Pov. Zeldris. ...............................

Ya era hora... todos estábamos en guardia para lo que sea que llegara... aún tenía ese mal presentimiento en mi cabeza, diciendome que algo horrible sucederá aquí y hoy, pero traté de ignorar esto, reprimirlo.
Sea lo que sea que venga, que venga hacia a mí para así poder acabar con su miseeable vida...
Todos los caballeros sacros estaban listos para el ataque, atentos a cualquier movimiento del suelo como el aire...
Estabamos preparados, listos, y atentos ante esto...

Bueno... mejor dicho...

Ellos lo estaban...

Todo el pueblo ya estaba en llamas, habían heridos y muertos, tanto como caballeros sacros a gente inocente...

Yo me había salvado porque salí volando con mis alas de demonio.
Maldita sea, este poder... ya sé quién es, pero... cómo demonios logró liberarse?
Si todos estabamos sellados en ese tiempo...

Fraudin...

En eso, Liz viene a mi cabeza, rápidamente salí volando hacia el pueblo, tenía que encontrarla, antes que ese maldito bastardo de Fraudin.
Ahora entiendo, ahora sé lo que éste hará.
Si encuentra a Liz, la matará y con la sangre de una diosa va a liberar a los 10 mandamientos.
Eso era lo que éste maldito está haciendo.
Pero si más no me equivoco, él no sabe que Liz está ahí, él cree que sacrificando vidas humanas va a poder liberar a los 10 mandamientos del sello que nos puso Meliodas...

Tengo que encontrar rápido a Liz...

Todo el lugar está en llamas, gente muerta, una destrucción de un pueblo inocente...
Lo demás... todo eso no me importaba ni me interesaba, yo sólo buscaba a Liz, tenía que encontrarla rápido y protegerla.
No quiero perderla, no puedo hacerlo, aún no, este no es el momento de hacerlo...

Quiero estar con ella...

Poco a poco empezó a llover, haciendo que el fuego se disminuyera algo rápido.
Eso debe de ser de ayuda por ahora para ellos.
Para mí, me da lo mismo...

Pov. Narrador.........................................

En alguna parte del pueblo, se encontraba Liz, buscando a Zeldris.
La chica de cabello corto corría y buscaba a su amado, mientras se empapaba por la lluvia.

Liz: Zeldris!
Zeldris dónde estás!?

Liz no dejaba de buscar al pelinegro, estaba preocupada por él, muy preocupada.

No muy lejos de ahí, estaba Fraudin con toda la sangre humana, para así liberar a los 10 mandamientos. Sin embargo, no funcionó para nada, cosa que él lo notó.

Fraudin: Porqué?
Porqué no funciona?
Tantas vidas sacrificadas, pero... el resultado sigue siendo el mismo...

No muy lejos, Fraudin escuchó algo en ese momento...

Liz: Zeldris!!!

Fraudin al escuchar esa voz, la reconoció de inmediato.

Fraudin: Pero claro...
Lo que necesito es.... sangre de una diosa.
Y aquí está una.

El demonio morado fue hacia Liz, para obtener lo que quería y cumplir su trabajo.

Zeldris seguía buscando a Liz sin parar, hasta que sintió una explosión cerca...

El pelinegro fue hacia la explosión, solo para ver la lluvia aún caer, y a su ser querido ahí...

Herida.... gravemente....

Zeldris: LIZ!!!

Pov. Zeldris. ......................................

Al ver a Liz así, fui rápidamente a ella.
Estaba gravemente herida, se veía muy mal.

Zeldris: Liz...

Liz me miró, me sonrió, y unas lágrimas salieron de sus ojos.

Liz: Viniste...
Zeldris: Liz... tranquila... vas a estar bien, no te preocupes.

No quería perderla, no puedo hacerlo!!!

Liz: Zeldris...

Miré a Liz... me acerqué aún más a ella para abrazarla...

Podía sentir su sonrisa, a pesar de cómo estaba.

La miré una vez más, ese bello rostro que me enamoró...

Liz: No llores...
Nos volveremos a ver.....

Liz me sonrió con lágrimas cayendo de sus ojos, yo la miraba con ojos casi llorosos, rogando que no se vaya...

En ese momento... solo recordé todos esos buenos tiempos que hemos tenido juntos durante este tiempo...

Jamás... Jamás voy a olvidar esos buenos tiempos...
Jamás voy a olvidar esos buenos momentos...
Jamás voy a olvidar... a la chica que me amó...
Jamás te voy a olvidar, Liz...

Te amo... te amo demasiado.

Abracé a Liz una vez más... ya sintiendo su cuerpo frío, mientras permaneciamos bajo la lluvia...

No sé cuánto tiempo pasó... pero me separé de ella, mirandola ahí.

Me fui para ir a buscar a Fraudin, el cual no se encontraba lejos.

De hecho, estaba justo casi en la escena...

Fraudin: Eh?! Zeldris!?
Pero Cómo!? Si ni siquiera he hecho la invocación.
Zeldris: Cierra la maldita boca...
Maldito demonio...

En ese momento, dejé que mi furia e ira me controlaran, empezando a causar grandes estragos, y acabando por completo la vida de Fraudin.

Estaba furioso, tanto, que cuasé el final de Britania...

Acabé con todo con una ira de explosión bastante grande, incluyendome con ella...

Desperté de golpe, sudando, con los ojos abiertos...

Qué?

Acaso.... si fue un sueño?...

Miré mis manos, me temblaban, me sentía caliente en ese momento...

Respiré profundo, calmandome poco a poco... y reflexionando todo lo que pasó en mi sueño...

Liz...

Ahora entiendo...

Ahora entiendo porqué Meliodas te amó, ahora entiendo su amor por ti Elizabeth...

En eso, sentí una presencia familiar...

Meliodas.... y...... Elizabeth ...

Fui y los miré desde no muy lejos...
Mirando a Meliodas con Elizabeth...
Miraba su sonrisa tierna, su ojo color azul, su cabello largo y plateado...

Solo sonreí, mirandola feliz y bien...

Amé a Liz.... amo a Elizabeth ahora...

Mi corazón.... ha dejado de ser de piedra.

The End.....