Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Décima octava Flor

Sus ojos se paseaban de la taza, al ventanal que estaba ligeramente alejado en la mesa en la cual se encontraba nervioso al sentir la mirada de KiHyun analizarlo de arriba a abajo una y otra vez mientras bebía su taza de café.

HoSeok sabía que el haber reaccionado como lo hizo la noche anterior le causaría tener esta conversación con su amigo. Si bien recibió ánimo por parte de JooHeon y ChangKyun no era el mismo caso con Yoo, después de todo era el doctor de HyungWon y tenía una ética con su labor inquebrantable.

Trató de parecer relajado cuando realmente se sentía muerto de nervios.

—Entonces... ¿Cuándo sucedió?

—No lo sé... —Respondió de manera honesta mirando sus manos. —Solo comenzó a pasar y cuando me di cuenta ya era natural para mí el admitirlo.

KiHyun suspiró cansino asintiendo un poco. —No me imaginé... Que terminarías gustando de HyungWon.

—Ayer dijiste tener la idea de la situación.

—Imaginaba una joven que conociste por la zona... Incluso en el caso más extremo creí que podrías referirte a SoYou–Omma.

—Eso es...

—Difícil de imaginar, pero no imposible que suceda. —Interrumpió con una mueca formándose en su rostro. —Además... Desde que te conozco jamás mencionaste un gusto por los chicos y tampoco has presentado a uno como tu pareja.

—Eso es porque es la primera vez que me siento así por un hombre.

—Vaya... Eso es... Sorprendente. ¿Te sentiste incómodo cuando lo descubriste?

—Nunca lo tuve en mente realmente. —Respondió honesto con una sonrisa tenue. —Tal vez porque el sentimiento es uno de los más profundos que he tenido en toda mi vida que no quise preocuparme por una banalidad así.

—Debes quererlo mucho.

—Lo hago Hyung. Demasiado.

—Entonces... ¿Qué son?

La pregunta tomó por sorpresa a HoSeok, quien miró a su viejo amigo. En él no había ninguna expresión furiosa como la que esperaba encontrar. Parecía más la cara de un niño quien está a punto de descubrir un gran secreto.

—Solo somos enfermero y paciente.

—¿Eh? ¿Entonces...?

—Él no lo sabe.

—¿No se lo has dicho? —HoSeok negó en respuesta. —Pero piensas hacerlo. —De nuevo, una respuesta negativa. —¿Por qué?

No puedes decirle sobre HyunWoo. Lo prometiste.

—No hay espacio para el enfermero que llegó a invadir su vida.

—Entonces no quieres dejarlo, pero tampoco piensas decirlo por lo que el resultado será el mismo; irte y seguir con tu vida.

Patético. Así sonaba en los labios de alguien más.

—¿Qué puedo hacer? Si le digo me odiará y la señora Chae también.

—HoSeok, has vivido con ellos casi nueve meses, ¿Enserio crees que alguno de los dos te odiaría por algo así?

Por supuesto que no. Pensó el enfermero con un sabor amargo en la boca.

Él sabía que no pasaría por que la familia Chae era demasiado buena.

—Escucha HoSeok. —KiHyun dejó su taza a un lado mientras miraba fijamente, al contrario. —Sé que tienes muchas cosas en la cabeza. Aunque no parezca, el que seas su enfermero te está provocando nudos en algo que no lo tiene. Entiendo, tienes miedo a decirlo, pero olvidas que los sentimientos y las emociones cambian. Tú has logrado cambiar a HyungWon, que tomara terapias, dejar de comer solo en su habitación, incluso JooHeon y ChangKyun dijeron que era un chico muy agradable cuando en el hospital solo decía un par de palabras. Quieras admitirlo o no esos cambios los lograste tú.

—Pero eso...

—Lo sé, es distinto porque ese es tu trabajo, pero no sabes que puedes lograr como hombre contándole tu sentir. Puede que no salga bien... Pero te quitarás un peso de encima y tal vez te funcione para que pases de página. Dolerá, eso es seguro, pero es mucho mejor a simplemente pensar en un hubiera.

Y nuevamente... KiHyun le demostraba ser una de las mejores personas que pudo conocer.
Sus palabras sonaban duras, pero eran realistas. ¿Quería recordarse como el enfermero que solo se mantuvo al margen? ¿O como el hombre que afrontó la situación?
El desenlace... Ese ya era otra cuestión.

—Podría jurar que ibas a darme un sermón y me regañarías.

