El tiempo pasaba demasiado rápido, el vientre de Jin crecía cada vez más, ya se encontraba en su octavo mes de gestación, el ginecólogo meses antes les dio la hermosa noticia que su bebé sería hombre, ninguna palabra expresaba la felicidad de Namjoon.

Jin estaba preocupado por Jennie, sus emociones eran un carrusel de dudas, todo el día tenía en mente a quien todavía seguía siendo su esposa, la mujer de la que había estado enamorada desde su juventud, la mujer que pensaba que estaba muerta había regresado, y si, ella tenía sentimientos muy fuertes hacia Lisa aún cuando estuviera casada con Winter.

Él castaño recordaba con melancolía a Lisa, quien en sus épocas de escuela le pedía ayuda para conquistar a Jennie, para hacer algo por su aniversario, para ayudarla a reconciliarse cuando se peleaban, siempre tenía una sorpresa que hacía llorar a la menor.

— Jin necesito tu ayuda ¡Urgente!

— ¿Qué sucede?

— La próxima semana, Jendeuk y yo cumplimos un año de novias y-

— Y quieres que te ayude a hacer alguna sorpresa ¿Cierto?

— Si ¿Me ayudas? — la pelinegra puso su mejor cara.

— Bien, te ayudaré, pero cómprame el almuerzo toda la semana.

— Trato.

Todo el resto de la semana, se la pasaron pegados como siameses, como pulga y perro, planeando la sorpresa para Jennie. Su mejor amigo, estaba seguro de lo enamorada que estaba Lisa de Jennie. El gran día llegó, su misión era distraer a Jennie todo el tiempo que pudiera hasta que recibiera una notificación.

— Vamos al parque, Jen.

— ¿Al parque? ¿Para qué? Debo regresar a casa y no encuentro a Lisa.

— Acompáñame un rato en lo que termino mi almuerzo.

Jennie sonrió y acomodó su mochila sobre sus hombros siguiendo al loco de su mejor amigo hacia el parque que quedaba cerca de su escuela, al llegar, los pequeños ojos de la menor se abrieron como platos.

— ¿Qué es esto? — se llevó las manos a la boca.

— Sorpresa preciosa, feliz aniversario.

En una parte del parque, había un mantel extendido a lo largo del pasto, dos palitos en
el extremo de cada esquina del mantel, que sostenían las letras de “I love you” y todo a su alrededor eran ramos de globos en forma de corazón, sostenidos en palos, había dos canastas, una radio, cojines y los dulces favoritos de la menor. Lisa la esperaba con un ramo de rosas, provocando que ella llorara y seguidamente se lanzara a sus brazos.

— ¿Tu hiciste eso, bebé?

— Soy un completo desastre, pero este desastre haría todo por ti y por ver esa hermosa sonrisa.

Jin cuando vio que sus amigas se besaban, sin hacer ruido se fue, dejándolas disfrutar de lo que tenían.

...

Él extrañaba esos tiempos, en el que todo estaba bien entre dos personas que eran importantes en su vida, porque antes de conocer a Nam, él no creía en el amor, su corazón estaba hecho pedazos por un chico que lo engañó miles de veces y lo manipulaba para no dejarlo, nuevamente fue Lisa su héroe, quien a pesar de su terquedad, siempre lo apoyó, lo cuidó y lo alejó de aquel hombre que le hacía daño, pero esas cosas del pasado no importaban, porque ahora estaba casado, tenía una hermosa hija y esperaba otro bebé. Estaba buscando un libro para leer hasta que el timbre sonó y fue a abrir la puerta, encontrándose con un rostro amigable.

— H-hola… ¿Estas ocupado?

— ¡Lisa! — él menor abrazó a su amiga con fuerza y la hizo entrar.

— ¿Cómo has estado? — entró a la casa y lo miró — Te traje esto, espero que te guste y te sirva — le mostró una bolsa que en su interior contenía paquetes de pañales, leche y juguetes.

— Lili, no te hubieras molestado, muchas gracias, siéntate, justo mi pie de limón acaba de salir del horno.

— Supongo que sigues haciendo los postres más deliciosos del mundo.

— Obviamente, hago los mejores postres, aunque este bebé siempre hace antojar de todo tipo de cosas dulces, pastel, dulces, gomitas, chocolates.

Lisa se rio al ver con que pasión hablaba Jin acerca de los dulces.

— Namjoon debe estar emocionado, es su primer hijo varón.

— Ni te imaginas, aunque a veces es insoportable — Jin le dio una rebanada de pie de limón.

— Por cierto ¿Dónde está? No quiero que me encuentre aquí cuando venga.

— Supongo que se va a demorar, fue a recoger a Hari al colegio.

— Vine a saludarte y ver como estabas, estoy tan feliz Jin que todo en tu vida marche bien, pero ¿Te puedo pedir un favor?

— Claro Lili, lo que quieras.

— ¿Me prestas tu baño?

Jin estalló en risas al ver su cara de desesperación y entre risas le señaló donde quedaba el baño, pero no contaba con que Namjoon y Hari entrarían a casa en esos segundos que Lisa estaba en el baño

— ¡Papi! — Hari abrazó a su padre por las piernas.

— Hola bebé ¿Cómo te fue en la escuela?

— Bien mami, la maestra nos pidió que dibujáramos algo que nos hiciera feliz y yo dibujé a nuestra familia.

— Después de almorzar muéstrame su hermoso dibujo.

— Si papi, esta bien, iré a lavarme las manos.

Jin iba a protestar, pero su esposo apareció con una hermosa sonrisa en su rostro.

— Hola precioso — le dio un casto beso en los labios.

— Llegaron rápido — Jin acarició su mejilla.

— ¡Tía Lisa!

Se escuchó la voz emocionada de Hari que había visto a Lisa saliendo del baño y estiró sus brazos para que la cargara.

— Cariño, hola — el alto besó la mejilla de su sobrina

— ¿Qué haces aquí? — La voz de Nam sonaba dura y molesta.

— Yo la invité, Nam.

— Dile a tu invitada que se vaya, no la quiero ver en mi casa.

— ¡Na-

— No te preocupes Jin, tengo que volver al trabajo pronto, te escribiré llegando a casa.

Lisa bajó a Hari y se despidió dándole un beso en la cabeza, seguidamente hizo una pequeña reverencia ante Nam y salió de la casa Kim.

La tristeza empezó a invadir el cuerpo de Jin, así que en silencio sirvió el almuerzo dejándolo sobre la mesa, pero no se sentó a comer, por el contrario, fue a su cuarto, cerrando la puerta, acostándose en su cama y permitiéndose llorar.
Namjoon apareció minutos después y el corazón se le rompió al ver a su esposo de esa manera.

— Amor ¿Qué te pasa? ¿El embarazo te tiene sensible? — trató de bromear.

— No digas estupideces Namjoon, mi problema eres tú.

— ¿Qué? ¿Yo?

— Quiero pasar tiempo con Lisa, hablar con ella, me lo prohíbes y cada vez veo más lejana la posibilidad de que todo sea como antes ¡Estoy harto, Namjoon!

— Jin y-

— No digas nada Namjoon, yo entiendo que la odies porque lo que hizo a Jennie y en su momento yo también la odié, pero tú no tienes ni la más mínima idea de todo lo que pasó.

— ¡Golpeaba a mi hermana, SeokJin!

— Trastorno bipolar tipo III.

— ¿Qué?

— Lalisa tiene bipolaridad en tercer grado —enfrentó a su esposo — Ella no sabía lo que hacia al momento de maltratar a Jennie, no lo podía controlar y si se fue, únicamente lo hizo para recuperarse.

— ¡¿Y por qué regresó 8 años después?!

