- ¿Entonces terminó con Regina? - Pregunta una sorprendida Hanna.

- Si - Respondí mientras cerraba mi casillero.

- Pero... eso quiere decir que van avanzando ¿No? - Pregunta Hanna.

- Creo... - Respondí - Lo está intentando -

- Hm... aún no me convence -

- Ni a mi, pero... siento que si no le doy por lo menos una mínima oportunidad, cometeré el peor error de mi vida... -

- Asegúrate de que solo sea una pequeña oportunidad, ni una más - Dice Gina.

- Por supuesto -

Nosotras continuamos con nuestro camino mientras discutíamos un poco sobre el tema hasta que Regina aparece.

- ¡Eres una maldita trepadora! - Grita y así provoca que todos atendieran a su numerito.

- ¿En serio quieres hacer esto ahora Regina? Si Jordan te dejó, fue porque no eres lo suficientemente buena para él y se dio cuenta por fin... - Murmuré lo último.

- Solo eres una perra que seguro le dijo que si me dejaba se acostaría con él porque sabes que eso es lo único que quiere de ti -

Aquello ya terminó por acabar con mi paciencia. La tomé del cuello y la golpeé contra la pared.

- Te recomiendo dejar de molestar, Regina, mis fuerzas están regresando como nunca, así que a la mínima que me vuelvas a insultar, no dudaré en partirte ese cuello de jirafa que tienes -

Gruñe pero yo solo la suelto bruscamente lanzandola al suelo. Bufé pasando por su lado y caminé hacia mis amigas.

- La Nicol de antes está volviendo - Dijo Gina sonriendo y levantando la mano, yo choqué los cinco con ella.

- Por fin - Respondí.

Después de aquello, el día con mis amigas fue lo que necesitaba, no tuve más inconvenientes con nadie y solo fuimos nosotras divirtiendonos y hablando como antes. El día pasó volando, y en la tarde noche decidí salir a correr, por Rexha.

"¿Cómo te sientes, Rexha?"

"Bien, solo espero que Jordan cumpla con lo que dijo"

"Yo tambien, no quiero que sufras de nuevo"

"Tampoco quiero que sea tan grande el dolor si no cumple"

Dejé de correr cuando encontré un río. Era muy hermoso. Tomé agua y vi los peces pasar.

Me quedé allí un par de horas, disfrutando de este tiempo, hasta que vi el atardecer. Suspiré acostándome de lado con mi rostro cerca del agua, pero me alerté cuando escuché unas ramas romperse. Pero me relajé al ver a Jordan...

- No saques las garras, lobita - Dijo acercándose riendo.

- Me asustaste - Respondí.

- Lo siento... - Dice pero aún con un poco de gracia en su tono.

- ¿Qué haces aquí? - Pregunté acostándome de nuevo, solo que esta vez no de lado y apoyando mi cabeza en mis patas.

- Mm nada, solo paseaba hasta que te percibí - Respondió, yo asentí comprendiendo.

Ambos nos quedamos callados por un tiempo, contemplando el lugar y el cielo.

- ¿Pasó algo con Regina? - Pregunta.

- ¿Por qué lo dices? -

- Los rumores - Respondió.

- Bueno... solo me dijo tonterías - Respondí quitándole importancia.

- ¿Cómo qué? -

- Nada importante, en serio -Dije mirándolo con una pequeña sonrisa lobuna.

- Esta bien - Dice suspirando. Nos volvimos a quedar callados, pero aquel silencio cómodo se vio interrumpido por una tercera aparición.

- Vaya... Así que fue por esto... - Nos levantamos rápidamente y mirámos hacia atrás.

- ¿Qué haces aquí? - Jordan se coloca frente a mi, confundiéndome por su actitud.

Se veía tenso, algo temeroso diría yo. Miré a la loba que acababa de aparecer. ¿Quién era?

- ¿Qué? Como madre, es mi deber conocer las razones de mi hijo para no hacer su trabajo -

¿Qué? ¿Es su madre?

- Déjate de estupideces, jamás fuiste una madre... - Dice Jordan muy alerta a todo lo que esa loba hacia.

- ¿Qué pasa? - Me atreví a preguntar.

- ¿Además de esconderme cosas, ni nos presentas... ? Jordan, no te eduqué así... -

- Ni siquiera me educaste... - Murmura él.

Ella lo fulmina y noté la tensión aumentando en Jordan.

- Como sea... Soy... Taylor... - Sonríe - Tú eres Nicol ¿No es así? -

- Si... - Respondí simple pero aún alerta por las reacciones de Jordan.

- Aha... me parecía que eras tú... y que fue por ti... - Se acerca pero Jordan igual a ella.

- Madre, no te... -

Sorpresivamente, Taylor ataca a Jordan quien intenta defenderse pero parece no poder hacerlo contra ella. Me alerté aún más pero sin saber que debería hacer, solo vi como Taylor hacia que Jordan adoptara una posición sumisa a pesar de seguir gruñiendo.

Baja la cabeza, mientras Taylor se endereza y pasa por su lado acercándose hacia mi. Miré a Jordan pero él ya no quería verme.

- Aún piensa que puede conmigo, que tierno - Se burla ella, cosa que no me agradó - Ahora... -

Ella comienza a caminar a mi alrededor, analizándome. Yo la miraba de reojo sin moverme para saber que era lo que quería y lo que estaba haciendo, entonces termina frente a mi de nuevo.

- Eres igual a tu madre... - Su tono demostraba desprecio y asco.

- ¿Cómo conoce a mi madre? - Pregunté.

- Digamos que... fuimos al mismo instituto, gracias a ella entiendo el dolor por el que la pobre Regina está pasando ahora -

- ¿Ah? -

- ¿No te lo dijeron? Tu padre fue mi novio, era tan feliz con él hasta que esa maldita apareció - Comencé a gruñir.

- No vuelva a referirte así de mi madre - Dije con voz de Alpha.

- Ese es el carácter de Jake, demandante y fuerte, era todo un bombón, todo un Alpha hecho y derecho - Dijo haciendo muecas de enamorada por un momento.

Miré a Jordan mientras aquella loba fantaseaba, él estaba avergonzado pero seguía mirando a su madre atento a cualquier cosa. No bajaba la guardia ni por un segundo.

- ¿En serio tus padres no te contaron de mi? - Pregunta haciéndose de la indignada.

- Supongo que no eras de un tema importante para que me lo contaran - Dije sonriendo. Ella frunce el ceño.

- Cuidando en como me hablas, niña estúpida - Dice acercándose con aires de intimidación.

Me coloqué firme y comencé a gruñir al igual que ella. Intentó que hiciera como Jordan y bajara la cabeza pero yo no lo haría. Mis ojos se volvieron rojos y me enderecé más.

Ella al ver que no me doblegaba, dejo de gruñir y se apartó un poco pero manteniéndose firme. Sonríe.

- Creo que ya fue suficiente por hoy, salúdame a tus padres - Dice dándose la vuelta, pasó junto a Jordan y le gruñó dándole la orden de irse, entonces ella se aleja hasta que ya no la percibí.

Finalmemte Jordan se mueve, se acerca a mi aún con la mirada en el suelo, seguramente por la vergüenza.

- Debo irme - Dijo.

- Jordan... - Froté mi cabeza debajo de la suya - No dejes que esa mujer te doblegue, aunque sea tu madre -

- Eso intento... -

- Lo sé... - Suspiré. Le di una pequeña lamida en la mejilla antes de pasar por su lado - También debo irme... -

- Está bien... cuídate, por favor -

- Lo haré, tú igual cuídate -

Asiente y yo me fui corriendo. Llegué a la manada pensando en aquella mujer y en todo lo que había dicho.

Entré a casa y busqué a mis padres para directamente ir al punto.

- ¿Quién es Taylor? -