Jueves 6 de agosto de 2015 20:02

—¿Llamaste?

—Sí, ya están llegando amor. El vuelo se retrasó un poco nada más.

—Menos mal, ya estaba preocupada.

—Quedate tranquila.

—No te molesta que se queden acá ¿No?

—Claro que no me molesta, son tu familia y ésta también es tu casa.

—Mati...

—Nada de discutir. No habremos firmado un papel, pero todo lo mío es tuyo amor.

—Está bien...

(...)

—¡Hermanita!

—¡Dante! ¡Qué bueno que viniste! Te extrañe.

—Y yo a vos, Lu.

—Hola ma.

—Hola hija.

—Estás hermosa Lu

—No hace falta que me mientas, Dante.

—No lo hago, para mí siempre vas a verte hermosa.

—Gracias tonto. Te quiero.

—Y yo más.