Seungmin estaba escuchando sus próximos horarios para sus próximas secciones de fotos, él trabajaba como modelo de productos cosméticos y gracias a su apariencia delicada y sensible era bastante conocido por ese medio.

- ...entonces nos vemos la próxima semana y si surge algo iré a visitarte.

- Claro, gracias Felix hyung - él era su mánager.

- De nada, vamos te llevó a la entrada - una vez lo ayudó a llegar a donde su chofer se despidieron y cada uno fue a su hogar.

Jeongin le había dicho que a las nueve su amigo iría, entonces ahora se encontraba cambiando para recibir a la visita, ya mandó a preparar la cena y solo esperaba a que Jeongin llegue.

Y no pasó mucho cuando escuchó la puerta principal ser abierta y después como alguien subía las escaleras seguido de eso su habitación siendo invadida por alguien y ese característico olor a vainilla de Jeongin inundó su habitación.

Podía reconocerlo por donde pasará, a él le gustaba usar en exceso aquella fragancia.

- ¿Jeongin eres tu verdad? - sonrió cuando el contrario lo afirmó- conozco tu colonia ya la distingo con facilidad.

- Eso es bueno así sabes quien es tu dueño - se acercó al castaño y lo levantó guiándolos por el pasillo y escaleras - mi amigo está aquí, es agradable espera a que lo conozcas te caerá bien.

°°°

Como era posible que tuvo que mentir diciendo que iría un poco tarde al trabajo porque un familiar tuvo una emergencia para pasarce a cenar a la casa del novio de Jeongin.

Cuando llegaron le sorprendió mucho el lugar no solo porque él jardín por donde pasaron era más grande que él parque de su barrio sino que la casa parecia un castillo.

- Es impresionante su mancion verdad.

- Jeongin realmente fuiste a lo grande - admiró cada detalle del lugar, incluso tenían un camino con faros para llegar al hogar.

Cuando abrió la puerta ( sin tocar obviamente) se sorprendió más, él pasillo tenía un acuario por paredes y al final de este había una gran sala, todo con tonalidades blancas y negras, las escaleras que iban al segundo piso eran decoradas por una alfombra gris peliduta.

- Esperame un momento iré a verlo - Lo dejó en aquel lugar tan grande sólo pero a los segundos una señora llegó para servirle algo de beber.

- Usted debe ser el amigo del joven Yang verdad - la señora se veía tan amable que rápidamente pudo tomar confianza.

- Sí, soy Minho, Lee Minho mucho gusto- hizo una reverencia.

- El gusto es mío- le sonrió- oh... de echo ahí vienen - señaló con su mirada al inicio de las escaleras - son muy lindos verdad.

Y lo volvió a ver nuevamente, realmente parecia un ángel bajando del cielo, literalmente, su cuerpo era envuelto por colores blancos, una camisa abierta los primeros botones, un short a la rodilla, su cintura marcándoce al borde de este.

Inconscientemente sonrió, volver a verlo parecía algo muy imposible, pero ahora tenerlo tan cerca hizo que su mirada quedé pérdida en él.

- Bajó con cuidado lindo - Jeongin tomó su mano y lo guió hasta donde estaba Minho - aquí.

En ese momento detuvieron sus pasos quedando ambos "desconocidos" a tan sólo un metro.

La luz blanca del lugar hizo que vea lo antes no pudo. Ahora veía sus piel tan blanca y sus mejillas hacían un contraste con él tenían un rosa impregnado en el, sus ojos ahora brillaban y se iluminaba en tranquilidad, sus labios mantenían ese color coral su cabello sutilmente desordenado, se veía hermosos de cerca y lo fue más cuando le sonrió.

- Hola, soy Seungmin mucho gusto - mostró aquella perfecta sonrisa blanca.

Perdido en aquella voz tan dulce que quería escucharla todos los días.

- Hyung - regaño disimuladamente Jeongin, sacándole de su nube - No te vas a presentar.

Era verdad se quedó perdido en aquel chico que hizo que su corazón de latidos exasperados que olvidó de presentarse.

- Lo siento, s-soy... Soy Lee Minho mucho gusto Seungmin- decir su nombre fue lo más bonito que mencionó en aquella noche.

Estiró su mano para que él contrario la tome pero olvidó aquel pequeño dato.

- Seung te esta ofreciendo la mano - menciono Jeongin susurandole al oido.

- Oh, perdona - mencionó apenado el menor, estiró su mano y está fue tomada por el contrario dejando un beso en esta.

Aquel toque, ese mismo que era tan desconocido hizo que su cuerpo se renueva ante el recuerdo, y aquel beso solo hizo que su sangre se congele.

- Error mío, soy imprudente - Minho estaba muy avergonzado, como había olvidado que no podía ver.

- No, esta bien, suele pasar - sonrió de igual forma - espero no te moleste que sea tan inoportuna la invitación, pero quería conocer a sus amigos - su tono alegre volvió a él- me contó que ahora estas desempleado lamento eso pero si puedo ayudar en algo puedes decirme, con gusto podría recomendarte en algún lugar - No lo dijo con mala intención, esperaba que no sé lo tomará a mal.

"DESEMPLEADO, como diablos se le ocurría mentir de esa forma, Jeongin sabia perfectamente que él trabajaba por las noches como recepcionista en un hotel"

- Ah-ah bueno...- miró a Jeongin para que le de una explicación- si me despidieron recién pero tranquilo ya mande mi carpeta a varios sitios - hablaría seriamente con su amigo después.

- Disculpen jóvenes la cena esta servida, pueden pasar, por favor- la señora que lo recibió volvió donde se encontraban dándoles la bienvenida a su banquete.

La mesa estaba sorprendentemente llena, con platillos nacionales como extranjeros, tomaron asiento Seungmin a la cabeza de la mesa, Jeongin a si derecha y Minho a su izquierda.

Durante toda la cena empezaron a charlar un poco, conociendo cada detalle del contrario, resultó que Seungmin era menor para él con dos años, la misma edad de Jeongin (22), pero lo que más le sorprendió fue como lograron coincidir en varios aspectos, desde sus gustos musicales, hasta países que les gustaría viajar.

Jeongin se mantuvo en silencio la mayor parte del tiempo, y al sentirme muy incomodo ahí, decidió salir del lugar dando una excusa de ir al baño.

- No me gustaría admitirlo pero, tengo más cosas en con un contigo que con Jeongin- mencionó el menor - Eres realmente divertido, me alegra que Innie tenga buenos amigos- mencionó con una sonrisa.

- Jeongin es aburrido, lo admito - soltó una carcajada - Es un anciano en el cuerpo de un joven, claramente soy mejor que él- soltó con diversión.

Durante toda la cena le fue inevitable no mirar al contrario, este siempre mantenía su mirada al frente pérdida en la nada y solo cuando se avergonzada bajaba la cabeza sonrojandoce en el proceso.

Les fue tan bien estando solos que olvidaron por completo a Jeongin que los miraba desde el umbral algo molesto.

- Sonará precipitado pero...me pasarías tu número - Minho no perdió la oportunidad de volver a ver al chico, así que sin recelo lo mencionó.

- Ah...claro, tienes en que anotar - mencionó el menor algo extrañado, nunca nadie había tomado tanta confianza tan rápidamente - Es **** suelo tardar un poco en responder pero...

- Ya es muy tarde Minho tiene que irse - Jeongin llegó a ellos con un semblante serio - Seungmin mañana tienes una sección deberías ir a descansar.

- Jeongin- habló con voz dura Minho viendo como este hacia su escenita de celos - No crees que Seungmin debería de decidir eso - Lo miro alzando una ceja.

- Innie tranquilo, aún es temprano - dijo de la forma más calmada tratando de transmitir lo mismo.

- Silencio Seungmin - Lo reto - debes irte Minho, ya llame a alguien para que te lleve - dicho eso mando a llamar a las encargadas de la limpieza, recogiendo toda la mesa en minutos.

Minho miró enojado al menor pero aún así desidio guardar la compostura.

- Lo lamento tengo que irme, descansa Seungmin- aún con la mirada retadora de Yang se atrevió a tomar su mano y dejar un beso en esta mirándolo a los ojos, viendo como este bajaba lentamente la cabeza sonrojado.

- Igualmente, adios - sonrió antes de escuchar como la puerta era cerrada.

°°°Jeongin - esta me las vas a pagar maldito, Seungmin es sólo mio°°°