Aki despierta en cuanto la alarma comienza a sonar. Ella gruñó como protesta. No quería levantarse y prefería quedarse durmiendo más horas de lo que debería.

Debía ir a la cocina y preparar el desayuno para sus hermanos. Después de eso tenía que llevarlos a la escuela. En la tarde tenía trabajo. Odiaba su tiempo en la heladería y sobre todo a su supervisor (estaba segura que el no dejaba de mirarla mientras estaba distraída). Pero necesitaban el dinero, asique se levantó con protesta. Afuera hacía el acostumbrado frío que traía la temporada de otoño.

Va al baño y se lava la cara. Luego se viste con el uniforme escolar. Cuando sale al pasillo, es recibida por los ladridos de Pochita. Aki sonríe y se sorprende al mismo tiempo, normalmente el cachorro prefiere estar con su hermano menor.

Aki sabe que la persona favorita de Pochita en todo el mundo es su hermano Denji. Aún así, la adolescente de 17 años acaricia la cabeza del adorable cachorro. Luego procede a dejarle comida en el plato como siempre.

Prepara café, tostadas y algunos bocadillos. Se trata de un desayuno nada oriental, pero a ella le gusta. Sus hermanos odian el café y gobernante critican todo lo que ella cocina, pero a pesar de todo ese par siempre termina por disfrutar de lo que sea que cocine.

Aunque la lucha de Aki para que Power se coma sus verduras nunca termina. Aki no pensaba rendirse de todas formas y quizás antes de desear más horas de sueño termine pidiendo más paciencia con los hábitos alimenticios de su hermana menor. Por lo menos Denji está de su lado con eso.

Aki se frota las ojeras que parecen permanentes y pone el desayuno en la mesa. Luego camina hacia el pasillo de puertas.

-Denji- golpea la puerta de su hermano- Despierta, ya es hora de desayunar y tienes que ir a escuela.

En vez de salir de su cuarto, termina escuchándose un ruido de protesta. Aki le dará tiempo para que se prepare. Luego repite lo mismo con Power.

Sus hermanos salen de sus respectivas habitaciones 10 minutos después. Tenían el uniforme desarreglado y Aki gruñó.

-Desayunen y arreglesen la ropa, por favor. Hoy no quiero que el director me llame por ustedes.

Denji le hizo una mueca y Power la repitió.

-Si, si, como sea- dijeron.

Aki rodó los ojos y comenzó a desayunar. Estaba metida en sus pensamientos y no notó que Power estaba poniendo a su pequeño gato en la mesa y dándole pedazos del desayuno.

-Ya sabes las reglas- dijo Aki cuando se percato de lo que hacía su hermana- Nada de darle de comer al gato en la mesa. Mucho menos con el desayuno.

-Pero, Aki...

La mirada de Power era demasiado tierna y triste, pero Aki estaba firme. Había mucha inocencia, hasta que la chica renunció a su intento cuando acepto que no podía convencer a su hermana mayor de permitirle lo que quería.

-Eres aburrida, toooonnnntaaaaa.

Denji río.

-Si! Aki tooooonnnntaaaaa.

Sus hermanos empezaban a reírse y Aki sentía que perdería la paciencia con esos niños otra vez. Como cada mañana.

-Terminen con su juego de una vez o no cenaran hoy.
-Aki, te tomas las cosas muy en serio- dijo Denji.
-Si! No sabes divertirte! Eres aburrida.
-Perfecto- dijo Aki, mientras llevaba la taza de café a la cocina para lavarla- Hoy no cenan.
-No! Espera!- dijeron ellos- No lo decíamos de verdad.
-No me importa.
-Pero Aki!

Aki estaba de espaldas, pero sonrió.

-Si terminan su desayuno y terminan de prepararse para ir a la escuela lo reconsiderare.

Ese truco siempre funciona.