Narra Sombra

Me estaba preparando para mi nueva misión en mi celda-habitación.

Consistía en una simple cama con una mesita de noche y un armario, que solo contenía ropa militar y un pequeño baño.

Tres golpes en mi puerta me indican que la misión va a comenzar.

Me abren la puerta desde fuera y salgo hacia el despacho de Lukin, mi superior.

- Sombra, bienvenida nuevamente - nos estrechamos la mano - ya sabes por que estás aquí, ¿ verdad ?

- Sí, señor, una nueva misión.

- Buena chica. Esta es tu misión - me enseña una foto de un hombre, unos cincuenta, moreno, media barba, alto y delgado - debes acabar con él, está poniendo obstáculos a nuestros planes. ¿ Entendido ?

- Sí señor.

- Saldrás en una hora.- Me conducen a otra sala en la que cogo las armas que voy a necesitar: pistolas, cuchillos...

1 Hora después

Estaba en posición, a noventa y cinco metros del objetivo, en la azotea del edificio de enfrente a donde él se encontraba. Estaba recostada en el suelo, midiendo el ángulo de disparo y la velocidad del viento.

- Aquí Sombra, lista para disparar, cambio.

- Dispara - aprieto el gatillo al mismo tiempo que alguien me lanza por los aires, ¡ mierda, he fallado ! - ¡¡ Sombra, has fallado!!¿ Qué demonios haces?

-Tenemos compañía - digo fríamente, mientras veo a un tipo vestido enteramente de azul, con un escudo rojo, blanco y azul y a... ¡ ja! El Soldado de Invierno. - Acabáis de cometer un grave error.

- No hay necesidad de luchar, por favor, pon las manos donde pueda verlas y entrégate. - dice el tío del escudo.

- ¿ Dónde quieres que las ponga ? - digo seductoramente - ¿ aquí? - levanto las manos y con mis poder los hago levitar, los dos se quedan bastante sorprendidos - vaya... me encanta cuando ponen esa cara, no os lo esperabais, ¿ eh ? - me río. El Soldado aprovecha mi despiste y me lanza un cuchillo directo al hombro derecho. Los dos caen al suelo y se lanzan rapidamente hacia mi, Invierno me saca el cuchillo y me inmoviliza los brazos a la espalda.

- Lincoln 6 Eco a Sombra, ¿ que ocurre? - escucho en mi auricular.

- Estos dos quieren jugar - le doy un cabezazo a Invierno en la nariz y le piso el pie, me suelta y me giro propinándole una patada en la cara.

El otro sujeto se lanza a por mi, comenzamos a luchar y logro dispararle en la pierna.

- ¡ Steve! - chilla el Soldado. Siento un pinchazo en mi cabeza cuando el Soldado dice el nombre del de azul.

- ¡ Ve a por ella Bucky ! - vuelvo a sentir otro pinchazo haciendo que me tambalee. Invierno lo aprovecha a su favor y me tira al suelo colocando su peso sobre mi espalda. Con mi poder, le estampo el escudo y me levanto. Nos peleamos, está bien entrenado y reconozco que me está poniendo las cosas difíciles y la herida no ayuda.

- ¡ Sacadme de aquí, ya! - le grito a mi equipo.

- Ya vamos, 1 minuto - me informan. Cuando llegan en el helicóptero, salto al vacío y me agarro a la escalera que han lanzado para mí.

- ¡ Volveremos a vernos, Sombra! - grita furioso Invierno.

- Eso no lo dudes - le sonrío con arrogancia.

________________________________

- ¿¡ Como has podido fallarme?! - Lukin me da una bofetada.

- Lo siento señor, esos sujetos me cogieron con la guardia baja, no se volverá a repetir, déjeme enmendar el erro de mi misión y... - me da otra bofetada.

- ¡ Te necesito preparada para ir a por el Chintamani, esa piedra me concederá todos mis deseos, con ella encontraremos las gemas del infinito! Luego solo tendremos que buscarlas.

- Señor, estoy preparada para ello... - otra bofetada que me tira al suelo.

- No estás lista, si lo estuvieses, habrías eliminado a esos dos malditos sujetos. Cuando localicemos esa piedra, ¡ más te vale no fallarme!

- No señor.

- Llevadla a la Cueva. - mi estómago se encoge.

La Cueva.

Un habitáculo de unos tres metros de alto y apenas uno de ancho, con solo una rejilla de ventilación. Apenas entra la luz del día.

Ese sitio es un infierno. Era mi castigo por no cumplir en la misión. Si fallaba, la mayoría de las veces iba a para allí, me pasaba días enteros de pie, sin poder sentarme, era una tortura con apenas alimento y agua para poder sobrevivir.

- ¡ Por favor, señor, no me lleve alli! - me habían bloqueado los poderes, como siempre pasaba cuando estaba en el cuartel de HYDRA. No podía defenderme, solo me quedaba aguantar. Ese tal Steve y Bucky me las pagarían.

______________________________

Narra Steve

-¡ No nos dijo nada sobre sus habilidades! - grito furioso. Gracias a que Furia se guardó ese secreto, tengo una herida de bala en la pierna, suerte que no es grave.

- Supuse que se les pasaría por la cabeza leer el expediente antes de tirarse de cabeza contra el enemigo.

- Aún así pudo habernos advertido - dice Bucky más calmado. Puede que tengamos parte de culpa por no leer el expediente de la chica.

- ¿ Como os ha ido ? Parece que no demasiado bien - mira mi pierna.

- No es nada grave, o tiene mala puntería, o no disparó a hacerme daños serios; opto por la segunda opción - Furia asiente - es rápida, ágil, sabe moverse bien. Está bien entrenada. Puede mover cualquier cosa. Ya sean personas u objetos.

- Bien, ¿ como es ?

- No lo sé, tenía la cara cubierta con una máscara.

-Entonces no podemos escanear su cara y buscarla - suspira resignado. - Bien, id a casa a descansar, seguiremos con esta misión.