El laboratorio de Seokjin estaba lleno de pantallas, cables y gráficos en 3D que flotaban en el aire, proyectando datos y códigos. Era un espacio ordenado, pero con una sensación de caos palpable: el tipo de caos que solo existe cuando alguien está buscando algo tan crucial que cada segundo cuenta. Seokjin estaba de pie frente a una mesa llena de planos y diagramas detallados de los androides de última generación. En el centro de la mesa reposaba el nombre "A-22" en letras grandes, acompañado de diagramas del cuerpo de Taehyung y las modificaciones que Frank Nolaso había hecho para hacerlo único.

El científico, con su bata blanca, fruncía el ceño mientras examinaba los planos de Nolaso. Sabía que el androide A-22 no era solo una máquina. Había algo en su estructura, en su programación, que iba más allá de cualquier cosa que la NASA hubiera visto antes. Pero había algo que aún no lograba entender completamente, el chip localizador. A pesar de sus mejores esfuerzos, no encontraba ninguna pista sobre su paradero.

Seokjin tocó la pantalla de su terminal, haciendo que aparecieran más diagramas y líneas de código en las que se había sumergido durante días. Intentó forzar una nueva búsqueda en el sistema, pero cada intento de rastrear el chip era inútil. Sabía que estaba cerca de un hallazgo, pero todo lo que había logrado eran resultados negativos.

— Maldita sea... — murmuró, exasperado, mientras volvía a mirar los planos de Nolaso — ¿Por qué no está aquí? ¿Dónde demonios escondió el otro chip?

Con un suspiro de frustración, se pasó una mano por el cabello y miró de nuevo los planos, observando con más detenimiento. Había una serie de líneas de código codificadas que parecían no tener sentido a simple vista, pero que, de alguna manera, lo hacían sentir que estaba justo al borde de algo importante. Sin embargo, cada vez que intentaba develar el misterio, todo se volvía más difuso.

El androide A-22 había desaparecido sin dejar rastro, pero Seokjin sabía que el androide seguía siendo el punto de interés. Si lograba encontrarlo, podría obtener respuestas a sus preguntas y llevar a cabo los experimentos que tenía en mente. Pero, por ahora, el chip localizador seguía eludiéndolo.

Más tarde, en una de las salas contiguas del laboratorio, Seokjin estaba revisando otros datos cuando escuchó la puerta abrirse. Era Namjoon, quien con paso decidido, se acercó al escritorio de Seokjin, que lo miró brevemente.

— ¿Tienes algo? — preguntó Seokjin, sin levantar la vista de la pantalla.

Namjoon se apoyó en la mesa, cruzando los brazos mientras le dirigía una mirada firme.

— Sí — respondió Namjoon, su tono serio — Yoongi y Hoseok encontraron al chico que probablemente tiene al androide.

Jin levantó la cabeza, ahora completamente atento.

— ¿En serio? — preguntó, con interés. De inmediato, comenzó a escribir rápidamente en su terminal, guardando la información.

— Sí, pero... — Namjoon hizo una pausa, notando que Seokjin esperaba una explicación más detallada — El chico no dijo nada. No mencionó nada sobre el androide. No cooperó.

Seokjin frunció el ceño, pensativo.

— ¿Qué quieres decir con que "no dijo nada"? — preguntó, con el ceño fruncido. Sabía que los métodos de Yoongi y Hoseok no eran exactamente sutiles, pero si el chico no estaba cooperando, eso complicaba las cosas.

— Lo que quiero decir es que simplemente no habló. Lo interrogaron, pero no dio respuestas claras. Sin embargo, hay algo más... —Namjoon lo miró fijamente, como si quisiera asegurarse de que Seokjin prestara atención a lo siguiente — El chico es ciego.

Seokjin parpadeó, sin comprender del todo la implicación.

— ¿Ciego? — repitió, como si estuviera tratando de procesarlo —  Eso no tiene sentido. ¿Un chico ciego tiene al androide? ¿Y por qué no dijo nada?

Namjoon se encogió de hombros, mostrando que también estaba algo confundido por el giro inesperado de los eventos.

— Eso es lo que nos dijeron. El tipo parecía desconcertado por las preguntas, pero no dijo nada relevante. Yoongi y Hoseok lo dejaron ir, pero... — Namjoon hizo una pausa, mirando a Seokjin con una expresión grave — A pesar de que no obtuvieron respuestas, han decidido mantenerlo bajo vigilancia. Lo estarán observando en todo momento. Están seguros de haberlo visto con el androide en esas grabaciones.

