PASADO PISADO

i w a l k e d p a s t

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Y. Hyerim

Una vez que llegamos al departamento nos instalamos, era espacioso y había una hermosa vista hacia el mar. Ese era el lado bueno de la situación.

Ahora, el lado malo.... Yoori se encerró en una de las habitaciones, la cuál supongo que ahora será de ella. Ni siquiera había querido cruzar palabras con ninguna de nosotras.

─ Entra tú ─la empujo.

─ Claro que no, hazlo tú. Tú eres mayor que yo

─ ¿Por qué siempre tienes que sacar el tema de la edad? Además, solo soy mayor por unos meses ─me cruzo de brazos, siempre es la misma.

─ Yoori te respeta más a ti que a mí y lo sabes muy bien, también sabes que soy muy directa y tal vez la incomode con algo sin siquiera darme cuenta

Iba a hablar, pero la puerta de la habitación abriéndose; interrumpió la conversación.

─ ¿Sí saben que estoy escuchando absolutamente todo? ─Sol y yo nos miramos entre sí─ son unas niñas tontas, entren de una vez antes de que me arrepienta

Sin chistar entramos a su habitación.

─ Bien, cuéntanos ─me siento en el suelo y Jinsol hace lo mismo y da un golpe en el brazo─ oye

─ Mejor quédate callada, Hyerim ─arrugo la nariz y solo le doy la razón.

─ Son unas tontas

─ ¡Yah! ─nos quejamos al unísono.

─ Es la verdad, apenas a pasado un año desde que hablamos sobre esto y ya lo olvidaron. Pensé que por ser aunque sea un tema que tiene que ver sobre un chico lo recordarían, pero al parecer su mente de Dory les gana

─ Alto ahí, esa es Jinsol ─la acuso.

─ ¡Claro que no! ¿Quién es la que siempre olvida las fechas importantes?

─ Tú

─ ¡Que no! Eres tú

─ Ya ya, le voy a contar todo nuevamente ─rueda los ojos, camina hacía su cama y se sienta cruzada de piernas─ presten mucho atención

Jinsol y yo asentimos frenéticamente y nos acomodamos mejor para escucharla claramente, Yoori rió.

─ ¿Y ahora de qué te ríes?

─ Parecen dos chiquillas esperando por que les cuente una historia ─una queja sale de mí boca─ vale, vale. Dejaré de dar vueltas en el asunto

─ Por finn ─esta vez soy yo quien la golpea.

─ Ya cállate y escucha ─me saca la lengua y yo hago lo mismo, infantil.

─ ¿Recuerdan que hace un año les dije que estaba saliendo con alguien?

─ Claro, el chico misterioso ─asentí.

─ Cierto, nunca nos dijiste su nombre. Aunque, ¿Eso que tiene que ver?

─ Espera que explique, Jinsol ─la reprende─ y seguramente también recuerdan porque terminamos

─ ¡Claro que sí! Fue totalmente injusto, merecías que te diera una oportunidad de hablar y explicar cómo pasaron las cosas ─exploté, de solo recordar cómo Yoori había llorando por meses después de que eso pasó me hervía la sangre.

─ Tranquila, Hye ─suelto un bufido─ el chico con el que salía se llamaba Jimin

─ ¿Jimin? Espera creo que ahora recuerdo algo, un día te escuché llamarlo ─la acusé─ creo que fue cuando enfermaste de fiebre días después

─ ¿Hice eso? ─parpadeó un par de veces y asentí─ vaya

─ ¡Cierto! ─Jinsol grita repentinamente─ Sabía que había escuchado su nombre de alguna parte, pero un momento... ¿Estás diciendo que...?

Abrí los ojos a más no poder al entender la referencia.

No.

No creo.

─ El chico de cabello rojo es Jimin, Park Jimin... Mí ex ─la mandíbula se me cae de la impresión.

Que pequeño es el mundo.

Y... ¡Debí golpear a ese chico cuando pude!

─ No hagan esas caras, lo pasado pisado

Nos quedamos un rato más hablando y después casa una fue a su respectiva habitación, órdenes dadas por nuestra hermosa hermana mayor. Apenas llegábamos al lugar y ya había problemas, me dormí pensando en todo lo que había pasado en tan solo un día. Cuando menos pensé ya había amanecido, tal vez debería aligerar un poco el ambiente.

