Os dejo esto por aquí. Sinceramente, yo creo que al capítulo le falta algo, pero es que estos días no ando muy inspirada. Eso sí, el próximo os prometo que será mucho mejor.

Como siempre, espero vuestros votos, comentarios, teorías...

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"Tengo que hacerlo yo. Yo voy a casarme con Kara."

LENA

5 de Octubre de 2019

Abrí los ojos y la luz del sol me molestó. Quise mover mi mano para cubrirme, pero algo lo impedía. Cuando miré, vi a Kara, dormida en una postura bastante incómoda, con la cabeza sobre la cama y su mano sujetando la mía. Intenté sacarla con cuidado, pero Kara se movió un poco y me detuve. No quería despertarla.

-Sarah: No se ha movido de ahí en toda la noche – dijo, desde la puerta, cruzada de brazos.

-Lena: Sarah...

-Sarah: ¿Te molesta el sol, quieres que baje la persiana?

-Lena: Sí... - dije, mirando aún a Kara – Ha dicho que... se casará conmigo.

-Sarah: ¿Qué? – dijo bajando la persiana y encendiendo la luz.

-Lena: Kara... Dijo que se casará conmigo.

-Sarah: ¿Qué se...? Ah, oh, bien... -dijo, mirándome – Pero... Antes de eso tienes que hacer varias cosas.

-Lena: ¿Qué cosas?

-Sarah: Pues... Pedirle una cita a Kara, por ejemplo – susurró.

-Lena: ¿Una cita?

-Sarah: Hay que hacer las cosas creíbles. La gente tiene que veros al menos una vez en una cita.

-Lena: ¿Y qué se hace en una cita?

-Sarah: Pues... Ir a comer, al cine, a cenar, dar un paseo... Lo que quieras.

-Lena: ¿Y luego?

-Sarah: Luego tendrías que darle un anillo y pedirle que se casara contigo.

-Lena: ¿Qué anillo?

-Sarah: Un... Me encargaré de eso, no te preocupes.

-Lena: Pero tiene que ser pronto o Tommy le quitará a Lexie.

-Sarah: Tommy se escapó. Posiblemente pasen unos días hasta que vuelva a dar señales de vida. Ha intentado matarte, ahora le conviene estar escondido y estarse quietecito.

-Lena: Pero hay que darse prisa.

-Sarah: De acuerdo, veremos qué se puede hacer. Hablaré con el señor Danvers y...

-Lena: No. Tengo que hacerlo yo. Yo voy a casarme con Kara.

-Sarah: De acuerdo. – Dijo, mirando la mano de Kara - ¿No te molesta?

-Lena: No. Kara me besó.

-Sarah: ¿Qué?

-Lena: Me besó en la frente... Como hacías tú cuando tenía pesadillas y no podía dormir.

-Sarah: ¿Kara me está quitando el puesto? – preguntó, cruzándose de brazos de nuevo.

-Lena: No. Tú siempre vas a ser... mi amiga. Mi hermana. Mi Sarah.

-Sarah: Lo sé, sólo bromeo, Lena – dijo acariciando mi pelo - ¿Te duele la herida?

-Lena: Me molesta...

-Sarah: Se te ha terminado la medicación para el dolor. Puedo pedir que te traigan más.

-Lena: No. Eso sólo hace que quiera dormir. Y no quiero dormir más.

-Sarah: Está bien. ¿Tienes hambre?

Miré el reloj que había en la pared.

-Lena: Sí. Pero no es la hora de desayunar.

-Sarah: Eh, estás herida. Puedes comer algo ahora si te apetece, ¿vale?

-Lena: ¿Puedo?

-Sarah: En realidad, puedes comer cuando quieras... -dijo, cogiendo algo del armario que había cerca de la cama - ¿Un zumo? Es de naranja.

-Lena: No es comida.

-Sarah: Pero también necesitas beber. Así que... Un zumo y... Un sándwich de jamón y queso. No es de máquina. Lo acabo de pedir en la cafetería, preparado como a ti te gusta.

-Lena: Vale... Pero no puedo soltarme. No quiero despertar a Kara.

-Sarah: A lo mejor puedo hacer que te suelte sin despertarla. – dijo, acercándose a Kara y abriendo su mano con cuidado. Saqué mi mano y Sarah volvió a cerrar la de Kara, que se movió un poco, pero no se despertó – Está cansada.

