Muy pocas veces había estado aquí, un par como mucho.

Tengo entendido que se hace llamar "casa segura" pero de "casa", tiene muy poco.

Nunca me había gustado estar en el matadero, que era su uso real antes de que todo se descontrolara.

Aunque las vacas y los cerdos muertos habían desaparecido, el olor seguía inundando cada esquina de este asqueroso lugar.

Recuerdo, cando era niña, venir a un sitio como este con mi padre. Salí corriendo en cuanto vi que no todo era darles biberones a las ovejas pequeñas.

Puede que por eso odie tanto éste lugar.
A demás , huele a muerte.

Borro de mi cabeza los recuerdos de un mundo pasado, un mundo que se desvanece por momentos.

Tengo que centrarme.

He de asegurarme de que no puedan comunicarse con Negan porque si lo logran, estoy muerta. Y conmigo, Carol y Maggie.

-Dadme uno de vuestros walkys- ordeno- he perdido el mío mientras escapaba de esos hombres-digo haciendo referencia a Rick.

Paula se frena en seco y sé que hay algo que no le cuadra.

-Lo último que supe de ti es que estabas con esos hombres en un sitio llamado Alexandria...

Sus ojos se clavan de lleno en los míos y sé que intenta pillarme desprevenida.

-Así era... vine con ellos pero cuando vi como masacraban a nuestra gente tuve que hacer algo- digo desafiándola con la mirada.

-Ya me he comunicado con Negan-añado- Ahora, ¿me das el walky o tengo que quitártelo yo misma?

*Wow Dakota, vivir tanto tiempo con el sádico de tu ex profesor tiene sus ventajas*

-Es el único que tenemos- dice dejándolo, bruscamente, en la mano que le había tendido.

Sonrío triunfal y con cuidado, pongo el interruptor en modo off, impidiendo cualquier comunicación el exterior con nosotras y viceversa.

-He dicho que me traigas a Maggie y Carol-digo levantando la voz- Estoy segura de que le encantará verme.

Realmente, estoy acojonada. No sé que estoy haciendo y por tanto, puedo liarla en cualquier momento.

Me tiembla hasta la columna vertebral.

No se como lo consigue Negan; parecer malo durante tanto tiempo. Dar miedo, provocar temor, amedrentar cada segundo de cada hora de cada día.

Eso acabó con él; con el hombre que yo conocía.

-Por aquí- me indica una de las mujeres que va con Paula.

Nunca la había visto, o si lo hice, nunca le presté demasiada atención.

Era una mujer mayor, tal vez de 50 años, desgastada por los años de vida a sus espaldas pero sobretodo por vivir en un mundo que ya no reconocemos como nuestro.

Lleva una cajetilla de tabaco en la mano y un humeante pitillo en la boca.

Yo la sigo sin decir nada y entro por la puerta que ella mantiene abierta para mí.

La sala es grande y bastante luminosa.

Primero veo a Carol , atada de pies y manos, en  medio de un ataque de ansiedad.

Maggie, grita en busca de ayuda para su amiga y yo me lanzo a los pies de la que fue mi cocinera particular en Alexandria.

Quito la cinta de su boca y dejo que el aire vuelva a recorrer su garganta.

Ambas mujeres me miran atónitas y yo recuerdo cual es mi papel.

Me levanto rápidamente y sacudo el polvo de mis vaqueros, intentando parecer neutral.

Evito la mirada de la chica de ojos verdes pero sobretodo la de Carol.

A la que miro con rebeldía y enfado es a Paula.

-Debemos mantenerlas con vida- grito furiosa- ¿no te das cuenta?

Estoy cagada de miedo pero la adrenalina recorre mis terminaciones nerviosas y gracias a eso puedo mantener mi actuación con cierto grado de credibilidad.

Una mujer que no he visto antes y que tiene un lunar en la comisura de los labios  baja la cabeza,acatando cada una de las órdenes que salen por mi boca.

-Tenemos un puto intercambio que hacer... joder.

Me permito unos segundos para inspeccionar mejor el lugar y me fijo en un rastro de sangre que cruza la habitación hasta la puerta.

Probablemente de un caminante.

También veo a un hombre apoyado contra la pared, agarrando su brazo herido que no para de gotear sangre. Está gritando algo pero no me molesto en prestarle atención.

-¿Puedes callarte?-pregunto dándome la vuelta y mirándole con desprecio.

Esto es más difícil de lo que pensaba; no me gusta ser Negan, nunca sería el.

Le compadezco.

Miro de reojo a Carol y veo como se lleva un rosario a la boca.

Una mirada de sorpresa se puede ver en mis ojos pero no tiene nada que ver con la de Maggie. Su asombro crece por segundos y me imagino la cantidad de cosas que le estarán pasando por la cabeza.

-Oh... eres una de esas mujeres- dice la mas anciana de las salvadoras.

Nadie comenta nada.

-¿De que tienes tanto miedo?- le pregunta Paula-¿de verdad te da tanto miedo morir?

