Conducia su moto a una gran velocidad, pues recibieron un llamado sobre unos héroes que habían sido atacados. Varias patrullas lo seguían, pues tambien era un caso policiaco. Pero eso no era lo que tenia preocupado a Izuku.

Era quien los había atacado.

---Stain...---pensaba bastante tenso y preocupado, pues de alguna forma, el cazador de héroes logro escapar de tartarus y ahora había vuelto a sus andadas. No era una buena situación---¿como saliste maldito?

Recordaba cuanto le costo el haberlo aprendido la primera vez, hace tres años. Cuando aun era un aspirante a héroe en la U.A.

Casi muere en más de una ocasión con cada batalla que tenian.

Al parecer los Midoriya tenían un legado en cuanto a atrapar a Stain se referia, pues primero se encargaba de el cuando era robin. Ahora no hace mucho, le toco a Izumi junto a un par de sus compañeros, el volverlo a hacer. Siendo nuevamente apresado y nuevamente escapado, aunque por experiencias anteriores, por lógica esta vez fue encerrado en tartarus en lugar de una carcel normal. Se suponía que ahora no podria escapar por razones obvias.

Que equivocados estaban.

Izuku creía que no le prestaron la debida atención a alguien tan peligroso como el, por eso es que lograba escapar cada vez y cuando. Se confiaron en la avanzada seguridad de tartarus y bajaron la guardia.

Pero lo peor....no era aquello.

---"Atención a todas las unidades"---un aviso en la radio de su moto llamo su atención---"Stain ha sido avistado al norte de la ciudad"

---Tsk.

Eso era lo peor.

Ya no era Stain.

Ahora era "Robin".

Ese lunático había tangiversado su anterior alter-ego, lo había convertido en un simbolo de muerte y terror. Siendo sincero, no le importaba en lo absoluto el manto de Robin, pero sabía que para algunos, Robin aun era un héroe prometedor. Un simbolo de heroismo oscuro. Algo raro, pero que increiblemente era aceptado. No podía dejar que decepcione a quienes aun tenían esperanza en los héroes.

No podía dejar, que su anterior legado, fuera mancillado. Debía protegerlo aunque no quisiera.

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En otro lado de la ciudad, varios héroes se dirigían hacia diferentes puntos. Una alarmante noticia le había llegado.

---¡Todos desplieguense!---ordenaba Erased a los héroes que lo seguían---¡busquen las bombas y avisen a todos cuando las encuentren!

---¡Hai!

Así es.

Bombas de gran poder.

Bombas sucias.

¡Hey mis amigos heróicos! ¿me recuerdan? ¡yo si! Los he extrañado bastante y es por eso que he vuelto ¡jajajajaja!.
¡Aqui estoy perras! Y traje obsequios para todos...
Veran, deje en varios sitios de la ciudad, varios regalos un tanto explosivos y sucios. Deben encontrarlos y hacerse con ellos lo mas pronto posible.
Haganlo lo mas pronto posible, deben hacerlo. No querran que la ciudad amanezca con una "explosiva" sorpresa ¿verdad? Eso seria pronto y va a picar.
¡Jajajajajajajaja!

Esa voz.

Esa demente, perturbada y retorcida voz. Había vuelto.

---Maldita sea...---maldecia Aisawa muy tenso y alterado---suficiente con Deadstroke, ahora "ese" sujeto tambien.

¿Por que había vuelto? O mejor dicho ¿como? Se supone que estaba muerto, Deadstroke tambien. Ahora se supone que los muertos vuelven a la vida.

Todo esto era una maldita locura.

Una que podría destruir la ciudad en una sola noche.

Y a pesar del caos y peligro mortal de esta noche, para algunos no era del todo malo. Podrían aprovechar la situación.

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En medio de todo este caos, un grupo se movia entre las sombras. Era el momento oportuno para actuar.

La ciudad estaba en panico, los policias y héroes estaban ocupados ahora buscando las amenazas de Deadstroke, King Robin y "ese" sujeto, por lo que era el mejor momento de llevar a cabo sus planes. Aunque de todas formas debían hacerlo con mucho cuidado.

Lo que harían seria lo más difícil de hacer en sus vidas.

Cualquiera pensaria que seria una locura, un suicidio lo que harían. Pero para ellos, el premio lo valia, además, los héroes no estaban cuidando el edificio por todo el caos generado, solo algunos lo hacían. El líder casi agradecia el hecho de que ese trio de psicóticos esten causando estragos en toda la ciudad.

---Pronto volveras con papá.....mi pequeña Eri.

El grupo de sujetos se dirigían hacia un peligroso lugar.

El edificio de Sir Knighteyes.

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---¡Jajajaja!---reía maniaticamente viendo las noticias en la televisión.

Todo esto le parecia divertido, bastante en realidad. El pánico generado por todo este caos, le estaba divirtiendo bastante. No podía negar que ver la ciudad y la sociedad tan a merced del caos, era bastante divertido en su opinión. De esa forma podría ver aunque sea unos segundos, su gran sueño. El más perturbador de todos los que tenía.

Ver el mundo arder.

Aunque para eso, el debería tambien poner su "granito de arena" en toda esta situación. No queria quedar fuera de esto.

---Kurogiri.

---¿Que sucede Tomura?---preguntaba el hombre niebla oscura.

---¿No es esto maravilloso?---preguntaba emocionado mientras sus bien abiertos ojos, brillaban por las noticias. Era algo muy estimulante---el caos, la destrucción, el terror, el miedo. Todos estos sentimientos en solo una noche---mencionaba emocionado acercando su rostro al televisor---es justo lo que siempre hemos deseado, crear el caos a esos niveles. Hacerle ver al mundo su realidad---reía ligeramente extasiado por lo que veia---jajaja, imbeciles. Creyendo en falsos dioses---obviamente se referia a los civiles y héroes---¿donde estan sus héroes ahora? ¿como podran salvarlos de todo esto? ¡no pueden! Jajajajaja.

Era igual que en Hosu, donde casi se destruye la ciudad. Como en Kamino, donde casi ocurre lo mismo. Pero esto era algo increible.

Sin duda era mucho peor y magnifico en su opinión.

---¿Que deseas hacer, Tomura?---preguntaba calmado el nomu de humo negro.

Tomura paro de raya sus risas macabras y dementes, para levantarse de su sofa. Generando una maligna sonrisa.

---Prepara los Nomus---fue su orden sin duda alguna---no podemos dejar que el "evangelio" sea promulgado sin nosotros.

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Varias ciudades del pais estan en alerta máxima, el nivel de peligro es aterrador. Todos los civiles deben evacuar y refugiarse en sitios seguros.

¡Llamando a todos los superheroes!

Fue el llamado que cada héroe y aspirante a uno, recibio aquella noche. Unos tenían miradas de miedo, otros de duda y claramente, otros de terror. Pero la gran mayoria, tenían una mirada llena de determinación. Una que solo los verdaderos héroes tienen.

En su oficina, Sir estaba calmado a pesar de todo el caos. Lastimosamente el no podria actuar, tenía algo muy importante que hacer en su empresa. Algo que por nada del mundo debía descuidar.

Eri.

Aquella niña que fue "rescatada" por Mirio e Izumi aquel día (claramente sabe que fue Izuku) era alguien demasiado importante y no era permisible el perderla ahora. Observo su mano pensativo por unos segundos.

---Esa niña---pensaba preocupado por el bienestar de ella y los demas, tenía un vaso de whisky en sus manos. Observaba el caos a travez de la gran ventana de su oficina---tanto poder en una pequeña, tanto sufrimiento. No puede ser perdonado ni tolerado---pensaba seriamente y su mirada furiosa lo delataba.

Pudo ver el futuro de Eri.

Era uno de los futuros mas brillantes y hermosos que una persona podría tener, Eri lo merecia, claro que si. Ya habia sufrido tanto, pero gracias a que vio su futuro, tambie pudo ver lo que pasaria a continuación. Por eso estaba preparado.

---¡Sir-sama!---hablaba uno de los héroes por el intercomunicador---¡nos estan atacando!

---Calmate---ordenaba el vidente con serenidad---sigan las ordenes que di, mantengan asegurada las entradas. Pero lo primordial sera mantener a salvo a Eri.

---¡Si señor!---colgo aquel sujeto.

El ya sabía que esto pasaria, pudo verlo indirectamente gracias a los recuerdos de Eri. Así que actuaria ahora mismo.

No dejaria que algo malo le pasara a la niña aun cuando su vida sea consumida hoy.

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---¡¿Que es toda esta locura?!

Izumi fue despertada de golpe, así como cada estudiante de la U.A que estaba descansando de sus pasantias. La ciudad era un caos de un segundo a otro.

Ahora por ser un grave caso de peligro nacional, los héroes y prospectos a héroes, debían actuar por esta ocasión. La habían sacado de la cama, así como a varios de sus compañeros para actuar en esta emergencia. Ahora debían buscar esas malditas cosas antes de que estallaran.

---¡Callate de una vez, Deku!---exclamába furioso Bakugo, asustando a la pobre chica. El tipo estaba molesto por tener que actuar a estas horas de la noche---¡deja de quejarte y terminemos de hacer esto de una vez!

---Preparense ambos---una inmensa dragona volaba por encima de ambos, ni era la única heroina ahi. Pues Mirko saltaba de edificio en edificio y Hawks volaba junto a ellos, ademas de algunos de sus compañeros. Era todo un caos todo esto---estamos a punto de llegar al sitio de peligro.

Izumi estaba algo nerviosa, Bakugo estaba tenso aun cuando no lo quisiera admitir. Esto era una situaciòn de gran peligro, una sola duda y todos moririan. Por eso no podían hacerlo.

¿Acaso los héroes debían afrontar este tipo de peligros y amenazas todo el tiempo?

A un lado de ellos, estaba Ochaco, corria detras de ellos. No podía evitarlo, estaba muy tensa y nerviosa. Era la primera vez que enfrentaria este tipo de situaciones, uno de peligro mortal. Solo esperaba poder ver la luz del sol por la mañana.

---¡Concentrate Ochaco!---se regañaba asi misma mentalmente y dandose ligeros golpes en las mejillas para dejar de pensar en esas cosas---¡no tenemos tiempo para miedos y dudas! ¡todos dependen de nosotros! ¡recuerda las enseñanzas de Gunhead-sensei y Midoriya-sensei!

Primero recordo cuando estuvo bajo la tutela del poderoso (y adorable en su opinión) Gunhead, sus artes marciales y demas entrenamientos, la habían vuelto una joven de temer. Una que podría partirle el brazo a cualquiera que intentara propasarce con ella.

Y vaya que ya había sucedido.....varias veces.

Gracias a los recuerdos de sus enseñanzas, pudo recuperar un poco de su calma y seguridad. Por eso su concentración ahora era notable.

Aunque ahora.....

---Midoriya-sensei...

Tenía una nueva preocupación.

No iba a negarlo, estaba asustada y preocupada por el bienestar de su prliverde sensei. No podía evitarlo.

Había vuelto a ser un mukosei, justo ahora que había un peligro de muerte (casi asegurada) tuvo que perder su don. Eso era una injusticia divina en opinión suya, como un mal chiste. Izuku era un detective de la policia, obviamente ahora debe estar desplegado junto a cientos de agentes por culpa de esta crisis. Gracias a eso, no podía evitar sentir gran preocupación y miedo por su bienestar. Claramente apreciaba al hermano de su mejor amiga.

Talvez demasiado.

---Cuidese por favor.

Era el pedido preocupado y desesperado de una asustada doncella.

Y no era la única con ese pedido.

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---¡Madre, haz lo que te digo!---exigía Izuku mientras conducia su moto a máxima velocidad---¡ve con los Bakugo y refugiense en el sotano!

---"¡Pero hijo...!"---trato de refutar la peliverde.

---¡Nada de "peros" y ve de una vez!---exigió antes de colgar rapidamente la llamada---¡por kami! ¡¿como diablos ocurrio todo esto?!

La ciudad era un completo caos, algunas otras cercanas, sufrian lo mismo. Los héroes y agentes del orden estaban tratando de solucionar los problemas que había en cada una, pero era demasiado. Robin King, Deadstroke y ahora un demente colocaba bombas sucias en toda la ciudad y posiblemente, en el resto cercano. En serio era una terrible noche para ser héroe o policia.

Gritos de pánico y terror era lo que se escuchaba en todo el sitio.

Había un tráfico del infierno, algunos autos abandonados estorbaban el paso. Para colmo, empezo a llover de forma torrencial. Era todo un cliche.

¡Baaaam!

---¡Mierda!

Algo había caído con violencia desde el cielo, arruinando el camino y elevandolo por los aires. Tuvo que soltar el manubrio y acrobaticamente, caer al suelo para rodar. Así pudo amortiguar un poco el golpe, aunque la moto cayo un poco lejos. Esperaba que no estuviera muy destrozada al tener que seguir adelante.

Pero sus ojos se abrieron en sospresa, cuando vio que había generado tanto desastre. Enorme, de color negro, musculos exageradamente grandes, tres ojos y cuatro brazos. Tenía tres ojos y no tenía boca.

---¡U-Un nomu!---exclamó mientras se levantaba frente al monstruo, pero luego afilo la mirada muy molesto. Ya sabía que estaba pasando---Tomura...---mencionaba mientras sacaba su arma de dotación---no pudiste soportar la tentación de participar en esta mierda ¿eh?

---¡Groooar!

Para sorpresa del peliverde, esa cosa rugio con furia y demostro que si tenía una boca, llena de dientes afilados. Era una simple membrana de piel que la tapaba, la cual se despedazo por el rugido. Aunque parecia que no le doliera en absoluto.

---Que mal día para volverme nuevamente mukosei---renegaba mientras le apuntaba con su arma a pesar de saber que las balas no le harían mucho daño.

Tambien era un mal día para no haber traido aunque sea un solo gadget.

La bestia se abalanzo con furia contra el, aunque no intimidaba al peliverde. El suelo temblaba con cada pisada que daba, incluso el suelo se cuarteaba con sus pisadas. Izuku empezó a disparar, cosa que parecia hacer casi nada. Aunque el monstruo se cubria la cara con dos de sus cuatro brazos, al parecer era su punto débil. Eso podría usarlo a su favor.

Aunque tuvo que saltar y rodar a un lado, pues casi es embestido por ese nomu. Al parecer tenía un fuerza física monstruosa, pero su velocidad no era tan grandiosa. Al parecer tanto musculo si le afectaba despues de todo.

Disparos iban directo a la bestia, pues ahora Izuku no era el único que disparaba. Los demas policias que habían seguido, por fin pudieron alcanzarlo y al verlo en peligro, ademas de ver a un nomu, comenzaron el ataque. Era una lástima que no halla llegado algún héroe, aunque parecían hacerlo bien. Pues lograban ralentizar al monstruo, pero eso solo encendía su ira. Tomando un auto cercano desataria toda su furia.

---¡A un lado!---exclamába alterado el peliverde.

---¡Groaaaar!

Tras ese rugido de furia, lanzo el vehículo, Izuku y los agentes se abrieron paso. Dejando que ese auto se estrellara con las patrullas.

Aunque por desgracia.......habían perdido de vista al nomu.

---¡Oh mierda!---gritaba uno de los agentes viendo el oscuro cielo con miedo---¡arriba!---exclamaba apuntando hacia aquella dirección.

Cuando todos vieron, sus ojos se abrieron en sorpresa. El nomu venía cayendo nuevamente, parecia un ataque inevitable. Pues ni tenían tiempo de disparar.

---¡Graaar!

¡Baaam!

Pero de pronto, una nueva fuerza embestia al nomu, cayendo al suelo. Había evitado que mataran a alguien.

---¡Roaaaar!

---¿Dog Hound?---preguntaba sorprendido por la llegada sorpresiva del héroe sabueso, aunque luego suspiro aliviado. Era un buen apoyo---¡gracias por la ayuda!

---¡De nad...CUIDADO!

¡Clack!

---¡¿Que mierda...?!

El héroe sabueso trato de advertir del peligro que caía sobre el peliverde, pero fue tarde. Aunque Izuku reacciono a tiempo gracias a su intuición y persepción entrenada, pudo defenderse. Usando su pistola bloqueo una larga y muy filosa hoja.

Aunque a pesar de ello, la fuerza del nuevo villano era increible. Pues lo hizo arrastrar un poco los pies.

Dog Hound trato de ayudar, pero el nomu nuevamente se alzo en batalla. Para mas terror, diversos nomus empezaban a llegar. Por lo que la policia ahora trataba de derribar a alguna de esas cosas, una tarea casi imposible al tener pieles tan duras y resistentes. Eran casi invulnerables.

---¡M-Maldita sea...!---maldecia Izuku mientras forcejeaba para no ser partido en dos---¡estas loco Stain!

Aquel que había llegado, era Stain. Aunque vestía su armadura de Robin.

Ahora sabía quien la habia robado.

---Jajaja, no pequeño héroe. Ya no soy Stain---respondía esforzandose para empujar su espada---yo soy Robin King.

La locura al fin había llegado.

Y lo peor llegaria solo segundos despues.

¡Bip! ¡bip! ¡bip!

Era la alarma, aquella que le diria cuando estuviera en peligro. Y ella lo estaba usando.

Eri estaba llamandolo por ayuda.

Eri estaba en peligro.