-Lena: Sí.

KARA

7 de Octubre de 2019.

Lena pasó dos días en el hospital. Los únicos momentos que no estuve con ella fue cuando fui a cambiarme de ropa y a casa de mis padres para sacarme algo más de leche para Lexie. Y cuando la policía vino a preguntar por lo ocurrido. Llamé a Cat para decirle que le avisaría cuando volviéramos a casa, pero que dejase la cama que había en el cuarto de Lexie preparada para mí, ya que Lena se quedaría con nosotras y usaría mi cuarto.

Cuando le dieron el alta, ayudé a Lena a vestirse mientras Sarah recogía sus cosas y acercaba el coche a la puerta.

-Kara: Lista... ¿Puedes andar?

-Lena: Sí.

-Kara: Bien. Primero pasaremos por casa de mis padres para coger algo de ropa para las dos y a Lexie. Y luego iremos a casa.

-Lena: ¿A casa?

-Kara: A mi casa...

-Lena: Bien... - dijo, intentando coger su bolsa.

-Kara: No. Ya la llevo yo – dije adelantándome – Tú despacito.

-Lena: ¿Por qué me cuidas?

-Kara: Porque estás así por mi culpa, y es lo mínimo que puedo hacer por ti. Y porque... Ahora estás viendo a la verdadera Kara, supongo. – dije, caminando con ella hacia el ascensor. Cuando llegamos, lo llamé y esperamos. Entramos y Lena se apoyó en la pared.

-Lena: Tenemos que tener una cita.

-Kara: ¿Qué?

-Lena: Si vamos a casarnos, primero tenemos que tener una cita. Sarah me lo dijo. Dijo que la gente tenía que vernos juntas para que fuera creíble.

-Kara: ¿Una cita, eh? ¿Y dónde quieres ir?

-Lena: ¿Yo?

-Kara: Sí. ¿Qué quieres hacer en esa cita?

-Lena: No lo sé. Nunca he estado en una, no sé lo que se hace.

-Kara: ¿Entonces puedo elegir yo qué haremos?

-Lena: ¿Tú? No lo sé, tengo que preguntarle a Sarah .

Salimos del ascensor y caminamos hasta el coche. Sarah ya estaba esperando y abrió la puerta de atrás para que Lena subiera.

-Kara: Cuidado... ¿Puedo ayudarte?

-Lena: Sí...

La sujeté con cuidado y la ayudé a entrar, cerrando la puerta. Luego miré a Sarah, que me sonrió, mientras yo entraba en la parte de atrás por la otra puerta y ella subía al lado del conductor.

-Sarah: Vámonos... – dijo.

-Lena: Sarah... ¿Puede decidir Kara qué hacer en nuestra cita?

-Sarah: ¿Cita?

-Lena: Dijiste que tenía que pedirle una y ya lo he hecho, pero no sé qué se hace. Kara ha dicho que ella puede elegir. ¿puede?

-Sarah: Sí, claro... - dijo mirándome a través del retrovisor.

-Kara: Perfecto. ¿Qué quieres hacer, Lena? ¿Te gusta patinar?

-Lena: ¿Patinar? No lo sé, nunca he hecho eso.

-Kara: Entonces no, podrías hacerte daño. Además, aún estás herida. Mala idea... ¿Quieres ir al zoo?

-Lena: No. No me gusta. Los animales están encerrados. No deberían estar encerrados. No, no quiero ir al zoo.

-Kara: Tienes razón. Nada de zoo entonces. ¿Y... El cine?

-Lena: El sonido es muy alto, me molesta.

-Kara: Vale... - dije, pensando. -¿Y un museo? ¿Te gustan los museos?

-Lena: Sí, los museos me gustan.

-Kara: Bien, un museo entonces... ¿Hay alguno al que quieras ir?

-Lena: Me gusta el arqueológico.

-Kara: Bien, ese será... ¿Cuándo quieres ir?

-Lena: Mañana.

-Kara: ¿Mañana? Pero... Aún estás herida y... - dije mirándola – Vale, mañana.

En ese momento, vi que Lena buscaba mi mano.

-Lena: ¿Puedo?

-Kara: Claro... - dije dejando mi mano cerca de la suya. Entonces ella puso su mano sobre la mía, tímidamente. Luego la apretó un poco.

