“Hay veces que una victoria, no es duradera”
                                      |Draven Villeel|

   ✝ N E A   B A K E R

Una muerte más para los Vleid.

Un triunfo para todo aquel en su contra. Logré destruir al primer convertido de Scarlet y a casi cientos de vampiros en una sola batalla. Al ser de día nos favoreció aunque hubo pérdidas por igual.

Perdimos a varios del aquerrale, Cazadores, incluyendo a Katia y a Jace. Su muerte dolorosa, inesperada cuando la culpa me invadió cuando los hice venir a Neevil. Por enfrentarse a vampiros, perdieron su vida y con ellos sus sueños. Una boda que nunca se llevará acabo por su ausencia.

Después de regresar a la Fortaleza, le insistí a Caston volver a la Guarida por sus cuerpos. Más que compañeros, existía un aprecio como amigos por los años de conocernos y merecían una despedida. Lamentablemente, no hubo un funeral cuando Mauren Agnes se encargó de volver cenizas sus cuerpos en fatales condiciones. Sin embargo hubo palabras de despedida y siempre serían recordados.

Después, Matt activó la bomba y su Guarida explotó y desapareció de todo Neevil. Sin rastro de aquel vampiro nombrado Blood.

Decir que no disfruté arrebatarle la eternidad sería mentira cuando lo hice y creció la sensación tan solo pensar en Nicolaik Vleid, enterarse.

Sería muerte a muerte y estaría alerta de su ataque en mi contra. Un odio intenso entre los dos día tras día.

Sin embargo, ni por todas esas muertes, Thiago volvería más fue por él y fue vengado.

Hasta Cassie salió herida. Fue fuerte y valiente para sobrevivir con medio brazo que el mismo aquerrale se encargó de curarla a tiempo.

Fue un triunfo para todo Cazador más su silencio, las calles nocturnas sin vampiros existentes fue muy sospechoso con el paso de los días.

Como siempre, visito una vez más la Fortaleza. Aunque nadie ha bajado la guardia, es raro que ningún Vleid haya salido de sus escondites desde la pérdida de aquel primer Vleid convertido. Sin embargo, nos encargamos de salir cada noche, de vigilar por todo Neevil siendo más extraño no verlos. Nada de disparos contantes o nuevas perdidas.

Cuando paso por el área de entrenamiento me detengo al ver a Nery y a Matt, la primera fue quien más lloró por Katia cuando se volvieron amigas como Matt amigo de Jace.

Me obligo a no acercarme cuando no puedo dar la cara. No encuentro las palabras correctas cuando no puedo mentirles. Quisiera pedirles irse de aquí antes de arriesgar su vida más nadie puede salir de Neevil hasta que los Vleid dejen de existir.

Entonces, prefiero la distancia.

Veo a Matt abrazar a Nery que sigue con ese semblante de tristeza. Con un nudo en la garganta, me obligo a apartar la vista y sigo mi camino hasta la habitación de Cassie Willford.

Cuando llego a su puerta, toco una vez con mi puño y espero su respuesta hasta escuchar su voz:

—Adelante.

Abro la puerta sin la menor dificultad y entro hasta adentrarme a su habitación.

—Hola Cassie —cierro la puerta detrás de mi.

—Comandante Cassie —me corrige desde la cama, con su espalda apoyada en la cabecera y la sábana cubriendo sus piernas hasta su cintura—Hola Nea.

Le sonrio y me acerco hasta su cama. Prefiero quedarme de pie y verla con detenimiento.

—¿Cómo sigues?

—Mejor cada día —se observa a si misma— pero este nuevo brazo, siento que no es el mio— ella mueve su brazo recuperado. Sin duda alguien del aquerrale hizo un gran trabajo— crei perderlo para siempre.

—Todo es posible con magia —pienso en Thiago y borro mi sonrisa— o casi todo. A veces, no se alcanza a salvar a tiempo.

—Siéntate Nea —me pide y ante su orden, me siento en la orilla de la cama. —Lo lograste, yo y mis Cazadores como Thiago, estamos orgullosos y agradecidos contigo.