—¿Por qué lo haría?

—No es profesional tener sentimientos por un paciente.

—En un inicio tuve algunas dudas. Me refiero a que, soy tu jefe temporal de alguna manera y hay un protocolo que seguir. Pero también te conozco y jamás harías algo para dañar a un paciente, no dudo que está vez sea lo mismo. Confío en ti... Y además...Tampoco es profesional enamorarse de un colega siendo el jefe del hospital y aquí me ves queriendo casi poner un anillo en la mano de la nutricionista.

Ambos rieron un poco haciendo el ambiente más liviano para el agrado de HoSeok.

Realmente sentía que su cuerpo se volvía ligero, hablar con Yoo le quitó varias dudas y cambió algunas de sus ideas. Sabiendo que era más fácil decir que hacer tomó la decisión de arriesgarse.

Sentía que valía la pena hacerlo.

————————

Después de hablar con KiHyun regresó al apartamento de ChangKyun por sus maletas y así, volver con la familia Chae, sabiendo que más tarde podía correr el riesgo de no poder regresar por una nevada.

Y la razón principal era el querer ver a HyungWon.

Así es como después de unas horas en tren pudo volver sano a la casa donde ahora vivía. Mientras caminaba por las calles notaba los adornos que no apreció en su ida y el cómo pequeños copos comenzaban a caer suavemente desde el cielo.
Seguramente HyungWon estaría molesto por que nevaría dos días después de su partida de la granja de BoRa.

Pensaba en las posibles reacciones que podría tener el menor; como hacer que no le importa, pero el pequeño tic de golpear su dedo índice con el reposabrazos de la silla diría lo contrario. O si había más suerte podría ver un puchero ligeramente pronunciado mientras habla de la mala suerte que tiene por no poder apreciar aquel suceso en DaeGu.

Se sentía bien el imaginar ese tipo de cosas ahora que no era un secreto para sí mismo. Ya no debía que cargar con ello solo.

Al llegar a la casa fue recibido por listones, campanas, escarcha y un pequeño árbol decorando la sala mientras SoYou le contaba el cómo junto a HyungWon decoraron la casa para darle una pequeña sorpresa.

—Me emociona mucho que pases la festividad con nosotros. —Confesó con una sonrisa la mujer mayor. —Quiero que mañana te sientas cómodo. Como si estuvieras en tu casa.

—Siempre me siento como en casa señora Chae.

—Oh... Cielos... —SoYou comenzó a lagrimear mientras corría escaleras arriba no sin antes exclamar. —¡Regreso en un segundo!

—¿Dije algo malo?

—Siempre ha sido muy sentimental. —Comentó HyungWon saliendo de la cocina con una libreta y pluma en mano. —No lo tomes muy enserio. ¿Fue bien tu viaje?

—Si. Los chicos te han enviado saludos.

—Oh, supongo que... Envíales un saludo de mi parte cuando hables con ellos.

—Lo haré. —Aseguró con una sonrisa. —Cambiando el tema... ¿Qué escribes ahí?

—Los ingredientes que usaré para la cena de mañana.

—¿Sabes cocinar?

—Solo lo hago en días festivos. —Comentó mirando al techo rápidamente. —Desde hace años me hago cargo de esto. Y este año tú serás mi ayudante.

—Entendido. —Susurró tratando de evitar el pequeño grito que estaba atorado en su garganta.

HoSeok consideraba a su paciente como alguien atractivo, un joven guapo que incluso puede ser descrito como bonito o hermoso. Pero era la primera vez que la palabra que llegó a su mente ante la escena de HyungWon escribiendo con un puchero como un niño fue adorable.

—Deja de mirarme así. —Pidió el menor aun escribiendo. Shin se disculpó con una sonrisa antes de sentarse en el sofá. —¿Algo que quieras contarme?

—¿Has salido hoy?

—No, he estado en la cocina casi todo el día. ¿Por qué?

—Está comenzando a nevar.

—¿Enserio?

HyungWon se acercó a la ventana arrastrando a un lado las cortinas confirmando lo que fue dicho por HoSeok. La calle aún no estaba cubierta, de hecho, solo había pequeñas zonas del pavimento húmedas, pero sin rastro de nieve.

—Perfecto para navidad. Mañana seguro amanecerá cubierto.

—Pensé estarías molesto por no poder verlo en la granja.

—Más bien quería que tú lo vieras. —Corrigió al mayor. —Yo ya lo he apreciado varias veces. Pero al ser tu primera vez en DaeGu me hubiera gustado compartirlo contigo.

—Esperemos que tengamos otra oportunidad.

HyungWon asintió antes de regresar a la cocina diciendo que mañana le pediría a SoYou salir después de la cena.

HoSeok se sentía feliz en esos momentos al saber que compartiría la navidad con dos personas tan importantes en su vida.

—————————

—Creo que mi madre tiene novio.

El enfermero pudo jurar que de haber sido más exagerado terminaría con el trozo de fruta atorado en la garganta.

Todo el día estuvo cocinando con HyungWon un festín de varios platillos.

Carne en salsa de frutas, pollo frito, puré, ensalada y más cosas formaban parte del buffet para solo tres personas que increíblemente pudieron terminar con más de la mitad de lo puesto en la mesa.

Ahora, con SoYou en su habitación atendiendo una llamada privada, escuchaba a HyungWon en una escena que le resultaba similar a la que tuvo con la mujer mayor meses atrás.

—¿Lo dices por...?

—Es demasiado obvio si lo piensas. —Comentó el más joven dejando sus cubiertos en el plato. —Salidas en la tarde de vez en cuando, llamadas de este tipo. Salir un poco más tarde del trabajo.

—Suponiendo que es verdad, ¿Cómo te hace sentir eso?

—Ella siempre ha puesto en primer lugar su rol como madre, así que me siento feliz que ahora busque felicidad como mujer. Sé que su pareja la amará.

De nuevo, HoSeok sintió su pecho hinchado de orgullo. Felicidad esperando que las suposiciones de HyungWon fueran ciertas y el cómo la madurez del joven se dejaba ver poco a poco atrayéndolo cada vez más.

No queriendo pensar mucho en ello decidió cambiar el tema pidiendo al menor un momento.

Se levantó de la silla y rápidamente fue a su habitación sacando de su mochila una bolsa de papel decorada de un tamaño mediano y así, volver a donde estaba el Chae menor.

—Feliz navidad. —Fue lo primero que dijo al estar devuelta entregando la bolsa. —Solo es un detalle, pero espero te guste.

Susurrando un "gracias" HyungWon abrió la bolsa dejando ver un libro de tapa dura sobre poemas. El chico pasó varios minutos apreciando tanto las cubiertas como las hojas del ejemplar. Al finalizar levantó la mirada.

Aquellos ojos...

—Es un muy bello regalo HoSeok–ah. Muchas gracias. A decir verdad, yo también tengo un regalo para ti.

—¿Enserio?

HyungWon asintió. —Está en una de las puertas abajo de la barra de la cocina. Estoy seguro lo reconocerás.

El mayor caminó hacia donde le fue indicado tratando de no verse ridículo debido a la emoción.
Al llegar a la barra se agachó abriendo las puertas de una sola notando la caja larga de color azul entre todas las cosas.

¿Cuándo HyungWon puso aquello ahí? No tenía idea teniendo en cuenta que estuvieron todo el día en la cocina.
Sin querer dar más vueltas, abrió con delicadeza la caja encontrándose con una bufanda gris hecha a mano. Sabía que fue hecha por HyungWon.

Su perfume estaba impregnado en el estambre.

—No es mucho, pero soy bueno con las manualidades. Así que espero te guste.

HoSeok se puso de pie colocándose la bufanda con una gran sonrisa mientras asentía a las palabras de su paciente.

—Me encanta. Muchas gracias.

—Ahora que estas cubierto. Salgamos, está nevando.

—¿Está bien? Tu madre...

—Nos verá en cuanto se asome a la ventana. —Interrumpió dirigiéndose a la puerta principal siendo seguido por HoSeok. —Vamos.

Sin mucho que poder hacer el enfermero acató órdenes ayudando a que la silla de ruedas no se resbalara dejando a HyungWon frente a un pequeño árbol a unos metros de la casa. Observó de reojo a algunos vecinos disfrutando de la noche dando un ambiente feliz.

Se alejó solo un poco para mirar al cielo y después a HyungWon quien jugaba de vez en cuando con los copos que caían en su rostro al lado de aquel árbol casi seco.

Quiso tomar una foto, pero se contuvo, queriendo que esa imagen fuera solo para él, contrario a la vez del festival de disfraces, el momento actual no quería compartirlo con nadie. Era especial para él, era la primera vez que en voz alta se atrevía a decirlo con una sonrisa.

—Te amo HyungWon.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro