Narra Joseph:

Joseph: ¡Auch maldición! -Me cubrí el ojo, porque si habia dolido, solo esperaba que no apareciera un moretón mañana,si que ardía- Carajo Azael, no puedes golpearme la cara ¿Que no vez que atrae a las chicas?

Azael: Y una mierda -Volvió a levantar el puño, pero Robert le habia sostenido  de la cintura para calmarlo y que se detenga.

Cosa que no funcionó, solo enfureció más al ebrio, empezando a sacudirse para que lo suelte.Yo me froté un poco el ojo golpeado y voltee a ver al cantinero que se reia con la situación.

Joseph: Solo por eso ni crea que le daré propina -Señalé, no tenia idea si reveló mi truco a propósito, pero no me gustaba que se riera de mi, él se encogió de hombros, dejando una sonrisa en sus labios. Bufé y saqué mi billetera, sacando efectivo en la mesa- Por cierto, la puerta de su almacen se ve rota.

Ahora era yo quien me podía reir de la cara que puso, jaja, quizas sospeche, pero bien pudo ser cualquier otra persona que lo haya roto, nunca sabría que fui yo.

Robert: ¡No se vale morder!¡Oye, Azael!¡Auch, eso duele cabrón! -Voltee a verlos, un pequeño grupo de gente se habia parado a verlos, pareciendo divertida con la escena. Más porque parecía una pelea de niños, Azael estaba trepado al abdomen del rubio, mordiendole el hombro y las orejas. Mientras este intentaba quitarselo de encima, le desfavorecia ser alto y azael una pulga a comparación, pero que esté borracho puede influir en su perseverancia.

No me iba a meter, nop, para nada, no si iba a recibir una de esas mordidas que dejaban marca.

Joseph: Solo vamonos si, sostenlo -Suspiré, un poco agotado con la noche, aunque sonreí un poco satisfecho con los resultados.

No había salido perfecto, pero si que era mucho material para escribir al menos unos...¿Tres capítulos? Hay, se iba a reir tanto de Azael mañana. Las quejas de Robert no pararon mientras salían del lugar, captando algunas miradas más, pero nada más relevante.

Robert: Ayudame al menos, ya se esta durmiendo, pesa más así.

Joseph: ¿No puedes cargar a un palillo? -Abrí la puerta, dandole paso, porque Azael se había dormido en su espalda y lo cargaba lo mejor que podia con un brazo pasando por su cuello, arrastrando los pies, una vez afuera dejé que la brisa nocturna me soplara la cara y refrescara la mente...oh bueno, hiciera que mi cerebro esté más atontado por el cambio de temperatura- Fue una noche divertida.

Robert: Para ti -Se quejó, masajeandose el hombro y acomodando al pelinegro en las nubes, quien parecia no querer despertar, babeaba un poco el abrigo de Robert, pero no se lo mencionaria- No puedo creer que sea así cuando se embriaga, yo crei que era de los que caían dormidos al instante, no de los desorientados que se meten en problemas sin buscarlo.

Joseph: Vaya sorpresa verdad -Tarareé- Vamonos a su casa, ya es media noche -Me podría haber quedado más tiempo y quería quedarme más tiempo.

Pero temía que volvieran a intentar abusar de Azael, la próxima me asegurare que no este tan ebrio para que luego no diga que lo dejamos a su suerte. Podía sonar como un mal amigo o una mala persona, pero ciertamente no era una buena persona.

Para nada.

Al poco tiempo de caminar hacia la lejisima casa de Azael, el rubio oxigenado se había cansado de cargarlo, por lo que me molestó hasta que sediera a llevarlo ahora yo, me resistí un poco, pero noté como este apenas si podia caminar sin que las piernas le tiemblen, supuse que si seguía así, haría caer a Azael o quizas lo tire al suelo. Ninguno era bueno, no queria lidiar con su ira nuevamente.

Lo cargué a caballito en mi espalda, yo era más fuerte que Robert, tenía que serlo por los sucesos que me pasaron anteriormente, tener una barriga al aire solo dificultaba correr y huir de las personas que querían tu cabeza cortada en una bolsa para tirarla al rio. Además que a las damas les gustaba más un cuerpo trabajado, te daba mucha más resistencia y aumentaba su deseo carnal en ellas.

Mmmm, necesitaba conseguir un compañera de cama pronto, la abstinencia no me sentaba bien. Quería aplacar mis necesidades al menos una vez por semana y ya iba casi dos sin contacto, era frustrante...

Azael: Mmm -Me sacó de mis pensamientos depravados al sentir como se retorció en mi espalda, pareciendo buscaer una posición cómoda- Al...no hagas...eso...

Ambos lo observamos un momento al escucharlo hablar dormido.

Robert: ¿Será que se preocupa por su hijo aún estando así?

Joseph: No a hablado de él hayá adentro, asique nose porque ahora lo haría -No lo había mencionado ni una vez en esas horas de desastre, yo creo que es porque no quiere hablar de su niño entre gente desconocida- Quizas solo tiene un sueño o algo así.

Robert:...Bueno, es lo más provable verdad -Se encogió de hombros- ¿Deberíamos quitarle el lapiz labial? o...

Joseph: Nha, que se le quede como recuerdo, lo asustará más cuando se despierte.

Fue una larga, cansada y agotadora caminata, no era lo mismo llevar a Alastor que a Azael todo el recorrido, Azael pesaba el doble y me dejó con la espalda adolorida una vez que estabamos a solo 50 metros de su casa.

Algo que olvidé por completo fue...la barrera. 

Fue el momento en que vi a Robert desmayarse en el piso delante de mi, justo en el límite del hechizo invisible que supe de que me había olvidado sacarles sangre.

Joseph: Bueno...mi culpa...jaja...

Suspiré, un poco cansado por esto, admitia que si fue totalmente mi culpa. Bajé al borracho de mi espalda un momento, seguidamente saqué una diminuta navaja que tenía escondida en la suela de mi zapato, lo traje para esto justamente y no podia creer mi descuido por olvidarlo.

Mencione a la barrera como algo coorporeo anteriormente, pero esa no era su descripción exacta, si quería hacer una barrera que mandara a la gente a volar, pero eso no era nada sutil y mejor lo modifique en un hechizo de cierta área de alcance, esta hacía que la gente se desmayara.

Astuto verdad.

Iba a ser evidente en grupos grandes, pero si no eran enemigos, dudaba que azael hiciera una parrillada para los vecinos a medio kilómetro de distancia de su casa (Eran los vecinos más cercanos), por lo que esto debía funcionar, Azael supondría que es un desmayo por un golpe de calor o el cansancio de haber subido hasta su casa porque la primera vez que una persona sube hasta aquí, casi estaba al borde del desmayo, lo digo por experiencia propia.

Corte un poco en la espalda de azael, cosa que pareciera un rasguño y fuera dificil de que lo vea facilmente, similar a los que me hace Figel, no comprendía porque me odiaba ese gato, pero no iba a pensar mucho en eso ahora. 

En cambio, el corte que le hice a robert fue en el tobillo, no me importaba si lo veia, ya me inventaria algo.

Joseph: Ahora esto aquí...-Caminé hasta donde coloqueé las runas, apartando los arbustos que lo cubrían, tuve cuidado de acercarme, no queria que Helen o Alastor vieran a su marido y su padre desmayados afuera, aunque por la distancia, lo dudaba. Marcando algunos simbolos más en el patrón que realice, con esto, a ellos no les afectaría la carga horaria desde ahora, solo me faltaba Helen y Alastor, pero ellos estaban dentro ya, sería mañana.

Una vez que lo terminé recién pude arrastrarlos a la puerta. Las ventanas emanaban luz, hacique Helen debía seguir despierta, toqué la puerta un poco fuerte para llamar su atención y tuve la suerte de que ella abriera.

Joseph:...¿Me ayudas? -Suspire, Helen pareció sorprendida de mi llegada, luego vio a su futuro esposo en el piso, roncando- El alcohol y la subida acá no le sentaron bien.

Helen: Sabes...no me sorpende jaja -Ella rió, con un poco de esfuerzo logramos entrar, primero ayudé a llevar a Robert, el tipo es pesado a pesar de lo delgado que se vé- ¿Se divirtieron?

Joseph: A lo grande...Espero no les moleste dormir hoy en mi habitación -Mencioné una vez que recosté al rubio en la cama- Pero no creo que puedan ir a su casa hoy.

Helen: No te preocupes, de hecho, gracias por ofrecer tu lugar ¿Pero tu donde vas a dormir?

Joseph: Bueno, no sería la primera vez que duermo en los sofás -Tararee- Sera bueno volver a recordar los viejos tiempos.

Ella se rió un poco y nos despedimos, ahora solo faltaba llevar a Azael, sería un poco complicado debido a que su habitación estaba subiendo las escaleras, pero no me quejaría.

Admito que fue tentador dejarlo dormir en el sofa y yo usar su cama. Pero mientras menos razones tuviera para molestarse en la mañana, mejor. Parecía que temia que se enojara ¿Verdad?, tengo una simple razón, es el dueño de la casa donde me hospedo, se que yo me meti acá y demandé quedarme, pero Azael podía hecharme cuando quisiera.

Que no lo haga denota que me tiene al menos un poco de aprecio JA.

Joseph: Siempre creí que tú serías el primero en llevarme borracho a mi habitaión, no al reves jaja -Intenté bromear, olvidando el hecho de que me dolia el cuerpo y el aroma a alcohol que emanaba Azael- Aunque no eres tan ligero como pensé que serías, aun asi fue una gran noche.

Pude abrir la puerta de su habitación, como estaba al otro lado del pasillo estuve agotado, lo acosté en la cama y suspiré. Pero un movimiento de sus brazos me avisó que se estaba despertando.

Eso era bueno, no tendria que acomodarlo en su cama.

Pero algo irracional pasó, empezó a quitarse la ropa...enserio no podías ser más divertido Azael, enserio que no podías pero lo lograste.

Joseph: ¡Espera, espera! -Lo detuve cuando se quitaba la camisa, no queria ver a un hombre desnudarse frente a mi, que asco- No te quites nada, eso deviste hacerlo con la chica del bar idiota.

Él me miró molesto y extrañado, sus ojos estaban casi por cerrarse.

Azael:...Yo duermo desnudo...imbecil -Habló con un tono de ser lo más obvio del mundo- Bueno, en realidad es con mi...ahhh ¿Como se llama? -Parecio esforzarse en recordar la palabra, yo seguí reteniendo sus brazos, no era mucho esfuerzo, no parecia poder oponer resistencia- Mi abrigo verde de panda...jaja ¿Donde está?

Se alejó de mi, buscando en su armario esa prenda mencionada, su cabello se había soltado de su liga, haciendo que su cabello se soltara, esta le llegaba hasta por debajo de la cintura facilmente.

Joseph: ¿Tienes un abrigo de panda? -Dije exceptico- No, mas bien ¿Duermes desnudo con solo un abrigo encima?

Una pequeña imagen mental se me pasó en la mente, pero rapidamente lo tiré por la borda, dandome un escalofrió por casi haber visto algo prohibido para mi sanidad mental. Azael revolvia entre su ropa, pareciendo frustrado por no encontrar lo que buscaba.

Azael: No esta...NO ESTA -De un momento a otro se cubrió la cara- Era mi favorita y muy linda ¿Porque no lo encuentro?

No me hiba a quedar a ver esto, hacique me voltee, ya estaba en su habitación, lo que pasara luego no lo contemplaría, cuando abrí la puerta para salir, unos sollozos me detuvieron, no mires Joseph, no mires, no te atrevas a mirar...

Azael: ¿Lo perdí?...-Los sollozos se hicieron más altos, enserio que no quería girarme, debía tener fuerza de voluntad- Era el regalo que más me gustó...Buaaaa.

Si, estaba llorando. Mierda.

Sabia perfectamente como tratar con mujeres deprimidas...¡Pero eran solo con el obejtivo de llevarlas a la cama!. Mi mente me estaba recriminando por dejar a Azael solo en medio de su llanto, pero la parte que me decía que es una mala idea acercarse me taladraba la cabeza...

Y justo cuando iba a decidir huir, mi descarada cabeza me recordó porque Azael estaba borracho en primer lugar....enserio consiencia, eres bastante inoportuno cuando te lo propones verdad.

Joseph: Por estas situaciones fue que Alan casi me mata -Las mujeres deprimidas eran presa facil, siempre se agarraban a la primera personas que les diera la mano, aunque lastimosamente esa fue Analy...-Dios, si me escuchas, tapate los ojos y oidos.

Con eso dicho, voltee a verlo.

Azael había pasado a agacharse en el piso y abrazarse a sus rodillas, seguía llorando, lo que no entendía, era solo una prenda.

Azael: Soy tan estupido...Arruino todo lo que hago -Murmuraba entre moqueos, me acerque a su lado para levantarlo y acostarlo en su cama- Joseph, ¿Crees que soy un idiota orgulloso?

Joseph: ....Sinceramente, todos lo son hasta cierto grado -Le respondí, sacandole los zapatos y acomodandolos bajo su cama- La meta es no dejarse dominar por eso supongo.

Se le habían secado las lagrimas a los minutos, yo estuve escuchando sus desvarios en todo ese tiempo, apaciguando su tristeza, bueno, eso hasta que le volvió a dar sueño y por alguna razón que desconosco, alegaba que hacía mucho calor a pesar del frio que hacía, se terminó quitando la camisa, dejandome ver la parte superior de su cuerpo desnudo, no me equivoqué en decir que era un flacucho debil, en efecto lo era.

Azael: Hace calor...-Murmuró, ya casi durmiendose, miré mi reloj y ya eran las 2 de la madrugada, yo tambien estaba callendo en los efectos del cansancio- ¿Te vas a ir?

Joseph: ¿Pues si? -Vi las lagrimas asomarse por sus ojos, lo que lo hacía parecer una pintura con el contraste que le daba su cabello a su rostro y cuerpo, esto era jodido, no queria estar aquí en primer lugar- No Azael, no voy a quedarme a dormir contigo, simplemente no.

Tomó mi mano y bueno...lo demás fue historia...

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Narrador:

Anti: Por favor, por todo lo divino y lo no divino, dime que no pasó nada más -Suplicó, se estaba muriendo de la verguenza durante todo el relato de sus actividades y acciones tomadas en su borrachera.

Joseph: Azael...-Lo miró seriamente- ¡Por supuesto que no pasó nada, estupido! No me gustas, no me gustan los hombres por más femenino que te veias en ese momento -Remarcó su respuesta con una expresión de asco- Simplemente me quede dormido contigo, quizas más tarde inconcientemente me quité la camisa por el calor al igual que tu, pero solo eso, entiendes.

En ese momento por fin pudo soltar un suspiro de alivio.

Anti:...Gracias -En ese momento le dió un golpe a la cabeza roja- Y eres un completo idiota por darme esos mojitos -Lo fulminó con la mirada.

Joseph: Sin arrepentimientos...

Definitivamente, no volveria a tomar junto a esos dos idiotas.

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Narra: ?

Me sentía tan confundida, no...no comprendía muchas cosas a pesar de ser obvias las respuestas que debería tener, todo se sentía tan...gris.

Sin vida, abarcada por la inmensa tristeza que no pudo controlarse e inundó su espacio para no parecer irse, dejandola sin esperanzas y miedo.

El "Y si" o el "Hubiera" atacaban su cabeza con frecuencia pero siempre se reia de la tristeza que le generaba, no eran risas de felicidad, eran risas de derrota, un sonido que te decía lo desesperada que estaba por encontrar algo a lo que aferrarse.

Pero tambien sabía que eso era malo, lastimosamente era tan tentadora...

Estaba tan confundida...

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Y tan tan, me dió verguenza escribir este capitulo, pero tenia que relacionarlo con lo que hice parecer jaja XD

Y bueno, desde el próximo capítulo empezaremos con el arco que tanto estaba deseando comenzar, cielos, incluso me pone nervioso y es que será estresante pero necesario.

Me duele la cabeza de solo pensarlo TvT

BAY BAY~