¡Esto no está funcionando y ya debería tener algo de panza! Obvio, si no estoy embarazada ¡¿Cómo podría tener?!

Estoy perdida.

En realidad estoy en la casa de Xavier, otra reunión "familiar".

―¿Han buscado nombres para el bebé? Los nombres son importantes. ―Mira José a su hijo.

―¿Eh? ―Xavier queda pensativo―. Pues no.

―Tranquilo, ya se les ocurrirá algo ―dice mi padre amablemente.

―¿Tienen una hija mayor, cierto? Nos encantaría conocerla ―pregunta Xiomara.

La madre de Xavier no sabe dónde se está metiendo, aunque no creo que Carina venga a estas reuniones, ella es astuta. No como yo, que ni siquiera me salvo.

―Sí ―dice tímida mi mamá―. Es que... está en la universidad ahora. Estudia mucho, no creo que pueda venir.

Bueno, no digo que no estudie, pero no creo que esa sea la razón para no venir.

Levanto la vista y Xavier me hace una señal para salir afuera. Nos vamos y nadie pone objeción, por suerte.

Al salir, mi novio me dice lo mismo que estuve pensando en todo el día. Sí, le llamo novio otra vez, me emociona solo de pensarlo. Me fui de tema, Xavier repite.

―Esto no está funcionando, si seguimos así, descubrirán que no estás embarazada.

―¿No estás embarazada? ―Se escucha una voz detrás nuestro ¡Ups!