— ¡Porque perdió la memoria, Namjoon!

— ¡Esa no es excusa para todo lo que hizo, ella debería estar en la cárcel y tú invitas al enemigo a nuestra casa!

— Eres un maldito monstruo sin corazón, no sé de que tanto te quejas de Lisa si estás actuando tal y como ella, con la diferencia que ella estaba enferma y tú no.

SeokJin empujó a su esposo con rabia y un pequeño llanto resonó en la habitación, sobresaltando a los adultos, quienes miraron a la dueña de esa voz, su pequeña de 6 años quien presenciaba la pelea de sus padres

— Y-ya no peleen por favor…

— Hari — Jin se secó las lagrimas y se acercó a su hija.

— D-dejen de g-gritarse, no me g-gusta

— Mi niña, lo siento tanto…

— Hari, ya es tarde, ve a hacer tus tareas — dijo el moreno.

— Si papá…

Hari se secó las lágrimas y salió de la habitación de sus padres, Namjoon tenía todas las intenciones de hablar con su esposo, pero Jin no quería, así que fue detrás de su hija, encerrándose con ella en su habitación, para hacer las tareas.

Al caer la noche, padre e hija salieron de la habitación, SeokJin se había antojado de comer una sopa de pollo, sacó todos los ingredientes necesarios comenzando a hacer su cena, mientras que Hari veía dibujos en la sala. Nam apareció mucho más calmado e intentó acercarse a él.

— Amor ¿Te ayudo en algo? — preguntó Nam

— No gracias — respondió con frialdad.
...

La noche para los Kim había sido fría y solitaria, ningúno de los dos se dirigió la palabra, ningúno pudo dormir bien, estaban tan acostumbrados a la compañía y al calor del otro, que la situación los mataba por dentro. A la mañana siguiente, Namjoon se levantó más temprano que de costumbre e hizo la lonchera y el desayuno para su hija, en cuanto a Jin, decidió llevárselo a la habitación y lo dejó sobre la mesita de noche con una nota, “Lo siento, te amo”. Se alistó y se fue a trabajar, pues tenía un contrato muy importante para cerrar, pero antes de salir de su casa, besó los labios de su esposo, quien dormía plácidamente y sonrió inconsciente por el beso. Cuando Jin se levantó para alistar a su hija, notó que su cama estaba mojada y tenía un dolor en su vientre, él ya había vivido eso, sabía que significaba, pero en esos momentos no tenia a nadie cercano. Nam trabajaba y ese día tenía una reunió importante, Jennie ya debía estar en el trabajo, pero a su mente vino una sola persona, a quien llamó y en menos de 20 minutos apareció en su casa, la puerta fue abierta por una niña a medio vestir, despeinada y confundida. Entrando a la sala, vio a Jin sentando en el sofá.

— Lisa… necesito ayuda.

— Vine lo más rápido que pude ¿Qué te pasa?

— Me duele el vientre y me duele mucho.

— Contracciones.

— Si… pero antes de ir al hospital, necesito que me ayudes dejando a Hari en el colegio, prácticamente ya esta lista y s-su lonchera también.

Lisa le ordenó a su sobrina que subiera al auto con sus cosas, ella al ver que no era una situación normal, obedeció sin rechistar, mientras que su tía ayudaba a su padre subiendo al auto. Lo primero que hicieron fue dejar a Hari en el colegio y en el camino al hospital llamo a Namjoon, que al enterarse que precisamente Lisa lo estaba llevando al hospital se molestó.

Cuando llegaron al hospital, la atención a Jin fue rápida, ya que sus contracciones aumentaban cada minuto, él ya sabía el procedimiento. Lo alistaron y lo prepararon para que entrara a sala, para Lisa las horas parecían años, a pesar del trabajo que tenía, no se movió un solo instante. Jin estaba con los efectos de la anestesia, pero aun así lo trasladaron a un cuarto, él recordaba con claridad como se escuchó el llanto de un bebé, de su bebé, de su pequeño Kyungsoo. Pudo descansar un par de horas para que la anestesia se le pase por completo y al abrir los ojos, la primera cara que vio, fue la de Lisa.

— ¿Cómo te sientes?

— Quiero dormir… estoy cansado.

— Te diría que lo hagas, pero… — la enfermera entró con su hijo en brazos.

— No puede ser… es tan chiquito.

— Y es hermoso, muy hermoso — Lisa acarició la mejilla del bebé— Tiene algo de Nam, tal vez cuando crezca sean igualitos.

— Ojalá solo sea en lo físico y no en el carácter.

Ambos se rieron, sin darse cuenta que la puerta de la habitación fue abierta, una emocionada Jennie entró con una pequeña cajita envuelta en papel de regalo, pero su sonrisa se deformó cuando vio a Lisa parada junto a la cama de su mejor amigo, aún le costaba estar cerca de ella sin sentirse nerviosa.

— Hola Jen.

Ella quiso responderle, pero sus nervios la traicionaron.

— Jin, felicidades por el nacimiento de mi sobrino — la menor se acercó a su amigo y lo abrazó con cuidado.

— Creo que yo me retiro — miró a los amigos — Jennie, acompáñame un rato afuera, necesito hablar contigo — se acercó y besó la frente de Jin — Hasta luego Jin, cuídate mucho y cuida a Kyungsoo.

Dicho esto, salió por la puerta de la habitación seguida de Jennie, que era mas nervios que persona, no pasaron mas de 5 minutos cuando la menor volvió a ingresar a la habitación, con los ojos llenos de lágrimas.

— Los papeles del divorcio están listos… —susurró con tristeza — Ella… ella ya los firmó.

Jin no supo que decir y solo tomó la mano de su amiga en señal de apoyo, dejando que esta llorara amargamente.

— Aún la amo Jin, pero no quiero y no puedo lastimar a Winter.

— Lo que pase en tu vida, será solo tu decisión, si quieres luchar por Lisa, házlo, ella regresó por ti, pero si quieres ignorar tus sentimientos y seguir con Winter, estás en todo tu derecho, pero no puedes tenerlas a las dos.

— Yo no quiero tenerlas a ambas, yo quiero a Lisa.

— Pero... — trató de hablar, pero fue interrumpido por Nam

— Hola Nam — Jennie forzó una sonrisa al ver a su hermano quien se acercó a su esposo y le dio un beso delicado sobre los labios.

— Amor ¿Cómo estás? ¿Cómo está nuestro bebe? Lamento no haber estado aquí, perdóname por favor.

— Mi vida, todo esta bien, tranquilo — Jin acarició la mejilla y señaló la cuna donde estaba su hijo y no pudo evitar derramar un par de lagrimas ante el pequeño que tenía enfrente.

Estuvieron toda la tarde juntos, hasta que antes del anochecer, apareció Winter con Jungkook, Dahyun y Hari, quienes estaba contentos al conocer al nuevo integrante de la familia, pasaron un momento ameno y divertido, ya que Namjoon se quedaría con Jin, Hari fue a dormir a la casa de Jennie, ella estaba feliz, solo por pasar tiempo con su prima. En la noche, cuando todo estaba en silencio, Kyungsoo dormido, Jin pudo hablar con Namjoon sobre Lisa, él sabía y tenía presente el odio de su marido por ella, fuera de los gritos o algún tipo de pelea, Namjy a regañadientes aceptó que estaba equivocado al no entender del todo a Lisa.

En una cama de hospital, Nam le prometió a su esposo que intentaría aceptar a Lisa, por el simple hecho que su esposo la quería demasiado, al igual que prometió no ser tan grosero cuando estuvieran juntos, eso para Jin era un inicio, quizá no era mucho, pero agradecía que su esposo hiciera el intento.