⚫4. Capturado⚫
Mei's POV.
Me quedo como una piedra. Literalmente, estoy plantada bajo el umbral de la puerta. Supongo que los recuerdos me paralizan y verlo empacar sus cosas frente a mí y el hecho de que yo no haga nada... Es una de ésas veces que de verdad quieres hacer algo pero ni siquiera puedes moverte. Me siento atrapada en el pasado.
—¿De verdad tiene que irse? —pregunto, sorprendiéndome de poder haberlo hecho.
El sensei se da la vuelta para mirarme con una expresión triste y desearía que no lo hubiera hecho, eso lo empeora.
—Confío en que Ninjago estará a salvo, sin mí.
—¿D-de qué habla?—se me quiebra la voz pero recupero la compostura—. ¿Cuánto tiempo se irá?
El sensei mira hacia la ventana y su vista se pierde ahí. Me gustaría poder saber qué es lo que ve allí, porque no hay más que el azul turquesa del cielo en la mañana.
—Eso es incierto —responde,mirándome nuevamente. Camina hacia donde estoy, con la bolsa de lino que contiene sus cosas—. Tengan cuidado, Mei. Estarán bien.
Frunzo el ceño y muerdo mi labio inferior.
—¿Sabe cuando las personas dicen "todo estará bien" sólo para hacer sentir mejor a los demás?
—Mei...
—¿No es una de ésas veces... o sí?
Me esfuerzo por verlo fijamente a los ojos porque la última vez que alguien se fue no tuve el valor suficiente para hacerlo. El sensei apoya una mano en mi hombro y esboza una sonrisa triste.
—Eres alguien fuerte, los demás necesitaran ésa fortaleza. No los dejes.
—Jamás —respondo, firme.
—Y Mei —se detiene antes de cruzar la puerta.
—¿Sí?
—No está mal que quienes te quieren se preocupen por ti. Sé que tras lo ocurrido te cuesta obtener fuerza, lo sé porque me pasó igual... —el sensei agacha la cabeza por un segundo, pero se reincorpora de inmediato—. Pero sé que hay cosas más importantes que el miedo. Los tengo a ustedes, tú nos tienes a nosotros. No olvides éso.
—Gracias, sensei —le digo, con una sonrisa.
Sin pensármelo le doy un abrazo, él se sorprende pero sonríe. El sensei ha sido parte de mi familia desde que tengo memoria y en momentos difíciles, cuando no tengo a mi padre cerca, me alegra poder contar con él en su lugar.
—Será mejor que me despida de los demás.
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—No se preocupe, sensei. Yo me encargaré —asegura Lloyd e incluso se endereza para parecer mayor.
Es curioso cuando hace eso y hasta endurece la voz, porque de verdad parece de la edad que debería tener, es algo irónico.
—Sé que si, Lloyd —el sensei Wu sonríe.
—T-tío, cuídate —le pide el rubio, volviendo a ser él.
—Cuídese, sensei —dice Cole, serio, detrás de él, junto con el resto de nosotros.
—¡Tráigame un recuerdo! —grita Jay, a lo que Nya le da un codazo.
—No seas tonto, va en una misión, no en vacaciones.
—Vaya con precaución —dice Zane y una sonrisa se asoma en su rostro de titanio.
—Sí, y no se preocupe. Nosotros nos encargaremos desde aquí —añade Kai, con determinación.
Ruedo los ojos. Kai siempre quiere ser el primero en vencer a los enemigos...
El sensei Wu baja por la rampa del navío y nos echa un último vistazo a todos. Yo también miro de un lado a otro. Somos toda una familia. Mi mirada y la de Cole se encuentran. Sonrío y él cambia su expresión seria por una media sonrisa.
—Seh... no duraremos ni una semana —dice Jay y ésta vez soy yo quien le da un codazo.
—¡Oye, no digas eso!
—Bueno, con Lloyd como líder... ¿Qué es lo peor que puede pasar? —dice Cole, cruzando los brazos.
