Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Venticinque

Luego de una larga mañana los cuatro chicos decidieron juntarse a comer, el exámen los dejó demasiado exautos y comer algo como pizza llenaría sus estómagos de felicidad.

El ultimo en llegar fue Sunghoon que tuvo un pequeño retraso con el autobus pero nada de que preocuparse.

–Al fin llegas, no quería tocar los violines solo. -dijo Jay, la pareja lo miró con cara de indignación y tuvo una patada por debajo de la mesa como venganza-. ¡Auch! ¿por qué fue eso?

–Por exagerado, apenas nos tomamos las manos y más encima te quejas. -le dijo el australiano-.

–¿Ya pidieron? -preguntó Sunghoon sentadose al lado de Jay quien aún se sobaba su pierna, cosa que le causó gracia al pelinegro-.

–Aún no, te estábamos esperando para no pedir algo que no te gustara. -dijo dulcemente Jake dedicandole una sonrisa-.

–Gracias -Sunghoon le devolvió la sonrisa-.

Youngbin no le gustó nada que su amigo y su novio se hayan quedado un rato dedicandose miradas, carraspeó llamando la atención de sus menores.

–Bueno, ¿qué vamos a pedir?

Mala excusa para disimular celos.

–Yo pensaba en una margarita. -dijo el pelirubio-.

–Agreguemos palitos de ajo. -dijo Sunghoon-.

–Tambien palitos de queso. -agregó Youngbin-.

–Está bien, agregaré una coca cola para todos también. Iré a pedir y vuelvo. -de eso el único omega presente en la mesa se retiró-.

Los temas eran triviales entre los tres, como les había ido en el exámen o que fue lo más dificil según ellos o que habían encontrado fuera de lugar. Youngbin olvidó el mal rato que pasó hace un rato y les siguió la corriente a sus amigos.

Pero por dentro sentía un retorcijón, ¿desde cuándo le desagrada esa cercanía con Sunghoon? ellos solamente eran amigos y su pareja nunca le había dado indicios de algún posible engaño, menos con él. Jake no era capaz de ser una cosa y él mismo lo sabía perfectamente, él era unico idiota cobarde de ahí, el que tenía miedo de que su novio lo dejara.

Después de esa fiesta Seon no le había vuelto a hablar como lo hacían antes, solamente cuando los llamaba o mensajeaba a todos en general por el tema del desfile, bien merecido se lo tenía.

Hizo sentir al beta como si él tuviera la culpa de todo cuando fue de los dos, agregandole que tenía que mentir para que el alfa no terminara su linda relación.

Youngbin quería que después del desfile todo volviera a la normalidad, o eso es lo que tenía en mente.

Felix estaba en el escritorio de su habitación terminando unos informes de la universidad desde la computadora para terminar los últimos ramos del semestre.

Lo que menos quería era tener trabajos atrasados y más estrés para su embarazo, fue lo que más le pidió el doctor en ese entonces.

Chan estaba en las mismas pero por su parte no adelantaba mucho porque le quería dedicar tiempo a su novio. Terminó su última tarea guardando su computadora terminando por acostarse en la cama que compartía con su omega. Felix no le ponía ni la más mínima atención al estar cien por ciento concentrado con sus trabajos a lo que bufó.

Channie quería atención pero no la tenía.

Como su omega seguía en sus asuntos decidió bajar a la cocina a preparar algo rápido para ambos. Sacó salsa de tomate, queso y nachos para preparar la mejor chatarra que se le ocurriría.

Primero puso una capa de nachos, luego una de queso y por último una de salsa. Continuó así hasta que hizo alrededor de pisos así.

Era algo asquerosamente delicioso. Pero nada que un alfa con gran apetito y un omega embarazado no podrían comer, estaba más que claro que se lo devorarían en unos minutos.

Espero unos quince minutos en el horno hasta que el queso se derritiera y sacó el recipiente del horno, seguido sacó dos vasos de bebida del refrigerador para dejar todo en una bandeja y subir a la habitación con esta en manos.

