Capítulo Único
Yo hago lo que juro, quería el poder en mi mano y lo tenía de una manera más compleja, ahora que el poder que tenía ya no existe.
Recuerdo mucho de todo lo que ha pasado, salía de un restaurante y terminaba en un matorral, esperaba que hubiera un acto más, pero ella al final no miraría en semanas y prometería que fue caprichoso, disfrutaba más el control del acto.
Al instante estaba caminando por una casa sin saber lo que hacía o pensaba, nadie entendería el impulso de sentirse liberado por minutos, nadie sabrá de lo que eres capaz, el instante de estar en sus ojos marrones e impedir que hiciera algo.
Miré a la mujer sometida en mis ojos, en la situación era incompetente en su defensa personal, yo vivía con ella y sentía que alguien se escondía en su habitación.
La llegada de la muerte fue mil veces mejor quien dio su última oportunidad, fui quien agarro el instrumento y la llevé a las palmas de mis manos, chocaba en su cuerpo, la dominación parece ser el increíble método para satisfacerme.
Pasé horas y sintió la estadía de que al ser yo, alguien que no sobrevive a una vida precoz e inútil, pueda crear un nuevo fin a la vida, sin caer en un espiral de autodestrucción; fue quien me llevó al clímax.
Sus brazos tiemblan, sus piernas no reaccionan, no recordaba que fue por un día cuando ella lloraba y ocultaba sus lágrimas en su larga cabellera, no lo recordaban tan bien como el día que acepté lo que debía hacer, todo me empujo a esto, pero yo, simplemente yo, tomé esta decisión si la vida no correspondía.
Nadie escuchara en estas paredes su voz, si alguien pudiera oírla, será silenciada por sábanas y el miedo de que sea igual o peor que ayer, su camisa será un manto que no verá lo que le espera y sin mirar lo que es sentir un alma chocando con otra.
La muchacha se irá desnuda y amenazada por mi arma de fuego, ella esperará que todo sea igual que los días que ha estado conmigo, la profanación de varios días y que cada minuto valía una experiencia mucho más mejor, entendí que soy yo, decidiré cuanto más sea y si ella quiere irse, será hasta cuando mi ritual termine.
Si fuera como otro, podría decirle sobre la oscuridad, igualmente la oscuridad estará a mis espaldas y ella terminaría consumida, como sus padres, el vecino, la maestra o mi amiga serán consumidos sin prestar atención a sus actos.
Vivo dentro de ella, habrá una manera que pueda salir de esta prisión, tu crees que estás libre, pero no entenderás lo que sucede en la escuela, calle, ciudad, o tan siquiera en tu cama.
Miraré a ustedes y volverán a mirarme una, dos o más veces por negar que serás igual, tu mente no me eliminará, aunque cambies de ideas, política o pasatiempo que te den felicidad; me verás de nuevo con esa mirada que tanto inspira someter.
¿Por qué tan miedosa? Si soy como tú, tengo lo que tu tienes, nada puede detenerme para conseguir el control de una persona y tu sabrás lo que te hablo porque sucedería hoy o mañana, serás una involucrada del próximo crimen.
Recuerda la vez que yo acaricié tu piel y me viste a los ojos, mirabas que todo sucederá lo que nadie quería que pasará, ayer tenía toda tu voluntad a mi disposición, no me detuviste a tiempo cuando tu me miraste preparado.
Quieres ignorarme por todo este tiempo, siempre cubres tu rostro con tus manos, pero son mis manos y yo soy quien controla todo, no puedes escapar de mi humillación y terminarás consumida, por un largo rato que te hará familiarizar mi método.
Realmente diría que lo siento mucho, que entiendo tu dolor..., volvería a entenderlo si me dejas escapar, yo hago lo que juro y tu serás mi testigo.
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