—Siguen existiendo Cassie, no es una victoria definitiva.

Ella asiente.

—Seremos los vencedores Nea —asiento segura— ¿Alguna novedad? El Brujo que me sanó el brazo, me pidió días de descanso para una total recuperación pero no puedo Nea —se inclina sin el menor esfuerzo— no puedo perder el tiempo desde aquí en cama cuando me necesitan.

—Comandante, solo serán por unos días más.

—La cacería no ha terminado Nea —demanda con esa seriedad habitual—. Los Nocturnos siguen libres por las noches y hasta no desaparecer esta marca, no voy a descansar definitivamente.

Suspiro cuando es terca y no puedo convencerla de lo contrario.

—Han sido tres noches donde ningún Vleid, ha salido por las calles. Es como si nunca estuvieran aquí.

—No te confíes Nea Baker. Son astutos, planean algo y solo quieren que bajemos la guardia pero no, —golpea con su puño la cama—. Debemos seguir igual.

—Totalmente de acuerdo Cassie —por su mirada, me corrijo—. Comandante Cassie Willford —ella asiente varias veces—. Caston se está haciendo cargo de todo, guía a los grupos cada noche.

—¿Acaso planea robar mi cargo?

—No Cassie —me inclino tras apoyar mi mano sobre la cama— lo hace en estos días de tú ausencia. Caston solo quiere que la Fortaleza siga fuerte ante las pérdidas.

—Eso espero. No puedo seguir más días aquí en cama —demanda— por cierto, mis condolencias por las pérdidas. Katia y Jace, demostraron ser unos excelentes Cazadores en varias noches que destruyeron Nocturnos.

—Si, pero no logré salvarlos como a Thiago.

—No te culpes Nea, en esta guerra, así es. Cada enfrentamiento con vampiros en es riesgo nuestra vida. Mírame, fui la prueba de casi dejar de vivir —se apunta— todos sabían que el plan era un riesgo.

Asiento varias veces y bajo la vista.

Nos invade el silencio por cortos segundos.

—La situación nos obliga a ser fuertes Nea —resuena su voz y alzo la vista fija en ella—. Te entiendo, por dentro sigo herida, destruida por la pérdida de mi hermano pero más me necesitan y esto aún no termina.

Extiendo mi mano y la apoyo sobre la suya. Me sorprende que me lo permita.

—Hasta debo reconocer que esta Fortaleza te necesita mucho Nea —agrega y aparta su mano de la mía—. Eres una gran Cazadora con armas o sin ellas. Es valioso y de mucha ayuda tú poder.

—Sigo trabajando en mi don como portadora de magia —suspiro— mi poder como portadora de luz, va a incrementar y lo usaré cuando sea el momento idóneo.

—Lo sé Nea —me sonríe—. Incluso, odio decirlo pero tengo la ayuda de Caston sean cual sean sus intenciones. Es hombre, no soporta una mujer al mando como yo.

—Caston no es así, su atención en ti es porque le importas —sonrio divertida—o le gustas.

—No, no es eso. —Cassie desvía la vista— pero si, todos los días viene a verme, suena muy preocupado por mi. Ese día, me ayudó —regresa la vista en mi—. La Cazadora Cassie Willford, fue cargada por uno de sus Cazadores, fue la noticia en la Fortaleza— niega varias veces— no seré la burla o seré tema de todos. Si pasó fue porque estaba inconsciente.

—Cassie, no debería importarte lo que piensen los demás de ti.

—Soy fuerte Nea, nunca me gusta demostrar debilidad.

—Thiago muchas veces me ayudó —le recuerdo.

Ella guarda silencio unos segundos.

—Caston está soltero, puedes darte la oportunidad con él —insisto.

—Lo sé, me contó su pasado con su esposa difunta. Me confesó que amó mucho a Tatiana y por eso está aquí. El vampirismo a ambos nos hizo perder a personas importantes pero no Nea, no me permito imaginar una relación con él —hace una corta pausa—No es momento para romanticismo en Neevil cuando eso es debilidad.