El Felix concentrado desapareció cuando sus fosas nasales sintió un olor que hicieron que su estómago rugiera, giró con la silla para ver de dónde venía y abrió la boca con asombro al ver a su novio con toda esa comida en sus manos.

Se le caía la baba por probar esa cosa, su cachorro igual quería probar eso que sus papá había hecho.

Corrió donde su novio para robarle un poco pero este le apartó dándole la espalda, Félix hizo un puchero poniendo ojitos llorosos.

–Channie~ cachorrito y yo tenemos hambre. -hizo un berrinche Felix y Chan solo negó con la cabeza riendo-.

–Primero apaga la computadora mientras yo busco una película. Si no, no habrán nachos ni para ti, ni para el cachorro. -Felix lo miró mal cruzándose de brazos haciendo un puchero-. Eso no me va a convencer. Has estado desde la mañana con tus trabajos y apenas tocaste el almuerzo por venir a terminar tus trabajos. Necesitas tener un descanso amor.

Él omega suspiró pesado dándole la razón a su novio, aunque quería terminar todo lo más pronto posible no había parado ni un segundo. Guardó su trabajo cerrando todo y verificando que no se hubiera perdido nada y cerró la computadora.

Chan puso una película de drama y le hizo un espacio a Felix para que estuviera cómodo mientras veían el televisor. Pasaron la película comiendo y dándose mimos hasta que acabó, como lo habían hecho los nachos.

–Que raro caso, pobre hijo. Los dos amantes se amaban pero eran primos, caso extraño lo que al pobre chico lo castigaron quedándose sin destinado. -comentó Chan-.

–¿Te imaginas que eso fuera un caso de la vida real? Debe sentirse horrible no tener un click con alguien -dijo el de pecas soltando un suspiro-.

–Si... pero por lo menos te tengo a ti y a nuestro cachorrito -el alfa atrajo a su novio a sus brazos estrujándolo en un abrazo con cuidado sacándole risas contagiosas al menor-.

Así continuaron su tarde melosa juntos.

Al día siguiente tuvieron la misma rutina ya que sería los dos últimos exámenes y así esperar unas semanas hasta tener sus tan esperados resultados.

Ese día decidieron que lo mejor era buscar algo con que quitar el estrés, y qué mejor yendo a patinar.

Los cuatro chicos entraron a la pista pagando su entrada y buscando patines de su talla. El guía ahí sería Sunghoon y con un poco de ayuda de Jake ya que el chico de lentes aprendió rápido en las clases que su amigo le dió.

–Bien, yo ayudaré a Jay, asegura que Youngbin no pierda ningún brazo. -bromeó el menor de todos-.

–No prometo nada~ -dijo el australiano y su novio le dió una mirada de indignación total que le hizo soltar una carcajada a su omega-. Es broma -le dió un tierno beso en la mejilla-. ¿Vamos?

Entre Jake y Sunghoon estuvieron ayudando a los dos mayores logrando que estos por lo menos pudieran tener equilibrio y ya moverse sin ayuda. Jugaron un rato dando vueltas alrededor de la pista.

Hubo un momento en donde Sunghoon se quizo lucir e hizo varias piruetas impresionando a sus amigos y a la gente. El triple Axel fue lo más emocionante sacando aplausos del público formado.

–Woah, Sunghoon-ah. Sabía que eras bueno pero nunca pensé que tanto. -halagó Youngbin-.

–Es porque nunca has ido a verme a alguna competencia. Deberías ir a la de ahora, serviría tu apoyo.

–Prometo ir de esta vez, te lo aseguro.

–Hoonie es muy limpio y elegante, cada cosa que hacía parecía como si estuviera pintando un lienzo. -dijo Jay orgulloso de su amigo-.

–Es verdad, Sunghoonie parecía un príncipe en la pista. -mencionó Jake haciendo que las mejillas del patinador se tiñan de rosado-.

"Alerta ahí, están haciendo ojo a nuestro omega" habló el lobo de Youngbin. Le encontraba la razón, no le estaba gustando la cercanía que tenían su novio y su amigo.

–Gracias chicos, prometo siempre ser el mejor.

