La luz había vuelto en la mañana, había sido una explosión en uno de los cables que conectaba a varias calles. Lamentablemente para Jennie, no tuvieron cómo comunicarse, así que fue una noche muy larga en la cuál no podía dormir.

Lisa había despertado muy temprano, al ser un día domingo, el señor Kim la había llamado para poder hablar de las investigaciones, pero al salir de casa, unos periodistas aparecieron de la nada, invadiendo su espacio personal.

_¿Es cierto que es mujer? ¿No es una mujer transexual?

_¿Qué? - Lisa se mostró incrédula - ¿De dónde sacan eso?

_¿Es cierto que embarazó a dos mujeres?

_¿Tiene dos parejas?

_¿Es cierto que ahora planea embarazar a la tercera que vive con usted?

_¡¿Qué?! - Lisa estaba desconcertada.

Lauren salió de casa, quedando confundida al ver todos esas miradas a ella. Retrocedió asustada cuando todos esos periodistas corrieron a hacerle preguntas y Lisa subió rápidamente al taxi que la estaba esperando.

Al instante recibió una llamada de Jennie y respondió.

_¿Sabes por qué hay periodistas en mi casa? - preguntó extrañada - ¿Tú padre dijo algo?

_No, pero me acaba de llegar un correo, me imagino que a tí también y a Nia.

Nia corría de regreso a su departamento siendo perseguida por muchos más periodistas.

_No sé, no reviso mis notificaciones de correo electrónico - respondió avergonzada - ¿Qué dice?

_Aprobaron el pedido, puedes firmar a ambos niños - pronunció, nostálgica.

_¿En serio? - Lisa sonreía, emocionada - ¿En serio en ya puedo firmarlos?

_Sí, ya serán tus hijos legalmente. Nos esperan esta tarde a cualquier hora para firmar. Creo que algún chismoso dió la noticia a los canales y periódicos. Mi papá está afuera pidiendo que se callen porque no dejan dormir a Yel.

_Estoy yendo a tu casa, tu padre me llamó para algo importante.

_Está bien, te espero - ambas se quedaron en silencio, como esperando algo.

_Me gusta escuchar tu voz - pronunció Lisa.

Jennie no pudo responder porque Lisa cortó la llamada de la vergüenza que sintió, al punto de esconder su cara en sus manos y patalear, sonrojada y sonriendo como una estúpida.

***

El señor Kim miraba por su microscopio, cuando escuchó a alguien entrar a su oficina y sonrió al ver a Lisa. Ella bajaba junto a Jennie, ambas conversaban sonrientes, cuando Lisa fue jalada repentinamente por el mayor.

_Lo logramos - pronunció ansioso.

_¿Lograr qué? - preguntó confundida.

_Mira - se acercó a su microscopio - mira esta muestra - puso un pequeño envase.

_¿Qué es? - Lisa observó.

_Es una muestra de mi esposa.

Lisa se alejó de inmediato, desconcertada y...un poquito asqueada. No era nada en contra de la señora.

_Que bonito - Lisa forzaba una sonrisa.

_No es para eso - reprochó, poniendo un nuevo envase - ahora mira este otro, también es una muestra de mi esposa.

_Señor, yo...prefiero evitarlo.

_¡Que mires! - se cruzó de brazos.

Lisa suspiró, se acercó resignada y observó por el microscopio. Lo que observó la dejó sorprendida, eran pequeños espermatozoides femeninos nadando.

_¿Como lo hizo? - giró a verlo.

_Usé los datos de tu muestra. Traté de imitar cada detalle y comportamiento de las células, pero no funcionaba. Mi esposa al ser de laboratorio, hizo más que yo y probó en ella varios pequeños experimentos. Es un proceso complicado y tarda como un mes en desarrollarse.

_¿Qué mi mamá hizo que? - Jennie preguntó incrédula y molesta.

_Solo fueron dos inyecciones por semana - respondió el mayor, desviando la mirada.

_¡Papá!

_¡Ella no me dijo nada! - explicó nervioso - me vió tan frustrado que...tomó todos mis documentos y ella hizo investigaciones sin decirme, hasta ayer, que me contó que había funcionado.

