Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 17: Bienvenido a casa

Pov. Nathaniel

- Vendrás a mi casa- dijo abriendo la puerta del auto. Me hizo una señal para que entrara.

- Adrien no, tengo que hacer el proyecto- dije evitando cualquier contacto visual con él que me hiciera cambiar de opinión.

- Puedes hacerlo allá. Ahora quiero que subas al auto- señaló.

- Pues no lo haré- cruce mis brazos.

- ¿Seguro...?-.

- Estoy completamente seguro- contesté.

Suspiró profundo, se acercó al que supuse que era su chófer, bajó la ventana y comenzaron a hablar. Estaba demasiado lejos como para escuchar su conversación, sólo vi como Adrien le sonrió y regresó conmigo.

- Bueno, aunque sea deja que te lleve a casa- sonrió.

- No creo que a tu chófer le agrade la idea-.

- Ya le dije y está dispuesto a llevarte, por favor Nath- y justo ahí caí, esos ojos verdes me atraparon...

- Ah, esta bien lo que tu digas- me metí al auto y después Adrien me siguió.

Comenzamos a avanzar, podía sentir la mirada de Adrien... No era como la de hace rato cuando me dijo que me llevaría a mi casa.

El camino se me hizo desconocido así que decidí preguntar.- ¿Qué hacemos aquí?-.

- Había mucho tráfico y decidió tomar otra ruta- contestó sin mirarme.

Pronto llegamos a una gran casa, las puertas comenzaron a abrirse y el chófer se metió.

Me mintió.

- Adrien... Esta no es mi casa-.

- Lo sé, es mi casa y ahora sal del auto- abrió la puerta.

Tenía miedo de salir, que alguien viera que estoy en su casa. Sin decirme nada tomó mi mano y nos echamos a correr.

- Bienvenido...- las puertas se abrieron y dieron paso a una enorme sala, mi casa literal era toda su sala. No pude evitar abrir la boca de la emoción, parecía un castillo.

- Es hermosa- dije observando cada detalle.

- Jamás le he visto lo hermoso a esta cárcel- contestó.

- Adrien, ¿qué es esto?- un hombre alto, delgado y con una mirada fría aparecía en la escalera central.

- ¡Papá! Creí que seria buena idea invitar a un amigo- Adrien se apresuró en hablar.

- No te dí permiso, así que dile a tu amigo que se vaya a su casa-.

- Papá, por favor... Tenemos que hacer un proyecto juntos- agarre el hombro de Adrien y cuando me volteo a ver le sonreí.

- No te preocupes, me iré a casa y mañana nos vemos- su padre se me quedo viendo, era demasiado incómoda su mirada.

- Perdón por traerte aquí- di media vuelta y comencé a caminar, sólo hasta que la voz de Gabriel volvió a sonar.

- Espera... Sólo por esta vez Adrien dejaré que tu amigo se quede en la casa, para la otra me tendrás que avisar con tiempo- Adrien corrió y abrazó a su papá.

¿En verdad él es tan malo como dice Adrien?

- Debo ir a trabajar, así que vayan a hacer su proyecto. Nathalie les avisará cuando la cena este lista- Adrien asintió, su padre se despidió de él y luego me observó a mi, de pies a cabeza.

- ¡Vamos Nathaniel!- Adrien me jalaba por décima vez, los pasillos eran demasiado largos. Podría jurar que llevamos dando vueltas todo este tiempo.- Esta es mi habitación- señaló la última puerta.

Camine lentamente hacia donde él estaba, esperó a que estuviera cerca de él para abrir la puerta. Ingrese con un poco de miedo, Adrien estaba demasiado raro, de repente traía una sonrisa que no se le quitaba con nada y a veces su mirada era fría, como la de su padre.

- Bien, ¿qué quieres hacer?- volteo a verme.

- Quiero ir a casa, pero supongo que no me dejarás. Así que lo no sé que quiero hacer-.

Di un paseo por toda la habitación, mire cada detalle que había. En una esquina se encontraban varios pósters de Ladybug, su antiguo amor.

Las manos de Adrien me tomaron por sorpresa, sentí su respiración cerca de mi cuello.- No te pongas celoso, planeaba quitarlos después- beso mi cuello causándome escalofríos.

- ¿Después...?- repetí.

- ¿Te gustan los videojuegos?- preguntó acercándose al televisor.

- Nunca fui fan de ellos-.

- ¿Qué hacías entonces?-.

- Ah... Salir a jugar con mis amigos- Adrien volteó la mirada no entendía porque hasta que me acordé que él nunca salió.- Perdón, no quería que te sintieras mal-.

- Da igual, de todas maneras no creo que sea tan divertido como los videojuegos- dijo agarrando el control.

- ¿Estas bromeando? Salir a jugar es lo mejor del mundo, correr... Bueno excepto que cuando no te fijabas podías caer y sacarte sangre, pero eso no importaba mientras estuvieras con tus amigos.

- Bien, basta ahora si me estas haciendo sentir mal- rió.

- Algún día saldremos a jugar...-.

- ¿Crees que mi padre me deje?- Me preguntó y asentí.

Toda la tarde estuvimos haciendo cualquier cosa menos el proyecto. El me enseñó a jugar y yo le enseñe algo de dibujo, cosa que no fue tan difícil.

- ¿Así está bien?- pregunto alzando su hoja.

- Perfecto- dije.

Generalmente cuando dibujo me amarro el pelo, para que al momento de colocar pintura o uno que otros detalles no termine manchando mi pelo. Tome la liga de mi muñeca y sujete mi pelo en media cola.

- Te ves muy lindo así...- voltee y Adrien estaba derramando la pintura morada que traía en la mano.

- ¡Adrien!- me acerqué a el para tratar de alcanzar la pintura y que no cayera nada, pero era un poco tarde... Adrien estaba manchado.

- Uy- tomé sus manos porque supuse que intentaría quitar la pintura, pero sólo terminaría arruinando más su ropa.

- No lo hagas-.

- ¿Por qué no? Es divertido mancharse de pintura- terminando de decir esto puso su mano sobre mi cara.

- ¡Oye!- dije riendo. Intenté alcanzarlo para mancharlo. Aunque sólo alcance a rozar un poco de su cara.

- Vamos zorrito... Demuestra que eres tan bueno sin el traje-.

Sonreí.

Di un paso hacia Adrien, el comenzaba a retroceder. No tengo ni idea qué hacer para alcanzarlo, sin Trixx creo que no soy nadie. Miré alrededor, todo el cuarto se encontraba algo desordenado, había libros tirados, ropa y otras cosas que no alcanzaba a distinguir bien. Y a unos cuantos pasos de él se encontraba su mochila.

¡Lo tengo!

Volvi a dar algunos cuantos pasos para que Adrien se acercara cada vez más a la mochila, al aparecer aun no podia notar lo que quería haceer.

Un paso más.

Su pie tocó la mochila y volteo hacia atras.

- ¿Creías que caería? Necesitas mucho más para hacerme caer-.

- ¡Buu!-.

- ¡Ahhh!- dio un paso atrás olvidando por completo la mochila.

- Caíste- dije riendo.

- ¿Cómo le hiciste para llegar tan rápido? Sólo voltee un instante-.

- Ahora puedes ver que sin el traje también soy el mejor- extendí mi mano para ayudarle.

Adrien había caído cerca de un estante, encima de este se encontraba un libro que no demoró en caer en su cabeza por el impacto anterior.

- Y tu sin el traje sigues teniendo mala suerte- me arrodille y comencé a reír.

- Mientras esa mala suerte no arruine nada nuestro está bien- le sonreí.

Se comenzó a acercar, mis nervios aumentaban cuando sentía su respiración más cerca.

No me pude contener más y lo besé, tome sus mejillas y el me tomo de la cadera. Ni si quiera nos importó que estuviéramos manchados.

Alzó mi playera, el contacto de la pintura y mi piel me hizo soltar un leve gemido que hizo sonreír a Adrien.

- Joven Adrien es hora de que usted y su amigo bajen a cenar- en ese momento me separé de Adrien pues pensaba que la chica abriría la puerta.

