SoYou bajó desde su habitación con gran emoción mientras admiraba su nueva propiedad.
HoSeok se lo entregó un día antes de marcharse con KiHyun debido a su día libre, desde ese entonces habían pasado muchos días y seguía igual de emocionada.

—Es la misma foto que antes madre. —HyungWon la miró con aburrimiento terminando se regar su pequeña planta ubicada en la ventana. HoSeok sonrió dándole la razón.

—Te equivocas. —Respondió SoYou en tono ofendido. —Ahora es tu fotografía, ¡enmarcada!

—No sabía que eso la hacía algo nuevo. Perdona mi ignorancia.

—Deberías dejar de molestarla, es normal que esté emocionada por algo de su hijo. —HoSeok dejó su laptop de lado mientras observaba a la mujer colocar la fotografía en un pequeño clavo en la pared donde se encontraban otras fotos, todas de ella con HyungWon.

—Eso no quita la situación de que, a pesar de ya pasar tiempo, siga gritando como si hubiera encontrado un tesoro o algo por el estilo.

—Eres su mayor tesoro.

—Cursi. —Se quejó el menor. —Pero fue mi culpa, te dije que no se la mostraras al Doctor Yoo, en ningún momento mencioné a mi madre. Hace mucho no la veía así de emocionada.

—Donde cuelga todas esas fotos. Noté que no hay recientes.

—¿Te pusiste a ver las fotos?

—Son muchas y están en la pared, es inevitable no detenerse a observar.

—Después de la preparatoria le pedí a mi madre que dejara de tomarlas, me sentía un niño pequeño cada vez que me hacía posar. Lo tomó mejor de lo que creí... Pero ahora que le has dado esa cosa no sé si vaya a seguir accediendo a dejarlo.

—¿Estas enfadado porque se la di?

HyungWon negó. —No estoy enfadado, solo es lo que dije. Hace mucho no la veo tan emocionada por un obsequio así que de alguna forma es algo nuevo para mí.

—Deberías ser más detallista con tu madre. —Sugirió jugando con los dedos de las manos. —Cuando era estudiante preferí muchas cosas antes que mi familia y eso creó una gran brecha que hasta la fecha sigo sin poder quitar.

—No sabía que tenías esa clase de problemas. —La mirada del menor se dirigió a HoSeok. —¿Sigues en contacto con ellos?

—De vez en cuando hablamos por teléfono y mi padre tiene la costumbre de mandarme cartas.

—¿Qué tal visitarlos?

—Debido a mi trabajo seguía sin poder ir con ellos.

—Entonces mentiste.

—¿De qué mentí?

HoSeok frunció las cejas dando la cara a su paciente.

¿Como ese niño se atrevía a llamarlo mentiroso?

—No mal entiendas, tal vez porque no trabajo no soy aún consciente de lo que implica, pero has dicho que no has podido reparar tu relación con tu familia.

—Eso dije.

—Es mentira. No quieres hacerlo.

—¿Disculpa?

—Si quisieras de verdad arreglar la situación podrías ir a verlos. Mi madre cambió incluso tus días de descanso de uno a dos, ¿Has pensado en usar ese tiempo para ellos?

—En realidad no. Pero es más fácil decir que hacer.

—Yo pienso que es igual de fácil. —Susurró poniendo los frenos a la silla que no dejaba de tambalearse. —Por cierto, HoSeok–ah, quiero ir a conseguir un libro a la biblioteca, me gustaría me acompañaras.

—¿Quieres ir ahora?

HyungWon asintió, por lo que Shin le pidió que esperara para ir por una chamarra y de paso avisar a SoYou antes de que se fuera al trabajo. Después de eso ambos partieron a la biblioteca que se encontraba a unas pocas calles.

—¿Es un libro de botánica?

—Algo así, traté de descargarlo por internet, pero no está disponible, así que espero poder encontrarlo.

—¿En qué momento te comenzó a gustar ese tema? Cuando llegué solo tenías cosas literarias, nada informático o algo por el estilo.

—En la preparatoria teníamos un pequeño huerto, nada especial. —HyungWon se detuvo un momento para descansar los brazos después de echar a andar la silla. HoSeok decidió ir a ayudarlo por lo que continuaron con su trayecto. —Me gustaba cuidar las pequeñas plantas que se nos era posible mantener en el lugar. Encontré mis notas que hice por esos tiempos y lo retomé.

—Lástima que deberás esperar unos meses más para poder sembrar en el jardín.

—No es algo que me quite el sueño en realidad, tampoco es como si fuera a ir a otro lado.

—Eso es porque tú así lo deseas.

—No hablemos de ese tema, no en público.

—Está bien.

HoSeok decidió dejar descansar a Chae de sus insistencias, al menos por el momento. A pesar de que HyungWon cambió de actitudes, seguía sin dar su brazo a torcer en lo que respecta a la terapia.

Desgraciadamente para HyungWon, Shin HoSeok era igual o incluso más terco, y nunca dejaba de insistir hasta lograrlo.

————————

—Creo que HyungWon está ocultando algo.

HoSeok dejó su taza en la mesa para poner toda la atención a la mujer mayor. —¿Algo como qué?

—No estoy segura, pero lo sé.

—He estado con HyungWon durante casi cinco meses, y en ningún momento me he percatado de algo así.

—Se trata de instinto materno HoSeok–ah, además me ha dejado estrictamente prohibido entrar a su cuarto. Si tú sabes algo.

—¡De ninguna manera! —Declaró rápidamente. —Repito que, si usted no me hubiera dicho esto, no estaría consciente de la situación. De hecho, sigo sin estarlo. Para mí, HyungWon sigue igual que siempre.

—Estaré vigilándolos... A ambos.

SoYou fue a la cocina y HoSeok sintió que podía descansar de esa mirada acusadora.
El chico creía que tal vez la mayor estaba teniendo algún tipo de paranoia, él no veía nada raro a su paciente y, por el contrario, tampoco le prohibió entrar a su habitación. Seguía yendo a despertarlo como era costumbre, así como ayudarlo a subir y bajar de la casa.

Tal vez solo sea su imaginación...

Invento o no, HoSeok se propuso a estar atento del menor, de cualquier mínimo detalle para así, desmentir o no las suposiciones de SoYou.

Con eso en mente, subió a la habitación del chico esperando encontrarlo ya despierto.

—¿Sí? —Preguntó HyungWon después de que el mayor tocara la puerta.

—Soy HoSeok, quería saber si ya estás listo para bajar, el desayuno está listo.

—En un momento estaré listo. Espera por favor HoSeok–ah.

—De acuerdo.

Cuando el momento se convirtió en rato, el enfermero por mero aburrimiento pegó la oreja a la puerta, para poder saber que le tomaba al otro tanto tiempo. Solo pudo distinguir de manera tenue el sonido del teclado de la computadora y un par de quejas de HyungWon.

—Si pensabas tenerme esperando mejor hubieras dicho que regresara después...

Siguió esperando por unos minutos más hasta que Chae abrió la puerta, HoSeok casi lo considera un milagro y no pudo evitar verlo con cara de fastidio.

—¿Qué hay con ese gesto?

—He estado esperándote por mucho tiempo, ¿qué tomó tanto?

—Estaba haciendo unas cosas sin importancia.

—Si eran sin importancia pudiste hacerlas después.

—Que no sean importantes no significa que no pueda hacerlas en el momento.

—Como digas. —HoSeok cargó a HyungWon en su espalda como era costumbre, al hacerlo el ya sabido olor dulce que el menor tenía no llegó a su nariz, fue sustituido por un olor parecido a los cítricos.

Tal vez SoYou tenía razón en que su hijo estaba ocultando algunas cosas.

————————

El parque más cercano a la casa Chae estaba comenzando a perder el color naranja del otoño, con la mayoría de las hojas caídas en los árboles muchos niños jugaban con los montones de estas. HoSeok estaba enternecido con tantos pequeños alrededor.

—Son tan lindos...

—Supongo. —Respondió HyungWon sin poner real interés en las palabras de su mayor, pues su mirada estaba en el celular. HoSeok hizo una cara de fastidio.

—El teléfono es más cómodo de usar en casa, podemos regresar si quieres.

—Lo siento, solo respondía un mensaje y no podía dejarlo pasar.

—Perdón que sea entrometido, pero ¿De quién se trataba?

—Un amigo que se marchó hace un tiempo debido a situaciones de trabajo. Me llamó hace unos días y acordamos estar en contacto.

—Me da gusto que al fin hables con un amigo. —HoSeok sonrió levantándose de la banca. —Espero que recuperes contactos con los demás.

—No esperes mucho de eso, mis amigos pueden contarse con los dedos de una sola mano.

—Eso no importa, mientras haya una persona que te aprecie, es suficiente.

—Últimamente tus comentarios se van a un lado muy cursi. —HyungWon guardó su celular para mirar al mayor. —Quisiera saber a qué se debe.

—No hay razón en particular, iré por un helado, ¿Quieres acompañarme por uno?

—Helado en invierno... No suena apetecedor para mí.

—De hecho, es algo bueno, pero no quiero aburrirte... Entonces...

—Ve tú solo. —Respondió con pereza. —Estaré aquí.

HoSeok sonrió dirigiéndose a la heladería que se encontraba enfrente. Para el medio año que llevaba viviendo con la familia Chae, el lugar se convirtió en uno de sus favoritos.

Tardó alrededor de quince minutos debido a la trabajadora del lugar, sin embargo, pudo cortar la conversación antes de que la chica se fuera por otros hilos.

Al regresar pudo ver a HyungWon jugando con un pequeño regordete en sus piernas. Chae lo peinaba mientras el pequeño aplaudía entre risas; el corazón de HoSeok se derretía junto al helado que comenzaba a escurrirse por sus nudillos y la palma de la mano, dejando una sensación pegajosa.

Al lado de la silla un par de niñas también hablaban con HyungWon y al ver sus zapatos supo que de trataban de las mismas que le pidieron una foto al chico el día del festival, eran los mismos que llevaban en esa ocasión.

Para cuando el trío se marchó, HoSeok hizo la acción contraria, acercándose a su paciente.

—No sabía que eras bueno con los niños.

—No son mi adoración, pero tampoco me molestan. —HyungWon observaba con disgusto el helado embarrado en la mano del mayor. —Límpiate por favor HoSeok–ah, vas a ensuciar todo lo que toques.

El mencionado asintió tomando el pañuelo que le era ofrecido, continuando con la degustación de su helado. —Volviendo a los niños, ¿Te gustaría tener un hermano menor?

—Desde siempre he tenido solo a mi madre, jamás me hice a la idea de un hermano.

—Yo creo que serías excelente hermano mayor.

—¿Qué hay de ti?

—Tengo un hermano, solo un año más joven que yo, así que no pude cumplir un rol como cuidador.

—Ya veo. —Susurró HyungWon dejando a HoSeok que fuera a tirar el cono del helado en el bote a unos pasos de la banca. —¿Qué hay sobre tener hijos?

—Para tener hijos se debe pensar mucho, además se necesitan a dos personas y solo estás tú conmigo en estos momentos.

—¿Entonces si has pensado en formar una familia? Ya sabes, casarte y todo eso.

—Por el momento no es mi prioridad, no hay alguien que me haga pensar en dar ese paso.

—Deberías considerarlo, te estás volviendo viejo.

HoSeok se sintió indignado con tal comentario y sintió sus mejillas calientes, observando como HyungWon tomaba camino por si solo de vuelta a casa. —¡Estamos en la misma etapa de vida!

—Como digas.

—¿A dónde vas?

—Me da vergüenza que me vean con un adulto que grita por saber que está por llegar a sus treintas.

—¡HyungWon!

————————

HoSeok se propuso cuidar una de las macetas de su paciente, poco a poco habían comenzado a brotar a pesar del clima, cosa que le hizo tener curiosidad por cuidar una pequeña planta.

SoYou se marchó demasiado temprano esa mañana de viernes, por lo que HoSeok decidió marcharse a sus días libres por la noche. Tenía planeado regresar en su auto para darle un mejor uso que estar en una cajuela.

Con este podría llevar a otros lugares a HyungWon y de paso llevar o traer del trabajo a SoYou, pues seguía preocupado de las horas a las que podía llegar por la noche.

De paso iría a comprar algunas cosas para la señora Song, una anciana mujer muy amable que vivía a unas cuadras de la casa Chae.

—¡HOSEOK!

El grito pudo ser escuchado por toda la casa, Shin corrió inmediatamente escaleras arriba después de tan desgarrador alarido por parte de su paciente.

Sin tiempo de pensar abrió la puerta de la habitación esperando de lo peor sabiendo que HyungWon jamás tendría ese comportamiento en su vida cotidiana.

La visión de HoSeok se volvió acuosa y sus piernas dejaron de funcionar, dando un golpe sordo con sus rodillas al impactarse en el suelo.

Viendo hacia arriba a HyungWon, quien solo mostraba una expresión angustiada... Parado por cuenta propia.