Xx- El ataque valeroso, osado y decidido de Marley. Les permitió conquistar el Fuerte Slava.

Tras el anuncio de aquel hombre todos estaban contentos y felices al tener 4 años de guerra contra los enemigos.

La mujer de cabellos castaños pago el periódico para así retirarse leyendo los informes de ese periódico ignorando a los demas.

Ella al llegar a su casa, abrió la puerta para así sonreír.

Violet- Falco, estoy en casa. -Dijo ella con sonrisa.

Falco- Señora Margareth. -Contesto el cargando a una bebe de 2 años.

Mientras tanto en una habitación el viento azotaba moviendo las sabanas.

El hombre de cabello rubio se encontraba acostado en su cama frunciendo el ceño soñando con aquella hermosa chica de cabellos gris.

Violet era la que sonreia en aquel sueño que el tenia pero de pronto Reiner veía como ella se alejaba y el sentía que no la podía alcanzar.

Reiner- ¡Espera!. -Exclamó alzando la mano mirando al techo en Shock. Cuando Reacciono se puso esa misma mano en la cara para sentarse en la cama.

Xx- Parecía que estabas teniendo un sueño divertido. Así que no te desperté.

Reiner- Aún no te agradeci por lo de esa vez, Galliard, me salvaste.

Porco- No necesito eso. Si hace nueve años yo hubiese sido elegido para ser el Titan Acorazado, nada de esto habría pasado. Mi hermano no hubiese tenido que salvar tu triste trasero.

Reiner- ¿Viste los recuerdos de Marcel?.

Porco- No. Pero aunque fuese por solo un poco, pude entender a Ymir. Le dieron un nombre demasiado grande para ella... pobre chica. Fue su propia voluntad devolver a "Mandíbula" el poder de mi hermano, a Marley, ¿cierto?.

Reiner- Si, así es.

Porco- ¿Que fue lo que lograste en esa isla?. Todo lo que hiciste fue sentarte y dejar que todo el mundo te salvará, ¿no?, tienes los recuerdos de esa mujer, ¿no?. Oye, por cierto... ¿Quien es esa mujer llamada Violet?.

Reiner alzó sorprendido su mirada viendo a Porco quien lo miraba seriamente.

Reiner- ¿Como sabes quien...

Porco- Aparece en uno de los recuerdos de Ymir. -Aclaro el haciendo que Reiner mirara el suelo pensando en la hermosa sonrisa de ella.- Esta más que claro que estas siempre pensando en ella, admito que es muy hermosa... pero recuerda, es uno de esos demonios.

Reiner- Oye, ¿Sabes donde esta Flaco?.

Porco- Se encuentra con una mujer que el se encariño, es una hermosa mujer de cabellos castaños y ojos celestes como el cielo.

Reiner abrió sus ojos nuevamente sorprendido al escuchar ese detalle.

Reiner- ¿Sabes como se llama?.

Porco- No, creo que se llama Margara... Margaret no lo se.

Reiner nada más bajo la mirada con tristeza.

Reiner- Si, sería una locura que ella estuviera aquí. -Pensó el.- Después de todo se que no me perdonara por lo sucedido.

En otra parte estaba Falco sonriendo mientras que veía veía la bebe.

Falco- Señora Margareth, una pregunta, ¿Quien es el padre de esta bebé?.

Violet solo dejo de cocina para así girar su rostro seriamente mirando a su hija, para luego mirar al suelo con tristeza.

Violet- Es un hombre descarado que solo nos abandono. -Contesto para seguir cocinando.

Falco- Entiendo, pero verá que ese hombre estaba sufriendo por lo que hizo.

Violet- ¿Eh?.

Falco- Bueno... digo. -Este desvío su mirada sonrojado.- Usted es una hermosa mujer, con un hermoso corazón. -Dijo mirando a Violet con una sonrisa.- Así que dudo mucho que ese hombre comprenda lo que es usted en realidad. -La mencionada cuando termino apago la estufa para acercarse al chico.

Violet- Ay Falco. -Dijo sonriendo.- Bueno, olvidemos eso, ¿comerás aquí o iras con tu familia?.

Falco- Quisiera comer aquí.

Violet- ¿Y si te dicen algo?.

Falco- Comere por segunda vez en mi casa.

Violet- Falco. -Regaño ella con una leve risa.- Bien, prepara la mesa.

Falco- Entendido. -Dijo para así comenzar a poner los cubiertos y platos encima de la mesa, para después comer con Violet quien se encargaba de darle a su hija de comer.

Cuando terminaron Falco se encargo de lavar los platos mientras que Violet bajaba de las escaleras para dirigirse donde Falco.

Violet- Listo, ya la cambie. Ya podemos irnos. -Le dijo ella sonriendo mientras que cargaba a la bebé.

Falco- ¿Irnos a donde?.

Violet- Iré al hospital para informarle a un médico que revise a mi hija, ¿Quieres venir?.

Falco- Si, con gusto. -Dijo y así Violet y Falco salieron de casa mientras que se dirigían al hospital.

Violet- Esta hermoso el día.

Falco- Tiene razón. -Dijo viendo el cielo que era de naranja con celeste.

Mientras que ellos estaban allí, un hombre de cabellos castaños se encontraba cabizbajo sentado en la banca mirando el suelo.

Violet- Me adelantare. -Le dijo y Falco asintio para así ver a la mujer caminar adelantándose dejandolo de pie fuera del hospital.

El hombre alzó la mirada al escuchar esos pasos pero solo logró ver la cabellera castaña de ella más con la bebé  que tenía tenía mismo color de cabello, aun así el sintió una extraña sensación de adrenalina al ver esa mujer.

Pero el volteo a ver la entrada encontrándose con el chico que tenía mirada pegada a la mujer.

Falco- Espero que la señora Margareth se encuentre bien después de que su esposo la haya dejado...

Xx- ¡Oi!. -Escucho el y giro su cabeza observando al hombre que lo había llamado.

(......)

Falco- Este... parece que te va muy bien, incluso puedes charlar conmigo.

Xx- Así es. Pero estaba fingiendo necesitar un tratamiento.

Falco- ¿Eh?. -Quejo el mirando al castaño.

Xx- Finjo que no puedo ir a casa por una incapacidad en mi memoria, pero simplemente no quiero regresar. No sé cómo se supone que pueda ver a la cara a mi familia. ¿Le dirás a los del hospital?.

Falco- No lo hare.

Xx- Estas herido, ¿es por el entrenamiento para convertirse en Guerrero?. -Le preguntó mirando al chico.

Falco- Si, pero no lo seré... otro candidato es mucho más apropiado, jamás tendré la oportunidad.

Xx- Que bueno. -Falco lo miro sorprendido.- Eres una buena persona, me alegra que puedas vivir una vida larga.

Falco- Pero no quiero ser un guerrero.

Xx- ¿Por que?. -Dijo mirando a Falco quien solo miraba el suelo.- ¿Es una chica?.

Falco- Es famosa, incluso, tuvo un papel importante en la última guerra. Todos dicen que ella será la próxima Acorazada, pero yo moriré sin hacer nada, ya carezco de Fuerza. Lo único que me motiva son los consejos de ella.

Xx- ¿De quien?. -Pregunto el en eso Falco escucha la voz entendible de Violet y alza la mirada llamando la atención del hombre de cabellos castaños quien dirigió la mirada a la mujer misma que vio hablando con un Medico.

Falco con una sonrisa se levantó para así dirigirse donde ella, Violet con una sonrisa empezó a mover sus labios mientras que Falco igual lo hacía, ambos tenían una conversación que Eren Jaeger no entendía.

Eren logro observar como Falco se acercaba a el pero ahora con una bebé en los brazos.

Falco- Señor Kruger, le presento a Rose. -Le dijo a Eren sorprendiendolo.

— ¿Como quieres que se llame?. -Pregunto el castaño acariciando el búlgaro algo grande de su pareja.

— He estado pensando mucho, y creo que ya lo tengo... Se le llamara...

Eren- Rose. -Dijo recordando cuando su mujer le habia mencionado el nombre del bebé que le pondría cuando naciera.

Eren alzó su mano a dirección hacia Rose, para asi acariciar la mejilla de la bebé y acomparacion de su tono de piel la de la bebé era una piel delicada, suave y blanca casi el mismo tono de su madre.

Falco- La señora Margareth me contó que ella quedó embarazada con 7 meses cuando su esposo se fue abandonandola.

Eren- Es una terrible noticia. -Comento el aunque por dentro le dolió saber que había abandonado a su mujer e hijo solo para estar en esa mision.- Una mujer hermosa, con una bebé igual que ella, a de ser un hombre completamente estupido para dejarlas.

Falco- Eso es lo que pienso siempre... -Dirigió la mirada a Violet quien sonreia hablando con el médico.- La señora Margareth no merece este sufriendo, ella es tan amable, cariñosa que me trata como si fuera su hijo.

Eren- ¿Así te trata?. -Pregunto el dirigiendo la mirada a Violet.- Ya veo.

Falco- Y yo la he estado considerando como una, ella ya a hablado con mis padres y ellos concuerdan que La señora Margareth es una hermosa mujer de buen corazón.

Eren solo se quedó callado mirando a su mujer desde esa distancia. Pero su mirada era preocupante pero sería por fuera.