_¿Y no tiene alguna secuela? - la castaña estaba preocupada.

_Le salió como una especie de bigote en la espalda, pero tranquila, se afeita. Ya pasaron dos meses de eso y está bien.

_¿Y funciona? - preguntó Lisa, desconcertada.

_Aún no lo sé - respondió con frustración - tendría que probarlo en alguien. Si funciona, tendríamos que cuidar que los nueve meses sean un embarazo normal y que nazca sano. ¿Quién querría hacerlo?

_Puede haber voluntarios - opinó Jennie - si ofrecen una buena cantidad de dinero, quizá alguien acepte, una de que las que están buscando algún donante.

_Eso lo soluciono después, pero este es un gran paso - el señor Kim estaba emocionado - es...increíble. Mi esposa lo logró. ¿Se dan cuenta de lo que hicimos? ¡Y todo a mi nueva favorita! - atrajo a un abrazo algo brusco a Lisa, casi dejándola sin aire.

_Papá, soy hija única y aún seguimos en citas - aclaró Jennie, cruzándose de brazos.

_¿Aún? - el mayor se separó de Lisa, ella recuperaba el aire finalmente - pero ya son como cinco meses, ¿No?

_Estamos yendo con calma...- respondió Lisa - y no pasaron cinco meses - pronunció confundida - apenas llevamos uno - giró a ver a Jennie - ¿Verdad?

_No, ya pasaron cinco meses.

_¡¿Cinco meses?! - preguntó asustada - p-pero...¡¿Tan rápido?!

_¿Has estado trabajando mucho? - preguntó el mayor, Lisa asentía, pensativa - cuando se trabaja demasiado, puedes tener una distorsión del tiempo. Incluso cuando llegues a casa a comer, no te percatas de nada. Me ha pasado muchas veces y es realmente increíble lo que puede hacer. ¿Qué día estamos?

Lisa se mostró confundida.

_¿Miércoles?

_Y si es miércoles, ¿Qué haces aquí y no estás en tu taller? - volvió a preguntar el mayor.

_Entonces estamos domingo - se sorprendió.

_¿En serio esto pasa? - preguntó Jennie.

_Aunque no lo creas - respondió su padre, divertido - una vez tu madre se olvidó de nuestro aniversario. Bueno, no se olvidó, pero no sabía que era ese día. Incluso me mostró la lista que había hecho para nuestro aniversario, había comprado muchas cosas y planeado una cita perfecta, pero pensaba que aún faltaban dos meses.

_Voy a tener regalos de emergencia por si eso me ocurre - pronunció Lisa.

***

Nia miraba por el borde de la cortina a todos esos periodistas, esperaba que todos se vayan y la noticia deje de ser interesante en solo unos días. Ella es muy tímida con las personas, le incomodaba mucho que la graben o tomen fotos sin que ella estuviera de acuerdo. Pero siempre debe haber un idiota que cree que la inseguridad de alguien es una exageración y le toma foto.

Una vez Lisa se peleó contra otra chica por eso, le tomó una foto directamente a Nia en la calle y se defendía con la excusa de que estaban en un lugar público y podía hacer lo que quiera.

Lisa le tomó la palabra, hizo lo que quería.

Le reventó la boca.

Pasó un día en la carcel pero valió la pena. ¿Pero no que uno podía hacer lo que quisiera en un lugar público? Quién los entiende.

Nia seguía esperando a que se vayan, pero al ver que muchos ya recibían su pedido de comida en motocicletas, supo que estarían todo el día allí. Estaba resignada a no salir de casa, cuando las sirenas de patrullas se escucharon fuertemente. Se sorprendió al ver a cinco patrullas detenerse frente a su departamento y de ellos bajaron varios oficiales. Parecían interrogar a los periodistas, pero no sirvió de mucho solo mostrar su carnet y documentos, a los segundos los periodistas se estaban retirando.