—En un futuro —me encojo de hombros— puedes pensarlo.

—No tengo sueños Nea, mi futuro depende de mi libertad de aquí —Cassie suspira—. Han sido varios años de ninguna relación con nadie, no pienso en hijos cuando estoy concentrada en lo que hago aquí en este maldito pueblo.

—Aún eres joven.

Ella niega.

—Seré una Cazadora hasta el final —percibo una sonrisa en su rostro— pero aquí entre nosotras —suspira—Caston Grenm me intriga mucho.

—¿Te gusta?

—No, no, no —mueve su mano— me quieres convencer de lo contrario.

—Cassie, es normal que estés confundida y es difícil darse la oportunidad en estas condiciones.

—No Nea, estoy decidida a no darle una oportunidad. En este corazón —señala su pecho— no hay espacio para el amor, solo es venganza nada más.

Estoy por hablar cuando un golpe en la puerta, me interrumpe. Comparto una mirada con Cassie y ella se acomoda en su cama. Ante todo, luce presentable, incluso se ve hermosa cuando ha dejado su cabello negro suelto que le llega hasta su cintura.

—Debe ser él —me dice en voz baja.

—Puedes entrar Caston —contesto por ella y la puerta es abierta.

En efecto, entra Caston con una bandeja de comida para Cassie.

—Nea, que sorpresa verte aquí.

—Hola Caston, quise venir a acompañar un rato a la Comandante y saber como sigue.

—Es terca como tú —él deja la puerta abierta y se acerca a la cama—. Tú comida Cassie.

—Es Comandante —lo corrige y porta esa mirada—. Nea me informó que eres el guía cada noche.

—Si, es lo que estoy haciendo.

—Lo supuse —Cassie aparta las sábanas y esta apunto de bajar de la cama—. La Comandante regresa, no van a seguir tus ordenes.

—Nea, por favor —me pide Caston al tener las manos ocupadas.

Enseguida me levanto y de los hombros la sostengo.

—Cassie, recuperate primero. Nadie se olvida que eres la Comandante aquí.

—No quiero tú cargo Cassie.

—No te creo —ella deja de verlo y regresa a su lugar. Cubro sus pies con la sábana y me situo a un lado de Caston— una noche más y punto.

Tras compartir una mirada, los dos asentimos.

—Aquí tienes —ella acepta la bandeja que Caston le entrega y entre dientes le agradece.

—Bueno, me tengo que ir —les aviso y me dirijo a la puerta.

—Nea —antes de salir, me detengo al escuchar su voz— gracias por venir —le sonrio—. En estos días, debemos crear el plan para atacar su última Guarida, la idea de seguir el mismo plan podría funcionar y evitar que se oculten en esa Mansión.

Asiento de acuerdo.

La misma Mansión donde él se oculta. El vampiro original.

—Primero recuperate para regresar a la batalla, Comandante —recalca Caston.

—Él tiene razón pero en cuanto antes, más Vleid serán destruidos —le aseguro y termino por salir de su habitación cerrando la puerta.

Dejo de escucharlos hablar, les doy privacidad y me encamino por el pasillo.

No obstante, una silueta me detiene cuando estoy apunto de salir de la Fortaleza.

—Nery

—Nea ¿nos vas a evitar todo el tiempo? —me enfrenta y tengo que retroceder un paso.

Suspiro y mi mirada viaja de ella hacia Matt que la acompaña.

—Nea, no te culpamos ni a Caston. Cada uno decidió venir a Neevil.

—Así es Nea, perdimos a Katia y a Jace. Es doloroso cuando los extraño pero nosotros seguimos con vida —menciona Nery— seguiremos siendo Cazadores y vamos a seguir cazando a esos vampiros cada noche. Estamos contigo Nea.

—Es personal por nuestros amigos.

—Gracias, los Vleid se van a arrepentir de lo que les hicieron. —Nery se acerca a abrazarme y la escucho llorar en mi hombro. Pese a compartir la misma tristeza, no derramo ninguna lágrima.

