Now I am - OLDCODEX

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Caminaba de regreso a casa, el invierno había caído junto con la noche, helándome las manos. No me gusta el frío, lo odio. Detesto tener tanta ropa encima, y ahora oculto mi nariz con mi bufanda color crema.

Paso frente de los cuartos comerciales, ignorando la bulla y la gente a mi alrededor. Solo unas cuantas cuadras más y llegaré a la estación de metro, detesto estar rodeado de tantas personas, detesto soportar fastidiosas voces, detesto...

Una chica vino corriendo hacia mi
Colocó la piedra que encontró en mi mano
Cuando desperté el reloj me mostró
Que me quedé atrás con un sorbo de café

— Toma —una suave voz me sacó de mis desvaríos para encontrarme a una chica casta, muy pequeña, tan delicada.

— ¿Qué se supone que es? —Mire la pequeña piedra lisa en mi palma cubierta con guantes. No era nada especial, solo eso, una simple piedra.

— Un regalo. —Dijo y me sonrío, cerrando sus ojos para marcar sus labios en una perfecta curva. Se giró y comenzó a caminar hasta perderse entre las personas arremolinadas esperando el tren.

Ella dijo, esto parece una joya
Entonces me pregunté, ¿dónde se fue el color de mi corazón?
La piedra mostró una la luz pura blanca
Derramó lágrimas, cayó en la paleta

Sentado dentro el vagón, me dedico a observar la piedra entre mis dedos y solo puedo recordar la sonrisa tan dulce de aquella chica de cabello corto.
¿Cuál será su nombre? ¿En dónde estudiará? ¿Por qué me regaló su joya? ¿Por qué... se fue?

Debí agradecerle, debí haber hecho algo más, debí seguirla y corresponderle como era debido... Soy tan patético.

Quieto y atascado sin un objetivo
Emprendo en la búsqueda de su ilusión
Todavía no puedo dar un paso adelante
Sin poder dar otro paso
Lo sé, yo era patético

El aire frío se cuela por mi chaqueta, acomodando nuevamente la bufanda en mi cuello. La piedra en el bolsillo de mi pantalón pesa, haciendo que tenga total consciencia de ella.
Aun no entiendo porque la guarde, es una jodida piedra, y aún así, las puntas de mis dedos la acarician como si pudiera transmitir el calor que le hace falta a mi cuerpo.

Pareciera que aquel regalo tuviera un mensaje oculto con un algoritmo secreto, del cual no sé como descifrarlo.

La sonrisa de la chica castaña aparece en mis recuerdo nuevamente, tan pura y honesta, ¿si quiera es real?
Ella es feliz, en algún momento yo también lo fui. ¿Hace cuánto fue eso? Ni siquiera lo recuerdo, fue hace tanto tiempo y tantas vivencias. La experiencia a veces tiene demasiadas cosas en contra.

Si esta brisa es la bendición del Señor
¿Cómo se reflejaría?
Tenía una sonrisa deslumbrante
cuando yo era un niño
ahora estoy viendo demasiadas cosas

Aquella piedra descansa en mi escritorio de estudio, la contemplo en vez de realizar los deberes escolares. Encima de cuadernos y hojas, me dedico a jugar con el guijarro entre mis dedos.
Bajo la luz de la lámpara parece cambiar de color y brilla. Otorga destellos plateados por el reflejo de la luz artificial.

El mensaje sigue sin llegar.

Ella dijo, esto parece una joya
Entonces me pregunté, ¿dónde se fue el color de mi corazón?
La piedra mostró una la luz pura blanca
Derramó lágrimas, cayó en la paleta

Mis ojos escozen y las lágrimas inconscientes nacen de ellos.

No puedo evitarlo.

Algo esta mal y no sé que es. Llevo las manos a la cabeza implorando por hacer retroceder a la migraña naciente del lado derecho de mi cabeza.

El mensaje ha llegado y el aire hace falta de mis pulmones.
El ataque de recuerdos me revuelve el estómago y quiero vomitar, pero el sabor metálico a sangre se abre paso a mi boca después de partirme el labio con los dientes al evitar gritar

Destruyo mi habitación al sacar la ira acumulada, ¿cómo pude olvidar parte importante de mi vida? ¿Cómo pude olvidarme de ella?

Quieto y atascado sin un objetivo
Emprendo en la búsqueda de su ilusión
Todavía no puedo dar un paso adelante
Sin poder dar otro paso
Tú sabes, yo estaba hecho de plástico

Mi vida término y otra comenzó en un atentado al distrito dónde vivía. Guerrillas ilegales se formaron sin que las autoridades se dieran cuenta y cuando lo hicieron fue demasiado tarde. Una bomba casera en un punto estratégico se llevo varias almas, y los que corrieron mejor suerte, tuvieron heridas muy feas.

Yo fui de los segundos.

Una viga de concreto cayó sobre mí, golpeándome el lado derecho de la cabeza. Tres días en coma y secuelas profundas en mi memoria, solo me dejaron mi información básica y el recuerdo de quien eran mis padres, de ahí, nada más.

Joya, al salir herido se pule
Joya, todo es diferente como nosotros
Tan brillante en el corazón, la piedra en el camino
Florecerá su brillo

El aire frío entraba por mía fosas quemándome la garganta.
Corría en dirección a su casa.

Rara... Rara-chan... Uraraka...

Solo podía pensar en regresar a ella, mis pies se movían solos, sin importarles que se incrustaran piedras causando heridas. Las plantas de mis pies están sangrantes, pero debo llegar antes que sea tarde.
Debo hacerle saber que ya recordé todo, a ella, lo que hicimos, lo que eramos... Lo que fuimos...

Solo quiero que sepas, que todavía te veo
A pesar de que te hice daño, mi joya

Las calles del distrito se vuelven cada vez más familiares, decenas de veces las recorrí para dejara a Uraraka en su casa, o cuando salíamos a pasear, o cuando simplemente nos acostábamos en la acera a contar estrellas...

Mis pies continúan fervientes en llegar a ese lugar, nuestro punto de encuentro y final de tantas salidas.

Corro y el aire frío quema mi garganta al respirar. La nariz ya no es suficiente y utilizo la boca. Aprieto los dientes cuando las lágrimas vuelven borroso mi camino, estoy cerca, lo sé y todavía no puedo parar.

Llego y caigo sobre mis rodillas. Ya no quiero ni puedo reprimirme más. Imploro su perdón hacia el cielo, esperando que ahora mi mensaje sea enviado.

Lloro por haber olvidado... Lloro por haber recordado.

Grito de dolor... Grito de frustración.

Ahora estoy enfocado en emprender en la búsqueda de mi voz
Ya no puedo alcanzarte, ya no puedo dar otro paso adelante
Usted sabe, yo estaba hecho de plástico
Lo sé, era patético

He llegado tarde y la he perdido.