⚽ Mediados de febrero ⚽

Lidia aparcó el coche donde el chico de seguridad le había dicho. Al cuello llevaba la acreditación que habían dejado en la entrada para ella. Se bajó respirando nerviosa y se animó a si misma. Sacó la maleta de su coche y cogió su cámara. Fue andando hacia la entrada del edificio de la Residencia de la Selección. Pasó cerca de un cartel donde ponía "Ciudad del fútbol de Las Rozas" y decidió grabar aquí su entrada para su primer video. Se situó con el nombre detrás y empezó a grabarse.

- Muy buenas tardes amores. Soy Primrose y hoy os traigo un video muy especial que iré subiendo poco a poco a mi canal de Youtube. Me han invitado a pasar un día con la selección española de fútbol y la verdad es que estoy súper-contenta y muy emocionada, porque ya sabéis que soy muy futbolera y me apetece un montón vivir esta experiencia. La verdad es que no tengo ni idea de lo que va a pasar ahí dentro, pero ya os lo iré contando. Tengo que darle las gracias a nuestro seleccionador nacional Luis Enrique, que fue quien me propuso venir aquí. Así que bueno, desearme suerte porque voy a pasar 24 horas con la selección y espero no ponerme muy nerviosa, bueno, más de lo que estoy. Que lo disfrutéis amores

Lidia apagó la cámara y la guardó. No pensaba estar todo el día grabando. Sobre todo porque el seleccionador le había dicho que una cámara de la selección grabaría también algunas escenas para que ella estuviera más tranquila. De lo que se trataba era de que Lidia disfrutara de la experiencia sin tener que estar todo el día pendiente de su cámara. Un miembro de la Federación la recibió en la puerta. Era el jefe de prensa de la Selección. Le explicó un poco donde estaba y lo que estaban haciendo los jugadores. Su maleta se la llevó un chico para subírsela a su habitación. En ese momento, Luis Enrique llegó y fue hasta ella para saludarla con dos besos y un afectuoso abrazo.

- Por fin nos conocemos en persona -le dijo él con mucha simpatía

- Pues si. No se puede imaginar lo que le agradezco que me haya invitado. Me hace muchísima ilusión vivir esta experiencia -le dijo Lidia entusiasmada

- No me hables de usted Lidia, que me haces parecer mayor. Anda vamos, tenemos ahora una pequeña reunión para presentarte a los chicos y que sepan que vas a estar por aquí...

Lidia acompaño a Luis Enrique hasta una sala que había al fondo de un pasillo. Estas instalaciones eran enormes y se respiraba futbol en cada rincón. Charlaron muy animadamente sobre otros temas. La hija mayor del seleccionador era una fiel seguidora de Lidia y fue ella la que le sugirió a su padre lo de hoy. Le prometió al seleccionador que si algún día iba a Barcelona quedaría con la chica para conocerla.

Entraron a una sala bastante grande. En la parte de delante había una tarima con una pantalla. Él le indicó que se sentara y mientras ella lo miraba todo muy curiosa, los jugadores fueron entrando minutos después preguntándose que hacía ella allí. Algunos la conocían porque veían sus videos o les sonaba de verla en la tele. Marco la vio y le mandó un beso que la hizo sonreír. Lucas le dijo guapa y Marcos, bueno cuando vio a Marcos casi se muere. Estaba guapísimo con el chandal azul oscuro de la selección. Resaltaba su pelo y sus enormes ojos azules. En cuanto la vio, le guiñó un ojo que la hizo sonrojarse. En cuanto todos estuvieron sentados, el seleccionador tomó la palabra. Lidia estaba nerviosa de tener a los jugadores delante, sobre todo porque no sabía si les haría gracia que estuviera con ellos.

- Hola chicos. Como veis tenemos visita. Para quien no la conocéis, ella es Lidia Ríos, más conocida como PrimRose. Es una conocida Youtuber e instagramer y la he invitado a pasar un día entero con nosotros. Espero que me la tratéis bien y que no se os vaya la olla. Sobre todo espero que colaboréis y que la hagáis sentir como si fuera un miembro más de la Selección. Lidia va a estar cerca de vosotros, y espero que la ayudéis en todo lo que necesite.

- ¿Te vas a quedar a dormir aquí? -le preguntó Marco levantando su mano. Lidia lo miró divertida

- Si, claro que me voy a quedar a dormir, pero no contigo que roncas -la respuesta de Lidia hizo reír al resto de los jugadores mientras otros la miraban extrañados de escucharla hablar así con Marco - no os extrañéis, es el novio de mi mejor amiga

- Uy, eso es una película -dijo Pedri en su inocencia

- Y "Campeones" una serie de dibujos -dijo Lidia sonriendo- muchas gracias por dejarme compartir un día con vosotros chicos. Os prometo que no voy a molestaros mucho con la cámara. No voy a estar todo el día grabando y si lo hago y no os apetece, me lo decís y la apago, sin problema. Yo lo que vengo aquí es a vivir la experiencia y a conoceros un poco más...

- Vivir la experiencia...esto no es Gran Hermano -le dijo Jordi Alba cruzando sus brazos

- Pues tú a veces te pareces a Jorge Javier Vázquez de la mala follá que tienes -le contestó Gerard Moreno haciendo que todos se rieran

- Bueno chicos. Lidia viene aquí a conoceros. No me decepcionéis y os comportéis como niñatos caprichosos. No olvidéis que su canal lo ve mucha gente y tenéis que dar buena imagen. A ver, dos voluntarios para enseñarle esto

De pronto, se alzaron muchas manos, haciendo sonreír a Lidia. El que no sonreía era Marcos de ver a sus compañeros mirarla embobados. Bueno, ¿y quien se lo podía reprochar cuando estaba tan preciosa?

- Llorente, Ferrán, id vosotros -les dijo Luis Enrique- pero antes tienes que ponerte el chándal de la selección Lidia

- Sin problema

Lidia se levantó de su asiento y al momento se acercaron a ella los jugadores para conocerla y presentarse. Lidia dio un montón de besos, pero sin duda el que más le gustó fue el de Marcos.

- Estas preciosa cariño - le dijo él muy bajito. Ella se separó y lo miró sonriente

- Bueno Llorente, creo que tienes que acompañarme a mi habitación para que me ponga el chándal y luego enseñarme todo esto

- Tenemos - le dijo Ferrán acercándose a ellos

- Es verdad. Lo había olvidado. Me alegro de conocerte Ferrán - el jugador del Barcelona se acercó a ella y le dio dos besos en la mejilla acariciando su cintura de camino. Gesto que no pasó desapercibido para Marcos y que le encendió la sangre. No había perdido detalle de las miradas de sus compañeros, algunos con curiosidad, otros con deseo y con descaro, mucho descaro.

Los tres anduvieron hacia los ascensores. Ferrán le iba explicando lo que había a su alrededor y ella sacó su cámara para grabar un poco. Lidia era todo sonrisas y escuchaba con mucha atención lo que le contaban los dos chicos. Cuando llegaron al pasillo donde estaban los ascensores, Lucas apareció en ese momento cuando estaban a punto de entrar.

- Ferrán. Te has dejado el móvil en el comedor y tú madre no para de llamar. Busca a Eric que lo tiene él - le dijo Marco mientras le guiñaba el ojo a Marcos.

Lidia y Marcos entraron en el ascensor y en cuanto las puertas se cerraron el rubio se abalanzó sobre ella besándola de una forma muy salvaje. La rubia puso sus manos en el cuello del chico para poder besarlo con más profundidad. Se devoraron con muchas ansías conscientes de que no tendrían ningún momento como este. Se separaron cuando las puertas se abrieron. Ella salió primero y Marcos la fue guiando hacia su habitación.

- Creo que le gustas a Ferrán, bueno, a él y a medio equipo - le dijo Marcos mientras andaban

- Me da igual. Yo solo tengo ojos para ti

Marcos la miró con una amplia sonrisa. Esa sonrisa hacia que su corazón latiera más deprisa. Porque la sonrisa de Marcos era lo más bonito que había visto en su vida. Llegaron hasta la habitación que ella tenia asignada. Lidia la abrió con su tarjeta y entraron los dos dentro. Se miraron a los ojos sabiendo perfectamente lo que querían. Marcos se acercó a ella y la alzó por sus caderas mientras besaba sus labios de una forma salvaje. La llevó hacia el baño y la sentó encima del lavabo. Marcos se bajó los pantalones llevándose de camino su ropa interior. Lidia se mordió el labio mientras miraba su grueso pene. Él la ayudó a quitarse su ropa y en cuanto la tuvo desnuda de cintura para abajo, se colocó entre sus piernas y la embistió con rapidez.

- Lidia, lo siento cariño pero tenemos que darnos prisa. Si alguien nos pilla...

- Pues no pares Marcos

Lidia se abrazo a su cuello reprimiendo los gemidos de placer de las embestidas de Marcos. Él iba rápido, no quería parar, porque estar dentro de ella era total y absolutamente increíble. Su balanceo de caseras y su ritmo constante los tenían a ambos enloquecidos y también el morbo de saber que podrían pillarlos en cualquier momento. Lidia sintió el cosquilleo del orgasmo más rápido de lo que pensaba y apretó sus piernas para que Marcos lo supiera. Él la besó tratándose sus jadeos y corriéndose él también. Lidia se dejó caer en su pecho totalmente exhausta. Miro a Marcos con los ojos brillantes y él volvió a besarla con más calma totalmente maravillado del momento tan increíble que acababan de vivir.

Para cuando Ferrán llamó a la puerta de la habitación, Lidia ya estaba con la equipación de la selección. El valenciano los miró algo sospechoso.

- ¿Te has cambiado de ropa con él delante? - le preguntó mirando a Lidia

- Ferrán, ¿a ti que te importa? -le contestó Marcos bastante fastidiado

- Bueno, es que...

- Ferrán - le dijo Lidia mientras salían de la habitación - Marcos es el hermano de mi mejor amiga. Y te puedo asegurar que no es la primera vez que me cambio de ropa delante de él. Para eso tenemos confianza. Así que venga, vamos, que tenéis que enseñarme todo esto

Marcos y Ferrán le enseñaron a Lidia todas las instalaciones de la Ciudad Del Fútbol. Era enorme y aunque no le iba a dar tiempo de verlo todo antes de la hora de comer, por lo menos las partes más importantes si las vería. El rubio estaba algo más relajado y ya toleraba algo, las bromas que le hacía Ferrán a Lidia. Eso si, el valenciano aprovechaba cualquier ocasión para decirle algún piropo a la rubia, algo que a ella la divertía. Grabó un par de veces, sobre todo con ellos hablándole. Entraron en el comedor y ella grabó un poco por aquí y por allí, sobre todo la zona del buffet y donde se sentaban los jugadores. Guardó su cámara y en cuanto vio a Marco se fue hacia él. Se agarró a su brazo y puso su cabeza en sus hombros.

- Te veo más relajada Ladybug... -le dijo él guiñándole un ojo. Lidia se sonrojó y le dio un suave golpe en su brazo- mira, ya tienes algo de lo que luego presumir con Mónica

- Ja, ja. Eres muy malillo Marco Asensio -Lidia le dio un beso a su amigo y fue a coger un plato para echarse algo de comer

- Yo también quiero un beso -le dijo Álvaro Morata poniéndose detrás de ellos

- Morata madura ¿quieres? -le dijo Marco visiblemente enfadado. Que Lidia fuera la atracción de algunos cabezas huecas de aquí, no le hacía ni puta gracia

Lidia reprimió una carcajada y lleno su plato de arroz integral con verdura. Se dió la vuelta para sentarse sin saber muy bien donde hacerlo. La mano de Marcos le indicó que fuera hacia allí. Se sentó teniendo enfrente a Marcos y a Pau Torres. A su derecha se sentó Morata el cual era todo sonrisas cuando lo hizo. También estaba cerca Jordi Alba el cual seguía con esa cara de perro cuando la miraba. Lidia sacó su cámara para grabarlos un poco, sobre todo la comida, la cual estaba buenísima. Estuvo unos 15 minutos más o menos y la apagó para poder comer tranquila.

- ¿Y a tu novio que le parece que vayas a dormir con tanto tío cerca? -le preguntó Jordi Alba mirándola con ironía

- Pues él no tiene ningún problema, pero vaya, si quieres, toma mi móvil y le preguntas tú. Así te quedas más tranquilo -Lidia sacó su móvil del bolsillo y se lo tendió al catalán. Él la miró confundido y lo rechazó con la mano

- No sabía que tuvieras novio - le pregunto Morata mirándola a los ojos con carita de niño bueno

- Serás el único, porque anda que no presumís en las redes sociales de "la maravillosa pareja" que sois - siguió diciendo Alba. Lidia cambió su semblante por otro más serio- pero bueno, ya saben lo que dicen: "dime de lo que presumes y te diré de lo que careces"

- Alba, a la niña la dejas -le dijo Marco desde el otro lado de la mesa viendo la cara que ponía Lidia y todos lo de su alrededor

- ¿Tú también Marco? -siguió diciendo el del Barcelona

- Si, yo también. Lidia es como si fuera mi hermana, y a mi hermana no se la toca, ¿te queda claro? ¿o te lo explico fuera? que ya me estoy hartando de las pullitas que le sueltas...

El catalán bajó la mirada avergonzado. Que delante de todos el capitán de la selección le llamara la atención, no era algo de lo que sentirse muy orgulloso. Se levantó de la mesa tremendamente enfadado echándole una mirada cargada de odio a Marco. Hubo un silencio en este lado de la mesa que duró algunos segundos.

- Bueno, y ahora después de comer, ¿Qué soléis hacer? -les preguntó Lidia para rebajar tensiones

- Pues o bien nos echamos la siesta, o jugamos a la play, leemos -le contestó Morata- descansamos hasta la merienda y luego a entrenar

- ¿Qué te apetece hacer? - le preguntó Pau todo dulzura

- Prefiero jugar a la play -contestó ella

- ¿Tú sabes jugar a la play? -le preguntó Morata

- Uy, que va -contestó Marco riéndose- no tiene ni puta idea de jugar, juega fatal...

Lidia miró a su amigo riéndose y siguió comiendo. Desvió su mirada y sus ojos se cruzaron con los de Marcos. Ambos se sonrieron y ella suspiró con fuerza. Para ser las primeras horas que pasaba aquí, tampoco iba tan mal, ¿no?

⚽ Más tarde ⚽

Habitación de Ferrán Torres

Lidia los había engañado a todos. Si que sabía jugar a la play, y bastante bien. Ya les había ganado a Ferrán, a Morata y a Pau. Estaba con ellos, con Marco y con Marcos en la habitación del valenciano.

- ¿Quién te ha enseñado a jugar así? -le preguntó Pau mientras se sentaba a su lado en la cama- juegas muy bien

- A ver, que soy youtuber y conozco a mucha gente -les respondió ella- pero también Marco y Mónica, ella si que juega bien, os daría una paliza a todos

- ¿Más todavía? -le respondió el valenciano- oye Lidia, ¿tú tienes hermanas?

- Pues si, tengo una hermana y muy guapa por cierto

- ¿Me la puedes presentar? Porque seguro que será igual de simpática que tú...

Lidia se lo estaba pasando realmente bien con ellos. Ahora era el turno de jugar de Marcos y ella no podía dejar de mirarlo disimuladamente. Morata se sentó al lado de ella mirándola algo embobado.

- Te pareces mucho a mi mujer -le dijo él casi susurrando

- ¿Ah, si? ¿Ella también es rubia?

- Si... pero tú eres muchísimo más guapa

Morata le puso la mano en el muslo mientras se lo decía. Lidia miró al delantero de la selección y sólo pudo pensar que o era tonto o no tenía vergüenza por hablar así de su mujer. La verdad es que no supo que decirle. Se levantó de la cama algo incómoda aportándole la mano por el camino.

- Voy a mi habitación a echarme un rato. Luego nos vemos en la merienda -les dijo saliendo por la puerta. Marcos la miró por el rabillo del ojo deseando salir también por esa puerta e irse con ella. Pero no quería que nadie se diera cuenta. Así que aguantó otro rato en la habitación, dispuesto a irse unos minutos después.

Marcos esperó unos segundos y salió de la habitación detrás de ella. Al  igual que hizo su cuñado Marco. 

- ¡Que fuerte! Aquí el café de la máquina es gratis - les dijo Lidia como el que hubiera descubierto América

- Siempre. Creí que lo sabías - le contestó Marco rodando sus ojos

- Pues no. ¿Dónde vais?

- A buscarte - le contestó Marcos - Te has ido de la habitación muy pronto

- Bueno si... es que... Da igual... ¿queréis que grabamos algo los tres juntos?

- ¿Cómo qué? Ya sabes que no me gusta mucho todo esto - le contestó Marcos

- Lo sé. Algo divertido. Te lo prometo

Lidia entrelazo sus brazos con los de Marcos y lo miró con esa sonrisa especial que sólo guardaba para él. Después de que la rubia cogiera su cámara de su habitación, decidieron ir a una de las salas de descanso y grabar allí.

A quien no le pasó por alto la complicidad de Marcos y Lidia, fue a Marta. Desde que le dijeron que la youtuber vendría, llevaba todo el día pendiente de ella. Estaba claro que había algo entre su ex y esa chica, algo que estaba dispuesta a averiguar para después poder usarlo en su beneficio.
Aún le dolía el rechazo de Marcos, y ella aún no había dicho la última palabra.