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Especial Yel 2

Cuando Yel regresó al día siguiente en la mañana, se cruzó en la sala con Lisa. Pensó que le gritaría, pero solo la ignoró y salió a trabajar. Se sentó en la mesa, pensativa por la mirada de decepción de su madre Lisa. Escuchó ruido y su madre Jennie entraba a la sala con su hermanito Alex, él ya estaba cambiado para ir al colegio.

_¿Por qué no llegaste a dormir? - preguntó Jennie sin siquiera mirarla, no quería hacerlo, se concentró en servir el desayuno a Alex.

_Ya era muy tarde y no podía regresar a casa, Yuna me dejó quedarme con ella - mintió, siendo tímida.

_En la cena, trae a esa chica - pidió seriamente, aún sin verla - tu madre y yo queremos conocerla.

_¿En serio? - Yel sonreía.

Pero la respuesta de Jennie fue distinta a lo que preguntó.

_Yel, vuelves a hablarle así a tu madre - pronunció con voz dura - y tendrás una habitación completamente vacía y sin alguna tecnología por todo un año - advirtió.

_¿Por qué? ¿Por defenderme? - salió a la defensiva - no solo los padres-

_¡Siempre hay un límite, Yel! - dejó en silencio a ambos hijos - insultar, menospreciar o herir a alguien no es defenderse, no tengas esas actitudes tan bajas y mediocres. Tu madre en ningún momento te faltó el respeto, espero ver lo mismo en tí.

Jennie continuó peinando a su hijo menor, Yel solo la miraba seriamente, Yuna tenía razón, ellas sí podían gritarle y ella no, solo la veían como su inferior.

***

En el auto camino al colegio, Jennie bajó un momento para hacer un retiro. Sus hijos la esperaban en el auto, Yel en su celular y Alex en su videojuego, hasta que el menor giró a verla, viendo curioso esa mancha roja detrás de su cuello, casi cubierto por su cabello.

_¿Dónde estabas anoche? - preguntó el menor.

_Con mi novia - respondió sin interés, seguía conversando con Yuna, le estaba avisando de la cena.

_Mi mamá Lisa estuvo llorando - Yel giró a él al escucharlo - y mamá Jennie no durmió toda la noche. Cada vez que me levantaba, la veía sentada en el sofá de la sala. Cuando me levanté para ir al colegio, ella seguía allí, también estaba llorando.

_Han exagerado - volvió a ver su celular, tratando de ignorar su culpa - era obvio que estaba con mi novia.

_¿Les avisaste? - Yel volvió a quedarse en silencio - si yo desapareciera, ¿No llorarías?

_¡No digas eso ni en broma, Alex!

Jennie se acercaba al auto, Yel mantuvo silencio, manteniendo las palabras de su hermano en su cabeza. Solo imaginarlo, su corazón se estrujaba.

Jennie ingresó al auto y lo encendió para comenzar a manejar. Yel levantó la mirada con disimulo al espejo retrovisor, observó el rostro de su madre, estaba muy cansada; sus ojos estaban rojizos, tenía unas leves ojeras, seguro cubierto por el maquillaje.

Regresó su mirada a su celular, tratando de ignorar lo que sentía. Siguió conversando con Yuna, cuando recibió una foto que hizo que cubra rápidamente la pantalla con disimulo. Volvió a ver al foto con cuidado y sonrió sonrojada.

***

En casa de Yuna, Yel había ido directo a verla después de salir del colegio, Yuna se arreglaba frente al espejo la cortaba. Yel le había traído un traje perfectamente de su medida, era un elegante traje negro que la hacía ver más atractiva.

_No sé cómo hacer esto - Yuna no entendía por más videos que vió - ¿Me ayudas?

_Sí - Yel se acercó, quedando frente a ella. Comenzó con el nudo y sonreía por la mirada confusa de Yuna al procedimiento, se veía muy tierna - te ves muy atractiva.

_Lo sé - ambas rieron - gracias por el traje, no sabía qué ponerme - la admiraba - ¿Cuándo vendrás a vivir conmigo?

_Cuando termine el colegio, faltan pocos meses - metió la corbata dentro del saco - listo.

Yuna la atrajo de la cintura, ambas se sonreían, cómplices. Yuna sostuvo ambas piernas de Yel y la cargó, colocando ambas piernas al rededor de su cadera. Sus labios se encontraron y Yuna caminó con ella hasta llegar a su cama, la hizo recostarse y se mantuvo sobre ella, guiando su mano por debajo de su camisa, amasando uno de sus pechos.

_¡YUNA! - la voz de su madre la hizo suspirar con frustración - ¡¿DÓNDE MIERDA ESTÁ EL DINERO DE LA MESA?!

_¡TUVE QUE PAGAR LAS CUENTAS, MAMÁ! - respondió Yuna con molestia, aún sobre Yel, ella se mantenía en silencio, incómoda.

_¡LA PRÓXIMA VEZ TOMA DE TU DINERO, INÚTIL! ¡QUIERES TRAER MUJER Y NI TIENES PARA PAGAR LAS CUENTAS, IMBÉCIL!

Se escuchó la puerta ser cerrada con fuerza y Yuna suspiró, causando lastima a Yel.

_No me gusta que te trate así - acariciaba su mejilla.

_Lo sé - recostó su mejilla en su pecho - nadie me entiende, solo tú, es por eso que me gustas tanto.

_Tú también me gustas.

Yuna levantó la mirada, sonriendo.

_¿Sí?

_Sí, mucho - la veía muy enamorada, admirandola.

***

La cena ya estaba lista, la familia esperaba sentada en la mesa a que Yel llegue con su pareja, la puerta fue abierta y giraron a ella, Yel ingresó con timidez, tomando la mano de Yuna.

¿Dónde estaba Momo con la katana cuando se le necesita?

Estaba de vacaciones con su esposa e hijos, cierto.

_Buenas tardes - saludó Yuna, viéndose tímida frente a ellas.

La cena comenzó de manera tranquila, las que más conversaban era Lisa y Yuna, el resto escuchaba, y Alex, él estaba en su mundo pensando qué disfraz usaría para halloween.

Cuando Jennie se puso de pie para sacar el postre del horno, le pidió ayuda a Yel y ella fue tras ella. El pequeño Alex fue también ante el tan deliciosa aroma, o al menos eso le había dicho Jennie que diga si Yel le preguntaba. Yuna se mantenía nerviosa por la mirada de Lisa; en toda la cena no había dejado de hacerle preguntas.

_Lo que tienes con mi hija - murmuraba Lisa, viéndola seriamente - ¿Es algo serio?

_Pues sí - respondió con simpleza, la mirada de la mayor supo que aquella respuesta no era suficiente - lo que quiero decir, lo mío con Yel es muy serio e importante para mí.

_¿Sí? - aún no confiaba en ella, pero hasta el momento se había mostrado como una buena chica - Yuna...- la joven vió nerviosa el cuchillo que tomaba con lentitud - ¿En serio quieres a mi hija?

_S-sí, señora Manobal.

_Y no le harás daño, ¿Verdad? - mantenía la pequeña cuchilla para carne entre sus manos, jugando - no intencionalmente, no con intención.

_N-no, señora Manobal; yo respeto y amo mucho a su hija.

_Sabes que soy chef, ¿Verdad?

_Sí, Yel me lo dijo - asentía - tiene el restaurante más famoso y prestigioso ahora, incluso ganando al restaurante en donde una vez soñó en trabajar.

_Vaya, estás muy informada - Lisa tocaba el filo del cuchillo con su dedo - este cuchillo corta muy bien la carne.

_Sí...- asentía - por cierto, muy deliciosa la comida que preparó; es un placer haber comido de una chef tan importante como usted - trataba de sonreír.

_¿Has comido carne humana, Yuna? - preguntó Lisa, borrando la sonrisa de la joven pelinegra.

_¿P-perdón? - seguro escuchó mal.

_Dicen que sabe a cerdo - la miró directamente - ¿Alguna vez has probado?

_N-no, señora - miraba la entrada de la cocina, necesitaba que ya regresaran. Jennie estaba distrayendo perfectamente a sus hijos en cortar el postre - no tendría porqué o cómo probar algo...así.

_¿No tienes curiosidad? - lo decía como si fuera lo más común del mundo.

_Claro que no - negaba - e-eso sería ilegal y...extraño.

_Yo sí tengo curiosidad - pudo ver la expresión desconcertada de Yuna - quiero saber si en verdad sabe a cerdo; soy chef, así que sería interesante qué podría preparar o a qué podría saber con diferentes ingredientes.

_Señora, no creo que...

_Si lastimas a mi hija - interrumpió seriamente, apretando el cuchillo - la carne que usaré para crear nuevos platos...será la tuya; quién sabe, quizá sí sepa a cerdo.

_U-usted...- respondía nerviosa, asustada - está loca...

_Y mucho, niña delincuente - sonrió - mucho. Pero tranquila, si tu intención no es lastimarla, ¿Entonces a qué temer? - clavó el cuchillo en la carne de su plato en un golpe, haciendo brincar a Yuna - solo tratala bien...¿Te estoy pidiendo mucho?

_¡N-no, claro que no! - negaba rápidamente - entiendo.

_Me alegra escuchar eso, niña delincuente - sonrió - ¡Cariño, ¿Necesitas ayuda?! - preguntó Lisa en dirección a la cocina, esa era la señal.

_¡No, amor! ¡Ahora voy! - respondió Jennie.

***

Jennie y Lisa estaban pensativas, hace mucho que había terminado la cena y sus hijos dormían en sus habitaciones.

_No me agrada - pronunció Lisa - hay algo, no sé qué, que me dice que no es lo que mostró en la cena. Se veía tan...perfecta; nadie es perfecta, Jennie.

_También sentí eso - estaba en un debate - no sé si es una intuición o es mi posición de madre que me hace preocuparme y crear todos los escenarios catastróficos.

_¿Qué hacemos?

_Tendremos que poner nuevas reglas.

***

La vibración de su celular la despertó, Yel vió la pantalla y vió que era una llamada de Yuna, pero también eran las tres de la madrugada.

_¿Yuna? - preguntó Yel en un susurro.

_¿Puedes bajar? Estoy afuera de tu casa.

Yel no pudo responder, la llamaba había sido cortada. Bajó con cuidado de no hacer ruido y abrió la puerta lentamente. Al salir y juntar la puerta, sonrió al ver a Yuna esperando en su moto.

_Hola, amor - Yel quiso besarla, pero Yuna evitó su beso, dejando confundida a Yel - ¿Pasa algo?

_Vine a esta hora porque se trata de una emergencia - se notaba preocupada - verás, quieren echarme de la universidad.

_¿Qué? ¿Por qué?

_No puedo pagarlo, he estado trabajando pero aún así no me alcanza, ¿Crees que podrías ayudarme?

_Sí, claro - respondió preocupada - ¿Cuánto necesitas?

_Necesito...algo más que solo dinero - pronunció insegura - tus abuelos...son los creadores del tratamiento para que dos mujeres tengan hijos, ¿Verdad?

_Sí...- a Yel eso le pareció extraño - ¿Cómo lo sabes?

_No hizo falta hacer una gran búsqueda, solo busqué el nombre de tu madre Lisa y apareció toda la información. Quería saber si era capaz de cumplir su amenaza.

_¿Mi mamá te amenazó? - preguntó con molestia.

_Sí, pero ese no el punto ahora, Yel. Quisiera que me ayudaras en...conseguir algunos de esos sueros, y darmelos para poder venderlos.

_Son...viales - respondió Yel - ¿Conseguirlos? No creo que me los den.

_Pero...puedes hacer un préstamo.

_Pero...Yuna - pronunció apenada - yo no tengo acceso a los estudios de mis abuelos, no sabría conseguirlo sin que me pregunten o investiguen.

_Pero eres muy cercana, ¿No? Puedes ir a visitarlos y sacar unos pocos sin que se den cuenta - vió la inseguridad de Yel - por favor, amor - sostuvo sus manos - solo una de esas inyecciones vale cinco mil dólares, podrías ayudarme mucho, por favor - pidió con tristeza - quiero seguir estudiando.

_Yo...- estaba en un fuerte debate en sus pensamientos - sería un robo...

_No lo sería, eres su nieta - trataba de convencerla - ellos no te denunciarán si te atrapan, solo sería un regaño, por favor - acarició su mejilla - hazlo por nosotras, ¿Sí?

Yel no estaba segura, pero al ver la tristeza en su novia y sus ganas de seguir estudiando, solo asintió.

_Mañana iré a visitar a mis abuelos, sé que ellos tienen muchos de esos viales en su casa, allí será más fácil que ir a su agencia.

_Gracias, amor - besó sus labios - en serio eres un ángel, tengo a la mejor chica como novia - Yel sonreía ante sus palabras.

_Iré a tu casa en la noche, solo espérame.

_De acuerdo.

Yel no pensó que fuera tan fácil, en cuanto llegó a casa de sus abuelos, solo tuvo que decir que iba al baño mientras ellos hacían el almuerzo, y aprovechó en bajar al sótano, que ahora era el doble del tamaño anterior, y sacó cinco estuches de la gran congeladora, metiendolos en su mochila rápidamente.

Cada estuche tenía veinte viales, en total, servía para veinte inyecciones, había mucho dinero allí.

Medio millón de dólares.

Cuando Yuna los recibió y al poco tiempo Yel se fue, la pelinegra quedó maravillada al ver todas esa cantidad de viales tan costosos en ese mini congelador.

Tomó una en especial, lo admiró por un momento, ante de inyectar la aguja y absorber el líquido. Palmeó su brazo, buscando la vena correcta. Su brazo ya tenía un delgado tubo atado fuertemente para que sea más fácil y al encontrar la vena correcta, se lo inyectó.

_Vamos, señora Manobal - sonreía divertida - aunque no le guste, seré la madre de su nieta. Esto es para que la próxima vez, lo piense bien antes de amenazarme - pronunció seriamente. 

Voten ❤️

¿Por qué siento que estoy creando otra historia? Me gusta 🤔

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