- Maldita sea...- susurró.- En un segundo bajamos Nathalie, gracias- contestó amable.- Si quieres puedes limpiarte en mi baño, yo iré al de abajo. Te espero en la sala- asentí.

Me dirigí al baño, abrí la llave del agua y empecé a quitarme la pintura que tenía en el rostro.

- Nathaniel tengo hambre- Trixx salió de mi saco.

- Ahorita que baje le diré a Adrien que si no tiene algunas naranjas-.

- Bien, vamos- me dijo con una sonrisa.

Camine rápidamente para alcanzar a Adrien, cuando salí del cuarto choque con alguien. Al principio pensé que se trataba de Adrien, pero al alzar la mirada me encuentro con su padre.

- Hola- dije nervioso.

- ¿Qué haces aquí? Le dije a Nathalie que ya bajaran a cenar- contestó de manera fría.

- Entre al baño a despintarme- me observó de pies a cabeza, luego me extendió la mano. Me ayudo a pararme.- Gracias-.

- Lindo collar- en ese instante mi piel se congeló, su mano se recargo en la pared, con la otra mano tomó el collar y lo observó detalladamente.

- Creo que tengo que irme...- me miró.

- Te pareces a aquel nuevo super héroe que lucha con Ladybug y Chat Noir-.

Mierda, mierda...

- No, para nada. Yo soy muy torpe para ser ese chico- mentí.

- Tienes un gran parecido. Que suerte que no eres el real porque si yo fuera Hawk Moth en este momento nadie volvería a saber de ti- soltó el collar y se fue por otro pasillo.

Me quedé inmóvil, mis piernas no reaccionaban. Caí al suelo...

¿Cómo reconoció el miraculous...?

- Nath, ¿dónde estas?- la voz de Adrien se escuchaba a lo lejos.

¿Debería decirle?

- ¡Nath! ¿Estás bien, qué pasó...? ¡Contéstame!- sentí las manos de Adrien en mi rostro, sus ojos me observaban. Junto sus labios con los míos no fue por mucho tiempo.

- Adrien, ¿puedo irme a casa?- pregunté.

- ¿Por qué?, ¿te sientes mal?- negué con la cabeza.- ¿Entonces qué pasó?-.

- Simplemente no me siento cómodo. Por favor, si quieres me puedo ir solo-suplique.

- No te dejaría ir solo, sólo quédate esta noche...-.

- Ni él ni yo nos quedaremos aquí, después de todas esas amenazas-.

Trixx sé que quieres ayudar pero este no era el momento.

- ¿Amenzas...?-.

- No le hagas caso a Trixx- dije. Me fui incorporando poco a poco.

- Ven a cenar- tomó mi mano y me guió hasta la sala. Dos vasos con leche y pan tostado se encontraban en la mesa.

- Escuchame Adrien...- me volteo a ver.- Sé que sonaré algo grosero, pero en verdad no quiero volver. Éste será el único día que estaré aquí-.

- Te lo prometo- me sonrió.

La cena estuvo tranquila, ninguno de los dos cruzó palabras. No había señales de su padre, sólo de la secretaria que se encontraba en la puerta vigilandonos.

Cuando ambos acabamos nos fuimos al cuarto. Adrien cerró la puerta y camino en dirección de un cajón, saco algunas cosas y luego me miro.

- Toma, tal vez te quede un poco grande. Al menos te cubrirá del frió- me dio una playera negra.

- Gracias... ¿Podrías prestarme un pants?-.

- No lo necesitarás- se acercó de nuevo a la puerta y le colocó seguro.- Aún no se me olvida el beso entre Chloe y tú-.

- Ya vas a empezar. Quiero dormir-.

Adrien me tiro a la cama, quería golpearlo pero tomó mis manos.

- ¡Suéltame pervertido asqueroso!- grité.

- Disculpa, pero este pervertido asqueroso es el que te hace gemir cada noche- susurró en mi oído.

- Idiota, eso no es cierto- paso su mano por mi parte.- ¡Ah!-.

Genial Nathaniel acabas de contradecirte.