-Lena: Son muy suaves...

Hicimos el resto del camino en silencio. Al llegar a casa, mi madre abrió la puerta, con Lexie en brazos.

-Eliza: Mira quién está aquí – dijo, dándome a Lexie.

-Kara: Hola, cariño... - dije cogiéndola, mientras Lexie me miraba, sonriendo.

-Eliza: Lena... ¿Cómo estás?

-Lena: Bien. Gracias, señora Danvers.

-Kara: Hemos venido a buscar algo de ropa. Lena se quedará conmigo.

-Eliza: Podéis quedaros aquí, Kara.

-Kara: Ya hablamos de eso, mamá. La casa que tengo alquilada es más segura ahora para Lexie. Por favor.

-Eliza: Está bien.

-Kara: Por cierto, necesito hablar contigo y con papá, ¿está en casa?

-Eliza: Sí, está en su despacho.

-Kara: Bien... Lena, acompáñame. Mamá, ¿puedes venir tú también?

-Lena: Sí.

-Eliza: Iré enseguida.

Fuimos al despacho de mi padre y llamé, entrando. Vi a Winn hablando con él y los dos se quedaron callados, mirándome.

-Winn: ¡Kara, hola! – dijo acercándose – Eh, mira a quién has traído... - acarició la carita de Lexie, haciendo gestos raros para hacerla reír.

-Kara: Necesito hablar contigo, papá.

-Jeremiah: Yo también. Winn acaba de proponerme algo que podría interesarte.

-Kara: ¿El qué?

-Jeremiah: Díselo, Winn.

-Winn: Bueno.... Vine a decirle a tu padre que necesito cambiar todas las cámaras de la casa, porque las otras ya son demasiado viejas y... se están estropeando y no podemos quedarnos sin cámaras, ya sabes...

-Jeremiah: Winn... Lo otro.

-Winn: Ah, sí... Bueno, yo... - dijo nervioso – Tu padre nos ha explicado a todos la situación con Tommy Merlyn.

-Kara: ¡Papá!

-Jeremiah: Tienen que saberlo por si se le ocurre aparecer por aquí, Kara.

-Winn: El caso es que... Bueno, he pensado que... Si quieres yo... Podría...

-Kara: Winn, no tengo todo el día.

-Winn: Claro. Yo podría... Bueno, hacerme pasar por el padre de Lexie. Si quieres, claro. Podría casarme contigo y...

-Kara: ¿Hablas en serio?

-Winn: Sí. Oye, no quiero que os pase nada y a lo mejor, si piensa que la niña es de otro, pues...

-Kara: Winn, Yo... Te lo agradezco, de verdad...

-Winn: ¿Entonces aceptas? Tu padre está de acuerdo y... - dijo, feliz.

-Kara: No. Lo siento, pero ya... Voy a casarme con otra persona, Winn.

-Winn: ¿Con otra persona? – preguntó, dolido.

-Kara: Sí, lo siento.

-Winn: ¿Con quién?

-Lena: Conmigo.

-Winn: ¡¿Qué?! ¡Pero...!

-Jeremiah: ¿Cómo?

-Kara: De eso es de lo que quiero hablar contigo. Y con mamá. Winn, por favor, déjame con mi padre.

-Winn: Pero...

-Kara: De verdad te lo agradezco, Winn, eres un buen chico, un amigo podría decir. Pero no voy a meterte en esto, ¿vale?

-Winn: ¿Un... buen chico...?

-Kara: Sí...

-Winn: Claro... Sólo soy un simple informático... Entiendo. – dijo dirigiéndose a la puerta – Iré a comprar las nuevas cámaras, señor Danvers.

-Kara: Winn...

-Winn: No, tranquila – dijo sonriéndome –Lo entiendo, de verdad. Además, Lena es... Bueno, su familia tiene dinero y puede daros más que yo. Puede cuidar mejor de vosotras. ¿Podemos seguir siendo amigos al menos?

-Kara: Claro.

-Winn: Perfecto... Nos vemos entonces.

En ese momento, mi madre llegó al despacho.

-Eliza: Perdonad... Ya estoy aquí. ¿De qué querías hablar con nosotros, Kara?

-Jeremiah: Va a casarse con Lena.

-Eliza: ¿Con Lena...? Pero... No lo entiendo.

-Kara: Lena pensó que si...

-Lena: Quiero casarme con Kara y darle mi apellido a Lexie. Así Tommy no podrá quitarle la niña a Kara.

-Eliza: Vaya, eso es... Encantador, pero... Aunque le des tu apellido... Sois dos mujeres, Lena.

-Lena: Pero yo puedo hacerle bebés a Kara. Porque tengo...

-Kara: ¡No! Lena, no es necesario... - dije, sujetando su mano cuando vi sus intenciones – Te aseguro que mis padres no necesitan verlo.

-Jeremiah: ¿Ver qué?

-Lena: Mi pene.

-Jeremiah: ¿Tu qué...?

-Kara: Vale, a ver... Lena es... Intersexual, creo que era la palabra.

-Eliza: ¿Eso qué es?

-Kara: Que es una mujer, pero tiene... Pene. Lena dirá que Lexie es suya.

-Jeremiah: ¿Y cuando las pruebas de paternidad digan lo contrario?

-Kara: Entonces ya veremos. Es posible que ahora Tommy no se deje ver en un tiempo. Disparó a Lena, la policía le estará buscando.

-Jeremiah: En cuanto a esas pruebas, lo mejor es que las hagas lo antes posible para saber cómo afrontar esto. Mañana a primera hora irás a realizarlas. Al parecer, Merlyn envió una muestra de sangre a los laboratorios donde quiere que se realicen y está todo listo para mañana.

-Kara: ¿Mañana? Pero...

-Eliza: Cuanto antes acabes con esto mejor, cielo. Por ti y por Lexie.

-Jeremiah: Mientras, aceptaré el plan de Lena y esa boda. Quizás eso nos haga ganar algo más de tiempo.

-Kara: Bien... Organizaremos una cena dentro de dos días para dar la noticia a las familias. La nuestra y la de Lena.

-Jeremiah: Sabes que la prensa puede enterarse, ¿verdad?

-Kara: Cuento con ello. Lo hará más creíble aún. – dije, tendiéndole a Lexie a Lena – Quédate con ella un momento.

-Eliza: ¿Qué vas a hacer?

-Kara: Iré a recoger algo más de ropa y nos vamos. Lena tiene que descansar.

-Lena: Debería hablar con mi padre.

-Jeremiah: Lionel no está. Ha dicho que tenía que ocuparse de un asunto importante. Pero le diré que te llame cuando llegue.

-Lena: Bien.

-Kara: ¿Quieres que te guarde algo de ropa? Puedes hacerte daño al subir las escaleras.

-Lena: Prefiero hacerlo yo.

-Kara: Entonces cuando termine de recoger mis cosas te ayudaré con las tuyas, mientras siéntate. – dije caminando hacia mi cuarto. Saqué un par de maletas y guardé toda la ropa que pude. Cogí algunos libros, fotos... Ya volvería a por el resto más tarde. Cuando terminé, bajé al salón y vi a mi madre mirando a Lena mientras ella jugaba con las manitas de Lexie – Lena, vamos, te ayudaré. Mamá, ¿puedes coger a Lexie?

-Eliza: Claro...

Lena se levantó y caminamos hacia las escaleras.

-Kara: ¿Podrás?

-Lena: Sí... - dijo subiendo despacio. Me quedé detrás, por si se caía, poder sujetarla. Cuando llegamos a su cuarto, Lena sacó su maleta del armario y empezó a llenarla con la ropa, sus velas, y algunas pocas cosas más. Apenas tardó cinco minutos, ya que tenía todo muy ordenado.

-Kara: ¿Ya está?

-Lena: Es todo lo que tengo.

-Kara: Necesitarás más ropa. Dame la maleta, yo la bajo.

Tras despedirnos de mis padres, fuimos a casa. Allí nos esperaba Cat, que sonrió a Lena cuando entramos, acompañadas de Sarah.

-Cat: Todo está listo.

-Kara: Bien... Lena, ven... Te quedarás en mi cuarto. Yo dormiré con Lexie.

-Lena: Pero es tu cuarto. Tú deberías dormir en él.

-Kara: Aquí estarás más cómoda, al menos hasta que te recuperes. La cama es más grande, y tienes baño propio por si lo necesitas.