Seokjin se quedó en silencio unos segundos, procesando la nueva información. El hecho de que el chico fuera ciego parecía una anomalía, una pieza del rompecabezas que no encajaba del todo bien. Sin embargo, no podía ignorar la posibilidad de que ese chico fuera clave para encontrar a A-22. Y si estaba relacionado con el androide, no podían dejarlo ir tan fácilmente.

— Mantén un ojo en ellos — dijo Seokjin, decidido. Su mente comenzaba a formular teorías sobre por qué este chico, aparentemente tan ordinario, estaba involucrado — Si no habló, tal vez no sea tan sencillo como parece. Asegúrate de que Yoongi y Hoseok sigan vigilando al chico. Tal vez hay algo más que no hemos considerado.

Namjoon asintió, entendiendo lo que Seokjin quería decir.

— Lo haré. Lo mantendré informado — respondió, dando un paso hacia la puerta.

Seokjin se quedó mirando la pantalla, pensativo. Había algo extraño en todo esto. Un chico ciego, sin decir una palabra sobre el androide... pero él sabía que no podían permitirse perderse ni el menor detalle. A-22, el chip... todo estaba conectado de una manera que aún no comprendía por completo.

Pero, sin duda, estaba más cerca de encontrar las respuestas que tanto buscaba.

.

La tarde caía lentamente en el departamento de Jungkook, y la luz suave que se filtraba a través de las cortinas proporcionaba un ambiente acogedor. El sonido de la televisión, con Buscando a Nemo reproduciéndose en el fondo, llenaba el espacio mientras Taehyung se encargaba de alimentar a Doris, el pez de Jungkook. Con la misma precisión con la que ejecutaba cualquier tarea, Taehyung depositó una pequeña cantidad de alimento en el agua, observando cómo Doris se acercaba rápidamente a comer.

Jungkook estaba sentado en el sofá, su bastón descansando a su lado, con los ojos fijos en el cuaderno frente a él. Aunque la película seguía su curso, con los personajes animados de la película disfrutando de una nueva aventura, su mente estaba lejos de los colores brillantes y las criaturas marinas. Estaba pensando en lo ocurrido esa mañana, cuando los agentes Hoseok y Yoongi lo interrogaron. La inquietud y la incomodidad seguían dando vueltas en su cabeza. ¿Qué querían esos agentes? ¿Por qué estaban tan interesados en él?

De repente, la inquietud lo impulsó a hablar en voz baja, sin mirar a Taehyung, pero sabiendo que él siempre estaba atento.

— Esos tipos... — Jungkook murmuró, dejando que las palabras salieran sin mucha deliberación — Los agentes... ¿por qué me están vigilando?

Taehyung, que acababa de alejarse un paso del acuario, giró lentamente hacia él, como si la pregunta de Jungkook lo hubiera sacado de sus pensamientos. Había algo en su tono que indicaba que lo que acababa de suceder lo había afectado.

Escaneando......Miedo 80%

Escaneando......Confusión 87%

— ¿Agentes? — preguntó Taehyung, levantando una ceja, y luego se acercó un paso hacia Jungkook, con la mirada fija en él — ¿Quiénes son esos agentes?

Jungkook dejó escapar un suspiro, dándose cuenta de que Taehyung no tenía la menor idea de lo que había sucedido esa mañana. Decidió que tenía que explicarlo, aunque no entendía cómo los científicos, los mismos que lo habían estado buscando durante tanto tiempo, habían encontrado la forma de interrogarlo sin que él lo supiera antes.

— Hoseok y Yoongi... —empezó Jungkook, con un tono serio, mientras se recostaba un poco más en el sofá — Son de la NASA, o al menos eso dicen. Están buscando a alguien, o mejor dicho... algo. Me interrogaron esta mañana. No sabían nada sobre mí al principio, pero poco a poco comenzaron a hacer preguntas raras. Se interesaron por el hecho de que no soy una persona "común". Me hicieron un montón de preguntas sobre el "androide".

Taehyung frunció el ceño ligeramente, procesando las palabras de Jungkook, pero sin interrumpir. A pesar de su capacidad de procesamiento avanzada, el hecho de que los agentes lo estuvieran buscando aún no encajaba en su mente de inmediato. Él había sido creado para proteger a Jungkook, pero hasta ese momento, no sabía que los científicos lo habían relacionado con el chico ciego.

— ¿Te interrogaron? — preguntó Taehyung finalmente, acercándose más. Aunque su rostro seguía siendo impasible, algo en su postura revelaba que estaba interesado en los detalles —  ¿Y qué dijeron exactamente?

Jungkook se frotó la frente, todavía algo agobiado por los recuerdos. No quería pensar demasiado en ello, pero sabía que tenía que explicárselo a Taehyung.

— Bueno, primero me preguntaron por el "androide" en general, pero después... — Jungkook hizo una pausa, recordando el momento exacto cuando lo habían llevado fuera del aula, todo tan repentino — Se dieron cuenta de que yo no sabía nada, pero no me dejaron ir. Empezaron a decir cosas sobre cómo había estado "cerca de un androide" y cómo querían saber más sobre "su ubicación". Luego, se dieron cuenta de que había algo raro en mí... Como si hubiera algo que me conectara con ese androide. Pero no dijeron su nombre. No mencionaron nada sobre ti.

Taehyung escuchó en silencio, sin interrumpir. Aunque no podía sentir la incomodidad de Jungkook, comprendía la presión que había experimentado. En su interior, una alarma silenciosa comenzaba a sonar. Todo esto no parecía ser una simple coincidencia. Algo más estaba sucediendo, algo que no podía ser ignorado.

Finalmente, Taehyung cruzó los brazos, observando a Jungkook con su mirada penetrante.

— ¿Y qué te dijeron? ¿Qué querían de ti? — preguntó, su tono sin emociones pero firme.

— Nada claro — Jungkook negó con la cabeza — Solo que querían saber más, y me mantendrán bajo vigilancia. Eso me tiene preocupado. Pero... no mencionaron directamente mi conexión contigo. Aún no saben nada.

Taehyung hizo una ligera inclinación de cabeza, procesando todo lo que acababa de escuchar. Finalmente, dio un paso hacia el sofá y se sentó junto a Jungkook, dejando que el silencio ocupara el espacio por unos segundos. Sabía que no podía revelarle toda la información de inmediato, pero no podía dejar de pensar en las implicaciones de lo que Jungkook le había contado.

— Hoseok y Yoongi... —Taehyung repitió, en un susurro casi inaudible

—  "Jung Hoseok"
- Fecha de Nacimiento: 16/Febrero/2001 (29 años)
- Nació en New Jersey.
- Experto en Inteligencia y Rastreo de Información.
- Alergia: Salsa de Soya y Gluten.
- Empleo: Área 51.
- Jefe: Kim Seokjin

—  "Min Yoongi"
- Fecha de Nacimiento: 09/Marzo/2000 (30 años)
- Nació en Michigan.
- Especialista en Operaciones de Campo y Tácticas.
- Alergia: Lactosa y Huevo.
- Empleo: NASA.
- Jefe: Kim Seokjin

Jungkook escuchó detenidamente mientras Taehyung escaneaba la información que tenía de ambos agentes.

— Son agentes de inteligencia. Tienen información sobre nosotros, aunque no saben mucho, estoy seguro que saben lo necesario, están bajo la Influencia de Kim Namjoon. Los dos están buscando algo. Y sé que no se detendrán hasta encontrarlo.

Jungkook lo miró con incredulidad. No esperaba que Taehyung supiera tanto sobre ellos.

—¿Sabes todo eso? —preguntó, un poco sorprendido. No sabía que Taehyung tuviera información tan precisa sobre los agentes y su conexión con los científicos.

Taehyung asintió ligeramente, manteniendo su expresión inmutable.

— Sé lo suficiente — Se detuvo un momento y luego añadió — Hoseok tiene 29 años, Yoongi tiene 30. Son expertos en sus respectivos campos. Uno se especializa en el rastreo de información, el otro en operaciones de campo. Son muy buenos en lo que hacen, pero no saben lo que están buscando. Y lo que buscan es algo mucho más grande de lo que imaginan.

Jungkook se recostó en el sofá, pensativo. El peso de las palabras de Taehyung lo alcanzó de inmediato. Si esos agentes estaban buscando algo relacionado con él, y si no sabían que Taehyung era un androide, entonces la situación se volvía mucho más peligrosa de lo que parecía.

— ¿Qué vamos a hacer? — preguntó Jungkook, su voz grave, mirando a Taehyung como si esperara una respuesta que lo tranquilizara.

Taehyung lo miró fijamente, sus ojos reflejando una determinación silenciosa.

— Lo único que podemos hacer, estar alerta. Ellos no nos dejarán tranquilos, pero mientras estemos preparados, podremos adelantarnos a sus movimientos.

Jungkook asintió lentamente, sabiendo que, con Taehyung a su lado, al menos no estaría solo en esto. Aunque no sabía qué les depararía el futuro, algo dentro de él le decía que debía confiar en el androide. Después de todo, Taehyung siempre había estado a su lado, sin importar las circunstancias.

La película en la televisión seguía su curso, pero para Jungkook, el mundo fuera del apartamento era mucho más complejo y peligroso de lo que había imaginado. Los agentes estaban en su camino, y Taehyung sabía mucho más de lo que él había sospechado.