Third R#ich abrió los ojos poco a poco viendo la habitación en donde estaba, era blanca con detalles negros, estaba ordenada, tal vez con mucho orden y pulcritud: ropa doblada cuidadosamente en el ropero, dos mesas de noche a cada lado de la cama, cada una con una lámpara y algunos adornos pequeños, varios estantes con figuras de porcelana acomodadas de una manera tan meticulosa que todas tenía la misma distancia entre ellas y un pequeño baúl a lado de la puerta. Y había una ventana a su izquierda con unas cortinas negras que obstruian los rayos del sol. Se levantó y recorrió las cortinas para ver que estaba amaneciendo. Esto lo sorprendió, se suponía que había llegado al edificio como a las 10 de la mañana, y ahora parecían ser las 7.

Se dio la vuelta viendo ropa limpia que estaba sobre la cama que supuso era para él. No era su uniforme pero no iba a quejarse ya que este estaba rasgado de varias partes y lleno de lodo y sangre.

Se puso la ropa y se dirigió a la puerta pero alguien mas la abrió, era Alemania que venia a ver como se encontraba. Se veía preocupado, tal vez por durar un día entero dormido.

TR- Lo siento por lo de Polonia. - Pudo haber dicho otra cosa como disculparse por desaparecer, preguntar donde estaba su otro hijo o mínimo decirle lo mucho que había crecido, pero no, tenía que empezar con el tema mas incómodo para Alemania. Aunque no iba a negar que sentía curiosidad por el tipo de relación que tenía su hijo con el polaco, la familia alemana siempre había tenido algún tipo de atracción hacia el polaco, no necesariamente amoroso.

Al- Tranquilo no fue tu culpa, solo un pequeño malentendido. - Dijo al ver que su padre se había incomodado con su propia pregunta, o eso creía.

TR- ¿Pequeño malentendido? Estabas a punto de iniciar otra guerra - Sonrió de oreja a oreja tomando a Alemania del hombro. - Estoy tan orgulloso.

Al- ¡Papá! - Se sonrojo ligeramente por la vergüenza, no pensó escuchar esas palabras por algo que dijo sin pensar en un momento de ira y desesperación. 

TR- Lo siento, lo siento, no pude evitarlo. - Reía por lo bajo al notar que su hijo si se había puesto bastante incómodo con aquello.

Al- No es momento para bromas, ahora tenemos que ponerte al corriente con todo. - Dijo con una expresión sería mientras acomodaba sus lentes. Esto sorprendió a R#ich ya que cuando Alemania era pequeño siempre sonreía y tenía muchos ánimos, era su rayo de sol, el que siempre incitaba a su hermano menor a jugar. Ahora solo se preguntaba que fue lo que vivió su hijo para cambiarlo tan drásticamente.

TR- Pues creo que ya debes de imaginarte lo primero que quiero saber. - Adoptó una postura sería al igual que su hijo, pero también parecía estar algo asustado o triste.

Al- Te refieres a...- Sabía a lo que su padre se refería, pero hablar de aquel tema era bastante difícil para él.

TR- ¿Dónde esta tu hermano? - Preguntó dejando de darle vueltas al asunto. Ya se imagina la respuesta pero dentro de él esperaba que le dijeran lo contrario.

Hubo un silencio largo en donde Alemania permaneció con la mirada en el suelo, dándole la respuesta a R#ich .

TR- Yo sabia que esto iba a pasar, pero quería estar con ustedes cuando ocurriera. - Murmuró mirando a su hijo con tristeza al pensar lo doloroso que fue el haber pasado por eso el solo.

Alemania abrazó a R#ich sorprendiéndolo pero no lo rechazó, simplemente dejo que su hijo se desahogará aunque sea un poco. Los dos lo necesitaban aunque no duro mucho, ambos no estaban acostumbrados a dar muestras de cariño.

Al- Será mejor bajar para aclararte todo lo demás. - Volvió acomodarse los lentes tratando de que no se notarán sus ojos llenos de lágrimas que trataba de retener.

TR- Que bien por que tengo tantas preguntas. - Siguió a Alemania que había salido por la puerta. - Antes de desmayarme vi muchas cosas...curiosas. - Entrecerró los ojos tratando de recordar cada detalle de aquellos que estaban en la sala de juntas.

Al- ¿Cómo que? - Empezó a bajar la escaleras junto a R#ich que buscaba la manera de empezar su interrogatorio.

TR- Empezó a hablar cuando bajaron las escaleras, casi diciendo una pregunta por escalón. - Pues USSR tenía un parche y yo no recuerdo haberle sacado un ojo, y quisiera saber si el de al lado era su hijo y si sale con USA por qué la verdad estaban muy juntos, no vi a Corea, Japón se veía extraño sin uniforme, había dos Italias y uno estaba muy junto de Japón, también la chica que estaba cerca se parecía a Japón y ya te vi con intenciones de conquistar a Polonia.

Cuando entraron al comedor todos miraban a R#ich, al parecer habían alcanzado a escuchar todo lo que dijo y algunos estaban avergonzados por tales preguntas.

USA- Ja, ¡Te dije que querías conquistar a Polonia! - Rompió el silencio para burlarse del alemán al ver que el padre de este pensaba igual.

Al- Mejor cállate simpeado. - Dijo molesto, no estaba de humor para tolerar las idioteces del estadounidense.

Mex- Eso hasta a mi me dolió. - Se metió solo para burlarse del de franjas.

Jap- Tal vez por que tú también lo estas. - Comentó sin intención de burlarse al pensar que el mexicano lo decía enserio.

Mex- ¡Ey! ¿Qué no se supone que me ibas a ayudar con eso? - Reclamó al pensar que el nipón se burlaba de él.

Can- ¿Ayudar en que? - Preguntó sonando molesto con obvios celos, ya no confiaba en la japonesa al verse tan sospechosa junto a México.

Mex y Jap- Voltean a verse para volver a ver a Canadá. - Nada.

Usa- Rusia, diles que no me tienes simpeado. - Le dijo casi seguro de que el ruso lo apoyaría, tomándolo del brazo para llamar su atención.

Rus- Te lo diría, pero no me gusta mentir. - Ni siquiera lo volteó a ver, y volvió a ignorarlo.

USA- ¡Qué cruel! - Se sostuvo el pecho simulando que le dolía el corazón de una manera exagerada.

TR- Bravo, ahora tengo mas dudas. - Dijo sentándose junto a Italia.

Ita- Y eso que solo has visto a estos 6.

TR- Estoy completamente perdido - Miro a Alemania que reía por la extraña situación en la que se encontraban, esa sonrisa de un niño que juro proteger hasta la muerte y que ahora era un adulto. - ¿Qué tal si me vuelvo a dormir por otros 80 años? - Dijo en broma al sentir que no encajaba ahí.

USSR- Yo me encargo de que duermas para siempre. - Estaba sentado frente a él recargando sus codos en la mesa y su cabeza en una mano mientras le miraba con indiferencia.

TR- Ahora recuerdo que tu y yo tenemos algo pendiente. - Lo miró con molestia al recordar lo que pasó antes de desmayarse.

Ambos se levantaron produciendo un estruendo al golpear sus manos en la mesa, tomaron el cuello de la ropa del contrario casi estando arriba de la mesa. Alemania iba a parar a R#ich junto con Italia y el imperio japonés se levantó para hacer lo mismo con USSR.

Rus- ¿Su relación secreta de la que nos enteramos ayer? - Dijo "respondiendo" la pregunta del alemán mayor.

Al- Podrías callarte, no quiero imaginar eso. - Hizo una cara de asco y horror al escuchar como Rusia les recordaba ese dato que le parecía perturbador.

Mex- Se podría decir que ustedes son hermanos.

Rus y Al- ¡Vete a la mierda! - Ambos se voltearon a ver con miedo y enojo, eso nunca había pasado antes, ni cuando el alemán vivió temporalmente con los soviéticos.

Jap- Aww hasta dicen las mismas frases. - Recibió un par de miradas que aseguraba que la correrían de la casa si no guardaba silencio.

USA- ¿Puedo decirte cuñado? - Se atrevió a decirle aunque se sorprendió al recibir un pequeño asentimiento como respuesta, solo para molestar al ruso.

Can- USA, USSR te va a volver a golpear. - Dijo con miedo a que volvieran a herir a su hermano como en otras ocasiones en que decía algo para enojar al soviético.

USA- Tienes que admitir que es gracioso. - Volteo a ver a los "hermanos" que comenzaron a pelear por lo que dijo.

Can- Se queda callado mirando de igual forma a los contrarios y notar que USSR estaba más concentrado en lo dicho por Rusia. - Si, si lo es. 

Mientras que ellos seguían peleando por amores, R#ich y USSR estaban sonrojados, y más al darse cuenta de la cercanía que ambos tenían, por lo que se separaron rápidamente desviando la mirada para ocultar sus sonrojos.

TR- ¡¿Les dijiste?! - Dijo molesto después de que sus cara volviera casi a su rojo original.

USSR- ¡¿Crees que yo les contaría sobre esa estupidez?! - Aún tenía un ligero sonrojo que trataba de ocultar con su gorro.

IJ- ¿Por qué dices que fue una estupidez? Se veían tan bien juntos. La estupidez fue haber terminado.

TR- Con que fuiste tu. - Miró con enojo a su amigo de años haciendo que este se asustara y le mirara con miedo.

IJ- ¿Qué? Yo no dije...- Trato de explicarle pero el alemán lo interrumpió. Tenía un pequeño presentimiento de lo que pasaría.

TR- No pongas excusas. - Tomó un cuchillo para untar mantequilla y apuntó hacia el asiático. - ¿Cuáles son tus últimas palabras?

IJ- Si salgo vivo de esto voy a matar a Italia.

R#ich se acerco a I. Japonés y este salió corriendo empezando una persecución alrededor de la mesa mientras Italia reía y USSR se dirija con el americano por que escucho otro comentario de él hacia Rusia.

Así siguieron hasta que casi rompen una foto que cayo cuando USA choco con el, pero el mexicano logro salvarla, aunque eso no impidió que el alemán mas joven se enojara por desordenar su casa, todos se quedaron quietos al ver la expresión del alemán y se sentaron.

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