**********RECUERDEN QUE ES UN M-PREG**********

Erik

Se quedo unos minutos mirando sin saber que decir realmente. No podía comprender bien sus palabras, tanto, que cada replica que quiso decir quedo atorada en su garganta.

-¡¿me estas jodiendo?!- grito el alemán luego de unos segundos haciendo a Charles dar un salto al escuchar el grito- ¿acaso es una puta broma?

Charles, que en ese momento ya se encontraba llorando, negó para limpiar sus mejillas con rabia. 

-claro que no ibas a entender- habla un molesto mirándole de manera desafiante- ¿acaso sabes lo que es ser un doncel inservible?- pregunta aun mas molesto- claro, el gran macho Lehnsherr no sabe lo que sienten los que no son capaces de hacer algo tan simple como cumplir su rol en la naturaleza. 

Erik le miraba sin entender el por qué de su ira. Porque de verdad no lograba comprender que era lo que Charles le quería decir.

-Charles...- suspiro peinando su cabello- ¿de que mierda me hablas?- hablo un poco mas calmado intentando racionalizar la situación antes de que se saliera de control, aunque algunos objetos de metal temblaban ante su desespero.

El castaño se acerco y con su dedo golpeo su torso, mirándole furioso.

-¡De esto!- grita molesto- ¡no lo entiendes! ¡nunca lo haces!- comienza a hablar subiendo el tono de voz- claro, para ti no es importante ser familia ¿te haces una maldita idea de cuantas veces llore en el baño al saber que no estaba esperando un hijo tuyo? ¿cuantas noches, luego de que te dormías, pensaba una y mil veces en como formar una familia contigo?- el llanto de Charles interfería en su discurso- ¡¿cuanto deseaba verte con NUESTRO HIJO EN BRAZOS?!

-Cálmate, Charles...- hablo Erik tomando su rostro pero Charles se separo golpeando su mano, Erik quedo en blanco ante su reacción. No. Su Charles no había reaccionado así nunca...

-¡No!- grito molesto- no te haces una idea de cuantas veces pensé en un hijo...- habla molesto- pero claro, tu ya tienes hijos y no te importa, porque tu vida esta hecha- Erik toma su rostro para que le mire- ¡pero yo no!

-No importa, no necesitamos tener un hijo...- Charles comienza a llorar otra vez. 

-pero quiero ser familia contigo...- habla separándose para darle la espalda y abrazarse a si mismo- quiero decir que tuve un hijo con el amor de mi vida... un hijo aquí...

Charles tomaba su vientre con rabia, era un inútil, siempre se lo habían dicho, pero no quería creerlo, intentaba no pensar cuando su padrastro o su madre se lo gritaban y lo habia logrado bien... hasta ahora...

-Charles...- Erik le abrazo por la espalda- podemos ser una familia... tu y yo...- habla despacio sintiendo como un nudo en la garganta se formaba. 

Desde que se conocían, Charles siempre se había guardado algunas cosas, siempre le había mentido cuando alguien le decía algo y luego solo le confirmaba cuando Erik escuchaba aquello por otras personas. Siempre aguantando todo... siempre solo...

-Estaré siempre contigo... Charles... siempre seré tu esposo... y tu mi amor...- susurra intentando reconfortarle pero Charles no decía nada. 

Aunque le doliera, el castaño había tomado una decisión que le dolería mas a el que a nadie...

-Te amo...- habla volteándose para mirarle con los ojos llenos de lagrimas y el rostro empapado- siempre lo hice... y siempre lo haré...- habla acariciando su rostro intentando memorizar cada una de sus facciones.

-Yo también, Charles, siempre te he amado, siempre seras mi amor...- habla uniendo sus frentes.

El castaño sonríe, si... siempre iba a amar a aquel hombre que fue su todo, que le trajo muchas alegrías, que amo como a nadie, que fue su amor...

Con las manos temblorosas, acerco sus dedos al rostro de Erik, puso una a cada lado y entró a su mente, paralizandole de paso.

Vio cada recuerdo, cada momento, cada instancia, cada beso, cada caricia, cada uno de los te amo... 

Erik sabia que estaba sucediendo, pero no podía lograr nada, estaba bajo merced de Charles. 

-Lo siento...- murmuró Charles mientras iba borrando cada uno de sus recuerdos... desde el mas reciente al mas antiguo... uno a uno...

-te amo...- Hablo Erik antes de que el recuerdo de aquella primera vez que ambos se entregaron fuera borrado. 

Reemplazo cada memoria con una vida "normal" tendría que explicarles a todos por qué Erik había desaparecido, pero seria lo mejor para ambos. 

Se amaban, pero juntos solo se estaban haciendo daño. 

Cuando Charles se separo de Erik... ya no era su esposo... ya no era el hombre que amaba... solo debía ser Erik Lehnsherr...

-Erik, ¿qué sucede?- pegunto con una pequeña sonrisa, intentando disimular lo que había pasado. 

-nada... solo... me siento un poco extraño...- murmuro sosteniendo su rostro.

-deberías ir a dormir- le sonríe apoyando su mano en su hombro- ve a descansar, viejo amigo...- aquellas palabras dolían mas a medida que las pensaba. 

-eso haré...- Erik le sonrió, pero ya no estaba esa mirada llena de amor de antes, solo estaba ahí...

 El aleman se fue y apenas pasaron unos minutos, Charles comenzó a llorar. 

Intentaba reprimirse para que no se escuchara fuera de la habitación, no quería que nadie le viera sufrir, pero su pecho dolía, dolía porque la mitad de su corazón se había ido con aquel hombre... y la otra mitad estaba muriendo.

Estuvo toda la noche quitandole el recuerdo a cada uno de su matrimonio, aunque había prometido no meterse en la mente de los demás sin autorización, debia borrar aquellos recuerdos. 

Lo único malo... era que no podía borrarlos de su memoria... por mas que quisiera borrar cuanto amor le tenia a aquel hombre que fue su todo... y ahora nada...

Quiso tirarse al suelo y llorar hasta que no le quedaran lagrimas en el cuerpo. Pero no lo hizo.

Quiso arrepentirse y correr a los brazos del hombre que amaba. Pero se contuvo.

Quiso gritarle al mundo que amaba a Erik. Pero se calló.

Porque el mismo había cedido aquel derecho... el mismo había dejado ir al amor de su vida para que fuera feliz.

Aunque aquello rompió su corazón.

Aquella noche, dentro de la mansión solo se escucharon los sollozos de un corazón roto.

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Lo siento por la demora, entre a practica y el trabajo me consume mucho, asi que estare poco por aca, pero no abandonare las historias, ninguna de ellas.

Saludos y pañuelos en oferta en el Oxxo mas cercano jajajaja