Capítulo 14
~Capitulo 14~
Pero miren que tenemos aquí, un joven enojado y deprimido encerrado en una habitación, eso no esta bien, para nada. Ahora que lo miro esta idéntico al joven peliblanco que vi en España solamente que diferente cabello...y ojos. Me parece que Norte me esta mintiendo.
-pero vaya ¿que tienes, niño?- dije apareciéndome aun lado de el
Como era de esperarse se asusto y tomo su cayado apuntándome con manos temblorosas. Este tiene miedo.
-no es necesario llegar a eso, ¿o si?
El relajo un poco las manos y me miro confundido, no sabia que Norte tenía prisioneros aquí en el polo.
-¿quien eres?- preguntó el niño aunque parecía ya no estar tan asustado
-mejor dicho quien eres tu...pero contestare tu pregunta soy alguien que te puede ayudar
Bajo el cayado y extendió su mano
-Jackson Frost, y ¿ayudarme en que?
¿Frost? Maldita sea es hijo de Norte, seguramente el otro también lo es y me lo oculto. Pero por lo menos sabré como manejarlo, de todas maneras es lo único que tiene: sus hijos.
-mira, mejor cuéntame de ti...se que estas solo y yo se lo que es la triste soledad. Saber que nadie te escucha, no tienes atención o quizá la atención se la dan a alguien mas...¿un hermano quizá?
El castaño apretó los dientes algo frustrado, así que eso pasa: envidia a su adorable hermano, bueno es normal.
-Jack...¿tu tienes un hermano? quizá puedas entenderme- me dijo algo desesperado
-claro que lo tengo..corrijo lo tuve, veras el siempre trato de llamar la atención y ser mejor que yo, trate de parecerme a el pero no obtuve resultados- miento, aunque trate de sonar lo más convincente posible
-es lo mismo que me pasa, lo bueno es que no esta aquí, digo esta de viaje
-¿así? ¿Y se puede saber a donde?- pregunto. Muy dentro de mi me estoy muriendo de la risa, este niño ya confía en mi y no sabe ni quien soy, eso es muy triste...que pena.
-se fue a España, regresa en seis meses. Mira lo quiero pues es mi hermano pero a la vez lo detesto, ¿eso es normal?
-ah..no tengo idea. Mira vengo a decirte que puedo ser tu amigo, te aseguro que ya no estarás tan solo- una palabra...idiota
-esta bien, pero dime ¿como te llamas?
-antes tienes que prometerme que no se lo dirás a nadie, ¿oíste?- pregunto, en caso de que lo haga y vaya a decirle a los guardianes, hasta ahí llega su vida.
-¿porque? Solo es tu nombre no hay ningún problema
Sin pensarlo lo agarro de la sudadera alzándolo del piso, el me mira asustado pero tengo que hacerle entender quien soy.
-mira muchachito no le contaras a nadie sobre mi, ¿de acuerdo? Mi nombre es Pitch Black- lo suelto y el me mira sorprendido- si lo dices tu vida se acaba
-ah..es..yo...esta bien...nadie lo sabrá
Sonrió con malicia y el me sonreí de igual forma. No se porque pero tenemos algo en común, puede ser muchas cosas: envidia, soledad, rencor o incluso odio.
Se me acaba de ocurrir una increíble idea, una forma de acabar con Norte, ¿sus hijos? Me da lo mismo si acaban vivos o muertos, aunque prefiero verlos muertos. No lo se debería pensar mejor en mi guarida, con mas calma, solo, sin la presencia de este chamaco. Noto que alguien viene subiendo las escaleras así que es momento de desaparecer.
-Jackson es hora de cenar- dice Norte
Estaba viendo de una distancia alejada detrás de la ventana, no creo que me vea. En fin me fui y me dedique a investigar sobre la vida de Jackson.
-veamos de Jackson
Tengo un pequeño mundo en donde refleja las luces que existen. Antes eran esperanzas pero lo modifique y me aparecen las pocas luces de vidas que tienen sufrimiento, soledad y odio. Además de poder ver la vida de cada miserable persona, cualquiera en realidad, tenga esperanza o no yo puedo averiguar de ella. Mire la estupida vida de Jackson y no es tan triste como me lo imaginaba, claro depende del punto en que lo veas. Jack es un chico alegre y amante de la lectura mientras que Jackson es solitario y amante del juego de cartas además de ser todo un mujeriego. Son completamente distintos y eso me da una buena idea que tengo que empezar a desarrollarla.
Tiempo después...