Aún con el sensei alejándose a la distancia tengo la sensación de que estaremos bien. Todo estará de maravilla, siempre que permanezcamos unidos.
Lloyd's POV.
¿Alguna vez te ha pasado que pierdes algo y no lo encuentras por ningún lado? Buscas por todas partes, le preguntas a todo el mundo y caminas sobre tus propios pasos para recuperar lo que quieres. Bueno, así me siento ahora. Pero, aquí la excepción es que nadie más, aparte de mi tío, conoce algo sobre los prismas. Y no puedo volver sobre mis pasos porque sería inútil. Es como tratar de encontrar un unicornio en una ciudad; no puedes encontrar algo que no existe y además, si existiera, es el último lugar en el que estaría.
El único lugar al que se nos ocurre ir es a la biblioteca. Sin embargo, no encontramos nadita de nada. Es inútil. Zane busca en la base de datos de las computadoras, Mei, Cole y yo buscamos en los estantes, Jay sólo se queja y Kai... él está tumbado en un librero, cruzado de brazos.
Me quedo mirando la mesa con libros. A éste paso es probable que ni siquiera lleguemos a obtener algo. Me siento frustrado. Como líder se supone que sepa qué debemos hacer, pero lo cierto es que no lo sé. Tal vez debería actuar despreocupado, como si lo que está pasando en éstos momentos no fuese importante, pero ¿A quién engañaría?
Ellos saben que sí, lo es.
Lanzo un bufido exasperado al tiempo que tomo un libro del montón y me quedo mirando la cubierta. “Leyendas de Ninjago” dicen las letras doradas.
—Sabes que esto no es tu culpa, ¿Verdad?
Miro a Mei a los ojos y después regreso la vista al libro que sostengo en mis manos. Lo abro en ninguna página en particular y recorro las palabras con los ojos, fingiendo interés.
—¿Enserio? ¿De verdad? —pregunta, enarcando una ceja—. ¿Ésa es tu técnica para hacerme cambiar de tema?
—¿Eh? —la miro de reojo con una sonrisa tímida a través del pelo rubio que ha caído sobre mí ceja derecha.
—Conozco ésa cara, yo la inventé, ¿recuerdas? —la castaña se cruza de brazos, sonriente.
—¿Cuál? ¿Hablas de ésta? —hago una morisqueta, consiguiendo hacerla reír. Mi amiga pone los ojos en blanco y ésta vez soy yo quien se ríe.
—Lloyd.
—Mei.
—¿Y bien?
—Bueno… —tomo aire y en mi mente comienzo a formular cada mentira posible. Gracias a la Escuela Oscura para niños malos soy como un experto con eso. Pero, por alguna razón, ninguna de mis mentiras funciona con Mei—. No sé lo qué hago…
La chica se sienta a un lado mío con una sonrisa comprensiva.
—Descuida, para eso estamos aquí. Averiguaremos quién es ése sujeto y lo detendremos antes de que intente una locura.
Se pone de pie y continúa inspeccionando en los estantes. Mei es una de las pocas chicas que he conocido en mi vida. Bueno, iba a un internado al que sólo asistían niños. Las niñas para mí eran un completo misterio. Pero si sé que ella suele preocuparse por nosotros.
—Llevamos aquí toda la mañana… —se queja Jay, dejando caer su cabeza sobre uno de los libros que dejamos en la mesa—. ¿Enserio creen que encontremos algo?
—Claro, Jay —responde Cole, con una sonrisa burlona en la cara. Arqueo las cejas… ¿Qué están tramando?—. Lloyd está a cargo.
Ah, pues…
—¿A qué se refieren con eso?
—A nada… maestro suplente Lloyd —bromea Jay, comprendiendo a qué se refiere Cole. Incluso Mei, Kai y Zane se ríen.
—Ja-já que graciosos…
—Lloyd, es cierto que no hay nada en la base de datos de la biblioteca —dice Zane, volviendo a ponerse serio—. Ya divague por la red.
—Pff… divague… —musita Jay, conteniendo la risa. Pongo los ojos en blanco.
—¿Y ahora qué hacemos? —pregunta Cole, y todos me miran atentamente.
Es algo abrumador tener todas las miradas sobre mí, todos esperan que diga algo, pero honestamente no sé me ocurre nada.
—Ah… ¿Quieren que yo les diga? —les pregunto, en parte angustiado, por qué no sé qué hacer, y en parte emocionado, porque nunca están dispuestos a escucharme ni a hacer lo que les digo.
—Tú estás a cargo, enano —responde Kai.
Miro a mis amigos, como si en sus rostros pudiese hallar las respuestas que necesito. Mi mirada se detiene en Mei.
<<—¿Qué hago?>>
Ella parece leer mi expresión y se encoge de hombros, apenada. El siguiente a quien le pido rescate es a Cole. Él antes era el líder del grupo, tiene que saber cómo actuar en estos casos… ¿no?
Pero en lugar de darme consejo pone cara de tener hambre, a pesar de ser un fantasma.
Vaya. Siempre quise que me hicieran caso, que me siguieran como a un líder, pero… esto es diferente. Al parecer solo me siguen porque están igual de perdidos que yo.
—Quizá deberíamos preguntarle a la bibliotecaria —sugiero, un tanto dudoso de mi “plan improvisado”—. Quizás ella sepa algo que no viene en los libros o en la base de datos.
Estoy por sonreír, porque en realidad no es una mala idea, pero entonces veo las expresiones vacías de casi todos.
—¡Es una gran idea! —exclama Mei, para romper el silencio.
—Aún no revisamos en todos los libros —dice Zane—. Los libros de historia pueden dar datos entre capítulos no relacionados a los prismas.
—¡Argh! ¿Tenemos que leer todos? —sé queja Jay, en tono zombi.
—Podemos revisar entre todos mientras Lloyd pregunta —sugiere Cole.
—Como sea… —masculla Kai, aburrido.
Camino entre los estantes hacia el escritorio de la bibliotecaria, pero antes de llegar choco contra alguien, que deja caer unos libros.
--Lo lamento --le digo, agachándome para ayudarlo.
No quiero ser chismoso, pero por un segundo veo lo que estaba cargando ese sujeto. Es un folder que se abrió al caerse y en su interior hay un archivo de... ¡DEL PADRE DE MEI!
--¡Oye! --exclamo, pero el extraño agarra sus cosas y sale corriendo.
Mei's POV.
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(⊙_⊙) ¡Se me congelaron los dedos!❄
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Jay tenia razón. Esto es completamente aburrido. En cuanto abro uno de los tomos de la mesa me quedo abrumada al ver el tamaño de las letras y lo largos que parecen ser todos los capítulos. Ninguna persona, por mucho que ame leer, terminaría de leer estos libros en menos de un día. No, alguien podría.
Sacudo la cabeza y cierro el libro de golpe.
—Esto no va a funcionar —confieso, inclinándome hacia atrás, en la silla, con una mueca.
—Tienes razón —apostilla Cole, con la nariz entre las hojas y expresión de concentración.
—Quiero a Lloyd, pero a veces sus planes están algo... mal planeados.
Cole levanta la mirada del libro de ochocientas hojas que, al parecer, estaba leyendo, y me ve con ojo crítico. Es algo extraña su mirada, como si intentara leer entre líneas, cosa que no tiene sentido, porque no dije nada difícil de interpretar.
—¿Sus planes son malos o no te gusta seguir órdenes? —me pregunta en tono de broma, regresando a su lectura.
—Sí, no... bueno un poquito —me hago bolas yo sola.
Cole dibuja una sonrisa.
—Es grandioso que el sensei lo haya puesto a él a cargo —farfulla Kai, mientras se sienta en la mesa, específicamente entre Cole y yo.
—¿Por qué?¿Tu querías ser el líder? —pregunto, con una sonrisa socarrona. Kai me fulmina con la mirada.
—Tal vez Lloyd no sea tan buen líder —coincide Jay—. Pero al menos él no causó que ése sujeto se llevara los prismas.
Kai pone los ojos en blanco y se vuelve hacia el pelirrojo con una mirada como pistola.
—¿Qué quieres decir?
—Ya sabes. Tú lo seguiste, y lo perdiste —continúa Jay, sin tener idea de lo que ha iniciado.
—Hay,no empiecen con éso —les digo, poniéndome de pie para inrermediar las cosas.
—Tú estuviste de tapete casi toda la pelea —lo acusa Kai, sacudiendo el dedo índice frente a Jay.
—Pues Cole me empujo.
—¡Oigan, a mí no me metan!
Ay, genial. ¿Por qué se tarda tanto Lloyd?
—¡Tú... tú cabezón! —le grita Jay a Kai—. A puesto a que los animales usan tu cabeza de sombra.
—¿Ah, sí? ¡Ceja rebanada!
—Ya, cálmense los dos —les dice Cole mientras se interpone entre ellos.
—Silencio, ninja menos valioso —grita Jay.
Oh, no.
—¡Oh, ahora sí te pasaste! —exclama Cole mientras posee un libro y empieza a pegarles con él.
—Zane, ayuda —le pido.
Zane sujeta a Kai y yo a Jay, pero no sirve de mucho. ¡Genial! Es el posible Apocalipsis y empiezan a pelearse de la nada. Sabía que algo malo sucedía en la Isla de Chen pero no creí que eso nos afectara aquí también...
--Basta, seguro Lloyd vendrá y se va a enojar --les digo. Cole le pega más fuerte a Jay.
¿Dónde estás Lloyd?
En ese instante, Lloyd pasa corriendo del otro lado de la ventana, persiguiendo a un chico encapuchado.
--¡Lloyd nos necesita! --dice Zane mientras sale de la biblioteca. Cole deja el libro y vamos tras el nindroide.
Lloyd's POV.
El hombre sale de detrás de un grupo de personas y se aleja a toda prisa. Yo corro tras él. Sea quién sea este sujeto, es muy rápido. ¿Quién es? ¿Para qué quiere información sobre el padre de Mei?
No lo sé, pero lo averiguaré. Nadie se meterá con la familia Harrison bajo mi guardia.
Me detengo justo antes de cruzar la avenida. Al sujeto parece no importarle la cantidad de coches que atraviesan la calle, ni siquiera el tráiler que pasa fugazmente frente a mis ojos. El conductor presiona el claxon varias veces, tratando de advertirle, pero el extraño hace caso omiso. Salta la avenida, pasando centímetros frente a la gran mole y llega al otro extremo sano y salvo, para nuevamente continuar corriendo.
El tráiler frena, bloqueandome la vista. Corro hacia atrás para tomar impulso y después me deslizo sobre el asfalto con las piernas para pasar bajo el vehículo.
--¡Detente! --le grito, mientras lo sigo por las calles de la ciudad.
El sujeto no me hace caso y sigue corriendo. ¡Va a pasar el Mojo Dojo de Dareth! Casi parece que lo invoco, porque sale de su Dojo y se me queda viendo.
--¿Lloyd? ¿Eres t- ? --empieza a decir, pero el sujeto hace que se tropiece--. Pero que tipo.
Estoy por detenerme para ayudarlo pero me pide que continúe. Perfecto, ahora nada me detendrá para atrapar a ese extraño.
Jay's POV.
¡Uf! Cómo corre este nindroide. Me detengo un segundo a descansar. Creo... creo que ya no estoy tan en forma, je je.
--¿Jay? --me llama Kai volviéndose hacia mí.
--Estoy bien, sigan corriendo, yo los alcanzo luego... tal vez...
--¿Demasiada acción para ti, ceja partida? --se burla Cole.
Lanzo un gruñido y continúo corriendo. Ese cara de alcachofa me las va a pagar.
No comprendo. Tuve la suficiente resistencia para avanzar un kilómetro ayer, en la Isla de Chen. Ahora sólo hemos cruzado algunas cuadras y siento que mis pulmones se incendian. Tal vez sea eso, el esforzarme mucho ayer, toda mi energía debe haberse... agotado.
Seguimos corriendo hasta que vemos a Dareth, tirado en el piso. Todos nos detenemos para ayudarle.
--¿Qué haces en el suelo? --le pregunta Mei en voz baja.
--Ninjas, llegan tarde, Lloyd pasó corriendo detrás de un sujeto loco... ¿No es su amigo, verdad?
--Dareth, ni siquiera sabemos quién es --respondo.
--¿Hacia dónde se fueron? --le pregunta Mei.
--Creo... que por allá --contesta, señalando un callejón.
Oh, es genial,un callejón. ¿Cómo es que no lo supuse? En las películas los héroes son llevados a un callejón donde el villano les tiende una trampa. Es un clásico. Pero igual vamos hacia allá. Lloyd puede estar en peligro y con un ladrón suelto quién sabe qué pueda pasar.
¿En qué se habrá metido ese niño está vez?
Lloyd's POV.
Je je je, al fin lo tengo, éste es su callejón sin salida, no se me pude escapar. El encapuchado no se ve asustado, ni intimidado. Da un paso al frente y por primera vez puedo ver su cara. ¿Es mi imaginación o... donde debería estar su ojo derecho tiene un visor de titanio?
Se quita la capucha, su pelo anaranjado sale a relucir. Sonríe maliciosamente. Tres chicos aparecen detrás de él, dos chicos y una chica.
Uno de los chicos tiene la silueta de un jugador de fútbol americano. Ellos también tienen un visor. Pero eso no me sorprende demasiado, al menos no comparado con lo que descubro más tarde... esos cuatro sujetos... son Cyborg.
Zane's POV.
Cuando llegamos a donde debería estar Lloyd, en este callejón algo iluminado, no nos sorprende lo que encontramos, sino lo que no encontramos. Lloyd no está.
Mis parámetros de lógica apuntan a que es imposible que haya desaparecido. Nosotros bloqueábamos la única salida.
--¿Pixal? --la llamo.
--Lo único que encontré son rastros de un extraño polvo en el suelo.
Me inclino y recojo un poco con mi mano. Lo escaneo y detecto rastros de caolín, bentonita, silicato de magnesio, óxido y algunos componentes corrosivos. Ingredientes que se utilizan en la fabricación de bombas de hum...
--¡ARGH! --exclamo sacudiendo la mano.
--¿Qué pasa Zane? --me pregunta Mei, preocupada, mientras ella y los otros se acercan.
--No... siento mi mano...
--Claro que no, eso pasa cuando SE TE DUERME LA MANO --responde Jay como si fuera lo más obvio del mundo--. Un segundo... ¿De dónde sacaste ese polvo?
Jay se va a agachar para recoger el polvo.
--¡No! --lo detengo--. Te paraliza los miembros del cuerpo.
--Pfft. Ya lo sé, Zane --responde con acento de genio--. Cyrus Borg lo usa en su empresa. Ya deberían saberlo.
--Hm... --musito.
--¿En qué piensas Zane? --me pregunta Cole.
--Si Cyrus Borg fabrica este polvo... y en lugar de encontrar a Lloyd encontramos esto...
--¿Crees que Borg lo secuestró? --me pregunta Kai, pero antes de que pueda responder el genio Jay me detiene.
--¡Claro que no, Kai! ¿¡Por qué haría eso!?
--Supongo que debemos preguntarle --dice Cole--. Tal vez nuestro "amigo" no es quién aparenta ser...
Cole's POV.
Tenemos que arrastrar a Jay (literalmente) hasta la oficina de Cyrus Borg.
La última vez que estuvimos aquí el gran Tirano había corrompido todo el sistema y tuvimos que detenerlo. Así que digamos que no me causa mucha gracia venir aquí, supongo que a ninguno.
Tomamos el ascensor y Zane presiona el botón con un cien grabado en él. Las paredes de este ascensor están hechas de cristal, así que puedes ver a la gente de la planta baja convertirse en hormigas conforme sales disparado hacia arriba.
Estoy seguro de que el Cole de antes habría odiado ésta cosa, con el vértigo que tenía, ver las cosas alejarse no estaba precisamente en mi idea de diversión. Pero tengo que admitirlo ahora pienso que el ascensor es alucinante.
Ninguno habla durante el trayecto hacía arriba. Cada uno parece estar sumido en sus pensamientos.
Cuando las puertas de metal se abren con un chasquido descubrimos algo que nos hace levantar más sospechas. Borg no está.
Su computadora parece estar encendida, lo sé por el reflejo celeste de la pantalla en el gran cristal que cubre por completo la pared frente a nosotros.
Jay se acerca al escritorio y se sienta en la silla de ruedas de Borg como si estuviera en su casa.
—¿Qué haces? —le pregunto en un susurro alto, molesto.
—Les voy a demostrar que Borg es inocente.
—Oye todos sabemos que es tu héroe y eso, pero no lo descartemos tan rápido —aconseja Kai.
—Ya verán, gente de poca fe…
El pelirrojo toma el ratón y lo desliza por la superficie de cristal del escritorio, con una expresión seria en el rostro. Mei corre hasta donde está e intenta detenerlo.
—¡Ey, basta! Podrían arrestarte.
—Al menos cinco años de prisión, diría yo —comenta Zane, levantando el brazo como si fuera un estudiante pidiendo permiso para hablar.
—¿Ya ves? —insiste Mei, seria.
—Pff, todo estará bien, mamá…
—Ya, suelta eso… —masculla la oji azul, peleando con Jay para que deje en paz el ratón.
—Que no.
—¡Sí!
Mei da un tirón con el ratón en sus manos y la computadora se sacude ligeramente. Jay y ella se miran directamente con los ojos como platos. La chica levanta el ratón y con él un cable que se supone debería estar conectado al monitor…
—Oh, oh… —murmura Mei, apenada.
—Eh, fue culpa de Mei —nos dice Jay.
—Aunque es claro que Borg necesita un ratón vía Bluetooth —menciona Zane.
—Pues esto puede ser una lección para él… —digo, justo antes de que un audio empiece a transmitirse directo de la computadora.
—Esto también es culpa de Mei —se apresura a decir Jay, alzando los brazos. La castaña frunce el ceño.
Nos acercamos con ellos para ver que sucede en la computadora de Borg. Se ha abierto una ventana que ocupa casi por completo la pantalla y en ella corre un vídeo de una de las cámaras de seguridad de la compañía. La cinta parece tener lugar justo en la entrada y todo parece tranquilo hasta que alguien aparece. No, no es el ladrón de los prismas elementales, es un maestro elemental, uno que no nos dio tiempo de conocer muy bien en el torneo de los elementos.
—¿Bolobo? —pregunta Kai, asombrado.
El maestro de la naturaleza hace uso de su poder elemental. Crea una planta enredadera que trepa por la pared exterior del edificio y sacude la cámara de seguridad que graba toda la acción. La cámara cae. Bolobo la toma entre sus manos y se alcanza a grabar su rostro pálido, sin vida, antes de que él hombre la destroce con un puñetazo.
La pantalla se funde en negro y refleja nuestros rostros enmudecidos.
—¿P-por qué Bolobo parecía estar infectado con materia oscura? —pregunta Jay, alarmado.
—¿Y por qué atacaba a la cámara de seguridad de Industrias Borg? —añade Mei.
—Tal vez… quería que alguien más lo viera —murmura Kai.
Las puertas del ascensor se abren.
Levantamos la cabeza hacia la persona recién llegada, que se acerca hacia nosotros con cautela.
—No debieron ver eso…
⚫✳⚫✳⚫✳⚫✳⚫
Tan, tan taaaan! 😱
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