Nya es la tipo de novia que...

Te llevaría a un paseo en dragón...

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T/N miraba al imponente dragón de Nya con un nudo en el estómago. El enorme ser de agua la miraba con curiosidad, sus ojos brillando como si pudiera percibir su miedo. A pesar de lo majestuoso que era, T/N no podía evitar sentir un escalofrío. A su lado, Nya le daba una mirada comprensiva, sabiendo bien el temor que T/N sentía hacia las criaturas.

—Vamos, T/N —dijo Nya suavemente, tomando su mano—. No tienes que tener miedo. Mi dragón es muy dócil, lo prometo.

T/N suspiró, mordiéndose el labio. Sabía que Nya tenía razón y confiaba en ella más que en nadie, pero aún así, enfrentarse a esa criatura se sentía como un desafío gigante.

—Lo sé, Nya, pero... es tan grande. ¿Y si... no le caigo bien o si me caigo en pleno vuelo? —preguntó, tratando de ocultar el temblor en su voz.

Nya sonrió y apretó su mano, transmitiéndole tranquilidad.

—Eso no pasará. Él sabe cuánto te quiero y jamás te haría daño. ¿Sabes? También me daba miedo al principio, pero con el tiempo aprendí a confiar en él. Y quiero ayudarte a que sientas lo mismo.

Con esa seguridad, Nya guió a T/N hacia el dragón, quien bajó su cabeza hacia ellas, dejando que T/N tocara suavemente sus escamas.

—¿Ves? No muerde —dijo Nya con una sonrisa traviesa.

T/N rió nerviosa, extendiendo su mano para acariciar al dragón, sintiendo la textura fría y suave de sus escamas. Poco a poco, sus nervios comenzaron a relajarse.

—¿Te gustaría dar un paseo? —preguntó Nya, mirándola con ojos llenos de cariño—. Si quieres, yo estaré contigo en todo momento. Puedes confiar en mí.

T/N vaciló, pero al ver la sinceridad en los ojos de Nya, asintió lentamente.

—Está bien, lo intentaré. Solo... no me sueltes, ¿sí?

—Jamás te soltaría —respondió Nya con una sonrisa, ayudándola a subir al lomo del dragón.

Con cuidado, Nya se acomodó detrás de T/N, rodeándola con sus brazos para darle seguridad. El dragón, sintiendo que ambas estaban listas, comenzó a elevarse lentamente, batiendo sus alas con suavidad.

Al principio, T/N apretó los ojos, aferrándose con fuerza a los brazos de Nya mientras sentía cómo se elevaban en el aire. Pero, poco a poco, el viento en su rostro y la calidez de los brazos de Nya la hicieron relajarse. Abrió los ojos y miró el paisaje desde las alturas, maravillándose por la vista.

—¡Es... es increíble! —exclamó T/N, una mezcla de sorpresa y emoción en su voz.

—¿Ves? Te dije que no era tan malo —respondió Nya, riendo suavemente mientras ambas miraban el horizonte.

A medida que el dragón volaba, T/N comenzó a disfrutar del paseo. El miedo se fue disipando y fue reemplazado por una sensación de libertad. Sentirse segura con Nya a su lado hacía que el vuelo fuera aún más especial.

Después de un rato, Nya habló con ternura.

—Estoy muy orgullosa de ti, T/N. Enfrentaste tu miedo y ahora mira, estamos volando juntas.

T/N giró la cabeza y le dio una sonrisa agradecida.

—Gracias, Nya. No sé si podría haberlo hecho sin ti.

Nya le besó suavemente la mejilla, susurrándole al oído.

—Para eso estoy aquí. Y siempre estaré a tu lado, para enfrentar juntos cualquier miedo.

T/N se acurrucó contra Nya, disfrutando el momento y el hermoso vuelo sobre el dragón de su novia, sintiendo que nada podría ser más perfecto.