-No me importa lo que me pase a mi- contesta mi amiga con lágrimas en los ojos -pero no hagáis daño a Maggie.

No hace falta que siga la frase porque ya sé cuales son las palabras que van a salir de su boca.

-... ni a su bebé.

Me quedo quieta y dejo de respirar por unos segundos. Maggie hace los mismo.

-Venga ya- dice la mujer del lunar.

-Si tiene un bollo en el horno, no se le nota- dice el hombre que está sentado en el suelo.

-Pero vamos a ver- digo levantando la voz- ¿Desde cuando le damos tanta importancia a una mujer embarazada?

Extiendo los brazos casi en forma de cruz y puedo notar la mirada de confusión de la futura madre.

Cuantos menos sepa esta gente, mejor para todos.

-¿Puedes salir un momento?- me pregunta Paula.

Asiento con un exagerado movimiento de cabeza y una sonrisa, tal y como hace Negan.

La rubia cierra la puerta tras de mi y me da tiempo a escuchar a una de las mujeres toser.

-¿Que quiere Negan que hagamos?¿Debemos esperar a que llegue?

Esa frase me pega de lleno y empiezo a marearme.

-¿Cuanto le falta para llegar aquí?

La voz me falla.

-Poco más de una hora.

Vale, Dak, tienes menos de una hora para sacarlas de aquí, me digo a mi misma. Que no cunda el pánico.

¿Cómo coño no va a cundir el pánico?

-Esperaremos- digo no muy convencida.

Abro la puerta cuando escucho gritos de dolor desde el interior de la sala y observo como Paula corre a auxiliar al único hombre de la sala.

Veo como forcejea con el torniquete que lleva en el brazo y aunque odio esto, no hago nada más que inclinarme contra la pared y actuar como Negan lo haría.

Maggie y Carol me miran. Yo las ignoro.

-Si te quitas eso, no serás más que un grifo

Paula intenta calmar al herido sin mucho éxito.

-Ya vienen los demás; están a menos de una hora de camino.

Abro los ojos de par en par.

Me ha mentido; no me cree.

-Ese hombre no tiene ni media hora. Sus nervios se mueren. Si no es atendido ya, podría perder el brazo o incluso la vida- dice Maggie.

Me asombra lo segura de si misma que está. Ojalá yo fuera igual que ella.

-Vuestro hombre, Clay ¿Creéis que puede ayudarle?- hace una pausa- Tiene que hacerse ya.

Veo como Paula la ignora y aprieta aún más el nudo del torniquete.

-Habla con Rick...

-Cállate Maggie- digo a la vez que la miro con arrogancia.

"Media hora" es lo único que sale de la boca de esa mujer.

-¿Sabes lo que me jode?- dice el hombre mientras intenta ponerse en pie.

Yo me incorporo, atenta.

-Ella me hizo esto- dice refiriéndose a Carol- me hizo esto y ahora está ahí sentada, tranquila e ilesa.

-eh- digo intentando avisarle de que no siga por ese camino.

-No, no vas a hacer el intercambio. Vamos a matarlas a las dos, ahora.

-No...-respondo agarrando la pistola que llevo conmigo.

-Vamos a esperar a Negan, tenemos que ser listos- comenta la rubia.

Lo que pasa a continuación es muy rápido.

El hombre se abalanza contra Paula y su mano golpea la mandíbula de ella; que cae al suelo.

Saco por fin la pistola que llevo en la parte de atrás del pantalón y aprieto el gatillo sin darme cuenta o poder asimilar que es lo que estoy a punto de hacer.

El cuerpo de ese chico cae al suelo y todos me miran.

Mis ojos amenazan con cristalizarse pero solo tengo que mirar a Maggie para saber que no puedo dejar que eso suceda.Por ella, por su bebé.

-Nunca dejes que un hombre te golpeé- digo escupiendo las palabras-Problema resuelto.

Sacudo mis manos y guardo el arma, todavía sonriendo , intentado imitar al que tantos quebraderos de cabeza me había provocado.

Empiezo a sentirme mareada así que salgo por la puerta y camino por el estrecho pasillo en busca de algo de aire.No lo encuentro.

Las lágrimas empiezan a caer por mis mejillas cuando llego a una sala apartada.

Llevo la vista a mis manos y observo como tiemblan. Están salpicadas por sangre pero después de la noche de hoy, no se a quien pertenece.

Tampoco sé a cuantas personas he matado y no hay posibilidad de saberlo.

Me estremezco.

Así me pasó varios minutos, en la oscuridad, agachada en uno de los rincones de la habitación.

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Agarro el walky todo lo rápido que puedo y mando un mensaje a Rick.

-Grimes ¿estás ahí?

-¿Dakota?

-Escúchame, todas estamos bien pero Negan viene de camino. Necesitamos ayuda... estamos en un matadero, siguiendo la carretera. Es facil de encontrar.

-Vamos para allí.

-Rápido

Rick quiere seguir hablando pero corto la transmisión y vuelvo a buscar a Paula.

Llevo aquí demasiado tiempo.

Necesitaba pensar en un plan para sacar a Maggie y Carol...

Quien me habría dicho que Peletier ya se había encargado de eso.

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Cuando volvemos a la sala, todo está completamente diferente a como lo dejamos.

Más sangre tiñe el suelo y dos cuerpos lo adornan.

Han escapado y lo han hecho por todo lo alto.

Los cadáveres pertenecen a la mujer fumadora y al hombre al que disparé en el pecho.

Ambas corremos en su busca pero con dos intenciones muy distintas. No tardamos en encontrarlas y Paula , dispara contra ellas.

Cargo mi pistola, con la intención de disparar a la secuestradora que tengo misto delante cuando Carol levanta su arma y nos apunta.

Percibo como el nuevo objetivo de la salvadora es Maggie , en concreto su abdomen. Tengo que actuar rápido.

Levanto la pistola y apunto a Carol aunque mi intención esté muy lejos de apretar el gatillo.

Si la mujer que está a mi lado descubre que realmente estoy con ellas, no dudará en mandar una bala directa al vientre de Maggie, aunque eso suponga asumir su propia muerte.

-¿Dak?¿Qué estás haciendo?

La voz de Maggie me parte el corazón y no puedo evitar que una lágrima caiga de mis ojos.

-Márchate- dice Carol- Marchaos.

Odio que piensen que realmente, estoy con ella y espero que lleguen a perdonármelo algún día.

En medio de todo este caos la  mujer del lunar hace su entrada y  tras forcejear con Maggie, acaba con una bala en la cabeza por cortesía de la Carol que conozco y que hace lo que sea con tal de proteger a su familia.

Yo en cambio, no se como actuar en estos momentos y me juzgo a mí misma por mi cobardía.
Estoy aterrada. La mano que sostiene mi arma no para de temblar. Así no acertaría ni a un blanco del tamaño de mi casa.

La mujer de pelo canoso avanza hacia nosotras, apuntando a Paula justo en la cabeza.
Sé que Carol no fallará el disparo.

Mantengo mi mirada fija en el gatillo que la rubia puede apretar en cualquier momento.

Veo como su dedo vacila y tras hacer un poco de presión, suelta la piecita de metal.
Esa es la señal que necesitaba. Nadie amenaza con matar a mi familia.

Doy un paso hacia delante y con un rápido movimiento dirijo mi brazo hacia la cabeza de Paula. Aprieto el gatillo que he apoyado en su sien y cierro los ojos.
Noto como gotitas de sangre aterrizan en mi cara.

Pero...

Hay algo que no entiendo. Si he sido yo la que ha disparado ¿por qué un dolor intenso en mi abdomen hace que me desplome en dirección al suelo?

El frío hormigón golpea mi espalda y el oxígeno se escapa de mis pulmones. Mi cabeza encuentra el suelo.

Intento respirar pero no hay aire suficiente en este mundo para que yo recupere la respiración. El dolor punzante no hace más que aumentar la sensación de ahogarme . Me llevo las manos a la zona cero del dolor.
Las noto resbaladizas y pegajosas.
No logro entender que acaba de pasar.

Un par de manos más aprietan mi herida y veo como todo empieza a teñirse de rojo.

-Dak - escucho gritar a Maggie.

-Eres una caja de sorpresas- dice Carol- no sabía que seguías de nuestra parte. Lo siento mucho- dice entre lágrimas- Debí haberlo sabido !

Cojo aire e intento que las palabras sean claras y precisas. Si esto es lo último que voy a decir, quiero que no tengan dudas de qué es lo que siento.

-No... no se abandona a la familia.

Escucho como alguien habla por el walky pero tengo demasiado sueño como para quedarme despierta y averiguar quién es.

De vez en cuando abro los ojos y descubro que mi posición ha cambiado y que tengo algo atado a la altura de mi cintura.

-Me duele...- consigo pronunciar.

-Aguanta Dak.

La voz de Maggie se repite en mi cabeza y lo último que noto vuelve a ser el frío suelo de cemento que espero no volver a pisar jamás.

Hola a todas !! Espero que el capítulo os haya gustado y si , he actualizado sin dejar que pasen 3 años de por medio!! Habíamos hablado sobre hacer un maratón de capítulos y como nunca hice uno , necesito que me digáis de cuantos capítulos debería ser y si los subiría el mismo día , o con uno de diferencia.
Voy a ponerme a trabajar ya en el siguiente para tener algo adelantado ya que .... voy a empezar a traducir una historia que realmente me ha encantado !!! También trata sobre DARYL así que espero que os paséis por ella. De todas formas , esto es un proyecto a largo plazo y no voy a dejar de lado Negan's Property.
Muchas gracias por el apoyo y si os ha gustado, por favor, votad y comentad!
#TeamDakyl