Lina corría por las calles llenas de nieve en la fría noche, no escuchó el llamado de sus padres o mejor dicho, ignoró a sus padres luego de haber salido de la casa así de repente. La joven de cabello blanco estaba decidida en buscar a su tía Luna.

_ "Ella tiene que estar en el pueblo, estoy segura de eso, ella muy probablemente quiera enmendar las cosas entre mis padres y ella. Claramente debe de estar en algún lugar, tengo que buscarla antes de que sea demasiado tarde".

Lina quería que su tía Luna pueda volver a ver a su familia nuevamente, luego de todo lo que escuchó de sus padres dejaba más que claro de que ellos no guardan algún tipo de rencor o molestia por su tía, ni ellos, ni sus demás tías y sus abuelos, todos ellos desean que Luna vuelva a casa.

Y hablando de casa, vemos como todos en la casa Loud estaban sorprendidos ante el actuar de Lina y como ella salió corriendo. Por lo que las preguntas no se hicieron esperar por parte de los demás a excepción de Lincoln, Lucy y Sam.

_ ¿Pero que fue eso? ¿Que le ocurre a Lina?— preguntó Lori.

_ Lincoln y Sam le contaron todo a Lina con respecto a Luna.— contó Lucy.

_ ¡¿Que hicieron que?! ¿Acaso están locos?— exclamó Lynn.

_ Ella misma quiso una explicación al encontrar la guitarra destrozada de Luna. Por lo cual no nos quedó de otra que contarle todo.— respondió Lincoln.

_ ¿Y por qué ella salió así de repente? ¿Le habrá afectado el saber la verdad?— se preguntó Luan.

_ No, lo que sucedió fue otra cosa. Solo puedo decir que Luna se encuentra en Royal Woods.— decía Lincoln.

Al decir eso todos en la casa estaban sorprendidos y sin palabras al oír que Lincoln acaba de decir de que Luna se encuentra en Royal Woods. A lo que todos querían una explicación de que en verdad eso es cierto.

_ ¿Que Luna se encuentra en el pueblo? ¿Cómo estás tan seguro de eso?— preguntó Lana.

_ Hace rato alguien tocó la puerta y cuando Lina fue a ver no había nadie, dudo que haya sido un bromista, de ser así se hubiera caído debido a la nieve.— decía el albino.

_ Si de ser cierta tu hipótesis entonces hay que ir por Lina, ya que no sabemos cómo Luna vaya a reaccionar al ver a Lina.— dijo Lisa.

_ Tienes razón, si de por sí Luna perdió el juicio cuando se enteró de que Sam estaba embarazada no digamos que puede hacer cuando vea a Lina. Es peligroso.— comentó Lola.

_ Hay que ir a buscar a Lina y pronto.— dijo Leni.

_ Iré a buscarla, afuera hace demasiado frío y Lina puede contraer un resfriado.— dijo Lincoln.

_ No irás solo, Lina puede estar en cualquier lugar, por lo que será mejor que vayamos nosotras también para cubrir más terreno y encontrarla pronto.— decía Lori a su hermano.

_ Así es, no dejaremos que hagas el trabajo solo, entre más ayuda más pronto encontraremos a Lina.— se unió Lynn.

_ Yo también pienso ayudarte hermanito, no quiero que alguien de ustedes se llegue a enfermar por el frío que hace afuera.— dijo Bobby también uniéndose.

_ Ustedes vayan a encontrar a Lina, nosotros cuidaremos de los niños junto a Francisco.— dijo Lynn señor.

_ En ese caso vayamos a buscar a Lina antes de que algo malo le suceda.— decía Sam.

Así Lincoln, Sam, Bobby y las hermanas Loud a excepción de Lily salieron en búsqueda de Lina antes de que esta misma se tope con Luna y evitar que algo malo le suceda. Volviendo con Lina esta última al no saber en dónde pueda estar su tía decidió hacer algo distinto para así dar con ella.

_ Podría preguntar si alguien la ha visto, y así tener una referencia en dónde pueda estar ella.— dijo a sí misma Lina.

La albina de mechón azul vio a una señora a la cual se acercó para preguntar si ha visto a su tía Luna.

_ Disculpe, ¿No ha visto por aquí a una señorita de cabello castaño?— preguntó Lina.

_ No he visto a una señorita de cabello castaño, lo siento.

_ Descuide, muchas gracias por su ayuda.— decía Lina.

Lina siguió caminando hasta que vio a un hombre el cual estaba quitando la nieve encima de su auto.

_ ¿Disculpe? ¿No vio pasar por aquí a una señorita de cabello castaño?

_ No niña, no he visto a alguien pasar por aquí. Mejor ve a casa que está haciendo mucho frío.

Esto no desmotivó a Lina por lo que siguió caminando y preguntando a cualquier persona que veía si alguien vio a su tía Luna pasar por ahí y ninguno ha visto a una mujer como la que dice Lina.

Cuando pensaba en dejar de intentarlo quiso seguir un poco más y si no regresaría a casa. Caminó hasta llegar a una escuela secundaria la cual ha visto varias veces y que según cuenta su madre solía asistir ahí. Vio que en la entrada de la misma se encontraba lo que parecía ser un velador el cual cuidaba de que nadie se escabulla dentro del recinto a robar o hacer actos vandálicos.

_ Disculpe señor, ¿No vio pasar a una señorita de cabello castaño corto por aquí?— preguntó Lina.

_ ¿Señorita de cabello castaño corto? Me pareció ver a alguien así hace unos momentos atrás, estuvo de pie mirando hacia la escuela por unos instantes y después se fue.

_ ¿Y hacia donde la vio irse?— volvió a preguntar Lina.

_ Vi que se fue por allí, solo eso ví.

_ Perfecto, muchas gracias señor.— agradeció Lina.

_ De nada, y por cierto feliz navidad jovencita.

Con esa referencia de dónde pudo haber ido su tía Luna fue que Lina salió corriendo para así encontrarla y con ello tratar de que ella pueda volver con la familia nuevamente y ya no tenga que estar distanciada.

_ Debo darme prisa antes de que ella se vaya del pueblo y quien sabe que vuelva otra vez.— dijo a si misma Lina.

