Capítulo 53: Te amo
Pov. Normal
- Y no me volveré a ir...
- Ni yo te dejaré ir- Adrien abrazó fuertemente a Nathaniel como si el chico pudiera irse en cualquier momento.
- A-Adrien no p-puedo respirar- dijo el pelirrojo y el chico lo soltó.
- Lo lamento, es la emoción. No puedo creer que estés aquí por fin, por favor dime que esto no es un sueño...
Las manos de Nathaniel acariciaron suavemente el rostro del rubio, Adrien solo cerró sus ojos disfrutando de aquella caricia. Efectivamente Nathaniel había crecido y ya no era necesario ponerse de puntitas para poder besar al rubio, así que solo se acercó y junto sus labios con el otro chico. Adrien correspondió rapidamente pero al instante Nath se separó.
- ¿En verdad crees que es un sueño?- Adrien abrió los ojos y se encontró con la hermosa sonrisa de su novio.
- Sigo sin creer que una persona tan perfecta como tú pueda existir- las mejillas de Nath se volvieron rojizas y desvió la mirada, Nathaniel pudo haber cambiado fisicamente pero seguía siendo el mismo chico de hace años, el chico que se sonrojaba con cualquier cosita.
Adrien tomó la mano de Nathaniel y observó el anillo, se sintió feliz al saber que el chico si lo conservó, comenzó a caminar directo a la sala.
- Vamos, tienes que contarme muchas cosas. Quiero saber todo lo que hiciste en estos años que estuviste sin mi, quiero saber si me extrañaste, si llorabas por mi cada noche, si me recordabas cuando te sentías solo y triste- se sentó en el sillón y el pelirrojo lo siguió.- Porque yo si lo hacía... Te extrañé bastante, a veces lloraba porque no podía tenerte y porque tenía el miedo de que conocieras a alguien mejor que yo y me dejaras.
- Adrien...- lo miró.- Jamás voy a conocer a alguien que te supere en cualquier aspecto, para mi tú eres el mejor y no te cambiaría por nadie.
- ¿Lo prometes?- asintió y Adrien lo abrazó.- Bueno, cuéntame que hiciste en esos años.
Nathaniel se acomodó el cabello tras la oreja y aclaró su voz.
- Pues creo que no hay algo que ya sepas, todo lo que contaba cuando hablabamos por telefono. Estudie pintura y comencé a comprar ciertas cosas para poder empezar a trabajar. me ofrecieron un trabajo aquí, me darán una buena cantidad de dinero por cada pintura que haga y dijeron que me ayudarían a que mi trabajo sea reconocido en todo el mundo, por fin podré ser alguien importante- dijo con todas sus ilusiones, incluso sus ojos brillaban más.- Si me va bien, muy pronto podré hacer mi primer exposición y vendrán personas importantes de todas partes del mundo a ver unicamente mis pinturas.
El rubio escuchaba con atención cada palabra que salía del chico.
- Me alegro que tu sueño se esté cumpliendo- dijo con una gran sonrisa.
- Bueno, aún me falta un sueño por cumplirse... Casarnos.
- Tienes razón, ese también es mi sueño. Dejar de ocultarle a todos a quién amo realmente, quiero que todos sepan que Nathaniel Kurtzberg el mejor pintor del mundo es el futuro esposo de Adrien Agreste. Si todo marcha bien, nuestra relación se sabrá antes de que sea tu primer exposición, nada me gustaría mas que acompañarte ahí sin fingir que solo somos grandes amigos.
- Eso espero...- tomó sus manos.- ¿Y tú qué tal tu vida sin mi?
- De lo peor, tuve que seguir con la empresa de mi papá... Deje el modelaje y me convertí en el jefe, como mi papá está pagando todo lo que hizo tuve que ayudar a Marinette para que su sueño se hiciera realidad, la convertí en la mejor diseñadora de París y del mundo, me encargo de aprobar todo lo que ella hace y de contratar a todos los modelos, es algo cansado estar en una oficina todo el día- Adrien odiaba lo que hacía, pero una idea llegó a su mente.- ¡Ya sé!- su grito asustó a Nathaniel.- Puedes trabajar para mí...
- ¿Q-qué?
- Sí, puedes hacer retratos de los modelos usando la ropa de Marinette. Podríamos usarlos como publicidad y así te conocerían más rápido, por favor Nathaniel te pagaré... Asi tendriamos la excusa de estar juntos y nadie sospecharía si te quedas aquí porque pensarán que solo lo haces por el trabajo.
- Pero... ¿Y mi otro trabajo? N-no digo que sea mala idea, pero ese trabajo también es muy bueno y realmente quiero saber si soy bueno en esto o no. A lo que me refiero es que si tú me das este trabajo es solo porque soy tu novio y no porque lo haga bien...
- Oye, ¿por qué desconfías tanto de ti? Tienes un gran talento Nathaniel, eres muy bueno dibujando. Dime ¿Crees que te hubieran llamado si tus pinturas fueran basura? Ellos vieron todo el potencial que tienes y quieren trabajar contigo antes de que alguien más les gané al próximo Claude Monet o incluso a...
- Adrien no exageres- reía el pelirrojo.
- Hablo muy en serio Nathaniel... Mira, puedes tomar este trabajo y el que te ofrecieron. Solo estarás conmigo los días en los que no te pidan nada allá, lo unico que quiero es verte diario. Pasé todos estos años solo y lo único que quiero hacer en estos momentos es tenerte entre mis brazos...- comenzó a acariciar la pierna del chico subiendo lentamente la mano, Nathaniel sintió escalofríos.- O mejor dicho en mi cama- esto último se lo susurró al oido, se alejó para ver la reacción de Nathaniel.
- ¿Y por qué no lo dijiste desde el principio? Estaba esperando a que lo dijeras- el pelirrojo se lanzó hacia Adrien y lo besó, obviamente el rubio le correspondió.
Los movimientos eran rápidos, habían esperado tanto tiempo para volver a unir sus labios, para estar juntos.
Nathaniel se subió en el rubio y volvió a besarlo, mientras que Adrien lo sujetaba de la cintura. Las manos del pelirrojo se encontraban rodeando el cuello del otro chico.
Tuvieron que separarse, ambos se miraron a los ojos y sonrieron.
- ¿No prefieres descansar...? Acabas de llegar del tra...- Nathaniel se vió interrumpido por los labios del rubio, después se separaron.
- Esto es mucho mejor que descansar, por favor sigue...- el pelirrojo sonrió, sus manos se dirigieron a la camisa que traía Adrien y que comenzó a desabrocharla lentamente.
Sus manos recorrieron lentamente el pecho de Adrien, estaba a punto de hacer algo que el rubio jamás imaginaría... Nathaniel se acercó a su cuellos y comenzó a besarlo, después de unos cuantos besos empezó con las mordidas dejando el cuello del chico marcado.
- Ah...- Adrien no podía negar que le gustaba lo que su novio le estaba haciendo, un escalofrío recorrió su cuerpo cuando sintió la lengua de Nathaniel bajar hasta su pecho.- Oye Nath...- dijo entre jadeos.- No querrás cambiar los roles, ¿o sí?- el otro se detuvo para mirarlo.- No tengo ningún problema con eso, pero... ¿Te parece si mejor vamos a la recámara?
- ¿Ir a la recámara...? Podemos hacerlo aquí- sonrió.
- ¿Por qué querías hablar conmigo urgentemente? Nino y yo estábamos viendo los últimos detalles de nuestra boda- dijo la morena señalando a su prometido.
- Necesito decirte algo sobre ese asunto- con esas simples palabras Alya entendió a lo que se refería su mejor amiga.
- Amor, quédate aquí... Marinette necesita decirme algunas cosas- el chico asintió y se sentó en uno de los sofás.
Las chicas se fueron al comedor, una vez que Alya entró la peliazul se aseguró de cerrar la puerta.
- ¿Qué pasa?- tomaron asiento.
- ¿Por qué no me dijiste que Nathaniel estaba muchísimo mejor?
- ¿Qué? ¿A qué te refieres?
- ¡Dios mío Alya! Hoy lo ví y está hecho un dios... ¿Cómo voy a competir contra él?
- Fácil, date por vencida... Amiga, sé que amas mucho a Adrien pero si él no siente lo mismo no puedes hacerlo cambiar de opinión. Él eligió a Nathaniel por algo.
- Es que no puedo hacerlo... Ya no es sólo porque lo amo, te das cuenta que cuando Adrien muestre a Nathaniel oficialmente como su novio yo seré la burla de todo el maldito mundo. ¡Mi carrera se arruinará!
- Eso lo hubieras pensado antes de meterte en esto Mari...
- ¡Ya lo sé!
- Bueno, el plan que te dije no funcionó pero estoy segura que si lo ejecutas mejor podrás llevar a Adrien a la cama... Dime, ¿cómo fue la primera vez que lo hicieron?
- No lo hemos hecho...- Alya tapó su boca para evitar reírse.
- Espera... ¿Qué no te le habías insinuado hace muchos años? En aquella fiesta- Marinette se puso roja al recordarlo.
- Lo hice, pero exageré en las copas que me terminé durmiendo- esta vez Alta no pudo evitar reírse.- ¡Oye, tú fuiste la de la idea!
- Perdón Mari, pero yo nunca dije que tomaras tanto al punto de quedarte dormida- y volvió a reírse.
- ¿Podrías callarte?
