— Abrelo — Él miraba la caja entre sus manos sin saber que hacer.

—No debiste

— Si debía y me encanta hacer regalos— sonreí — ¡Anda, Ábrelo! Espero que te guste porque no tienen cambio

Sus manos quitaron la cinta que con mucho cuidado coloqué y dejó entre ver tres pins de diversas cosas que me recordaban a él, un Snoopy, un cassette y una calavera.

 —Vi en tu instagram que te gustan los accesorios y darle un toque único a las cosas, creo que son perfectos para eso— Miré el contenido de la caja orgullosa.

Lo miré de reojo para ver su expresión pero no parecía tener una puntualmente, solo mira a la caja y tocaba los pins con su índice afirmando la caja con la otra mano.

 —No son para nada caros porque con mi salario no me daba para una bolsa Gucci que seguramente ya tienes pero quiero que sepas que pensé en ti cuando los vi y creo que es muy especial eso ¿No? — mencioné sintiéndome muy nerviosa ante su ausencia —Un gracias se sentiria bonito

—Lo siento es que estoy impresionado, hace tiempo que no recibía un regalo así— sonrió — Es lindo que al regalar algo piensen en ti de una forma tan detallada y gracias por ser sincera con lo del costo y por lo psicópata al revisar mi perfil de instagram— rió mostrando sus lindos dientes.

—Ya no te cubres los dientes al reír — lo miré — Gracias por ello, tu sonrisa es preciosa

Lograba sonrojarlo a pesar del frío que hacía y eso me daba unas puntadas en el estómago y por debajo de él, lo tenía tan cerca.

— Los guardaré para alguna ocasión especial — cerró la caja y la guardó en su chaqueta — HeeJin, quería pedirte disculpas por algo que hice

— ¿Qué cosa? — me acomodé en el asiento para mirarlo mejor bajo la luz de la farola.

— Sobre lo que sucedió en el mirador, yo no tenía intenciones de propasarme y tocarte como lo hice, me siento poco caballero así que pido disculpas, fue el momento

— ¡De qué hablas! — le toqué el hombro — ¡Fue un buen agarrón de pecho! A mi me pasaron cosas

Ho Seok  se giró hacia mí y abrió sus ojos preciosos algo impresionado.

— Sí, tus manos fueron muy gentiles pero firmes, fue justo lo que necesitaba, bueno, obviamente una queda esperando más después de un contacto como ese pero me agradó— mordí mi labio de forma inconsciente.

— Bueno, sí es así yo retiro mis disculpas— se levantó del asiento — ¿Te estas quedando muy lejos de aquí? — miró hacia todos lados  me miró — Podría acompañarte para saber que llegaste bien

— Lo agradecería porque las calles son algo confusas de noche— sonreí —Me viene de maravilla un lugareño a estas horas

Llegamos a fuera del hostal donde me estaba quedando y esperé a que al menos tomará la iniciativa de dejarme en la puerta, acercarse a mí al punto de restar distancia entre nosotros porque me confundía que una noche me tomara los pechos en un juego algo fogoso y ahora me tuviera algo de miedo.

— Ha sido una noche fría y muy feliz, espero que para ti también lo sea— acaricié sus manos —Gracias por venir a pesar de que esto no estaba planeado, lo pensé bastante y resultó que por muy loca que sonara la idea el arrancarme esta noche acá fue lo mejor que pude hacer

—¿Por qué lo dices? — vi como sus ojos miraron mis labios, luego a mis ojos y nuevamente a mis labios, era la señal que necesitaba.

—Porque te pude dar tu regalo de cumpleños— calenté mis manos frotando la una con la otra — Y creo que es hora de darte el último regalo de la noche.

— HeeJin ya basta, no debes seguir dándome nada, te lo agradezco— sonrió  — Con que hayas venido hasta acá a verme ha sido algo muy considerado

— Cierra los ojos, necesito ocultarlo en mi mano— le solicité.

Vi como cerró los ojos obedeciéndome luciendo muy tierno. Su mascarilla estaba bajo el mentón sin ser una molestia para lo que iba a hacer y me acerqué lentamente temiendo de que abriera los ojos y esto resultará siendo incómodo.

Deje un beso sobre sus labios, algo delicado esperando a que no se alejara y aceptara que mis labios tocaban los de él, no se movió y siguió estático con los ojos cerrados respirando más lento.Me acerqué nuevamente y capturé entre mis labios su labio inferior y lo jalé levemente, succionando con poca presión.

Sus manos de forma sorpresiva se posaron entre mi mandíbula y mi oreja acariciando mientras entre abría sus labios para acariciar los míos con la punta de su lengua, sutil y candente a la vez. Acaricié el cabello corto que tenía tras su cuello y profundicé el beso dándome pasó completamente a la exploración de su lengua contra la mía devorandonos lento y pausado, embriagandonos con nuestras respiraciones.

"Demonios, quiero que suba conmigo al cuarto para continuar así toda la noche"  pensé.

— Tengo que ir a casa, mi familia espera— se apartó lentamente susurrando —Gracias por tus regalos— miró a sus zapatos y luego a mi algo tímido — Y por decidirte a venir hasta acá por mi

— Creo que fue la mejor idea que he tenido en estos meses— mordí la comisura de mi labio — Besas muy bien— le di un halago solo para verlo sonreír o sonrojarse.

— ¿Gracias? — sus pómulos se elevaron y miró hacia un costado ocultándose nuevamente —Buenas noches Somsatang

—Buenas noches Huimang— lancé un beso que lo hizo sonreír antes de que subiera su mascarilla y se fuera caminando por donde habíamos llegado.

HeeJin, esas muy jodida ahora que probaste sus labios preciosos y es tal como lo imaginaste, muy dulce, tierno, es íntimo completamente, ¡Me ha regalado un beso!

Como jode saber que esto es justo lo que no querías... Sentir cosas más serias por alguien.