No es fácil... Seguir enamorados de alguien que no nos ama, desear ser tú, el que haga feliz a esa persona... Y el ver a la persona que amas siendo feliz al lado de otro que no eres tú, es un dolor que no se lo deseo ni al peor de mis enemigos. Yo me calme después de haber llorado por horas... E intentaba consolar a mi hermano, y no encontraba como hacer, ¡NADA LO CALMABA!; lo llevé a su cama y le dije que durmiera un poco, él no quería hacer otra cosa más que llorar por haber perdido a su amada Akane.

Yo tenía que ir a trabajar, porque apenas inicié ayer y no iba a faltar hoy, me lavé la cara me puse el delantal encima y me fui a trabajar... Preocupadísima porque había dejado a mí hermano solo en esas condiciones... Como nos haces falta mamá, Ryoga te necesita tanto en estos momentos – Pensaba.

Buenos días – Dije – Disculpen el retraso...

¡Menos mal llegaste Ryaga! – Dijo la abuela Cologne – Tenemos mucha clientela y la pobre Shampoo parece un pulpo haciendo muchas cosas a la vez.

¡Ya mismo me pongo a trabajar! – Dije y empecé.

Hoy el restaurante estaba abarrotado de gente, Shampoo y yo corríamos de aquí para allá llevando los pedidos a las mesas y entregando pedidos a domicilio, casi a la 1:00pm tuvimos un descanso, nos sentamos en el almacén donde guardan la comida, Shampoo me dio unos "Panes al vapor" y nos pusimos a comer, ella noto algo en mi rostro que le llamó la atención así que me preguntó:

Ryaga... ¿Estuviste llorando?

Me sonrojo un poco – Pues... ¡Pues si!, ¿Se me nota mucho?

Solo un poco Ryaga – Dijo – Cuéntame... ¿Qué te aflige?

Le desvié la mirada, puesto que se me volvieron a aguar los ojos y no me gusta que me vean llorar, es algo que detesto mucho, pero... No la iba a dejar con la palabra en la boca así que le respondí:

Él amor de mi vida... Se... Se casó con la chica de la cual se enamoró mi hermano – Contesté entre sollozos.

¡Cielos! – Exclamó Shampoo – O sea sus amores se casaron.

Si... Hace ya 3 días – Le contaba – Pero ¡YA!, no hablemos más del tema por favor...

Está bien – Contestó – Si tú lo dices.

Shampoo, es mejor que me vaya a casa, no sé qué pueda estar haciendo mi hermano en estos momentos en la condición que se encuentra – Le contaba – No quiero que cometa una locura.

Ve tranquila – Dijo poniéndome la mano sobre el hombro – Yo hablaré con mi abuelita, tampoco vengas mañana, cualquier cosa que pase con tu hermano nos avisas por favor.

¡Gracias Shampoo! – Le di un abrazo y salí de volada para la casa.

Al llegar a la casa, me desespere un poco más de lo que ya estaba – ¿Ryoga?, ¡RYOGA DONDE ESTÁS! – Gritaba. Mi hermano había salido en un estado muy crítico, quien sabe a donde pudo haberse ido... Tengo un mal presentimiento en todo esto, estoy segura de que quiere volver a Japón a darle una buena paliza a Ranma... Pero... Así lo que va a conseguir es que le dé algo, no me perdonaré si algo le pasa a mi hermano. Regresé al restaurante y Shampoo intentaba calmarme:

¡Mi hermano Shampoo! – Dije desesperada – No sabes de lo que es capaz, además... No... ¡No! – Me pongo a llorar de nuevo.

¡Tranquilízate Rya! – Dijo Shampoo sacudiéndome un poco – Te ayudaremos a encontrarlo... ¡Es más!, ¡Vayámonos ya!

. . .

Serena: ¡Ryoga está en peligro! – Dijo tocándose el pecho – ¡No hay duda!, algo le pasa a Ryoga.

. . .

Ryoga-kuh: Voy de regreso a Japón a ponerle fin a esto, ¡YA NO AGUANTO MÁS!, me voy de regreso a Japón para empezar de una vez con mi venganza, he entrenado mucho y es justo que ya le dé una buena paliza a Ranma. Soy un desconsiderado por irme sin avisarle a mi hermana, pero es que si le digo no me dejara siquiera que salga a la puerta... Además no quiero arrastrarla a esto, ella se está adaptando aquí, ya tiene trabajo, y algunos amigos... No cometeré el mismo error dos veces, perdóname Ryaga pero... Esta vez tendré que separarme de ti.