Lejos de dónde estaba Lina vemos a Luna quien seguía caminando y pensando de que volver a Royal Woods fue una mala idea, pese a todo sabe que nada volverá a ser lo mismo, lo que ella misma provocó es algo que ya no tiene forma de revertirlo, lo hecho hecho está y así será.

_ Lo mejor será irme y ya no intentarlo, mi familia son felices sin mí con ellos, aunque no tengan la culpa de la ocurrió aún eso ellos deben de estar molestos por lo que hice.

La castaña pensó en ir a la terminar de autobuses para dejar el pueblo e ir a la cuidad en dónde se encuentra viviendo, pero recordó que al ser navidad ya todos deben de estar en sus casas celebrando.

_ Rayos, aunque ya me esperaba esto. Podría quedarme en un motel hasta que sea mañana.— decía Luna.

La castaña no le quedó de otra que ir a un motel para quedarse solo esta noche y luego regresar a dónde vino, no importa lo que haga, su familia aún no le perdona lo que ella hizo, sobretodo su hermano y Sam, a quienes a uno le causó una fuerte herida y a la otra casi le provoca un daño severo.

El daño que provocó sigue ahí y ella ya no puede hacer nada, muy posiblemente su familia se encuentra mejor sin ella. Caminó viendo si había algún motel en la zona, ya que al estar 11 años fuera de Royal Woods no sabe del todo si algo ha cambiado, de lo poco que ha visto sigue igual tal cual cuando seguía viviendo aquí, pero ya lo demás lo desconoce completamente.

Mientras veía por los alrededores fue que sintió un fuerte golpe en la zona entre su pecho y su estómago, lo cual hizo que cayera sobre el frío suelo cubierto de nieve.

_ ¡Eso me dolió! ¿Pero que rayos fue eso?— se quejó Luna.

Luna vio que fue lo que le provocó ese golpe, vio que delante de ella se encontraba una niña la cual se tomaba la cabeza, dando a entender de que esa niña tiene algo que ver con lo que pasó. A lo que Luna se dirige a esa niña para saber si se encuentra bien.

_ ¿Te encuentras bien niña? ¿Te duele algo?— preguntó Luna.

_ Descuide..... iba corriendo y no me dió tiempo de frenar, aunque de todos modos no serviría de mucho.

Luna vio a la niña la cual levantó su cabeza para verla, la niña por su lado al ver a la mujer con la cual chocó inesperadamente fue que ella se quedó sorprendida. La castaña vio a la cara a la niña y al hacerlo ella también se quedó sin palabras ante lo que veía.

Mientras tanto vemos a Lincoln quien junto a Sam estaban mirando por todos lados a su vez que estaban al tanto por si se llegan a topar con Luna, ya que no saben cómo la castaña puede reaccionar a verlo tanto a él, como a Sam y al resto de sus hermanas.

_ ¿En dónde pudo haber ido Lina? Dudo que haya ido muy lejos.— se preguntaba Lincoln.

_ Estoy nerviosa, Luna puede hacerle algo a Lina si la ve. Nosotros la conocemos bien y sabemos que ella es muy impulsiva y no sabe controlar su enojo.— comentó Sam.

_ Te entiendo, por eso hay que seguir buscándola antes de que Luna la vea.— decía Lincoln.

Ambos esposos y las hermanas Loud seguían buscando a Lina antes de que Luna se encuentre con ella de repente. Y hablando de Luna, vemos a la ya mencionada quien seguía anonadada y sorprendida de lo que veía, esa niña, esa niña ya la había visto antes, no podía alguien más, era ella.

Por su lado la niña al ver a Luna fue que ella también estaba sorprendida, al verla mejor pudo notar el parecido de alguien a quien estaba buscando, pese a que se ve un poco mayor aún mantenía el parecido, como si los años no le hubieran afectado en nada.

_ ¿T-t-tía Luna?

Si, esa niña era nada menos que Lina, quien al ver a su tía Luna en persona no sabía que decir o hacer, no pensó encontrarse a su tía así de golpe, literalmente, verla en persona frente a ella le daba una sensación que no sabía cómo describirla.

Por un lado se sentía feliz de poder conocer a la única tía que no estuvo con ella a su lado desde que era una bebé así como sus demás tías, y por el otro lado no sabía que decir, luego de todo lo que le contaron sus padres de lo ocurrido entre ellos y su tía Luna no sabía cómo esta última se lo vaya a tomar.

_ Vete a casa, Lina. Yo no tengo nada que hacer aquí, haz como si no hubiera pasado.— le dijo Luna a Lina.

La castaña se levantó y siguió su camino dejando a Lina sola, la albina estaba extrañada debido al actuar de su tía, ya que no era la reacción que se esperaba de ella, por un momento pensó que su tía le diría algo feo como que es su culpa de que todo esto sucediera y demás cosas.

_ E-espera, tía Luna, hay algo que quiero hablar contigo.— decía Lina a su tía.

_ Que te vayas a casa, no quiero hablar con nadie en estos momentos, quiero estar sola.— respondía la castaña.

Luna siguió caminando ignorando a Lina quien seguía aún sorprendida del actuar de su tía, pero no iba a desistir, quería hablar con ella y saber que pasó con ella en estos 11 años que ni sus padres ni sus tias y abuelos supieron de ella. Además de contarle algo que le haría sentir mejor a su tía.

_ No te vayas tía Luna, puede que estés algo sorprendida de verme, pero en serio quiero hablar contigo. Ya sé todo lo que ocurrió contigo y mis padres, solo quiero que sepas que ellos no están molestos contigo, ni ellos, ni mis tias y mis abuelos.— decía Lina a Luna.

La ex rockera al oír lo que dijo Lina fue que paró en seco, por un lado no sabía si creerle a Lina de lo que dijo, de que su familia no está enojada con ella ni le guarda rencor, aunque no estaba segura de que si le estaba diciendo la verdad, por lo que le preguntaría si es verdad.

_ ¿Cómo estás tan segura de que todos ellos no me odian por lo que hice?— preguntó Luna sin mirar a Lina.

_ Mi papá siempre me cuenta anécdotas de las veces que él te ayudaba cuando estabas en la banda junto a mi mamá, y en todas ellas siempre hablaron bien de ti y también he notado cuando se ponen tristes al recordar esos momentos.— respondía la albina.

_ ¿En serio ellos hablaron bien de mí?— volvió a preguntar Luna.

_ También me contaron mucho de ti, como que eres la fan número 1 de Mick Swagger, tu comida favorita es el pastel de carne que prepara el abuelito Lynn, que también es el favorito de Mick. La guitarra morada que ví en varias fotos tú misma la compraste con unos ahorros que tenías guardado y antes de tocar la guitarra solías tocar el violín.

_ Antes solías compartir habitación con la tía Luan, tenías otros instrumentos en la habitación además de tu guitarra, la banda en la que estabas se llamaba Moons Goats, sin contar que ustedes participaron en un evento del cual quedaron en segundo lugar pero que sorprendieron a propios y extraños.

Luna al oír lo que Lina contó sobre ella le dejaba claro que en definitiva tanto Lincoln, como Sam así como el resto de su familia han hablado mucho de ella a Lina para conocer un poco sobre ella además de mostrarla algunas fotos de cuando era joven.

_ Tal parece que te contaron mucho sobre mí, ¿Dices que tus padres te contaron todo lo ocurrido hace años?— preguntó Luna.

_ Si, ellos tenían pensado en decírmelo cuando fuera más mayor, pero descubrí tu guitarra toda destrozada y eso me llenó de preguntas, y fue así que supe que algo ocultaban y ellos me lo contaron todo.

_ No imaginé que fuera demasiado lo que ocurrió, aunque ya tenía mis dudas de que algo andaba mal. Empezando con las edades de mis padres, al ver que mi papá es menor que mi mamá y que tiene 22 años y yo 11 supe que algo pasaba pero no quería hacerle preguntas al respecto ya que ellos tratarían de cambiar el tema.

_ Pero ahora que sé toda la verdad, ahora sí tiene sentido ese tema. Aunque lo que quiero saber es, ¿Que fue de ti luego de haberte ido de casa?— preguntó Lina a su tía.

_ ¿Que fue de mí luego de huir de casa? Te lo diré ya que me acabas de contar de que nadie me guarda rencor por lo que hice. Vayamos a un lugar más cómodo para que podamos hablar.— dijo Luna a Lina.

Tanto tía como sobrina fueron a un lugar más cómodo y en dónde puedan estar más a gusto y también dónde no haya mucho frío, vieron que estaban cerca de la vieja estación de servicio del viejo Flip, a lo que fueron a ese lugar el cual Luna conocía.

_ Me sorprende que este lugar siga en servicio pese a que es un sitio el cual no irías a menos que sea la única en toda la tierra.— comentaba Luna.

_ Recuerdo que mi papá me cuenta que solía frecuentar a este lugar junto al tío Clyde cuando eran más jóvenes. Ahora sí, ¿Me contarás que fue de ti durante estos 11 años que pasaron?— quería Lina saber todo.

_ Uff, hay mucho de que contar, obviamente te contaré todo desde el inicio. Luego de todo lo que ocurrió que ya sabes que pasó, tras huir de la casa fui a un lugar del cual era el único que podía ir en ese momento.

Flashback, 11 años atrás.

Regresamos al pasado y más en concreto al momento en que Luna le había partido su guitarra en toda la espalda de Lincoln cuando intentaba golpear con la misma a Sam. Al ver lo que había hecho fue que Luna salió corriendo sin mirar atrás y sin escuchar los llamados de sus padres.

La castaña salió corriendo a su vez que se repetía una y mil veces "¡¿Que he hecho?!" Quería que todo fuera una pesadilla pero no fue así, ella había lastimado a la única persona que la apoyó y que le ayudó en todo cuando más necesitaba su ayuda, no quería lastimar a Lincoln, la irá la había cegado, por sus celos casi provoca una tragedia aun peor.

Ahora no es capaz de ver nuevamente a Lincoln, a Sam o al resto de su familia. Escuchó como su hermana Lynn iba tras ella, miró como la atleta estaba enojada por lo que había hecho.

_ ¡Detente de una vez Luna! ¡No trates de huir así como si nada luego de lo que hiciste!— exclamó Lynn.

Luna no dijo nada, no es capaz de ver a la cara a nadie de su familia, ya que podía hacerle lo mismo que a Lincoln y eso no se lo perdonaría, a lo que Luna trato de perder de vista a Lynn, y para ello comenzó a correr en círculos en la zona en dónde estaban, aunque no sea buena haciendo ejercicio físico eso era lo que menos le importaba en estos momentos.

Cómo pudo perder de vista a Lynn, no la vio atrás suyo por lo que podía ir tranquilamente al lugar que tenía en mente. Es así que llegó a una casa la cual es propiedad de nada menos que su amigo y asistente de banda Chunk.

Pero no fue a la casa de su amigo grandote, sino a su camioneta ya que suele estar ahí más tiempo, tocó la puerta del vehículo varias veces hasta que pudo ver que Chunk salió de la misma viendo a Luna.

_ Oh Luna, no esperaba que vinieras de visita.— dijo Chunk a Luna.

El robusto amigo de Luna vio a esta última quien estaba llorando, esto claro activó sus alarmas al pensar de que algo malo está pasando.

_ ¿Que ocurre? ¿Sucede algo malo?— preguntó preocupado Chunk.

_ Y-y-yo h-h-hice algo muy m-m-malo Chunk...... casi provoco una d-d-desgracia.— decía Luna llorando.

_ Tranquila amiga, calma aquí estoy yo para ayudarte, solo deja de llorar, no me gusta ver a mis amigos más cercanos llorar ya que me pone triste.— decía Chunk a Luna.

La rockera se acercó a Chunk al cual lo abrazó a su vez que dejaba salir todo, en su mente Luna se imaginaba que hubiese pasado si ese golpe con su guitarra le hubiera dado en la cabeza a Lincoln, se imaginaba los peores escenarios y que todos terminaban de la misma forma, su hermano dejando este mundo para nunca más volver.

Chunk aún estaba atónito ante lo que estaba pasando, quería saber que estaba ocurriendo, pero en estos momentos Luna se veía muy afligida, algo muy malo debe de estar pasando, lo mejor que pudo hacer en estos momentos fue abrazar a Luna, consolarla, para así deje de llorar hasta que saque todo de su interior.

_ Ya amiga, déjalo salir, no me gusta ver esa carita llena de lágrimas.— dijo Chunk a Luna.

Pasado unos minutos en dónde Luna dejó de llorar, había sacado todo de su interior, aún así se sentía mal de lo que hubiera pasado si ese golpe que le dió a Lincoln fuera peor de lo que pensaba.

Entraron a la camioneta de Chunk en dónde ya Luna se encontraba un poco mejor, es ahí que Chunk quería saber que estaba pasando para así poder ayudar a su amiga.

_ Dime, ¿Que está pasando? Ya que no es normal lo que acaba de suceder.— preguntó Chunk.

_ No me vayas a odiar, pero acabo de hacer algo que no me lo puedo perdonar, si tan solo no fuera una maldita impulsiva.— decía Luna a su amigo.

_ Calma, solo cuéntame lo que sucede y veré que puedo hacer.— dijo Chunk.

Fue así que Luna le cuenta a Chunk lo que acaba de suceder hace unos minutos atrás, el como Sam y su madre fueron a su casa en dónde Sam contó que ella está embarazada y que el padre del bebé es nada menos que Lincoln. Claro está que Chunk se sorprendió al oír eso, tanto de que Sam se encuentra embarazada al igual que Lincoln, el hermano menor de Luna es el padre del bebé.

_ ¿Pero como es posible que tu hermanito sea el padre del bebé que tendrá Sam?— preguntó Chunk.

_ No lo sé, cuando Sam contó eso yo perdí el juicio, me enojé tanto que estuve a punto de golpear a Sam con mi guitarra, pero Lincoln se puso en medio y recibió el golpe, fue tanto el golpe que recibió que mi guitarra se partió en dos.— respondía Luna.

_ Eso sí que debió doler, entonces eso fue lo que sucedió. En verdad no sé que decir, todo esto me tiene un enredo en mi cabeza.— comentó Chunk.

_ Es por eso que estoy aquí contigo, al ver lo que estuve a punto de cometer me hace sentir una loca, una maldita lunática, no creo poder ver a mi familia otra vez por lo que hice, ellos en estos momentos me deben de odiar por casi matar a alguien.— decía la rockera.

_ No creo que te odien, enojados si pueden estar, pero llegar a odiarte lo dudo mucho.— respondió Chunk.

_ Aún así no puedo volver a casa tras lo ocurrido. Me siento una animal, lo mejor será irme de casa, no sería capaz de verlos a la cara, sobretodo a Lincoln y Sam, por mis malditos celos hice la peor de las atrocidades y rompí una promesa que le hice a mi hermano hace años, no soy digna de ser su hermana.— dijo la rockera.

_ ¿Y a dónde piensas irte? ¿Tienes a un familiar cercano para que puedas vivir con ellos?— preguntó Chunk.

_ No, el único familiar cercano es mi abuelo y dudo que en la casa de retiro me dejen vivir con él. Aunque, ahora que lo recuerdo, hace unas semanas atrás me habías contado sobre un amigo tuyo que vive en Nueva York y es dueño de una cafetería, ¿Verdad?— decía Luna.

_ ¿Isaac? Si recuerdo haberte contado sobre él, ¿Acaso piensas irte a Nueva York?— decía Chunk.

_ Es lo único que se me ocurrió, quiero estar en un lugar donde mi familia no me puedan encontrar, no soy capaz de volver a verlos nuevamente, lo mejor será estar lejos de ellos y evitarles problemas.— respondía Luna.

_ Podría hablar con Isaac, pero llevará algo de tiempo, ya que él suele estar ocupado tanto con su cafetería así como en otros asuntos.— dijo Chunk.

_ Te lo agradeceré mucho si logras contactar con tu amigo, dile que quiero que me dé trabajo y un lugar donde pueda vivir, es lo único que quiero.— decía Luna casi suplicando.

Así como dijo Chunk no le fue fácil contactar con su amigo Isaac para que pueda darle trabajo a Luna en su cafetería y también hospedaje en su casa o en otro lugar. Pasaron dos días en los cuales Luna se quedó a vivir temporalmente con Chunk en su casa, bien podría vivir con él pero quería estar apartada de su familia ya que no sería capaz de controlar sus emociones mas que todo su ira.

Finalmente luego de mucho esfuerzo Chunk pudo comunicarse con su amigo, le contó lo sucedido y fue así como le dió las buenas noticias a Luna.

_ Por fin pude hablar con Isaac, le conté un poco lo que pasó y me dijo que si te dará trabajo en su cafetería.— le dijo Chunk a Luna.

_ ¡Que bien! Solo me queda ir hasta Nueva York para así estar lejos de mi familia, no me gusta tener que hacerlo, pero lo hago por el bien de ellos y por el mío.— dijo Luna a su amigo.

_ Antes de que te vayas te daré algo para que puedas llevarte para que vivas más tranquila y sin problemas.

En eso Chunk fue a buscar algo para así dárselo a Luna, un par de minutos después volvió con una caja y una mochila, Luna vio lo que trajo su amigote y fue ahí que le preguntó.

_ ¿Que hay en la caja?— preguntó la rockera.

_ Es ropa que compré por 5 dólares, ahí debe haber ropa de mujer que te puede quedar. Solo revisa y si ves algo que te guste puedes tomarlo, la mochila también te la daré.— respondía Chunk.

Luna no dijo nada y buscó algo que le pueda quedar y así quedarsela tal como le dijo Chunk, entre lo que encontró había algunas blusas, unos pantalones, unas faldas y un hoodie de color morado, su color favorito. Tomó la ropa y la metió en la mochila, con eso le servirá para poder vivir en Nueva York mientras esté trabajando para el amigo de Chunk.

_ Bien, ahora que tengo algo de ropa ya podré irme. ¿Me puedes acompañar hasta el aeropuerto?— le dijo Luna a Chunk.

_ Por supuesto, también te pagaré el boleto de avión, no me lo agradezcas.— respondía Chunk.

Con eso Chunk y Luna subieron a la camioneta y fueron rumbo al aeropuerto para que Luna pueda ir a Nueva York para estar lejos de su familia, no quería provocarle más problemas a ellos y también evitar cometer otra locura que esta vez si podría cobrar la vida de alguien de su familia.

Llegando al aeropuerto entraron y Chunk le compró el boleto con destino a Nueva York para Luna, esperaron hasta que finalmente escucharon que hay un vuelo disponible que se dirige a Nueva York, por lo que Luna se dispone a abordar el avión.

_ Llegó el momento, no me gusta tener que hacer esto, pero viendo todo lo que hice no quiero que eso se repita. Adiós Chunk, no sé cuando vaya a volver, pero lo más probable es que esté un buen tiempo lejos de Royal Woods y de mi familia, y antes de irme te quiero pedir un último favor.

_ ¿Y cuál es ese último favor?— preguntó Chunk.

_ No le digas a mi familia en dónde estoy, si te preguntan si me vistes dile que no lo sabes. Es lo último que te pediré, no le reveles a nadie en dónde estoy de ahora en adelante.— dijo Luna a su gran amigo.

_ Prometo no decirle nada a tu familia, ninguna palabra saldrá de esta boca ni aunque me amenacen no diré nada. Tu secreto está a salvo.— prometió Chunk no decir nada.

_ En verdad te agradezco toda tu ayuda Chunk, también te prometo estar en contacto contigo y contarte todo lo que haga en Nueva York. Adiós Chunk, te extrañaré mucho.

Así Luna abrazó a Chunk y este corresponde el abrazo, ambos saben que no se volverán a ver en persona por un largo tiempo, aunque se mantendrán en contacto para así no perder la comunicación entre ambos.

Sin más Luna fue a abordar el avión que la llevará a Nueva York en dónde comenzará su nueva vida alejada de su familia y no causarle problemas, sabe más que nadie que hizo una estupidez de proporciones planetarias al no escuchar lo que Sam estaba contando y haber estallado en cólera al oír que su novia estaba embarazada y sin escuchar como fue que se dió todo.

_ Por el bien de todos estoy haciendo esto, no quiero que alguien más salga perjudicado por mis arranques de ira. Espero que Lincoln no me odie por lo que le hice y por lo que estuve por hacer con Sam.— dijo a sí misma Luna.

Horas más tarde.

Tras unas largas horas de vuelo el avión finalmente había llegado a su destino que es Nueva York, Luna al igual que el resto de pasajeros desbordaron el avión y fueron a recoger su equipaje.

Luna fue a buscar su mochila. En eso recibe un mensaje el cual es de Chunk, quien le avisa que Isaac le está esperando en el aeropuerto con un cartel con su nombre escrito, lo reconocerá cuando lo vea.

_ Bien, es momento de buscar a Isaac y así me pueda llevar a un lugar donde pueda vivir.— dijo Luna.

Caminó por la terminal aérea en búsqueda de Isaac, no sería difícil sabiendo que él le está esperando con un cartel con su nombre. Miró por todos lados entre muchas personas que iban y venian de un lado a otro, siguió y siguió hasta que finalmente lo encontró, vio a Isaac quien como le contó Chunk llevaba consigo un cartel con el nombre de Luna.

_ Con que tú eres Luna, Chunk me contó sobre ti, bienvenida a Nueva York, mi nombre es Isaac Martinez.— dijo Isaac a Luna.

_ Hola Isaac. Me alegra de que esté aquí para recibirme.— agradeció Luna.

Luna vio más a detalle al amigo de Chunk, el cual a simple vista uno pensaría que es un tipo al cual no quisieras meterte, pero viendolo mejor no pareciera una persona así, lo ve como un tipo normal del cual bien puede ser tu amigo.

_ No me lo agradezcas, será mejor que te lleve a tu nuevo hogar, no queda muy lejos de aquí, acompáñame.— dijo Isaac.

Salieron del aeropuerto en dónde Luna se sube al auto de Isaac, este último condujo hasta llegar a un complejo de apartamentos el cual no era ni tan lujoso ni tan deteriorado, era un lugar simple pero que cumple para lo que es, alojar a varios inquilinos.

_ ¿Vives en este complejo de apartamentos?— preguntó Luna.

_ No, tengo casa propia, la dueña de estos apartamentos es una conocida mía, le pediré que te dé una habitación para que puedas vivir.— respondía Isaac.

Bajaron del auto y fueron al interior del inmueble para que Isaac hable con la dueña y le dé a Luna una habitación. Vieron a una mujer la cual estaba barriendo cerca de la entrada, Isaac la ve y fue en ese momento que la saludó.

_ Hola Cinthia. Hace rato que no te veo, ¿Cómo estás?— saludó Isaac.

_ Hola Isaac. Yo estoy bien, y me sorprende que vengas así de imprevisto a visitarme.— respondió la mujer llamada Cinthia.

_ Ya sabes, paso ocupado que a veces no me suelo darme el lujo de hacer lo que quisiera. En fin, vengo a pedirte un favor, uno muy pequeño.— respondía Isaac.

_ ¿Vienes a cobrar el dinero que me prestaste? Aún me falta para dártelo completo, solo espera hasta pasado mañana.— decía Cinthia.

_ No vengo a cobrarte el dinero, yo estaré esperando. Lo que quiero es que si puedes alojar en el apartamento que me sueles rentar a una amiga de un viejo amigo mío.— le dijo Isaac a la mujer.

Cinthia miró a quien se refería Isaac con una amiga de un viejo amigo del castaño, vio a Luna quien no dijo nada, solo se limitó a saludar nada más.

_ ¿Con que ella es amiga de un amigo tuyo? ¿No es muy menor para que pueda estar sola en un apartamento?— preguntaba Cinthia.

_ Eso lo sé, pero no te preocupes, que ella está bajo mi cuidado y lo que ocurra yo me haré cargo. Eso es lo único que te pido, que le dejes alojar a Luna en el apartamento que suelo estar.— dijo Isaac.

_ Si dices que ella está bajo tu cuidado y responsabilidad en ese caso confío en ti. En seguida te traigo las llaves.— respondía Cinthia.

Mientras Cinthia fue a buscar las llaves fue que Luna le hizo una pregunta a Isaac de lo que este había dicho.

_ ¿No que habías dicho que tienes casa propia?— preguntó Luna.

_ Por supuesto, solo que a veces cuando estoy cansado y no tengo ganas de ir a casa vengo aquí solo a dormir y luego en la mañana volver a casa.— respondía Isaac.

_ Ya veo, es genial tener gente conocida que te brinda ayuda cuando más lo necesites, realmente le agradezco mucho a Chunk por lo que hizo por mí.— comentó Luna.

Luego de recibir las llaves del apartamento tanto el castaño como la rockera fueron a la habitación que suele usar Isaac cuando no tiene tiempo de ir a su casa. Abrió la puerta dejando ver el interior, el cual era algo grande con lo necesario para que una persona pueda usar para vivir.

_ ¿Que te parece? No es mucho pero tiene lo necesario para que puedas vivir tranquila.— decía Isaac.

_ No me puedo quejar, me gusta, es mejor esto que nada.— opinó Luna.

La Loud fue a dejar su mochila en la cama de la habitación en la cual ella dormirá, después volvió con Isaac quien este último le diría algo a Luna con respecto a lo que ella tendrá que hacer y por el cual ella vino en primer lugar a Nueva York.

_ Espero lo disfrutes, mañana te llevaré a la cafetería donde empezarás a trabajar. Por ahora descansa, debes de estar cansada por el viaje.— dijo Isaac.

_ Perfecto, te prometo que haré mi mayor esfuerzo para así me tomes en cuenta en tu negocio amigo.— respondía la castaña.

_ Y por cierto, Chunk me contó un poco de lo que ocurrió, y la verdad me sorprendió bastante. Para que no te sientas mal por lo que dije solo te puedo decir que no me voy a entrometer, es un asunto personal del cual no me incumbe.

_ Para lo que sea me tienes a mí, como dije de ahora en adelante tú eres mi responsabilidad hasta que cumplas los 18 años. En fin, dejaré que descanses y recuerda que mañana pasaré a recogerte y mostrarte la cafetería.— decía Isaac a Luna.

Ya con eso Isaac dejó el apartamento para dejar a Luna sola para que pueda sacar lo poco que trajo y luego descansar. Se acostó en la cama a su vez que pensaba si lo que acaba de hacer fue lo correcto o debió hacer algo más.

_ De momento quiero estar lejos de mi familia, no soy capaz de volver no después de lo que le hice a Lincoln. No soy digna de ser parte de la familia ni mucho menos ser hermana de Lincoln.— decía Luna.

Estuvo así por unos momentos hasta que se hizo un poco tarde, salió del edificio para comprar algo de comer, afortunadamente había una pequeña tienda en la cual compró unos fideos instantáneo y con ello cenó y después se fue a dormir.

Al día siguiente.

Pasando ahora al siguiente día vemos a Luna quien iba de camino junto a Isaac quien la llevaba a la cafetería en dónde ella trabajará de ahora en adelante. Al llegar bajaron del auto y entraron al inmueble, Luna veía el lugar el cual tanto por dentro como fuera se veía muy bien.

_ Está muy genial la cafetería, tiene un encanto único.— comentó Luna.

_ Solía pertenecer a mi padre, y cuando él se retiró me hice cargo de continuar con el negocio. Al principio se lo iba a dejar a mi hermano mayor pero él no quiso aceptarlo, pero yo si, y me hago cargo del negocio a pesar de que me ocupo en otras cosas, como por ejemplo en un pequeño taller mecánico.— respondía Isaac.

_ Vaya, me recuerda a mi padre, él es dueño de un restaurante muy famoso en Royal Woods. Aún me pregunto a quien le dejará el restaurante cuando él se retire.— dijo Luna.

_ Pero bueno, antes debo hacerte una pregunta para así darte el trabajo. ¿Sabes cocinar?— preguntó Isaac.

_ Soy un asco en la cocina, y si me pongo a cocinar que sea estando los bomberos afuera de mi casa.— respondió Luna.

_ En ese caso te encargarás de pedir las órdenes de los clientes. Irás de mesa en mesa anotando las órdenes y luego se las das a las cocineras y cuando ya estén listas las dejas en las mesas correspondientes.— decía Isaac el trabajo de Luna.

_ No parece tan complicado, acepto el trabajo de mesera.— aceptaba Luna el puesto.

_ Excelente, antes te daré tu uniforme para que así empieces a trabajar. Ven conmigo para así puedas comenzar ahora mismo.— dijo Isaac.

Luna acompañó a su ahora jefe para que el diera su uniforme que usará para trabajar. Ya lista fue que Luna comenzó su primer día de trabajo, llevando consigo una pequeña libreta que el mismo Isaac le dio y un bolígrafo fue a atender a los clientes que llegaban al local.

_ Huevos y tocino para la mesa 5, por favor.— dijo Luna a las cocineras.

_ Sean bienvenidos, ¿En qué les puedo servir?

Luna iba y venía en dónde llevaba varias órdenes a distintas mesas a su vez que escribía los pedidos de los mismo clientes. De esa forma fue el primer día de trabajo para la Loud, no fue tan difícil como pensaba, aunque si hubo una cantidad de clientes que llegaron este día.

Pasado las horas ya era momento de cerrar, Luna limpió algunas mesas y acomodaba algunas sillas, todo había salido bien. En eso llegó Isaac quien en todo momento vio a Luna y como ella hizo su bien su trabajo.

_ Lo hiciste bien, sigue así y te aseguro que todo irá bien para ti, Luna.— dijo Isaac a Luna.

_ Gracias, seguiré haciendo lo mío para que veas que soy útil en tu local. De eso no tengas dudas.— respondía Luna.

Ya con su turno terminado Luna se cambió de ropa a la que llevaba puesta cuando llegó y dejó el uniforme en un casillero el cual le puso su nombre para no olvidarse cual es. Después se ve a Luna quien iba de camino a su apartamento contenta de que le fue bien en su primer día de trabajo en la cafetería.

_ Si sigo así estoy segura que recibiré un buen pago por parte de Isaac, tengo que darlo todo para no ser una buena para nada.— comentaba Luna.

Eso pensaba Luna, si seguía así le irá bien en su nuevo trabajo. Daremos un pequeño salto en el tiempo en el cual han pasado 4 meses desde que Luna dejó su hogar para irse a vivir a Nueva York, y las cosas para ella han ido relativamente bien.

Para empezar, con su primer pago Luna pudo comprar algunas despensas para que pueda comer, pero solo compraba algo que fuera facil de preparar y no sea tan detallado como algunos platillos que suele preparar su padre.

El primer mes que ha estado viviendo en el apartamento Isaac se lo pagó, por lo cual ella estuvo viviendo gratis ese mes, pero ya en adelante ella misma se haría cargo de pagarlo sin falta. Y en cuanto a su trabajo, aunque no sea la tarea más difícil del mundo lo cierto es que a veces suelen llegar clientes que no son para nada amigables, cosa que ponía aprueba la paciencia de Luna, pero se controlaba para no ser echada de su trabajo, aparte sabe que sucede cuando pierde el juicio.

Vemos en estos momentos vemos a Luna quien estaba a la espera de que le den la orden de una mesa el cual ya se estaba tardando un poco.

_ Amiga, ¿Para cuándo estará lista la orden de la mesa 4?— preguntó Luna a su compañera.

_ Ya sale dentro de unos instantes, no es fácil estar aquí, si supieras cocinar quizás todo sería más fácil.

Luna no dijo nada ya que si se pone a cocinar lo único que conseguiría era incendiar el local, recibió la orden y la fue a dejar a la mesa que lo pidió.

_ Aquí tiene, lamento la demora.— se disculpó Luna.

Luna seguía haciendo su trabajo atendiendo a los clientes y anotando todo en su libreta. Se acercó a otro cliente al cual estaba esperando a que este elija que va a pedir, mientras tanto Luna esperaba mirando su libreta viendo las órdenes que ha escrito mientras mascaba una goma de mascar.

Después vemos a Luna quien estaba un poco atareada debido a que llegaron varios clientes al mismo tiempo y ella ser la única que estaba atendiendo se puso a escribir las órdenes y llevarlas a sus compañeras en la cocina.

_ Maldición si que son muchos clientes, no me molesta siempre y cuando paguen por lo que pidan, pero es demasiado para una sola empleada.— decía Luna.

En eso se ve a Luna quien al ser la única que atiende toma una rebanada de pastel y un plato con una orden que fueron pedidos en diferentes mesas, por lo cual ella se daba prisa para así entregar otras órdenes a los clientes.

Las horas pasaron y se puede ver a Luna quien estaba un poco cansada, el atender a varios clientes al mismo tiempo no era fácil, en parte lo es pero cuando llegan muchos clientes al mismo tiempo la cosa se pone de todo menos bonita.

_ Rayos me duelen los pies de tanto caminar, ahora entiendo un poco a mamá y papá y el como ellos le hicieron para mantener a 11 hijos, el trabajar así no es para cualquiera.— decía Luna.

Así era la nueva rutina de Luna, ir a su trabajo, ir a su casa, cenar y dormir, esto durante casi toda la semana, ya que los domingos suele descansar, cosa que en verdad agradece, pero en lo demás es básicamente lo mismo.

A veces Luna recordaba sus días cuando ella estaba con sus amigos de banda y solían ir a divertirse un poco. Las salidas luego de la escuela y cuando tocaban de vez en cuando en el garaje de su casa.

_ Me pregunto si ellos seguirán con la banda sin mí, aunque Sam tendrá un bebé y es poco probable que ella pueda seguir con la banda.— comentó Luna.

Y no solo extrañaba a sus amigos de banda, también obviamente a su familia, se pregunta que han hecho ellos en su ausencia, aunque en parte sabe un poco gracias a Chunk, quien le cuenta como van las cosas en Royal Woods así como a su familia, dónde Chunk le contó que sus hermanos fueron a preguntar si la ha visto, a lo que este, fiel a su palabra les mintió diciéndoles que no sabe nada al respecto.

Vemos a Luna atendiendo a unos clientes cuando de pronto escuchó una risa que se le hacía conocida, la cual le recordaba a Luan cuando ella contaba uno de sus chistes malos. Luna volteó su mirada y vio que se trataba de una niña que estaba mirando unos vídeos en un celular.

Y no solo eso, tiempo después vio a un niño a quien se le veía emocionado por sus prácticas en el baloncesto, esto claro a Luna le hizo recordar a Lynn y su amor a los deportes. En otra ocasión vio a dos niños gemelos, una niña y un niño quienes peleaban por el bote de ketchup, a Luna le hizo recordar a sus hermanas gemelas Lana y Lola.

Después de una larga jornada laboral se puede ver a Luna que estaba lavando unos platos que habían sido usados, lavaba uno y lo ponía separado para después secarlos y ponerlos en su sitio. En eso Luna toma uno de los platos y se imaginó que era un platillo de bateria, tal como el que estaba en su habitación compartida con Luan.

_ Me pregunto si todavía sigue ahí mi batería, aunque ahora que lo recuerdo ví que estaba en el suelo cuando estuve persiguiendo a Sam. Espero que no se haya roto alguno de sus tambores.— dijo Luna.

Esto hizo sentir mal a Luna cuando estuvo persiguiendo a Sam para golpearla con su guitarra, no quería recordar eso pero simplemente no podía, era algo del cual tendrá que cargar por el resto de su vida.

Acabado con su turno Luna fue a cambiarse para luego ir a su hogar, se despide de Isaac y sale del local. Caminó por las calles oscuras de Nueva York a su vez que pensaba que podría comprar para cenar.

_ Podría ir a un KFC que está por aquí cerca, si, se me antojó un pollo frito.— dijo Luna.

En eso mientras caminaba para ir a ese local famoso de pollo frito fue que Luna vio un grafiti que había en una pared el cual le llamó su atención.

_ "Friday Night Funkin" parece el nombre de una banda Hip Hop o una banda de Rap.

Al decir la palabra banda fue que nuevamente los recuerdos de ella con su banda volvieron, momentos felices que ella compartió con sus amigos y quién en ese entonces era su pareja. Ella siempre soñó con algún día tanto ella como su banda fueran famosos, pero vaya que la vida está cargadas de sorpresas, algunas no tan buenas.

Sin decir nada Luna solo continuó su camino dejando atrás ese grafiti mientras caminaba por las calles oscuras de Nueva York acompañada de la luna llena.

Tantos recuerdos hicieron que Luna comenzara a dudar de que si fue buena idea el venir a Nueva York, ya que no podía dejar de recordar tanto a sus amigos así como a su familia y si estos siguen molestos con ella o por el contrario la extrañan.

Un día estando en su hora de descanso fue que Isaac fue a la habitación donde las empleadas se toman su merecido descanso para almorzar.

_ Perdón por hacerte esperar, aquí está el almuerzo.— dijo Isaac a Luna.

_ Gracias amigo, y descuida, estoy segura que había mucha gente esperando aparte de ti.— le dijo Luna.

Isaac vio a Luna quien se le veía pensativa a su vez que tenía un aura como si algo le estaba pasando.

_ ¿Sucede algo Luna? Te noto como si algo te pasara.— preguntó Isaac.

_ Tranquilo, no es nada malo, solo pensaba en cosas, nada fuera de la normal.— respondía Luna obviamente mintiendo.

_ Puedo sentir que no es así, aunque no te obligaré a que me lo digas. Eres libre de decirlo si quieres.— decía el castaño.

_ Es sobre si fue buena idea venir en primer lugar a Nueva York, estoy dudando si de verdad mi familia me debe de odiar por lo que hice o si ellos me deben de extrañar.— contaba Luna lo que le pasa.

Por su lado Isaac ya tenía el presentimiento de que fuera eso, a lo que este de acercó a Luna para hablar un poco de ese tema del cual sabe un poco gracias a su amigo Chunk.

_ No sabría decirte si ellos te odian o te deben de estar buscando, si, estuvo mal lo que estabas por hacer y lo que le hiciste a tu hermano. De buenas a primeras te diría que si, ellos en estos momentos siguen enojados por lo que hiciste.

_ Pero hay una probabilidad de que ellos no están molestos, puede que al principio si, pero odiarte así para toda la vida eso nunca. Es difícil saber si está pasando una cosa u otra, y sobre si fue buena idea el venir a Nueva York o si quieres regresar a Michigan eso ya sería decisión tuya.

_ Esos son casos en los cuales no quisiera entrometerme demasiado, solo puedo decirte eso, la decisión depende de ti si volver a tu hogar o quedarte aquí en Nueva York.

Luna escuchó lo que le dijo Isaac con respecto a lo de volver a su hogar o quedarse en Nueva York, por un lado quería estar con su familia, intentar solucionar lo que ella misma provocó, pero muy dentro de ella tiene el miedo de que ellos la odien y que no quieran verla jamás por golpear a Lincoln y casi hacerle lo mismo a Sam.

_ Lo pensaré mejor en otra ocasión. No puedo tomar una decisión apresurada así de una, tengo que reflexionar si hacerlo o no.— respondía Luna.

_ Y como sabes me tienes a mí por si necesitas algo, no quiero que estés sola aquí. Y sé que vas a tomar la mejor decisión.— dijo Isaac.

_ Gracias viejo, en verdad sabes cómo animarlo a uno, me recuerdas a mi hermano menor, él si sabe cómo ponerle de ánimos a uno, es un don que solo él tiene y las demás no.— decía la ex rockera.

Con esa charla que tuvo con su jefe es que Luna debía de pensar bien las cosas, aún mantiene esa espina de que si su familia aún están molestos por lo que hizo, y más aún de que no tiene el valor de ver a la cara a su hermano y a Sam.

_ Lo mejor será tomarme un tiempo y tratar de olvidar todo esto, si sigo así me volveré loca de tanto pensar en ello. Por ahora seguiré con mi trabajo y esperar lo que pueda pasar.

Fue lo que dijo Luna para luego comer su almuerzo y después seguir con su trabajo. La Loud rockera aún no estaba segura si deba volver a su hogar, seguía en duda de si hacerlo o no, pero como bien se dijo antes eso sería para otra ocasión y no pensar tanto en ese tema para no afectar su mente y le impida hacer lo suyo.

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Hola amigos míos, ¿Cómo están? Espero que bien.

Bueno, en este capítulo vemos como Lina luego de salir de la casa de sus abuelos fue en busca de su tía Luna, la cual ella sabía que se encuentra en el pueblo y quiere buscarla y así convencerla de que regrese y vea que nadie le tiene odio o resentimiento por lo que ocurrió años atrás.

Y como era de esperarse, Lina dió con su tía a la cual le cuenta que ya sabe toda la verdad y le dice que todos la extrañan, cosa que Luna duda, pero Lina insiste en que confíe en ella, que ni sus padres, ni sus tías ni sus abuelos están molestos, al contrario ellos la extrañan y no hay un solo día en que esperan su regreso.

También aquí se revela que fue de Luna luego de huir de su casa, en dónde fue con Chunk y este le hizo el favor de llamar a un amigo quien es dueño de una cafetería en Nueva York en darle trabajo, cosa que accede y Luna le pide un último favor a Chunk en no revelar a su familia en dónde está ella.

Y como algunos han de saber, en el cómic se cuenta que fue de Luna y en la misma hay cosas que no encajan, por ejemplo al inicio del cómic Luna se le ve normal pero más adelante se le ve a ella viviendo como una vagabunda, y tampoco se detalla que pasa más adelante, pero aquí le di un enfoque que va más a corde a como Luna tuvo que dejar todo atrás y vivir una vida tranquila y lejos de su familia.

Antes de irme le quiero dar las gracias a mi buen amigo dragon3321 por prestarme a su OC de Isaac Martinez y también de colorear esos dibujos de Luna el cual le pertenece al artista SketchToons.

Ya sin nada más que decir los dejo con mis angelitos para despedir este capítulo.