Pasamos el resto del día colocando mis cosas y las de Lena en su sitio. Le pedí a Alex que no viniera esa noche a dormir, porque no tendría sitio para todas, ya que Sarah dormiría en el sofá. Luego, nos fuimos a dormir temprano. Tenía que madrugar para hacer la maldita prueba que Tommy había pedido. Sólo esperaba que Lexie no lo pasara mal en el proceso.

Antes de dormir, recibí un nuevo mensaje en mi teléfono.

"Mala elección. Debiste elegir al chico"

LENA

8 de Octubre de 2019

Me desperté temprano, aunque no había dormido mucho. Había sentido a Kara entrar en el cuarto tres veces durante la noche, pero las tres, fingí estar dormida. Una de esas veces, estaba medio destapada y Kara me tapó de nuevo, susurrándome en el oído que descansara.

Me levanté y fui al cuarto de Lexie, donde Kara le estaba dando de comer.

-Lena: Buenos días.

-Kara: Hola... ¿Has dormido bien?

-Lena: Más o menos, gracias. ¿Tú no has dormido? – pregunté, al ver las manchas oscuras bajo sus ojos.

-Kara: No mucho. No pude... Estoy preocupada por lo que Tommy pueda querer hacer.

-Lena: No dejaré que os haga daño.

-Kara: Lo sé... ¿Qué tal la herida, te duele?

-Lena: No mucho... - dije mirándola - ¿Piensas en la prueba?

-Kara: Sí...

-Lena: Yo podría... Hacer que... cambiaran los resultados.

-Kara: ¿En serio?

-Lena: Sí. Podría hacer que Barry cambiara las muestras o... pagarles...

-Kara: Pero no estarías cómoda haciendo eso, ¿verdad? – dijo, mientras intentaba que Lexie sacara los gases – Además, Tommy querría repetirla y no quiero hacer pasar a Lexie por eso otra vez.

-Lena: Entiendo...

-Kara: ¿Puedes vestirla? Iré a preparar el desayuno.

-Lena: ¿Vestirla?

-Kara: Sí, ahí está la ropa, los pañales y... - dijo, mirándome – Perdona. Se lo pediré a Cat.

-Lena: No, yo... Puedo hacerlo.

-Kara: ¿Sí?

-Lena: Sí.

-Kara: Bien, gracias... - dijo dejando a Lexie en mis brazos y saliendo.

Cuando se fue, dejé a Lexie sobre la cama y le quité el pijama que llevaba.

-Lena: Va a ser la primera vez que cambie un pañal... - dije, quitándole el pañal sucio tras poner una toalla debajo para no manchar la cama si se hacía pis en ese momento. Intenté recordar lo que había aprendido cuando iba a cuidar al bebé de una pareja un año atrás. Un trabajo que nunca llegué a realizar, ya que el bebé murió en el vientre de su madre cuando ella y su esposo tuvieron un accidente. Cogí la esponja y el recipiente con agua que Kara tenía preparado y limpié bien a Lexie para ponerle el pañal limpio. Ella me miraba con esos ojos azules, idénticos a los de su madre, igual de profundos y penetrantes. También se reía y me dificultaba las cosas intentando llevarse el pie a la boca. Después de diez minutos y dos pañales que acabaron hechos un lío, conseguí ponerle la ropa que Kara había dejado y levanté a Lexie – Ya estás... Creo. ¿Estás cómoda? - Lexie se rió, haciendo ruiditos. - Supongo que eso es un sí. – dije mirándola de nuevo - ¿Sabes? Tu mamá te quiere mucho. Y no voy a dejar que nadie os separe. Prometí cuidaros a las dos y no podré hacerlo si no estáis juntas.

Cuando terminé de vestirla, fui a la cocina. Kara estaba allí con Cat y Sarah.

-Kara: Justo a tiempo. He hecho tortitas, ¿te gustan?

-Lena: Sí... - dije mirando el reloj.

-Sarah: ¿Recuerdas lo que te dije? Puedes comer cuando quieras, Lena.

-Lena: Sí pero... Aún faltan...

-Kara: Dos minutos. Justo el tiempo que tardarán en hacerse las tuyas. Mientras, siéntate. ¿Cuántas quieres?

-Lena: Tres.

-Kara: ¿Con chocolate?

-Lena: Y nata.

-Kara: Perfecto... - dijo, dejando el plato delante de mí. Había tres tortitas que tenían unos ojos y una boca sonriente dibujados con el chocolate y la nata parecía el pelo – Mi madre siempre me las hacía así. Sé que son un poco infantiles, pero...

-Lena: Son divertidas – dije sonriéndola y empezando a comer.

-Kara: Dame a Lexie, podrás comer mejor. – dijo cogiéndola – Iré a vestirme.

-Cat: déjame a Lexie mientras te vistes...

Kara se marchó.

Cuando terminé de desayunar, yo también fui a lavarme un poco, con cuidado de no mojar mi herida y me vestí, después de que Sarah me ayudase a cambiarme el vendaje. Cuando salí, vi que Alex y Sam estaban allí. Al parecer, Alex no quería dejar a Kara sola en ese momento. Poco después, salíamos hacia la clínica donde realizarían las pruebas a Lexie.

KARA

Después de desayunar y vestirnos, fuimos a la clínica. Le pedí a Cat que se quedase en la casa. En primer lugar, porque ya éramos demasiada gente, aunque Sam y Sarah esperarían fuera. Y segundo, porque no quería que vieran a Cat conmigo y ponerla en peligro.

Al bajar del coche, vimos a varios fotógrafos en la puerta.

-Kara: Mierda...

-Alex: ¿Quién les ha avisado?

-Kara: ¿Tú quién crees...? – respondí, mientras salía y cubría a Lexie todo lo que podía

-Alex: Tommy.

-Kara: El mismo... - gruñí, mientras alguien se acercaba a nosotras.

-Reportero 1: ¡Señorita Danvers, ¿es cierto que esa niña es hija de Tommy Merlin?!

-Kara: No, no lo es – dije pasando de largo. Varios reporteros más empezaron a acercarse y Lena se puso rápidamente delante.

-Lena: Apártense.

-Kara: Ten cuidado, Lena, pueden golpearte... - dije, preocupada por ella.

-Reportero 2: ¿Entonces, por qué está aquí?

-Alex: Quítense de en medio...

-Reportero 2: Sólo queremos una respuesta.

-Alex: La respuesta es que estamos aquí para confirmar que ese hombre no es el padre de mi sobrina.

Sam y Sarah vinieron rápidamente y nos empezaron a abrir paso entre los periodistas, que no dejaban de tirar fotos.

-Kara: ¡¿Quieren dejar de sacar fotos?! Si veo una sola foto de mi hija en un periódico o revista, les juro que me encargaré de que les despidan y no vuelvan a contratarles en la vida.

-Lena: Entremos – dijo abriendo la puerta – Sam, Sarah, que no entre nadie. Si es necesario, que Oliver y Barry vengan a ayudar.

-Sarah: Claro...

Una vez dentro, en la sala de espera, empecé a caminar de un lado a otro, nerviosa.

-Alex: Kara...

-Kara: Ya lo saben... Ya saben que Lexie existe y no pararán hasta saber quién es su padre y conseguir una foto decente de ella.... ¡Voy a matar a Tommy! – dije, con Lexie en brazos aún.

-Alex: Cálmate...

-Kara: ¡No puedo calmarme, Alex! Tommy acaba de exponer a MI hija. Ha revelado que Lexie existe. Esto no puede ser bueno. Ni para Lexie, ni para papá...

-Alex: Olvídate de papá ahora. Lexie estará bien. Tranquila, yo no voy a permitir que os hagan daño a ti o a ella. De ninguna manera. – dijo abrazándome – Tranquila...

-Enfermera: Kara Danvers... - dijo.

-Kara: ¿Entráis conmigo?

-Alex: Claro.-Enfermera: Sólo puede entrar usted con la niña.

-Kara: Ellas van a entrar conmigo. Son mi hermana y mi guardaespaldas.

-Enfermera: Lo siento, pero...

-Kara: No. Ellas van a entrar. Quiero que estén presentes, quiero que haya testigos de que todo se hace correctamente. Y la seguridad de mi hija es lo más importante.

-Enfermera: De acuerdo...

Entramos en la sala y me senté en una silla, con Lexie.

-Kara: ¿Le dolerá?

-Enfermera: Sólo sacaré un poco de sangre.

Vi que Lena observaba todos los movimientos de la mujer desde la puerta, mientras que Alex se ponía detrás de mí y ponía sus manos sobre mis hombros.

Cuando la enfermera clavó la aguja en el bracito de Lexie, esta empezó a llorar.

-Kara: Ya, cariño... - dije, intentando no llorar. Sólo era un pequeño pinchazo, pero odiaba tener que hacer que mi hija lo pasara mal.

-Enfermera: Listo.

-Kara: Ya está... - dije besando el bracito de Lexie. - ¿Cuándo estarán los resultados?

-Enfermera: En unos cinco o diez días. Tenemos los laboratorios hasta arriba. Le enviaremos los resultados por mensajero cuando estén listos. ¿Puede darme la dirección?

-Kara: Sí... - dije, diciéndole la dirección de casa de mis padres.

-Enfermera: Bien... Hemos terminado.

Al salir, vimos que Sam y Sarah estaban solas en la puerta.

-Kara: ¿Y los periodistas?

-Sarah: Bueno... Después de que Sam "tropezara" y rompiera un par de cámaras, "accidentalmente", decidieron que lo mejor era marcharse. Tranquila, todo está despejado.

-Lena: Sam...

-Sam: ¿Qué? Tropecé y sin querer empujé a un par de periodistas. No es culpa mía que tengan las manos de mantequilla y sus cámaras acabasen en el suelo. Debieron tenerlas mejor sujetas. Además, todo está grabado, así que... Puedo demostrar que no fue nada... Intencionado – dijo sonriendo.

Vi que mi hermana y Sarah se reían.

-Lena: ¿A casa? – me preguntó.

-Kara: No. Tú y yo tenemos una cita pendiente para hoy.

-Alex: ¿Una cita?

-Kara: Lena y yo vamos a ir al museo.

-Alex: ¿Tú... En un museo? ¿Y cómo es eso de una cita?

-Kara: Lo sabrás mañana...

-Alex: ¿Y vas a llevar a Lexie?

-Kara: No pienso separarme de ella.- dije. – Tranquila, estaremos bien. Sarah vendrá con nosotras.

-Alex: Supongo que yo sobro en esa... Cita. Está bien, avisaré de que volveré al trabajo a partir de mañana.

-Kara: Mejor a partir de pasado mañana. – dije, mientras entraba en el coche. Lena entró después de mí y Sarah se puso al volante.

-Alex: Ten cuidado...

-Lena: No le pasará nada. – dijo.

Cuando el coche arrancó, miré a Lena.

-Kara: Anoche recibí otro mensaje – dije, mostrándole el móvil.

-Lena: Se lo mandaré a Felicity.

-Kara: ¿Aún no ha podido hacer nada?

-Lena: Confío en que tenga resultados pronto. – dijo, devolviéndome el móvil tras mandarle el mensaje a Felicity.

LENA

Llegamos al museo y Kara bajó el carrito de Lexie del maletero del coche.

-Sarah: ¿Os acompaño?

-Lena: No. Espera aquí. – dije, acercándome a ella.

-Sarah: Está bien.

-Lena: Pero dime que tengo qué hacer...

-Sarah: Puedes empezar invitándola. Paga tú las entradas al museo.

-Lena: ¿Y luego?

-Sarah: Pues lo veis tranquilamente. Si ves que algo le interesa, puedes comentarlo con ella... Vendré a buscaros para la hora de comer. Mientras, iré a encargarme del anillo.

-Lena: Vale.

-Sarah: Eh... - dijo acariciando mi mejilla – Si en algún momento no sabes qué hacer, deja que sea Kara quien haga algo. Pero no te pongas nerviosa. Si necesitas algo, sabes dónde estoy – dijo, señalando su oído.

-Lena: No escuches...

-Sarah: Entonces lo tendré conectado en el canal de emergencia. Si necesitas algo, háblame por ahí.

-Lena: Vale...

-Sarah: Eh, Danvers... Más te vale tratarla bien.

-Kara: Lo haré... – dijo, algo confusa.

Sarah se alejó y Kara y yo caminamos hacia la entrada. Kara empujaba el carrito de Lexie.

-Lena: Dos entradas, por favor... - dije.

-Kara: Puedo pagar la mía...

-Lena: No. Es una cita y tengo que invitarte. Eso ha dicho Sarah.

-Kara: También podría haberte invitado yo a ti... - dijo.

-Lena: La próxima, invitarás tú.

-Kara: ¿La próxima? Primero veamos qué tal se nos da esta.