Narra Sao

Será un poco difícil juntar esta pareja, pero lo lograré como me llamo Sao the Killer. 😈

Sao: Ya conseguí lo que necesito, ahora solo necesito que se lo beban... (sonrisa de demonio 😈)

Entré a la oficina de Slender y vi que no estaba. Al parecer salió del despacho por algo porque su taza de café estaba caliente. Cogí el tubo con el líquido verde y lo eché en la taza. Lo removí con la cucharita que había y se disolvió por completo. No se notaba ni pizca de diferencia.

Escuché pasos, así que me escondí en el baño que había cerca y esperé. El que entró era Zalgo.

Narra la escritora

Zalgo se sentó en el sillón de Slender. Empezó a hojear unas hojas cuando notó la taza de té que olía exquisito.

Zalgo: Seguro que lo ha preparado Elsa por el olor. (lo coge y da un sorbo) No creo que Slender se enfade por esto...

Después de tomarse toda la taza, Slender entró con varios papeles.

Slender: Ya tengo los documentos faltantes... (los deja en la mesa) ¿¡Te has bebido mi café!?

Zalgo: No te preocupes, Slendy. Te puedo preparar más. (con un sonrojo inexplicable)

Slender: ¿Tú, el destroza cocina, Zalgo, preparando un café? ¡Si te cargaste mi cocina con solo preparar un sandwich para Sally! (enfadado)

Zalgo: No te enfades, Slendy. (voz cantarín)

Slender: ¡No me llames Slendy! (muy enfadado)

Zalgo: Seguiré haciéndolo, Slendy. (muy cerca de Slender)

Slender: ¡No te acerc-! (gritando)

Pero fue callado por un beso de Zalgo. El de trajes intentó apartarse, pero no tenía suficiente fuerza para apartar a Zalgo. El beso siguió y Slender siguió intentando apartarlo. Después de varios minutos de intentos, Slender cesó y se dejó llevar por el dulce sabor de los labios de Zalgo.

Narra Sao
¡Por fin lo logré! Valió la pena conseguir el afrodisiaco más potente de las manos de Ann... ¡Me costó 300 tabletas de chocolate! 😭😭😭 Pero me vale con que funcione. O sino, tendré que noquearlos para ponerles más afrodisiaco para que funcione mejor y dure más. 😈😈😈

Sao: Ahora les toca a los Proxy... (saltado de la ventana)