- ¿Te gusta no?- su mano subía y bajaba.

- N-o lo hagas...-.

Su mano subió a mi abdomen, alzó la playera y comenzó a lamer uno de mis pezones- ¡Adrien!-.

- ¿Te gustó el beso de Chloe?-.

- Cl-aro que no...- dije tratando de no gemir, algo técnicamente imposible.- T-u padre está a-quí-.

Frunció el ceño, dejo de agarrar mis manos y me besó. Su lengua se introdujo en mi boca a pesar de mi resistencia.

- ¡A-hh!-.

- Sé que no te gusta que deje marcas, pero es necesario hacerlo tomatito- acomodó mi pelo detrás de la oreja.- Así Chloe sabrá que tienes a alguien que te hace suyo...-.

- Sólo qui-ero que par... ¡Ah! Que pares- contesté.

- No lo haré, esta vez tendrás que hacer todo lo que diga-.

- Maldita sea Adrien... Si lo vas a hacer hazlo ahora, no me hagas esperar tanto-.

- Bien...-.

Volvió a besarme pero con más suavidad, sin mordidas. Nos acercamos a la cabecera, me pidió que me recargara en esta.

Sentí sus manos posarse en mis caderas, su respiración la sentía en mi cuello. Sus labios rozaron con mi piel, comenzó a succionar y a morder dejando rojo en algunas partes.

Maldita sea, quieres volverme loco Agreste.

- ¡Ah!- la mano de Adrien estaba tomando mi pene, estaba demasiado duro. No sabía cómo explicar esto, era un dolor fuerte en la entrepierna que solo se relajaba si el deslizaba su mano.

- ¿Cómo se siente Nath?- maldito esta jugando conmigo.

- N-o pre-guntes y solo si-gue-.

- Cada noche que pensaba en ti no podía evitar imaginarte de esta forma Nathaniel, siempre tenía que estar en el baño arreglando el problema que me causas- continuó con más rapidez.- Te amo tanto-.

No podía contener los gritos así que tape mi boca porque no quería que alguien se enterara que el más grande modelo esta cogiendo con un chico en su habitación. Supongo que la prensa no le tomaría importancia si una chica estuviera en mi lugar pues es Adrien Agreste.

- ¡Agh...!- un calor recorría todo mi cuerpo, la mayor parte se centraba en mi erección que era atendida por Adrien. No aguanto más, ya no puedo.- ¡Ahhh!-grité, Adrien sonrió satisfecho. Pasó su mano por su boca.

No contuve más el dolor de mis piernas y me recosté en la cama, mi respiración estaba agitada y estaba cubierto por algunas gotas de sudor en mi frente y en el pecho.

Mi cuerpo no reaccionó cuando Adrien alzó mi cadera y sin decir nada entró.

- ¡Ah...! Du-ele- enterré mis uñas en la sabana.- Id-iota-.

Comenzó con leves embestidas que aún así dolían, después las hizo con rapidez. Aquel sonido de nuestros cuerpos invadía la habitación, tanto él como yo estábamos agitados.

Te mataré si mañana no puedo pararme... No dejaré que me toques por un mes.

- ¿Crees que Chloe pueda darte este placer?- jaló algunos mechones provocando que me separara de la almohada.

- N-o...- conteste.

- Nathaniel, ¿me amas?- preguntó en mi oído, mientras continuaba con las embestidas.

- Sí, t-e amo co-mo no tie-enes idea... ¡Ah!- todo daba vueltas, no pensaba con claridad. Hasta que recordé que él vivia con su papá.- Si si-gues haciéndome gri-tar tu padr-e se dará cuenta-.

El maldito no pudo terminar más fácil con esto sólo era sacarlo y ya. ¡¿Qué te costaba Agreste?! Sentía como se llevaba mi alma al sacarlo después de la ultima estocada.

Mañana será un gran problema levantarme.

¿Adivinen qué...? Ayer fue el concierto de Gorillaz v':

Desde el lunes estuve depresiva por no poder conseguir boletos, pero solo por ustedes salí de mi cama y vine a actualizar uwu.


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro