Narra___:

-Hmg...-Me quejo mientras me siento refregándome los ojos.

Pero me sorprendí al ver que aun era de noche, mire a mi alrededor, todos se encontraban dormidos, o casi todos......faltaba Shintaro. Por lo que salí de la cabaña y comencé a buscarlo por los alrededores de la aldea, pero nada. Algo insegura tome valor y me transforme en un demonio completo, mire mis manos con temor, si, me imaginé sangre callendo de ellas.

-Yamete-Me susurro mientras cierro mis ojos.

Al pasar unos minutos logro tranquilizarme y así no perder el control, para luego buscar su aroma, Lo encontré! Corro en dirección en el que se encuentra y termino en el bosque cerca del pozo.

-Donde estará?...-Miro alrededor, hasta verlo parado en la nada.

-Aquí debe ser suficientemente lejos-Dijo desenvainando su katana.

Se posicionó en forma de batalla, respirando profundamente y concentrándose.

-Bien-Dijo y comenzó a hacer movimientos profesionales y de gran agilidad para ser un principiante, hasta podría decir que ya lo había utilizado antes.

Cuando? De verdad no es la primera vez que lo usa? O solo abra practicado mas de lo necesario? Sin embargo luego de unos movimientos mas, pierde el ritmo y se pasa a llevar en el brazo, soltando de inmediato la katana y arrodillándose para sostener la herida.

-Aguanta-Se decía solo.

Estuve a punto de correr hacia el, pero me detuvo algo que me dejo paralizada, la sangre que comenzaba a gotear de su brazo no era roja...era negra.

-Yamete,yamete,yamete,yamete!-Se gritaba con la voz quebrada.

No tuve las agallas para acercarme, solo pude observar como el golpeaba el suelo y comenzaba a llorar. Como una estúpida, llore, sin saber como ayudarlo.

-Onegai....onegai yamete-Su sangre se empezó a devolver a su cuerpo, por lo que Shintaro grita de dolor, lo peor es que retrocedia lentamente.

La noche estaba adornada por los dolorosos gritos de este, por sus lagrimas en el suelo y un ambiente de confusión absoluta. Al pasar los minutos se recostó en el suelo, con la respiración agitada y poso sus manos en donde se situaba su corazón.

-Ya paso, solo...tengo que tener mas cuidado-Dijo.

Se limpio las lagrimas que le quedaban y siguió practicando, pero con mas cuidado. Se la paso unas horas y luego termino, por lo que volvi y fingi que seguía durmiendo. Que exactamente eres Shintaro? Que me estas ocultando? Sin darme cuenta, me dormi.

...

-___?-Una voz conocida habla-___-.

-Hmg?-Me quejo y levanto una mano, mostrando una señal de que espere un segundo.

-Apurate pequeña Inu, que hay que ir a seguir buscando fragmentos-Shintaro?

Me siento de inmediato y lo observo preocupada, Acaso no piensa decírmelo? Porque me siento triste? El me miro extrañado.

-Porque te dormiste con esa transformación?-.

-Eh?-Me miro, seguía como demonio completo.

-Pero te ves kawaii-Sonrie.

-Arigato Shintaro-Le devuelvo la sonrisa.

Me lo quede mirando un rato, No piensa contarme todo lo que sufre? Acaso no quiere que lo vea débil? Porque te aguantas tanto sufrimiento y dolor Shintaro? Me transformo en humana y por impulso rápidamente lo abrazo, parandome y encondiendo mi rostro en su pecho.

-Nani? ___ que sucede?-Su voz se nota preocupado.

-Shintaro...gomene-Lo abrazo mas fuerte-Gomene, me eh vuelto mas débil-.

Antes que pudiera decir otra cosa siento la mano de Shintaro en mi cabeza.

-No se a que refieres, pero no eres débil, sino no estarías aquí-Lo mire a la cara-Deja de criticarte tanto-.

-Hai...-Susurro.

Su rostro termino apoyado en mi cuello, dejando que su respiración choque contra mi piel y una corriente pasa por mi cuerpo, Nani? Porque estoy nerviosa? Mis mejillas arden.

-Shintaro ya despertaste a...___?....-Levante el rostro, era Inuyasha.