Un auto conocido para ella se estacionó frente a su casa al mismo tiempo que ya todos se iban. Lee bajó de este y conversó por un momento con el líder. Este la abrazó y dejó un beso en su frente, revolviendo su cabello con diversión. El oficial levantó la mirada y Nia por un momento se sintió nerviosa y confundida cuando él la saludó con la mano en alto antes de irse.

Lee se apoyó en su auto y llamó desde su celular, Nia recibió la llamada y respondió.

_¿Tú trajiste a los policías?

_Sí - Lee sonría - mi padre me ama mucho y haría lo que fuera por su pequeña.

_¿Tu padre es policía? - preguntó asombrada.

_No, es militar - ambas se veían a la distancia - el que me abrazó es mi hermano, es comandante. Mencioné a mi padre porque él fue quien convenció al resto de traer cinco patrullas para implementar el miedo.

_¿Cómo te enteraste de esto? - preguntó dejando de lado la reciente información.

_Me llamaste en la mañana. Perdón por no responder pero es que estaba atendiendo a vecinito que su madre había traído por una fiebre. Había dejado mi celular en mi habitación. Y cuando ví la noticia corta en un canal de televisión, supuse que querías que te acompañe, así que vine directamente en lugar de volver a llamar - sonreía - sí, usé eso como una pequeña excusa para venir, lo confieso.

_Yo...no te llamé - respondió Nia.

_¿Qué? - se mostró confundida - tengo muchas llamadas perdidas tuyas.

Nia giró a ver a Jung, él estaba sentado en el tapete armando un juguete de grandes legos.

_Yo dejé mi celular en la cama y salí a comprar el pan aquí al frente mientras Jung dormía, pero cuando volví corriendo por todo esto, él estaba sentado con mi celular.

_¿Tu hijo me llamó?

Ahora entendía porqué había recibido un mensaje que decía "ejejjdjd"

_Habrá visto tu foto en los contactos y sabes que le agradas bastante.

_Genial - asentía, felíz por aquella información - ¿Me dejas pasar?

_Está bien - también sonrió - pero vé a comprar el pan.

_Voy corriendo.

Y efectivamente, salió corriendo.

***

Lisa veía incrédula a la pediatra salir del departamento de Nia. Se mostró confundida cuando ella también subió a su camioneta y se sentó de los más tranquila, sonriente. Jennie también la miraba confundida, no sentía alguna vergüenza estar con todo el cuerpo girado y estar viéndola. Lee comenzaba a ponerse incómoda.

_¿Qué pasa? - preguntó Nia, ella ponía el cinturón de seguridad a Jung, su asiento pequeño estaba en medio. Lisa había comprado dos asientos de seguridad para sus dos hijos.

_¿Qué hace ella aquí? - preguntó Lisa, sin comprender porqué la veía en todos lados. Literalmente se la encontró en el baño de su taller.

¿Cómo era posible eso?

_Me va a acompañar en los trámites - respondió - a Jung le agrada.

Lisa entrecerró los ojos.

_¿Están saliendo? - preguntó Jennie. Yel estaba durmiendo en su sillita cuna que estaba en medio de ambas.

_¿Qué? No, yo...ella - Nia estaba nerviosa - ¿No sé?

Lee bajó la mirada, sonriendo.

Lisa comenzó a conducir, ya tenía un buen control y ya estaba apta para manejar, menos para poder cargar cosas pesadas ni correr a una gran velocidad.

_Lee, nosotras no hemos hablado mucho de nuestras vidas - comentó Jennie, sentándose correctamente en su asiento. Lisa detuvo el auto y se inclinó, regañando con la mirada a Jennie mientras le ponía el cinturón de seguridad - gracias - sonrió nerviosa, Lisa volvió a avanzar - ¿pero cuántos años tienes?

_Tengo treinta - ambas chicas se sorprendieron, Nia ya lo sabía.

_Nia, ¿Tú no tenías veintidós? - preguntó Jennie, ella asintió - así que eres menor por...- comenzó a contar con los dedos - ocho años.

_Bueno...sé que es un poco...la diferencia pero - Lee no sabía qué decir.

_Esto parece un interrogatorio - pronunció Nia.

_Solo era curiosidad - Jennie no sabía qué pensar, Lee le caía bien, pero jamás dejaría que su hija salga con alguien ocho años mayor. Eso la dejaba pensativa - ¿y solo eres pediatra?

_No, tengo tres carreras. Medicina, ingeniera en mecatrónica y pediatra. También serví al país por unos años y al salir decidí quedarme como pediatra. En unos meses inauguro mi clínica, me va muy bien en mi profesión. Tengo mi propia casa con piscina, dos autos y empleados ¿Y ustedes?

_Arreglo llantas...- respondió Lisa seriamente.

_Cuidadora...de una bebé - respondió Jennie - lo sabes... - estaba algo avergonzada.

_Ow, pensé que...ya tenías una carrera...- respondió incómoda - pero es por el momento, ¿No? Luego...saldrán adelante.

_Lee - llamó Nia, le hizo un gesto de silencio y ella asintió, cabizbaja.

***

_Bien - el mayor estaba estaba pensativo - ¿Están seguras de qué quieren arriesgarse? Puede no funcionar y el dolor de perder un hijo en el vientre, sería algo muy difícil de enfrentar.

Jisoo y Rosé se observaron, nerviosas pero seguras de querer arriesgarse. Su más grande sueño es tener un hijo, un hijo con el ADN de ambas.

_Estamos seguras - respondió Jisoo. Lisa le había contado hace unas horas antes de salir. Al hablarlo con Rosé, no tardaron en venir a casa de Jennie - es nuestro más grande sueño.

_Chicas - el señor Kim no sabía si aceptar, se veían muy nerviosas, pero también ilusionadas - esto no afectará nada en la persona que tenga el embarazo, sería un embarazo normal, pero si el bebé no se desarrolla...

_Lo enfrentaremos - respondió Rosé - pero queremos hacerlo.

El mayor suspiró, pensando seriamente. Observó la pantalla de su laptop a los lejos y vió toda la información que mostraba. Las posibilidades de que algo salga mal, son bajas, pero no imposible.

_Vuelvo a preguntar una última vez - pronunció el mayor - ¿Están seguras? - Jisoo y Rosé se tomaron la mano, asintiendo - está bien - suspiró - ¿Quién tendrá el embarazo?

_Yo...- respondió Jisoo.

El mayor se acercó a su caja metálica personal, sacó dos envases pequeños y se acercó a ella.

_Tú, Jisoo - le entregó un envase - me traes una muestra de...

_Ya lo sé - interrumpió Jisoo - Lisa me lo explicó antes - era algo vergonzoso para ellas.

_Y tú, Rosé - el mayor le entregó el otro envase a la rubia - también me traes una muestra, pero desde hoy, todos los días tienes que venir aquí para una revisión. Mi esposa y yo nos encargaremos de inyectarte el líquido experimental por un mes entero.

_¿Y algún consejo de qué debe comer o no? - preguntó Jisoo.

_No, puede comer todo con normalidad, no se le impide nada, solo que estimules mucho a tu novia, todos los días. Tengan mucho sexo ese mes, las hormonal debe estar elevados.

Ambas desviaron la mirada, sonrojadas y asintiendo.

_¿Y hay alguna secuela o algo parecido? - preguntó Rosé.

_Un bigote en la espalda baja, pero lo puedes afeitar - sonrió tranquilo.

Ambas mujeres cruzaron miradas. Bueno, era un pequeño sacrificio para tener un bebé de ambas.

***

_Felicidades - la joven mujer sonreía - ya es legalmente la madre de los dos niños.

Lisa sonrió emocionada al terminar de firmar. Se arrodilló frente al pequeño pelinegro y lo abrazó con alegría, sus ojos estaban cristalinos. Besó su mejilla de manera juguetona y Jung reía. Lisa se puso de pie y se acercó a Jennie, quien cargaba a Yel. La pequeña también rió por los besos eufóricos en su cabeza.

Jennie estaba felíz al verla así de emocionada, pero...¿Cuándo carajos le va a pedir ser su novia?

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