Son las 11:00 de la noche y Katsuki se encuentra tirado en el sofá de su casa mirando el televisor. Hoy es la pelea del siglo en una famosa empresa de luchas de Estados Unidos, UUA, VVI, como sea que se llame, no le importa saber el nombre, esta ahí por las luchas.

Es una noche de chicos con diferencia de que... Bueno, es solo un chico el que hace la noche.

Compro bolsas enormes de papas, litros de bebidas con gas y golosinas, ahora solo faltaba lo esencial para completar la noche: PIZZA. Toma el teléfono para marcar a su establecimiento favorito de comida rápida.

— Buenas noches, Pizzería Dominó, ¿en qué podemos servirle? —La voz de una chica le contesto de manera agradable, haciendo que el rubio solo rodara los ojos con fastidio.

— Pizza familiar de carne con salchicha asada, champiñones, triple queso y orillas rellenas. —Dictó la orden con precisión.

— ¿Quisiera piña en su pedido? —La chica pregunto por cortesía, pero solo se ganó un dulce rechazo de su cliente.

— ¡La pizza no se hizo para llevar piña! ¡Qué asco! —Gritó Katsuki a la bocina, en donde la chica al otro lado tuvo que alejar el teléfono para que su tímpano no sufriera.

— Entiendo, sin piña. —Aclaro con desdén la recepcionista. —Enseguida pasaré su pedido, sería un total de 20 dólares y alrededor de 30 a 45 minutos se la estaríamos entregando. Qué pase buena noche.

La recepcionista le colgó el teléfono y Katsuki se quedo indignado al no tener tiempo de pedir sus sobres de crema extra. Deseo por todos los dioses que las mandaran o alguien regresaría con la pizza en su cabeza y sin un dólar.

La lucha había comenzado, presentando el programa que se llevaría a cabo junto con los luchadores que participarían, al ver a su favorito en pantalla, Katsuki comenzó a golpear las mesa y chillas como fangirl.

— ¡Pateales sus traseros, John Cena-sama!

Las luchas americanas estaban llenas de emoción, drama y gritos, gritos que por su puesto también daba Bakugou a la pantalla.
Solo había pasado media hora y tres bolsas de papas estaban abiertas y tiradas por doquier.

Estaban en la mitad de la emocionante pelea cuando el timbre suena, haciendo que un gruñido de frustración saliera de la garganta del rubio.

— ¡¿Quién carajos es?! —Reclamó Bakugou despegando su trasero del mueble para ir a abrir la puerta.

— Buenas noches, son 20 dólares.

Una chica bajita con uniforme y gorra de la pizzería estaba parada con una caja de pizza. Tenía ojos grandes y castaños, al igual que su cabello. Su voz se le hizo parecida a quien le tomó el pedido, así que debía ser ella la grosera que le colgó el teléfono.
Katsuki solo chasqueo la lengua y fue a buscar su billetera para sacar el dinero.

— ¿Trajiste crema extra? —Ni bien terminó de hacer la pregunta y sujetar la caja, cuando el dinero se le fue arrebatado de los dedos y la chica salio corriendo hasta su motoneta.

— ¡Disfruta la pizza, grosero! —Gritó la chica antes de arrancar su motoneta e irse a la máxima velocidad que poseía.

Una mirada extraña quedo en la cara de Bakugou y al abrir la tapa, se dio cuenta que todas las rebanadas tenían mordidas por doquier.

— ¡REGRESA AQUÍ, MALDITAAAA! —El grito de Katsuki resonó por toda la cuadra al igual que una risa cantarina de triunfo.

La preciada pizza fue arruinada y con ella, tal vez un poquito del corazón del rubio que ahora lloraba silenciosamente mirando como John Cena-sama perdía la lucha titular.

Era un jodido asco, sobre todo, porque la pizza traía piña.

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Ok, no sé que tal salió esto pero me gustó jsjsjs

Debo terminarlo... Este año... Tal vez :D