Una, dos ¡Tres!

─ ¡Despierta, Yoori-ssi! ─entro a su habitación con mí cámara en manos, lo bueno es que ella no tiene el sueño pesado y al momento abre los ojos─ sonríe

─ Hyerim, apaga eso ─se queja─ ni siquiera me eh lavado la cara

─ Siempre te ves bien, hermanita y esto va para el álbum digital ─le guiño el ojo y ella rueda los ojos─ ya levántate, se supone que hoy conoceríamos nuestra nueva universidad

─ Lo había olvidado por completo ─dió un bostezo; el cual se me contagió y yo también lo hice, ambas reímos─ es la primera vez que no tengo para nada ganas de estudiar

Y ahí fue cuando me dí cuenta por primera vez, los ojos de Yoori estaban un tanto hinchados.

Hay dos opciones: no durmió nada o lloro...

Ugh, otra razón más para matar a ese idiota.

─ Unnie, ¿Estás bien? ─ella asiente─ ¿Estás segura?

─ Estoy bien, Hye ─se levanta de la cama─ me cambiaré, ¿Puedes despertar a Jinsol?

─ Ugh, al parecer me estás deseando la muerte ─bromeo.

Aunque no tanto, lo más seguro es que saldría con un par de rasguños de parte de Jinsol. Nunca, nunca perturben el sueño de ella.

─ Anda ya ─me empuja fuera de la habitación y antes de que yo me gire a reprocharle me cierra la puerta─ ¡Suerte!

─ ¡Eres mala, Yang Yoori! ─le grito de vuelta.

Miro la puerta de la habitación de Sol, ya que, me toca sacrificarme.

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─ ¡Dejen de comportarse como dos niñas pequeñas! ─grita.

─ ¡Vas a pagar el almuerzo, Yoori-ssi! ─le respondo.

─ ¡Eres una anciana para correr, unnie! ─Jinsol suelta una carcajada.

Es raro, se supone que la persona que ama el deporte debería estar por enfrente de nosotras en esta improvisada carrera a la universidad.

─ En realidad, ¡Les estaba dando ventaja, prepárense! -y en menos de dos minutos, Yoori ya nos había tomado distancia por muy enfrente de nosotras─ será mejor que se apuren si no quieren pagar

Joder.

Y ya me estoy comenzando a cansar.

Miro a Jinsol y ella hace lo mismo que yo, una idea me viene a la mente y justo cuando estoy apunto de llevarla a cabo, Jinsol toma mí brazo y me tira hacía atrás.

─ ¡Yah!

Ese era mí plan.

Sol aprovechó y se echó a correr más rápido.

Nuevamente me reincorporo y vuelvo a correr, ya no me importa nada y voy mis todas mis fuerzas. Cuando se trata de competencias ninguna de las tres se deja vencer fácilmente, es algo muy común.

Les estoy pisando los talones, pero mí mirada se desvía a un posible atajo que me hará alcanzarlas, las personas del alrededor dificultan correr. Así que yo comienzo a correr en esa dirección y doy un salto para irme por arriba del camino.

─ ¡Será mejor que apresuren el paso! ─les digo y ambas voltean a verme─ nos vemos en la universidad

─ ¡Eso es trampa, Hyerim!

─ ¡Patrañas! Aprende a perder Yoori ─y otra vez retomo mí camino.

Soy genial, lo sé.

Más adelante veo como ya no hay más camino, así que me detengo y tomo distancia para saltar.

─ Una... Dos... ¡Tres! ─corro lo más rápido que puedo y doy un salto al ya estar en la orilla, sin embargo, abro los ojos a más no poder al no esperar que alguien se atravesará en mi camino─ ¡Cuidado!

El chico voltea en mí dirección, pero no sé mueve. Okey, ese es un punto a mí favor; al menos no me dolerá tanto la caída.

─ ¡AHH! ─ambos soltamos un grito cuando caemos al suelo, como dije, para el fue más doloroso porque yo caí encima.