Abrí los ojos tratando de acostúmbralos a la luz que trasmitía la ventana que había en la habitación, me trate de estirar pero un brazo sobre mi cintura y unas piernas entrelazadas con las mías me lo prohibían. ¿Qué mierda había hecho ayer?

Trate de alejarme un poco para poder observar a mi acompañante, el corazón se me paró cuando vi a Negan a mi lado, levanté las sabanas y comencé a sudar frio cuando me di cuenta que ambos nos encontrábamos desnudos. Mi limitada vista encontró unas botellas de alcohol sobre uno de los estantes además de ropa esparcida por parte del suelo, volví a apoyar la cabeza sobre la almohada tratando de recordar algo de lo que había pasado la noche anterior; Negan había vuelto de una expedición más contento que nunca por haber encontrado las botellas de alcohol que ahora se encontraba en la habitación, comenzamos a hablar y a beber. Lo típico ¿en qué momento las cosas se habían salido de control?

Volví mi mirada hacia Negan, su respiración era tranquila y pausada, no se había dando cuenta que yo había despertado y me encontraba desesperada por saber respuestas. Solté un suspiro mientras pasaba una de mis manos por mi rostro. Recordaba haber estado riéndome y que después nos habíamos besado suponía que después nos habíamos desnudado y llegamos a la cama, ¿era lo normal no?

Mi acompañante se quejó un poco mientras se movía y pasaba de la etapa de sueño profundo a una de confusión, me miro mientras acostumbraba su vista a la luz de día.

— ¿Buenos días?

—Como si fueran buenos. —Respondí con frustración.

¿Cómo era que me había acostado con uno de los hombres más guapo de lo que quedaba de mundo, además uno mis mejores amigos haciendo y no lo recordaba?, claramente me iba a sentir frustrada.

—Veo que no te di la satisfacción suficiente. —Rió mientras se acomodaba en la cama.

— ¿Qué sucedió ayer?

— ¿No lo recuerdas?

—Si lo hiciera claramente no te preguntaría Negan.

—Me siento totalmente ofendido. —Rodé los ojos.

—Negan, por favor.

—Ayer decías lo mismo pero de una manera diferente, como si suplicaras. —Rió.

—Eres un idiota. —Lo golpeé con una almohada mientras también reía.

—Bueno ya sabes lo típico que pasa. Bebemos, hablamos y nos besamos, las cosas pasan de una cosa a otra y terminamos desnudos en la cama. —Me mira esperando una reacción.

—Santa mierda. —Murmuré.

—Lo mismo dije yo cuando vi tu cuerpo. Por cierto ¿Dónde mierda lo escondes?

—Cállate de una vez.

—Cállame. —Me guiñó un ojo.

— ¿Te puedo pegar un puñetazo entonces?

—Ya, si claro. —Bufé.

Me levante mientras recogía la ropa y me la ponía rápidamente, aun cuando Negan ya me había visto desnuda me sentía cohibida ante su mirada. Él también se levantó y se comenzó a vestir a paso lento. Se volvió hacia mí antes de salir.

—Búscame cuando estés dispuesta a hablar con sensatez.

— ¿Y eso que significa?

—Significa que estás loca. Eres imposible. —Lo miré claramente ofendida

— ¿Qué estoy loca?

Me miro con una sonrisa para luego tomar mi barbilla con el índice y me estampo un beso en los labios.

—Y yo debo de estar loco por aguantar esto.

Rodé los ojos mientras me zafaba de su agarre.

—Idiota. —Murmuré y él me miro con una sonrisa antes de marcharse.