Narra Jack:
-Jack necesito que consigas leña- me dice la señora con la que estoy viviendo
Suspire y no tuve de otra que obedecer. Han pasado cuatro meses, en todo este tiempo no he visto a mi familia, lose, se que es mucho tiempo pero esta señora no sabe de otra mas que estar dándome ordenes. Por otro lado he desarrollado un poco de fuerza no se me nota pero la tengo, puedo levantar costales de harina pesados que antes no podía hacerlo, de hecho estos meses me han servido mucho. Los extraño, si lo hago, extraño a mi padre, a Hada, incluso al canguro y también a mi hermano. Me imagino que el no lo hace pero yo si y mucho. Le había dicho a la rubia que de vez en cuando la visitaría pero no he podido ir, pienso que ya se olvido de mi aunque no estaría mal visitarla.
Recogí la leña lo más rápido que pude y se la deje a Olga, creo que la quiero, puede llegar hacer muy estricta y exigente pero me ha cuidado y alimentado y además me protegió de algo que no me gustaría recordar, fue muy penoso. Verán estaba repartiendo la leche y un poco de pan, así es, la señora Olga me enseño a hornear. En la pequeña aldea obviamente todos me conocen, soy el único muchacho de mi edad.
Flashback:
Termine hornear y fui a vender pan y leche. A todas las casas tenía que ir solamente que ir a una en especial no me agradaba del todo, pero no tenía de otra. Llegue a la pequeña cabaña donde vivía una muchacha como de un año menor que yo, ¿bonita? Ni siquiera puse atención si lo era o no. Ella era de cabello negro con ojos verdes y al llegar a su puerta me miraba de pies a cabeza, me empece a sentir algo incomodo pero no podía irme sin antes vender algo.
-disculpa, vendo pan y leche a treinta pesos
-oh claro que te compro, dame dos pedazos de pan y una botella de leche
Saque lo que me dijo y por accidente se me cayo la canasta pero no perdí nada, por suerte la canasta cayo parada. Al agacharme ella también lo hizo, me miro y yo no sabia ni que hacer.
-Jack ¿verdad? Sabias que eres muy lindo- yo solamente trague saliva, su mirada estaba clavada en mi, esto es incomodo.
Tomo mi mano y la puso sobre su rostro de inmediato la quite. Tenía que irme de aquí, no estoy dispuesto a perder mi virginidad con ella, simplemente no. Me levante y ella también lo hizo, le di lo que me pidió, saco su dinero y cuando lo iba agarrar se lo escondió detrás de la espalda.
-no, niño, antes quiero algo a cambio
-ah...estoy dando lo que me pediste, entrégame el dinero- dije algo irritado
Ella se rió y no se como me tuvo atrapado contra la pared.
-ah...mira tengo prisa, me dejas pasar y me das el dinero- dije con algo de miedo, Olga me va a matar cuando me vea que no estoy vendiendo
Puso su mano sobre mi cabello y eso reducía mis posibilidades de escape, estaba muerto. Trataba de safarme pero simplemente no tenía salida. Ella me miraba de frente y yo tenía mi mirada al lado derecho, no quería verla. Me iba a voltear al otro lado ya que me estaba doliendo el cuello y fue ahí cuando me beso. ¿Me estaba besando? ¡Que le pasa! Trataba de quitármela de encima pero mis inútiles intentos fracasaban, ah como podía trataba de gritar pero dudo que me haigan escuchado, en cuanto terminaba de hablar me estaba besando.
-ayuda
Fue ahí cuando Olga intervino, no estaba muy lejos de ahí. Como es algo agresiva, la tomo del cabello y la alejo de mi.
-ay que le pasa, no tiene ningún derecho en meterse
La señora le dijo muchas cosas que sonaron algo hirientes, pero la verdad estaba muy agradecido por que haiga llegado. Al irme la muchacha me guiño el ojo, estaba muy enojado que inconscientemente y un poco infantil levante el dedo prohibido, y solamente me reí. Ella se me quedo viendo y se encerró enojada. Después de eso Olga no dijo nada al respecto solamente <<los guapos, tienes que cuidarte>> me reí y ella río conmigo.
Fin Flashback
Y eso paso, aunque para mi fue humillante. En fin debería visitarla o no a la rubia, ¿debería? ¿O seria muy imprudente? Digo cuatro meses, ella no sabe si estoy vivo o muerto...mmm debería ir. Pero ¿seguirá trabajando en la florería o se habrá cambiado? Pues lo averiguare cuando llegue allá, de todas maneras Olga esta ocupada tejiendo un vestido de una niña así que estará muy distraída ni siquiera se dará cuenta de mi ausencia.
Al llegar ahí, entre pero mi sorpresa fue que ya no estaba el mismo jefe, estaba uno robusto de cabello negro con ojos grises, de solo verlo daba miedo. Aunque la tienda estaba muy deprimente, no estaba la rubia aunque seguramente estará en la bodega, salí y vi en la entrada un moño negro. Al instante se me hizo un nudo en la garganta y mi corazón empezó a latir muy deprisa, ¡alguien murió! ¡Puede que haiga sido Rapunzel! ¡¿Pero cómo?!. Estaba muy distraído pensando en como habrá muerto ella, cuando me da un suave golpecito en el hombro, tratando de llamar mi atención.
-¿si?- al darme vuelta, la vi a ella, sonriendo, con unos girasoles en las manos
Me calme un poco pero entonces ¿quien murió?, además ella traía un lazo negro alrededor de la cintura no pude evitar preguntar, incluso ni la salude.
-¿quien murió?- pregunte
-nuestro antiguo jefe- respondió ella. Mi pecho se hundió, a pesar de que no conviví mucho con el me agradaba, era una buena persona.
-¿cuando?- dije y pude notar mi voz algo quebrada
Ella soltó unas lagrimas y temía que me pusiera a llorar. Soy una persona muy pero muy sensible, es lo que mas odio de mi.
-ayer, fue después de que tu te fuiste- lo ultimo no lo comprendí muy bien, trate de interrumpirla pero siguió hablando- después de media hora que te fuiste de aquí, no supimos quien lo agredió, en la bodega alguien le encajo una espada, solamente encontramos esto- dice y me entrega una carta de un juego...alto esta carta ya la había visto, ¡es del juego de Jackson! Definitivamente es de el, este juego solamente lo tiene el nadie mas, mi padre se lo regalo pero solamente existe uno. Antes de que pudiera salir el nombre de mi hermano de mi boca, trato ocultar mi sorpresa.
-pero...no lo puedo creer- no puedo creer que haiga muerto y no puedo creer que mi hermano lo mato, ¡es un asesino! Como pudo pasar esto.
-lose, ayer fuimos a su entierro, de todas maneras el no tenía muchos familiares
Simplemente me niego a creerlo, no puedo delatar a mi hermano lo pueden ejecutar o torturan o mandarlo al reino más cercano y sentenciarlo. Todavía no lo creo, ¿como pudo quitarle la vida a un ser humano?, ¿que no mi padre dijo que lo llevaría por el buen camino? Pues sus resultados son un asco.
-y dime porque no lo curaste, si lo hubieras hecho estaría vivo- me estoy dando cuenta que estoy gritando, estoy enojado con mi padre, el tiene la culpa de que todo esto este pasando. Mi hermano no esta siendo educado, si mato una vez puede volver hacerlo.
-tu no me vas a gritar como lo has hecho siempre- ¿siempre? Jamás le he gritado ni faltado el respeto, ¿como? Si nunca la miro, es irónico- la espalda le atravesó el pecho, no pude hacer nada ¿entiendes?
La mire con rabia pero me doy cuenta que ella no tiene la culpa. Agarro la carta y me la hecho en el bolsillo del pantalón. El único que tiene la culpa es mi padre, solamente el.
-lo lamento, es solo que esto me sorprende mucho- dije sentándome en el suelo, ella se sienta a mi lado pero sin ninguna sonrisa. ¿Quien quiere sonreír? Mi ex jefe murió a causa de una herida irreparable de mi hermano, solamente trato de contener las lágrimas y tragarme este nudo de garganta
-tenía doce años cuando mis padres murieron- empieza, aunque no tenía idea de porque me lo estaba diciendo- murieron en un incendio, en mi casa, yo estaba afuera, había ido a la tienda a comprar leche y huevos y cuando volví...- ella se rompo en llanto
-no sigas, esta bien- trate de consolarla pero siguió hablando
-la casa estaba hecha cenizas, los cuerpos de mis padres sin vida y yo...yo me quede sin nadie- no pude evitarlo y la abrace apoyando mi barbilla sobre su cabeza
-tranquila- ella estaba llorando y aferrada a mi, solamente tenía mis brazos alrededor como intentando protegerla o tranquilizarla.
Ya no lloraba tanto pero su voz estaba sensible, se apartó de mis brazos para mírame a los ojos.
-desde entonces he buscado comida y un hogar, cuando me encontré con mi prima en el bosque le conté todo lo que me había pasado, ella había huido y buscamos una casa y lo siguiente era buscar empleo. Ella cazaba con su arco pero también necesitábamos otras cosas para sobrevivir que pura carne, no sabes el hambre que he pasado varias veces, dormirme con el estomago vacío
Su triste historia amenazaba con soltarme a llorar pero tenía que verme fuerte. Me doy cuenta que no he sufrido nada a comparación de ella, tengo comida suficiente mientras que tiene que comer de forma medida si quiere seguir viva mas días.
Me despedí de ella y me regrese a España. Todavía no asimilo lo que hizo mi hermano, ¿como pudo ser capaz de hacer eso? Hiccup tiene razón, si a el lo mato en cualquier rato puede matarme a mi. Pero no puedo creerlo. Saco la carta de mi bolsillo y la examinó bien, noto que tiene una pequeña gota de sangre sobre ella, la vuelvo a guardar horrorizado. Solamente de imaginarme a mi hermano levantar una espada y acabar con la vida de alguien me hace escalofríos...
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro