus ojos supe en lo que estaba pensando pero yo no quería qué lo dijera me sentía sucia, como si no valiera nada durante mucho tiempo Eliot, me a hecho sentir de esta manera. me quede callada esperando a que me dijera lo que no quería escuchar.
—Esos moretones en tu abdomen, y esa costilla que tienes fracturada, no es por una caída y tú lo sabes muy bien.
Lo mire a los ojos y sin poder evitarlo sé me salieron las lágrimas sabía qué tenía razón pero no podía decir nada le tengo mucho miedo a Eliot, bajé la mirada y seguí llorando en silenció cómo sí él no estuviera allí.
—Mirame Graciela, dime quién té dio esos golpes.
—Nadie me hizo nada me caí eso es todo.
—Y si eso es verdad entonces ¿porqué lloras,y porqué no me miras?.
Me limpié las lágrimas y hice todo el esfuerzo para mirarlo y no derramar una lágrima. —Ya te lo dije no me pasó nada Aarón, por favor me quiero ir a mi casa
—Esta bien Graciela, no te quiero presionar no era mi intención esta bien. Muy bien Graciela tienes restringidas las actividades donde tengas que hacer mucho esfuerzo, no puedes alzar pesó y té colocarás hielo en la zona y realizarás unos ejercicios de respiración eso té ayudará mucho utilizarás una venda si tienes molestias y te voy a recetar calmantes para el dolor esta bien .
—Bueno nos vemos ahora voy a preparar la hoja de salida de la clínica para que te puedas ir a tu casa a descansar.
—Esta bien gracias Aarón,.
—No me tienes que dar las gracias para eso estamos bueno yo ya regreso te dejo para que te cambies.
—Aarón, espera.
—Si dime Graciela,.
—Tienes un hijo muy hermoso espero no te molesté qué lo vea antes de irme. él me dio una sonrisa hermosa qué nunca vi en una persona era dé ésas sonrisas sinceras
—Graciela, no tengo porque molestarme la verdad le caes muy bien jamas lo vi preocuparse cómo lo hizo contigo no dejaba dé llorar cuando te desmayaste y preguntaba una y otra vez si ibas a estar bien. —Bueno ya regreso.
Después de que Aarón, se fuera no pude evitar pensar qué mis Padres, no sé pueden enterar dé qué estuve en el hospital me cambié para irme a mí casa estoy cansada física, y mentalmente. Al salir de la habitación me encuentro a Emily sentada en las sillas del pasillo.
—Emily, ya nos podemos ir.
—Aja hasta qué sales qué tanto hablaban.
—De nada solo me dijo que tenia que cuidarme más, sobre todo ahora qué estamos en él ultimo año eso es todo.
—Si, claro vi como se miraban y los dos tenían un brilló especial le gustas Graciela,.
—Oye ya basta Emily, qué locuras dices si apenas lo voy conociendo hoy basta.
—Bueno ya perdón me callo solo porque hay viene Aarón,.
—Bueno Graciela, estos son los medicamentos que tienes que tomar cada ocho horas sí sientes dolor también hay una crema para qué te la apliques en la zona afectadas y tienes qué guardar reposó por lo menos un par de semanas pero cómo sé qué están en su ultimo año de universidad qué sean por un par de días pero tienes qué tener mucho cuidado.
—Esta bien gracias Aarón, prometo qué trataré dé descansar por un par dé días. Aarón, puedo ver a Damián, antes dé irme.
—Si, claro te debe estar esperando.
—Papi,.
—¿Qué pasa? Damián, por qué lloras.
—James, me regañó
—Y qué hiciste.
—Yo no hice nada.
—Si claro como no mira quien esta aquí Graciela,.
—Graciela,.
—Ven Damián, estiré los brazos para cargarlo y al momento dé tenerlo me dio una sonrisa hermosa.
—Graciela, esta bien.
—Si, Damián, estoy muy bien gracias por preocuparte por mí sabés tienes unos ojos muy bellos
—Tu también eres muy bonita
Gracias bueno Damián, ahora sí me tengo qué ir a mí casa a descansar un poco sí.
—N,o te vaya quédate un ratito más.
—Papi, dile qué sé quedé un ratito más si.
—Damián, ella tiene qué descansar todavía ella no está bien.
—Bueno entonces llevame contigo si.
—Haber Damián, té parecé sí nos vemos en un par dé días y té invitó un helado o lo qué tú quieras sí.
—Helado, dé chocolate.
—El helado qué tú quieras cariño.
—Pero Papi, di que si me llevás con ella. —Esta bien Damián, yo te llevo con ella ahora deja que Graciela se valla a descansar .
—Gracias Aarón, por todo nos vemos luego adiós Damián, le di un beso y salí con Emily, dé la clínica.
Gracias por leer mi historia dejen comentarios de que les parece nuestro Aarón y Graciela no olviden comentar y votar.
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