Te vez muy lindo Seungminnie.

Aquellas palabras las guardo por mucho, se sentía bien decírselo.

El menor se congeló en su sitio, quedó sentado en el sofá con las manos en las rodillas, no lo regresó a ver pero sabía que lo escuchó.

- Seungmin, has echo un gran trabajo, te has visto precioso - se acercó, se sentó frente a él.

- ¿Q-que haces aquí?...tu eres "Lee Know",¿no?

Minho sujetó sus manos, las apretó con fuerza para que no las aleje.

- Esta era la única forma que tenía para acercarme hacia ti - Seungmin trató de alejar sus manos pero Minho se lo impidió.

- Por favor sueltame, no hagamos las cosas más difíciles - bajó la cabeza sintiendo un nudo en la garganta - Me estás lastimado con tus acciones y palabras, Minho no quiero esto.

El nombrado lo vio con pena, quería abrazarlo y decirle que todo está bien, que ellos están bien.

- Soy un tonto, te mentí y no me siento la mejor persona por hacerlo, creí que si lo ocultaba sería como si no ocurrió, al final no esperaba volverla a ver Min, estas enojado y triste por eso, porque esperabas algo mejor de mi y se que cometí un error, por eso quiero disculparme - sentía el aire no circular correctamente por su cuerpo, le asfixiaba la situación.

- Pensé que no te gustaban las mentiras por eso confíe en ti desde el principio - hizo un puchero inconscientemente- me dijiste que era una amiga y ahora... resulta que será la....- no pudo decirlo, era mucho, demasiado dolor para confesarlo en voz alta.

Ambos jóvenes suspiraron, Minho acarició sus manos con los pulgares, su piel siendo suave y lisa, tan lindas que quería que lleven algo de su pertenencia, quería tomarlas para siempre, que todos vean que aquellas manos eran dueñas de todo su ser.

- Ella es la madre de mi hijo...- habló Minho con timidez - Ella portada a mi primogénito... pero no estaré con ella, se lo dije - Seungmin alzó la cabeza en su dirección, tenía los ojos aguados - su padre casi me mata, pero es la verdad no estaré con alguien a quien no amo, nadie me va a obligar a casarme solo por mi irresponsabilidad, que sea un despistado y descuidado no me obliga a hacer lo que otros quieren - una de las manos que tenía la llevó serca de su rostro, le besó el dorso y la llevó a su mejilla, esta daba un toque suave a su piel, también desprendía una suave fragancia, todo de él le gustaba - te amo y por eso me negaré a todo lo otros me impongan, al único que quiero tener en mi vida es a ti, quiero que seas el chico que amanece a mi lado y el que vea cuando duerma, quiero protegerte el día y la noche de lo bueno y lo malo, y si soy tan tonto lo haré incluso de mi.

Dejó otro beso en su mano, acunó esta en su mejilla para descansar en ella.

Seungmin se quedó en silencio, no le era tan fácil confiar en sus palabras pero sabía razonar.

El también lo quería, también quería sentir su calor y su perfume que inunde su habitación, que sus manos nunca se separen y que sus vidas caminen juntas hasta el final.

- No se que decir - sonrió nervioso - Me gustas Minho pero no sé si pueda estar tranquilo sabiendo que tienen un hijo con ella, estoy asustado, tengo miedo de que lo hagas nuevamente y...

- No amor, Minnie soy un tonto pero se cual es mi límite y ya lo crucé, se sintió muy feo no ser partícipe de tu día a día, sentí como era destrozado por no poder estar a tu lado, entendí que lo único que me hace feliz es estar a tu lado, quiero ser tus ojos y guiarte por el mundo, no volvería a escarmentarme de esa forma, no quiero perderte y no haré nada tonto para hacerlo, no eres TÚ lo que quiero, eres lo que necesito.

Se acercó con cuidado y dejó un corto beso en su mejilla, algo muy tierno pero emotivo. Dejó sus sentimientos expuestos, Seungmin tenía el control de su corazón, podía destrozarlo o podía acogerlo.

- ¿Realmente me amas tanto como dices?, ¿todo lo que dices realmente lo sientes?, se sincero Minho, no quiero más mentiras, con el tiempo lo descubrire si no es así, ahorrame más dolor.

- Claro que te amo, caí a tus pies desde el momento que te vi.

Seungmin analizó su palabras con cuidado cada una de ellas, buscaba la falsedad pero sólo encontró ese lado amoroso de Minho.

- Quiero creerte, harás las cosas bien, confío en ti, lamentablemente soy débil ante tus encantos, aún así dame tiempo dejemos que las cosas fluyan, no presionemos esto, si me quieres tanto como dices entonces esperame hasta que este completamente seguro de que te puedo aceptar con todo.

Minho sonrió, eso era bueno, y claro que lo amaba, lo esperará la hasta el final del mundo si lo deseaba.

- No desperdiciare esto, para que compruebes que mis palabras son reales, te llevaré una rosa todos los días y si algún día falló será que me rendí. Te contaré de mi día y como haré las cosas, se que me espera una gran responsabilidad y prometo ser un buen padre y un gran enamorado tuyo, te daré el lugar que mereces Seungmin.

Seungmin asintió con una media sonrisa, tenía miedo que por estar con él descuide a su hijo, pero si les daba a cada uno su lugar en su vida para él estaba bien, ambos eran importantes y cada uno ocuparía lo suyo en la vida de Minho.

- Te esperaré Minho, también esperaré a que me ames tanto como yo lo hago...