- Bien, bien... Escucha, no conozco mucho a Nathaniel pero por lo poco que sé de él siento que él es la chica en la relación... ¿Sabes a lo que me refiero?- negó.- O sea que a la hora de ya sabes qué quién tiene el control es tu novio falso.
- Eres una...
- Shhh, déjame terminar... Eso podría significar que tienes aunque sea una pequeña posibilidad de acostarte con él, solo se un poco más provocativa, tienes que coquetear con él. Hazlo por varios meses, se comenzará a hartar y el día que menos te los esperes tú amaneceras en la cama de Adrien antes de que Nathaniel lo haga.
Marinette estuvo a punto de contestar, pero la entrada de Nino las interrumpió.
- Alya, recuerda que tenemos que ir con tus padres...- la chica miró el reloj y se paró de la mesa.
- Tienes razón, lo lamento Marinette tengo que irme- los tres salieron de ahí y Marinette fue a abrirles la puerta, solo que antes de salir Nino revisó su celular y vio la llamada perdida de Adrien.
- Oh... Adrien me llamó en la mañana y yo ni en cuenta, ¿Sabes para que me quería Mari?- la chica negó.- Solo déjame marcarle y nos vamos.
Se colocó el celular en su oído y no esperó pacientemente que Adrien le contestara...
- ¡Adrien amigo!- saludó alegremente.- ¿Adrien... Estás bien? Solo quería preguntarte porque llamaste en la mañana no pude contestar, esto de la boda es muy ocupado... ¿Que? ¿Mañana?- Alya y Marinette voltearon a verse.- ¿Seguro que te sientes bien? Te escucho algo raro... Cómo si- volteó a ver a Marinette.- Tienes razón, mejor te marco mañana cuando estés más tranquilo. Adiós hermano cuídate, nos vemos- colgó su celular y lo guardó en su bolsillo. Obviamente a Marinette le dió curiosidad.
- ¿Que te dijo Nino?
- La verdad no le entendí muy bien, estaba muy agitado y me dijo que le marcara mañana. Adrien es raro... Bueno, vámonos Alya- el chico se despidió de Marinette y salió.
Alya se acercó a la chica.
- Creo que Nathaniel te ganó otra vez...- le susurró en el oído.
- Si, si. Ya vete- contestó de mala gana y cerró la puerta.
El simple hecho de pensar que justo en este momento Nathaniel está en los brazos del rubio la hacía enfurecer.
- Esto no se va a quedar así...
**********************
La puerta fue abierta bruscamente por Adrien, tenía abrazado al pelirrojo de la cintura y lo llevaba directo a la cama.
- ¿Sabes que otra cosa hacía mientras no estabas?- susurró seductoramente.- Éstas cuatro paredes han sido testigo de todo tomatito.
- Eres un pervertido- lo recostó.
- ¿Tú crees?- besó al chico, sus manos se introdujeron a la camisa que traía puesta Nathaniel y al primer roce entre los dedos y uno de sus rosados pezones gimió.- Extrañaba escuchar eso- Nathaniel se sonrojó y desvió la mirada.- Perdóname, pero no puedo resistirme más, han sido años sin esto.
Se despojó de la playera del chico y de la suya, después siguió con su pantalón.
Adrien fue desabrochando el cinturón del chico y bajó lentamente el pantalón, sonrió al ver la erección de Nathaniel. Él había preferido cerrar los ojos, solo sintió cuando su pantalón junto con su boxer recorrían sus piernas.
Su cuerpo temblaba, sintió como Adrien se posicionaba para entrar pero lo detuvo antes de que lo hiciera.
- ¡E-espera!-.
- ¿Qué pasa?- preguntó confundido el rubio.
- Es que... No lo he hecho desde la última vez que nos vimos, dolerá...- el rubio no pudo evitar sonreír y se agachó para besarlo.
- Lo haré con cuidado, lo que menos quiero es lastimarte tomatito.
- P-pero no lo sé, la primera vez me dolió y...
- Está bien, tranquilo... ¿Podrías voltearte?-Nathaniel se levantó y le dió la espalda al chico.
- Puedes recargarte en la almohada, para que sea más cómodo para ti- el pelirrojo lo hizo, se aferró de las sábanas y suspiró. Curveo un poco la espalda y esperó a que Adrien comenzara.
Adrien no quería lastimarlo, así que lo prepararía bien.
Lamió uno de sus dedos y lo metió lentamente.
- ¡Ah!- Nathaniel sentía un poco de dolor, pero no dijo nada. El rubio siguió introduciendo su dedo, quería que su chico se sintiera bien.
Simuló ligeras embestidas para que el pelirrojo fuera acostumbrándose a esto, sus jadeos no paraban y eso le encantaba al chico. Después de ciertos minutos Adrien metió un segundo dedo, el pelirrojo se quejó un poco.
- ¿Estás bien Nath?- no recibió respuesta del otro.- Puedo parar si...
- N-no... Sigue p-por favor- suplicó.
Adrien siguió, los minutos pasaron y el chico creyó que era momento así que sacó lentamente sus dedos del interior del chico. Nathaniel volteó a verlo confundido.
- Voltea Nath- lo hizo. Adrien tomó con suma delicadeza ambas piernas del pelirrojoy las separó. El pecho de Nathaniel subia y bajaba, sus mejillas tenían un color rojizo y habia un poco de sudor en su frente.- Eres hermoso- se agachó para poder depositar un beso en la frente del pelirrojo.
Sus miembros se rozaron y con eso bastó para que Nathaniel se estremeciera más. Adrien se dio cuenta de esto y comenzó a moverse para escuchar los dulces gemidos que salían de la boca de su novio.
- A-Adrien ¿q-qué haces?- preguntó agitado.
- ¿Acaso no te gusta?- dijo sin dejar de moverse. Nathaniel sujetó las sabanas con fuerza y cerró los ojos. La mano de Adrien recorrió su pecho hasta llegar a su miembro, lo tomó y comenzó a subir y bajar la mano.
- ¡A-adrien!
El chico sonrió satisfecho, Nathaniel no podía parar de gemir ni siquera podía pronunciar bien una sola palabra, su mente estaba hecha un caos.
- Escucha...- susurró el rubio en su oído.- Voy a hacerlo, si quieres que pare solo dilo... ¿Está bien?- Nathaniel asintió.
Adrien se posicionó para entrar, tomó al pelirrojo de las piernas y lo hizo. El chico no se quejó, de sus ojos salían pequeñas lágrimas, el las secó y le dijo al rubio que continuara.
Las embestidas comenzaron lentas para que Nathaniel se fuera acostumbrando, los jadeos de Nathaniel encendían más al otro. Adrien sujetaba con fuerza las piernas del pelirrojo, observaba el rostro sudoroso del chico. Los ojos de Nathaniel brillaban, sus mejillas eran rojas; mordía levemente su labio inferior intentando no gemir pero le era imposible.
- A-Adrien más p-por favor- una sonrisa iluminó el rostro del rubio y comenzó a ir más rápido, Nathaniel enredó las piernas en las caderas del rubio y éste recargó sus manos contra la pared sin perder de vista al pelirrojo.- E-espera...
- ¿Qué pasa?- Adrien se había preocupado, pensó que había lastimado a Nathaniel.- ¿Estás bien?
- S-si, solo que te ví cansado y... Quiero hacer algo yo- con eso Adrien entendió el mensaje que quería darle, sonrió emocionado.- Bien, soy todo tuyo amor...- se recargó en la pared observando cómo el pelirrojo se le acercaba.- Solo no seas brusco, ¿de acuerdo?
Las manos de Nathaniel se posaron en el abdomen de Adrien recorriendo cada parte hasta llegar a su cuello donde se detuvieron.
Nathaniel le dedicó una hermosa sonrisa a su rubio, una sonrisa que enamoró más Adrien. Se subió encima del chico con una mano ayudó a que el miembro de Adrien entrara en él, cuando estuvo dentro soltó un gran suspiro.
Se quedó un rato así, Adrien posicionó sus manos en la cadera de Nathaniel y el pelirrojo empezó a dar ligeros brincos mientras se sujetaba del cuello de Adrien.
La respiración de ambos era acelerada, las manos de Adrien comenzaban a marcarse en la blanca piel del pelirrojo. Nathaniel subió el ritmo, junto su frente con la de Adrien.
Ambos se vieron y no dudaron en besarse, la lengua de Adrien recorrió cada parte del pelirrojo, mordió su labio. Nathaniel lo sujetó de algunos mechones profundizando el beso.
Estaban a punto de acabar, el pelirrojo se separó de él y entre gemidos intentó hablar...
- ¡Ah! A-Adrien...- aquellos ojos verdes lo admiraron.- T-te... Te amo.
Y volvieron a juntar sus labios.
Todas las noches las paredes fueron testigo del sufrimiento del rubio al partir Nathaniel, fueron testigo de esa promesa que el rubio le hizo... Y ahora estaban siendo testigo de tan esperado reencuentro.
Volví uwu
Perdonen por ya no actualizar tan seguido es que la escuela me deja muy cansada y apenas toco mi cama y me quedo completamente dormida.
Debido a que me ignoraron la vez pasada ajaj :'v
Ya sé cuál será el siguiente fanfic al concluir este así que prepárense. uwu
Esto no tiene nada que ver, pero solo quería decirles que mi crush me trae bien enamoradaaaa, ya eso es todo.
Bai
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro