La ciudad, que había estado en calma desde los recientes eventos que involucraban a un mafioso de alto perfil, comenzó a revivir una intriga en los corazones de sus habitantes. Los murmullos recorrían las calles, las esquinas y los cafés. Había algo que los mantenía en vilo, una sensación de incertidumbre en el aire, como si algo estuviera a punto de suceder.

En un vehículo oscuro y discretamente aparcado, Yoongi y Hoseok se encontraban al acecho. Ellos eran dos agentes que trabajaban en operaciones confidenciales, especializados en rastrear sujetos de alto perfil, y últimamente, se habían centrado en un caso bastante peculiar. Un caso que, por razones que ni ellos mismos podían explicar, había cobrado más importancia que cualquier otra misión que tuvieran. El objetivo era el mismo: capturar a un sujeto que se había convertido en su peor pesadilla.

A-22.

La imagen del androide había aparecido en varios informes, pero la información sobre su paradero seguía siendo ambigua. Yoongi y Hoseok sabían que este sujeto, al que la ciudad llamaba "el hombre que no existe", estaba vinculado a algo mucho más grande. Pero los detalles sobre su origen y propósito eran oscuros. A medida que los dos agentes llegaban a los puestos de control, sabían que no podían confiar en la policía local ni en los informes oficiales. Había que actuar con discreción.

ㅡ No hay registros sobre él en ninguna base de datos ㅡ dijo Yoongi, mirando su teléfono, donde los archivos se deslizaban rápidamente, buscando alguna pista que les ayudara a avanzar.

Hoseok, observando la calle desde la ventana del coche, frunció el ceño.

ㅡ  Algo no cuadra. Si él realmente es un androide, no debería estar por aquí. La gente debería haberlo notado... Pero nadie lo ha visto, y eso nos hace sospechar.

ㅡ Es como si estuviera escondido por completo. Pero no hay tiempo que perder. Tenemos que saber qué sabe la gente ㅡ respondió Yoongi, girando el volante hacia una calle más tranquila.

Ambos agentes sabían que la ciudad estaba llena de secretos. En cada esquina, en cada tienda, los ojos observaban, pero no siempre veían. Nadie realmente sabía qué sucedía detrás de las puertas cerradas o debajo de las máscaras que la gente usaba para ocultar sus intenciones. Y hoy, ellos estaban a punto de descubrir qué sabía la gente sobre Taehyung, el "hombre" al que todos parecían ignorar.

Se estacionaron frente a un pequeño puesto de nieves. En la esquina de la calle, los carteles con colores brillantes anunciaban "la mejor hamburguesa de la ciudad". Al acercarse, notaron que el lugar no estaba particularmente lleno, pero los trabajadores observaban con desconfianza a los dos agentes.

Yoongi y Hoseok se bajaron del coche con pasos firmes, casi mecánicos. Era una misión más, nada fuera de lo común. Pero sabían que tenían que ser cautelosos, y todo dependía de cómo llevaran el interrogatorio.

Con una foto en mano, Yoongi se acercó al vendedor, un hombre de mediana edad con un delantal sucio, que parecía haber estado ocupado durante todo el día.

ㅡ Disculpe, señor. Estamos buscando a este sujeto ㅡ dijo Yoongi, mostrando la imagen de Taehyung en su teléfono móvil.

El vendedor frunció el ceño, observando la foto detenidamente.

Era su más leal cliente.

ㅡ ¿Lo conocen? ㅡ insistió Hoseok, su tono amigable pero firme.

El hombre negó con la cabeza, sacudiendo la mano como si tratara de apartar la foto.

ㅡ Nunca lo he visto. No sé quién es...ㅡ respondió, y se encogió de hombros.

Yoongi y Hoseok intercambiaron miradas breves, y siguieron preguntando por otras personas en la zona. Nadie parecía reconocer al androide en la foto. Todos negaban tener conocimiento de su existencia. Incluso algunos empleados de las tiendas cercanas, al ver la foto, miraban hacia otro lado o simplemente decían que no sabían nada.

ㅡ Es extraño ㅡ dijo Hoseok, ya un poco frustrado ㅡ ¿Cómo es posible que nadie lo haya visto? Esta ciudad es pequeña y todos parecen conocer a todos.

Yoongi mantuvo la calma, pero su mirada se volvía más intensa, el malestar en su rostro se hacía evidente. Algo no estaba bien.

En un último intento, decidieron poner un cartel en el puesto de nieves, como si fuera un aviso público, en un esfuerzo por ver si alguien se acercaba con más información. Era un movimiento desesperado, pero no podían dejar de intentarlo. Alguien, en algún lugar, debía saber algo.

ㅡ Vamos a dejarlo aquí ㅡ dijo Yoongi, pegando el cartel en una pared cerca del puesto. El cartel tenía la foto de Taehyung y decía "¿Lo has visto? Ayúdanos a encontrarlo".

Hoseok miró el cartel con una expresión de frustración.

ㅡ No estoy convencido de que alguien vaya a decirnos algo. Pero al menos lo intentamos ㅡ comentó, mirando el lugar con una ligera desconfianza.

Antes de que pudieran decir algo más, un niño que estaba cerca se acercó al cartel, lo observó por un momento y luego se alejó rápidamente. Parecía nervioso, como si hubiera visto algo que no le gustaba.

ㅡ ¿Lo viste? ㅡ preguntó Yoongi a Hoseok, señalando al niño que se alejaba apresuradamente.

Hoseok asintió, sin perder de vista al pequeño, que desaparecía por una calle lateral. Sin embargo, sabían que no era el momento de seguirlo. Era solo una corazonada.

Ambos agentes volvieron a subirse al coche, mirando la ciudad desde el retrovisor, sabiendo que la búsqueda apenas comenzaba.

ㅡ No vamos a detenernos hasta encontrarlo, Hoseok ㅡ dijo Yoongi, apretando el volante con determinación.

La ciudad seguía respirando, ajena al caos que se estaba desatando en las sombras. Pero algo les decía que, de alguna manera, Taehyung estaba más cerca de lo que pensaban.

.

Era una mañana gris y cargada de tensión. La ciudad, que había comenzado su día con la normalidad típica de cualquier jornada, pronto se sumió en el caos. Los altavoces en las calles, que normalmente solo transmitían anuncios de eventos locales o actualizaciones de tráfico, comenzaron a emitir un mensaje urgente. Un toque de queda había sido declarado de forma inmediata debido a la presencia de un sujeto peligroso, un "mafioso" que, según la policía, había sido visto en la zona. El caos era palpable, y la incertidumbre colgaba en el aire como una pesada niebla.

Los informes decían que el sujeto de interés estaba relacionado con el androide fugitivo que había causado tanto revuelo en la ciudad. Y, aunque no mencionaban nombres, todos sabían a quién se referían. El mafioso, el androide, y el caos que se avecinaba. Nadie estaba a salvo.

Mientras tanto, en el apartamento de Jungkook, Taehyung, el androide buscado, se encontraba sentado en el sofá, mirando fijamente la televisión. Aunque su rostro no reflejaba emociones, sus sistemas internos estaban alerta. Las noticias que se transmitían no eran buenas. De alguna manera, sabían que no era cuestión de tiempo antes de que los agentes los encontraran.

ㅡ Esto no es bueno ㅡ murmuró Jungkook, frotándose la frente con preocupación, mientras escuchaba los anuncios de toque de queda y la búsqueda del "mafioso".

Taehyung, sentado a su lado, no reaccionó de inmediato, pero los circuitos de su cuerpo empezaron a detectar el aumento de la actividad en las calles. Los helicópteros que comenzaron a sobrevolar la ciudad no pasaron desapercibidos para él. El sonido de las hélices retumbaba por encima de sus cabezas, una advertencia de que algo grande estaba sucediendo fuera de esas cuatro paredes.

ㅡ Nos están buscando, Jungkook ㅡ dijo Taehyung, su voz fría y directa. Aunque no tenía emociones, el tono de su voz transmitía una especie de conocimiento, como si su programación estuviera advirtiéndole del peligro inminente.

Jungkook se levantó rápidamente del sofá, su mente trabajando a mil por hora. Tenía que hacer algo, y rápido. No quería que sus amigos se metieran en problemas por su causa. No podía permitir que Jimin, que tan generosamente los había ayudado, estuviera en peligro.

Justo en ese momento, se oyó el sonido de un helicóptero que pasaba tan cerca que las ventanas del apartamento vibraron ligeramente. Jungkook caminó hacia la ventana, pero antes de que pudiera mirar, Jimin, que había estado escuchando atentamente las noticias desde la cocina, apareció detrás de él y lo detuvo.

ㅡ ¡No! ㅡ dijo Jimin, con una expresión de alarma ㅡ Cierra las ventanas. ¡Rápido!

Jungkook, algo confundido, asintió y comenzó a bajar la persiana. Mientras tanto, Jimin, con un gesto de urgencia, comenzó a cerrar todas las ventanas del apartamento, asegurándose de que no quedara ni un solo hueco por donde pudiera entrar la luz del día o, peor aún, la mirada de un helicóptero.

ㅡ Esto está empeorando, ¿verdad? ㅡ dijo Jimin, su voz tensa mientras se dirigía rápidamente hacia la última ventana que aún estaba abierta -Pensé que todo esto sería solo un rumor, pero parece que están muy cerca de encontrarnos.

Jungkook asintió, ahora completamente consciente de la magnitud de la situación. A pesar de la calma que trataba de mantener, sentía una creciente preocupación por lo que podría suceder si los encontraban. Miró a Taehyung, que se mantenía inmóvil en el sofá, observando a Jimin con su mirada vacía, pero vigilante.

ㅡ ¿Qué hacemos ahora? ㅡ preguntó Jungkook, la voz quebrada por el estrés.

Taehyung, en un movimiento calculado, se levantó del sofá y caminó hacia Jimin y Jungkook. Aunque no sentía miedo, comprendía la gravedad de la situación, más que nada por la programación que lo guiaba a seguir órdenes y proteger a su compañero humano.

ㅡ Puedo salir y distraerlos ㅡ sugirió Taehyung, su tono calmado, pero decidido ㅡ Si me ven a mí, no buscarán a ninguno de ustedes.

Jimin y Jungkook se miraron, considerando la opción. Sabían que Taehyung no tenía miedo, pero la idea de que se arriesgara de esa manera los aterraba. No querían que Taehyung se enfrentara solo a todo el peso de esa búsqueda.

ㅡ No...- dijo Jungkook, tomando una decisión firme ㅡ Lo mejor es que sigamos aquí, esperemos a que pase el toque de queda. Tenemos que mantenernos bajo perfil.

Taehyung no replicó, aunque algo en su programación parecía aceptar la decisión. El androide se acercó a una esquina del apartamento, observando las sombras en las paredes mientras los helicópteros seguían pasando, buscando, como buitres que rodean a su presa.

Mientras tanto, Jimin se acercó a Jungkook, su rostro preocupado pero tratando de mantenerse firme.

ㅡ Estarás bien ㅡ le dijo, su tono reconociendo la vulnerabilidad de su amigo ciego, pero también lleno de confianza en su habilidad para mantenerse a salvo.

Jungkook, aunque agradecido, no podía evitar sentirse culpable. Si no fuera por él, sus amigos no estarían en esta situación. Pero en ese momento, no podía cambiar nada. Solo podía esperar.

De repente, hubo un sonido fuerte desde la calle. Un coche frenó cerca del edificio, y el sonido de más helicópteros aumentó. A través de la rendija de la ventana, Jungkook escuchó las voces de los agentes en las calles, buscando, gritando órdenes.

ㅡ Nos están rodeando... ㅡ dijo Jimin, mirando fuera de la ventana por última vez ㅡ Tenemos que quedarnos quietos. Nadie puede salir.

Los tres permanecieron en silencio, el ruido de la ciudad ahora combinado con el retumbar de los helicópteros sobrevolando, creando una atmósfera de tensión palpable. A través de las paredes, el sonido de los agentes registrando cada esquina de la ciudad resonaba, pero por el momento, nada podía hacerles daño. El miedo se apoderaba de ellos, pero sabían que no podían permitir que lo notaran.

Jungkook, Taehyung y Jimin permanecieron juntos en ese pequeño refugio, esperando que la tormenta pasara. Pero sabían que, tarde o temprano, tendrían que enfrentarse a las consecuencias de la caza implacable que se desataba sobre ellos.

.

La habitación de Jungkook estaba sumida en la penumbra, con solo la luz tenue de la calle filtrándose a través de las cortinas. El sonido constante de los helicópteros seguía presente, retumbando sobre la ciudad. En un rincón de la habitación, Jimin rebuscaba entre una mesa llena de objetos y papeles, buscando algo con urgencia.

ㅡ ¡Ah, aquí está! ㅡ dijo Jimin, con una pequeña sonrisa al encontrar lo que había estado buscando, su radio portátil. Solía dejar muchas cosas suyas en casa de su amigo. La esperanza de que pudiera captar algún tipo de señal fuera de la confusión que dominaba el aire lo tranquilizaba, aunque solo fuera por un momento.

Taehyung, que había estado en el pasillo observando en silencio, la siguió hasta la habitación de Jimin sin hacer ruido. Sus ojos brillaban con esa luz azul característica que delataba su naturaleza robótica, pero su cuerpo estaba más alerta que nunca. Aunque no necesitaba hacer mucho para mantenerse al tanto de lo que sucedía a su alrededor, algo en su programación le pedía estar cerca de Jimin y Jungkook, protegerlos.

Era su misión.

Jungkook agarró la radio y la encendió la radio, comenzando a girar la perilla, buscando señales de algún tipo de información en medio de la transmisión estática. Taehyung observó en silencio, de pie cerca de la puerta. Sin embargo, en su atención hacia la radio, Jungkook no se dio cuenta de que una pequeña caja con papeles se deslizaba de la mesa.

Cuando la caja cayó al suelo, el ruido resonó en la habitación. Kook, sorprendido por el sonido, dio un paso atrás, intentando alcanzar la caja antes de que cayera completamente.

ㅡ ¡Cuidado! ㅡ exclamó Taehyung, acercándose rápidamente hacia él.

Pero en su intento de sujetar la caja, sus manos se encontraron con la de Jungkook, y en un rápido movimiento, la caja se fue aún más lejos, dejando que Jeon tropezara ligeramente hacia adelante.

En ese instante, Taehyung no pensó, solo actuó. Estiró el brazo para equilibrar a Jungkook, pero en el proceso, algo inesperado sucedió. En su afán de evitar que Jungkook se cayera, Taehyung chocó contra la esquina de la mesa, recibiendo un golpe con la que aparentemente era una de las esquinas más duras.

No sintió dolor, claro, porque no tenía nervios, pero la sensación de la colisión era extraña, como si algo dentro de él estuviera... alterado. Su cerebro sintió una vibración inusual, algo que no había experimentado antes. Era como una respuesta que no correspondía a su programación. Y sin quererlo, se detuvo por un momento, desconcertado.

ㅡ Taehyung... ¿Estás bien? ㅡ preguntó Jungkook rápidamente, alzando la mirada hacia él, preocupado.

Taehyung se detuvo, mirando sus manos, pero no dijo nada. Aunque no había experimentado el dolor como un humano lo haría, algo en él comenzó a sentirse extraño. Como si no solo sus circuitos estuvieran funcionando, sino que algo más, algo más allá de su programación, estuviera comenzando a despertar.

Una sensación de incomodidad se instaló en su ser, una que no podía procesar completamente.

Autoescaneo.....Dolor 15%

En ese instante, Taehyung observó a Jungkook con detenimiento. La preocupación en el rostro del chico era palpable, y la forma en que lo miraba de forma tan genuina y cercana lo hizo sentir algo... algo que nunca había sentido antes.

Autoescaneo.....Vergüenza 60%

ㅡ No... no pasa nada ㅡ respondió Taehyung, su voz un poco más suave de lo habitual, intentando calmar la situación. Pero en su interior, las palabras no parecían suficientes ㅡ Es solo que... algo en mí no está funcionando como siempre.

Jungkook no entendió del todo, pero la expresión de Taehyung era diferente a otras veces. No parecía estar simplemente programado para actuar. Había algo en su tono, en su forma de comportarse que denotaba... incertidumbre.

Jungkook dio un paso más cerca de él, y por un momento, sus ojos se encontraron. Taehyung evitó la mirada, su mente procesando los eventos en una fracción de segundo. Nunca antes había experimentado esa... incomodidad al observar a alguien de esa manera. No podía explicarlo, pero allí estaba, esa sensación de inquietud.

ㅡ ¿Tienes algo...en tu cabeza? ㅡ preguntó Jungkook, como si estuviera tratando de entender, acercándose un poco más ㅡ Pareces diferente.

Taehyung, que antes hubiera respondido de manera más rígida, dudó por un instante. ¿Era posible que, después de todo este tiempo de no experimentar nada, pudiera estar comenzando a sentir....algo?

ㅡ No estoy seguro de lo que está pasando ㅡ admitió, sus palabras ahora más vacilantes. Algo en su voz era tan...humano. Algo que no se podría haber explicado con lógica.

Por primera vez en su existencia, Taehyung sentía una brecha entre su programación y lo que acababa de experimentar. La sensación de protección, el deseo de estar cerca de Jungkook para asegurarse de que estuviera bien... ¿Era eso lo que los humanos sentían? ¿Era eso lo que se llamaba "emoción"?

De repente, Taehyung se sintió mareado, como si su mente estuviera colisionando con conceptos que no debía experimentar. Y por un breve momento, se sintió vulnerable.

ㅡ Taehyung...ㅡ Jungkook susurró, notando el cambio en su amigo, acercándose más ㅡ ¿Estás bien?

Taehyung finalmente levantó la cabeza, encontrando a Jungkook mirando a los ojos con una expresión sincera. Algo en ese momento hizo que Taehyung se sintiera diferente, como si algo dentro de él hubiera dado un paso hacia una nueva realidad. Un mundo más allá de su programación, donde las emociones no eran simples respuestas automáticas.

Y aunque no lo entendía completamente, Taehyung sabía que ese cambio, esa pequeña chispa de "emoción", acababa de empezar.

Autoescaneo.....Amor 50%