–Iré al baño chicos, no tardo. -mencionó el de lentes saliendo del escenario-.

–Iré a comprar limonadas, esperen aquí.

Quedando solo Youngbin y Sunghoon el mayor le dedicó una mirada haciendo extrañar al menor.

–Hyung, ¿pasa algo?

–¿Crees que soy tonto? -puso pose firme-.

–¿Por qué? No entiendo a lo que se refiere. -ambos eran alfas así que por naturaleza nunca se dejarían pisotear, inmitó la pose de su amigo-.

–Esa cercanía que tienes con Jake. Es más de lo que deberías.

Sunghoon sabía a lo que iba, pero era absurdo. El australiano de por sí era una persona cómoda con todos sus cercanos, incluyéndolo a él. Era absurdo que solo le reclamara a él.

–No hallo problema en ello, Jake y yo somos nada más que amigos. No entiendo porqué solo me reclamas a mí sí él es así con todos.

–Deberías mantener distancia, no me gusta que estés cerca de él.

–¿Y quién eres para decirme eso? No lo haré solo porque un tercero como tú desconfía de su novio y amigo. Lo haré cuando Jake o yo lo queramos.

–Basta.

–¿Por qué me estás diciendo esto ahora? Siempre ha sido igual. Es raro que esté pasando luego de lo ocurrido en tu cumpleaños ¿Por qué ya no hablas con Seon hyung como lo hacían antes? ¿Ocurrió algo en la fiesta, nos estás ocultando algo?

Estaba apunto de golpear al menor hasta que sintió una mano tomar su muñeca, volteó a ver y vio que era su novio con el ceño fruncido esperando alguna respuesta.

–Y bien ¿me vas decir por qué estabas a punto de golpear a Sunghoon?

–Parece que se dejó llevar por sus celos y quiere que tome distancia contigo porque eres su novio. -acusó Sunghoon a lo que el castaño soltó bruscamente la mano de su novio y se puso frente a él-.

–¿Es broma no? Estás tratando de ponerme un pie encima.

–No Jake, yo-

–Tú nada. Que sea omega y el que seas mi novio no te da el derecho de decidir sobre mí. Yo no soy tuyo, soy completamente mío y de nadie más. Yo veo a quien le hablo y a quien no y que esté enfermo no significa que sea un débil, yo confié en ti cuando pasó lo de la fiesta así que tú haz lo mismo cuando soy así con mis amigos.

Después de eso hubo un silencio incómodo entre los tres, Youngbin prefirió irse antes porque no quería ocasionar más problemas, Jake solo suspiró pesado cerrando sus ojos. Sintió una mano en su hombro haciéndolo sobresaltar.

–Gracias por lo de hace un rato, es bueno que no te dejes pisotear. -dijo Sunghoon-.

–Es mejor así, no tenía derecho a tratarte así. -le dedicó una sonrisa leve a su amigo-.

–Perdón la demora, había mucha fila en el puesto. -dijo Jay al llegar, buscó con la mirada al mayor-. ¿Y Youngbin hyung?

–Tuvo problemas y se tuvo que ir -excusó rápidamente Sunghoon-.

–Ya veo. Tomen, una para cada uno. -entregó las limonadas a cada uno-.

–Gracias Jay-ah~ -agradeció Jake-.

Se mantuvieron un rato conversando olvidando lo que había pasado hace un rato. Extrañamente Jake le empezó a picar la garganta e inflamar esta, todo se volvió borroso y cayó a un lado.

–¡Jake Responde! Estoy aquí -Sunghoon empezó a dar varios golpecitos pero este no reaccionaba-. ¡Jake!

Olió el vaso y abrió los ojos estupefacto esperando que no fuera lo que creía.

–¿¡Qué le sucede Sunghoon!?

–¿Su limonada tenía jengibre?

–Si, si tenía. ¿Qué tiene? No entiendo.

–¡Jake es alérgico al jengibre!


Casi 2000 palabras y los dejé con suspenso.

Cuídense, lxs adoro. 💖

Nos leemos pronto~

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro