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Jungkook jugaba tranquilamente en el jardín de su hogar, nuevamente su hermano lo había dejado a fuera de la casa para evitar que el pequeño escuchara los gritos de sus progenitores, eso era casi siempre Jungkook no le daba mucha importancia cuando ambos estaban así por que apenas era un niño de 5 años y no andaba pensando en esas cosas, detestaba escucharles gritarse pero su hermano mayor se las ingeniaba para que el quedará fuera de esas discusiones y no las escuchara.

El pequeño Jeon estaba entretenido jugando con sus juguetes en el gran jardín de su casa, el cual tenía una gran cerca que llevaba a un bosque, había una pequeña puerta la cual estaba cerrada, su padre siempre la mantenía cerrada, solo la abría cuando iba a por leña, no le permitía a Jungkook ir ni a Namjoon tampoco, por que era muy grande y ambos podrían perderse. Jungkook miró hacía la cerca de madera al escuchar pisadas, Jungkook tomó entre sus brazos su peluche de conejo rosa y camino hasta la cerca pero su bracito fue tomado antes de llegar a esta.

—A donde vas Kookie?—Nam había salido de la casa para buscar a Kook

—Es que escuche un ruido hyung—murmuró el pequeño

—Seguro fue un animal, vamos adentro mamá y papá ya se calmaron—Nam tomó en brazos al pequeño y entraron a la casa.

Los padres de Jungkook miraron a sus hijos y se sintieron mal por ellos, sus constantes peleas afectaban a sus hijos y a ambos por igual, así que la señora Jeon había llegado a la conclusión de que divorciarse seria lo mejor tanto para ellos como para sus pequeños, pero el señor Jeon no estaba de acuerdo con esa idea, sabía que no podría vivir sin su esposa y sus hijos, necesitaba buscar el modo de que ellos se quedaran con el no podía dejar que su familia se desmoronara.

Jungkook y Namjoon habían presenciando una semana entera sin peleas, al mayor de los hermanos le parecía raro por que sus padres casi diario discutían, pero ahora que no o hacían durante una semana le devolvió la esperanza de que su familia volvería a ser la misma, Jungkook igual se sentía feliz al ver que sus papás ya no se estaban gritando y como su papá trataba a su madre. Pero la tranquilidad no dura mucho, la madre de Kook se había enojada mucho cuando el señor Jeon tocó el tema de dejar el divorció atrás y de comenzar de nuevo. Los gritos comenzaron nuevamente, cuando Nam los escucho le dijo  Jungkook que saliera a jugar, Jungkook así lo hizo, Nam se quedó dentro para calmar a sus padres.

Jungkook jugaba con cooky su conejo de peluche, estaba entretenido hasta que nuevamente comenzó a escuchar las pisadas del otro lado de la cerca, Jungkook se levanto del césped y camino hasta la cerca, se sorprendió cuando vio que la puerta no tenia el candado puesto, el pequeño tomo en su mano el pestillo y abrió, del otro lado habían muchos árboles, y hojas secas en el suelo, Jungkook volvió a escuchar las pisadas y miro todo a su alrededor, hasta que vio lo que ocasionaba el ruido, era un perro y el pequeño amaba los perros, pero no podía tener uno por que su mamá era alérgica, el perro se acercó al niño y lo olfateo, rápidamente lamio la mejillita del menor, Jungkook soltó una risita al recibir la lamida del perro, el can comenzó a jugar con el pequeño, Jungkook dejó caer su peluche al ver al perro correr, entre risas el pequeño inocente le siguió hasta adentrarse al bosque.

Cuando el perro se detuvo estaban en un río, el pequeño miraba el pequeño río mientras su respiración se normalizaba, sabía que estaba lejos de casa, necesitaba volver, cuando iba a darse la vuelta vio allí al señor que vivía al lado de su casa, se asustó un poco por verle allí, pero se tranquilizo, por que sabia quien era aquel señor.

—Vaya, pequeño Jungkook que haces aquí?—cuestionó con voz amable el señor

—Es que seguí al perro—murmuró el pequeño señalando al que parece ser el perro del señor— pero ahora quiero volver a mi casa

—Por que no te quedas un rato...tus padres aún deben de estar peleándose —el señor le miro y le indicó que se sentara con él en aquel tronco.

—Es que debo volver señor Cheng —volvió a hablar el pequeño

—Vamos siéntate, luego te llevare a casa, siéntate no te hare daño, si quieres puedo enseñarte a pescar— le enseño la caña de pescar, eso atrajo al pequeño curioso.

Jungkook se acercó al señor Cheng y se sentó con el en aquel tronco, tal y como dijo el señor comenzó a enseñarle a Jungkook como pescar, el pequeño se emocionaba bastante pues llego a atrapar un pez, el señor Cheng le indicó al pequeño que se sentara en sus piernas para poder atrapar mas peces, el pequeño como todo niño inocente lo hizo. Jungkook después de unos minutos intentando atrapar un pez en aquella posición se sintió extraño, había algo duró en su trasero, el señor Cheng soltó las manos del pequeño y las llevo a las pequeñas caderas del menor, para comenzar un vaivén, era obvió lo que estaba haciendo, pero Jungkook era un niño pequeño y no entendía bien lo que pasaba, pero eso no quitaba que al pequeño no le gustaba intentaba bajarse del regazo de aquel hombre pero no podía, el lo tenía aprisionado entre sus manos. 

Una de esas manos se dirigió hasta el pantalón de pijama del pequeño y lo bajó e hizo lo mismo con el suyo, Jungkook ya estaba llorando intentando soltarse de aquel hombre, Jungkook comenzó a gritar con desesperación cuando su pequeño cuerpo comenzó a ser profanado, pero estaba muy lejos de casa como para que le escucharan. Cuando aquel despreciable ser termino de profanar el débil cuerpo del niño lo soltó dejándolo tirado en el suelo, Jungkook estaba débil, pero aprovechó la distracción de aquel hombre para huir, pero fue en vano tan pronto como comenzó a correr con las pocas fuerzas que tenia aquel gran perro corrió y mordió el brazo del niño , lo arrastró devuelta hacía el hombre y comenzó a sacudir la cabeza con agresividad mientras el brazo del pequeño seguía dentro de su boca, Jungkook gritaba de una manera dolorosa pues su pequeño brazo esta siendo desgarrado por los dientes de aquel animal, el perro arrancaba pedazos de carne con sus dientes y os comía, el pequeño golpeaba la cabeza del can con su otra manita intentaba despegar al animal de su casi mutilado brazo, el pequeño en un ataque desesperado tomo una roca la cual estaba filosa y golpeó con todas sus fuerzas al perro, logrando apuñalar uno de sus ojos, el perro rápidamente se separó del pequeño y fue hacía  su dueño, el cual se enojo mucho al ver que Jungkook le había hecho daño, el pequeño se arrastraba entre las rocas lleno de sangre y su bracito casi desprendido, solo algunos cartílagos lo mantenían unido.

El hombre bastante molesto, tomo un bat de beisbol que tenía consigo y comenzó a golpear sin piedad alguna al pequeño, llego a hacerle un hueco en la cabecita y le desfiguro el rostro. Cheng miro lo que había hecho y sonrió, había planeado hacer aquello desde hace mucho tiempo, el niño era muy hermoso, le gustó ver como luchaba por su vida en vano, tenía que admitirlo había sido el niño más valiente de los tantos que había secuestrado y matado, Cheng encendió un cigarrillo y se encargo de mutilar el pequeño cuerpo y meterlo en una bolsa, al terminar su acto limpió todo y se fue de allí. Por otro lado Namjoon alarmo a sus padres y le dijo que el pequeño no estaba pero no sabía desde hace cuanto no estaba. Estuvieron buscando a su pequeño hijo, pero ese no aparecía por ningún lado. 

Fueron años de búsqueda y después de esos largos años el caso quedo cerrado por falta de material de investigación, por que lo único que lograron obtener fue aquel conejo rosa. El caso del pequeño Jeon Jungkook quedo en el olvido y el monstruo que lo asesinó quedo totalmente libre quitándole las vidas a muchos niños más, niños que al igual que el quedarían como un caso cerrado en el olvidó de la policía.

The End.  

Muchas veces los monstruos no son solamente ficticios y dan mucho miedo, también hay muchos en la sociedad que no dan ni una pisca de miedo...hasta que se les conoce realmente.

pasen linda noche y lamento mucho este one shot.