Matt es quien la aleja de mi y ella se acurruca en su pecho.

—Somos un equipo Nea.

Coloco mi mano en el hombro de Matt y con una última mirada, me despido de ambos hasta salir de la Fortaleza.

Afuera es medio día, con una idea en mente, regreso a casa.

...

Cuando soy protegida por la barrera, dentro del límite, desde la reja observo su Mansión. Justo hacia la ventana donde no detecto su presencia. Ni he visto a Jhon, mi mayor debilidad.

Más Cassie tiene razón, debo ser fuerte por Joan y por Carolina.

Suspiro y me doy la vuelta hasta entrar por la puerta principal. Dentro, no me sorprende ver a mi padre acompañado por Mauren Agnes cuando ella siempre está aquí. En cuanto entro, los dos guardan silencio más lo escuché decir:

“Nea se debe enterar”

Me molesto por un secreto más.

Bajo su atenta mirada, cierro la puerta y me doy la vuelta.

—Regresé —les aviso.

—Hija —me sonríe Jhony Baker sentado en una silla con su bastón a su lado—. Carolina y Joan, salieron.

—Deben estar con Yane —avanzo hasta detenerme a unos pasos de ellos. Por Lucky, bajo la vista cuando ronronea cerca de mis pies— Hola Lucky, igual te extrañé.

—Insolente, debes practicar tú poder —alzo la vista al escucharla— Les ganaste una batalla pero no la guerra. Si es un mérito que hayas derrotado de los cinco Vleid, al segundo hijo de la maldita de Scarlet pero faltan más.

—Lo sé, no estaré del todo satisfecha hasta derrotarla tanto a ella como a su primer hijo —observo a los dos— pero no quiero secretos, los escuché.

Ambos comparten una mirada.

—Nea, tienes que saber que...

—Un mes Nea —lo interrumpe la anciana con fingida apariencia— falta casi un mes para que esta barrera sea destruida y tienes que actuar lo más pronto posible para evitar que Scarlet sea libre de Ancestral antes de que sus creaciones sigan aquí.

La preocupación me invade y fijo la vista en mi padre.

—Estoy más débil —me responde— no voy a soportar por mucho tiempo hija. Eso le decía a Mauren, tienes que estar enterada del tiempo.

—Haré lo que sea, nos queda una Guarida más por destruir y atacar su Mansión —esquivo al gato y avanzo dos pasos— lo haré lo antes posible pero Scarlet no debe ser liberada.

—Eso quisiéramos —Agnes se cruza de brazos.

—No puedo, ni tú puedes destruirla desde su prisión —atenta lo escucho— para ese día, Scarlet será libre sin evitarlo.

—Para ese día, debe estar lo suficientemente débil sin ninguno de sus hijos existir para atravesar su oscuro corazón con una estaca —le sigue Mauren Agnes con odio en su voz— Tú tendrás que hacerlo, insolente.

—Así será —les doy mi palabra a los dos cuando pienso derrotar a todos los Vleid hasta terminar con Nicolaik — ¿Existe una manera de destruir Ancestral definitivamente?

—Es posible pero se requiere un gran poder. Lo intenté pero no lo logré con Scarlet prisionera.

Asiento al entender.

Al recordar mi idea, doy otro paso.

—Con mi poder —paso saliva— ¿puedo Resucitar a Thiago?

—Nuestro don no funciona para eso.

—Mauren —mi padre por su cuenta se levanta y se apoya de su bastón—. Nuestros ancestros, han dejado registros Nea pero nadie del aquerrale, incluso yo mismo, lo ha logrado. Cuando tenía mi poder, lo intenté con Everit pero no lo logré.

—Revivir conlleva graves consecuencias incluso para quien lo intenta y para quien regresa de la muerte. Es una maldición, Nea.

Me dedico a ver de Mauren Agnes a Jhony Baker.

—Voy a intentarlo, después de cumplir mi misión aquí, lo haré por Thiago.

—Déjalo descansar en paz, insolente.

—Hija, te ayudaré.

—Jhony, no puedes...

—Se lo debo Mauren —mi padre deja de verla y fija la vista en mi. Si derrotamos a los Vleid, unire mi poder con el tuyo para lograr una Resurrección.

—Gracias papá —le digo sincera cuando no pierdo la esperanza de recuperar a Thiago.

—Los dos son unos inconscientes —nos regaña Mauren—. Jhony, te costará años para recuperar todo el poder que tenías de siglos y tú Nea —ella baja sus brazos— tú poder como portadora de luz solo lo usarás una vez y va a desaparecer.

—Tendrá la ayuda de todo el aquerrale incluyendo la tuya Mauren, eres poderosa como Nea —le dice mi padre sin dejar de verme— cumpliré mi palabra hija. Tal vez no puedo reparar el daño con Jhon pero contigo, te permitiré que seas feliz y libre de todo esto.

Le sonrio y no evito ir a abrazarlo.

De esa manera, este de acuerdo o no, le otorgo un poco de poder para darle fuerza para seguir sobreviviendo.

✝✝✝

—Blood no existe más y no hay nada que pueda traerlo de vuelta ¿qué vamos a hacer Nico?

—La pérdida fue mayor, Nicolaik.

—Soy consciente del daño —él deja de caminar de un lado a otro y se detiene con una mano en su bolsillo—. Blood será vengado.

Tres Vleid desde la cocina de la Mansión, se observan mutuamente.

Kyve se cruza de brazos y niega varias veces.

—Sigo sin creerlo. Blood era superior a nosotros. Imagino el daño tanto para Madre desde Ancestral como para ti por convertirlo —observa al vampiro pelinegro frente a él— pero Maxius está igual de afectado, tenían una conexión.

Sasha con sus manos sobre la mesa, asiente varias veces.

—Todos Kyve —espeta con tristeza— Por siglos fuimos los cinco —la ira le invade y con sus uñas rasga la madera de la mesa—. Esa desgraciada, debe sufrir lo peor por Blood —dirige su vista en el vampiro líder—. Ordena salir esta noche, Nicolaik. La sed será peor para todos.

—Aún no Sasha.

—No podemos demostrarles miedo. Somos vampiros, hijos de Scarlet.

—No es temor Kyve —lo apunta— es precaución. Debemos buscar una manera de afectarlos si queremos vencerlos. —Nicolaik observa a los dos—. Vamos a llevar acabo el plan, capturar al crio y debilitar tanto a Baker como a su hija.

—¿Cuándo? —le pregunta Kyve desesperado. —Todos en la Guarida, están sedientos de venganza.

—No todos los Vleid se van a involucrar. —Nicolaik comienza a caminar de un lado a otro bajo su atenta mirada—. Tengo un plan y nosotros cuatro lo vamos a llevar acabo y el resto será la distracción— se detiene sin ocultar sus colmillos— mañana mismo por la noche van a perder.

Tanto Kyve y Sasha sonríen con malicia hasta que escuchan un ruido que los alerta.

—Debe ser Maxius otra vez con su descontrol —emite Kyve y es el primero en salir en dirección a la sala principal.

Enseguida lo sigue Nicolaik y después Sasha tras levantar su vestido.

—¡Maxius! —interviene el vampiro castaño al separarlo de un Jhon desde el suelo con una amplia sonrisa burlona.

—¡Suéltame Kyve! ¡Debo matarlo por Blood!

—¡No fue él! —ante su fuerza se safa de su agarre. Apenas Jhon se levanta cuando es sostenido del cuello por un Maxius colerico.

—Máximo, suficiente —aparece Nicolaik y con la menor fuerza los separa—. No puedes matarlo, no entre nosotros.

—No es un Vleid, es igual a su... hermana —Sasha interviene y con ayuda de Kyve lo aleja de él— si lo mato... ella sufrirá exactamente lo mismo.

—Maxius, cálmate —le pedí la vampiresa.

—¡No! ¡Ninguno hace nada por Blood! —se safa de su agarre más se mantiene en su lugar con sus ojos carmin— estoy harto de esperar. De una vez, vamos a arrancarle la cabeza a Nea Baker —masculla su nombre entre dientes.

—Debes ser paciente. Nadie olvida la pérdida de Blood—. Él niega varias veces—. Jhon, vete de aquí.

—Es una Mansión compartida, Nicolaik.

—Jhon —basta una mirada suya para él gruñir e irse a la cocina por una copa de sangre.

—No pretendas una convivencia con él —le dice Maxius más calmado.

—Será necesario para esa noche lograr que ese crio, salga de su límite.

—¡Un carajo su hijo! ¡La venganza es contra Nea Baker!

—¡Es una conexión Maxius! —Nicolaik alza la voz y se obliga a controlarse— Tanto Nea Baker como Joan Baker, nos nos conviene que unan su don. Conector y portadora de luz, una mayor dificultad para todos nosotros ¿Lo entiendes?

—Maxius, lo vamos a lograr por Blood —le dice Sasha— tenemos que confiar en Nicolaik.

Él gira a verla.

—No debió morir, no para siempre —se voltea y se deja caer en el sillón bajo su atenta mirada—. Debí irme con él, no lo comprendo.

Sasha comparte una mirada con Nicolaik tras días atrás, hablar a solas sobre el tema.

—Entonces, fue por eso que Maxius existe— le dijo la vampiresa tras preguntarle y escucharlo con atención.

—Solo quise ayudar a Blood. Él solo quería marcarlo, quería una conexión con Maxius. Le advertí las consecuencias, pero él no quería condenarlo cuando existía la posibilidad de que no funcionara —bajó más la voz— y sería un riesgo.

—Esto comprueba que funcionó —le respondió en voz baja Sasha— y se lo debes decir —se acercó a él—. Maxius lo va a entender.

—Es demasiado pronto, Maxius está descontrolado, tú misma lo viste.

—No sabe controlar las emociones, Nico. Él único que lo controlaba era Blood. —Sasha apoyó su mano en su hombro y fugazmente vio hacia la puerta. Ambos lejos de los tres Vleid en la misma Mansión— pero me preocupa Maxius ¿habrá una afectación mayor para él? Tenían una conexión y sin Alexandro, temo que Maxius poco a poco...

—No Sasha, no va a morir —Nicolaik la interrumpió y beso su frente— no existe más conexión y cuando sea el mejor momento, se lo diré— le juró.

Sasha con su mirada, le pide hablar con él.

Nicolaik deja de verla y tras dudar, fija la vista en Maximo.

—Maxius, entendemos tú dolor por Blood o... Alexandro —espeta Kyve extraño de nombrarlo por su nombre—pero ante todo, te tienes que recuperar. No haz bebido sangre —él niega— te traeré una copa.

—No Kyve —él se levanta y Kyve desiste su idea de ir por una copa de sangre— no bebere ni una gota hasta descubrir que fue lo que pasó —coloca sus manos en su cabeza— perdí la conexión con Blood, no tengo la marca al ser su último sirviente —baja sus brazos y se revisa a si mismo— ¿por qué sobrevivi? ¡¿Por qué fui el único?!

—Maxius, fue plan de Blood —habla Nicolaik y causa su atención—. Él antes de marcarte, me pidió ayuda y un consejo.

—¿De qué hablas? —se acerca a él más Sasha interviene a tiempo entre los dos vampiros.

—Blood estaba decidido a marcarte y nombrarte como su sirviente, pero no quería que ante la marca, condenarte por la conexión. Conocía el riesgo, así que le sugerí la idea de separar y alterar la conexión. Para eso, requería un poder de magia que afectara un vínculo de esa magnitud en el vampirismo. Quise ayudarlo pero no controlo este poder que tengo por culpa de Baker —gruñe y hace una corta pausa—. Le aconseje buscar un portador de magia de su aquerrale. De varios traidores, eligió a Athenea y fue quien le dio la sustancia azul. El día que te marcara, te la tenía que dar y eso iba a alterar la conexión. Cuando Blood, dejara de existir justo como pasó, serias el único sobreviviente cuando la conexión se iba a desactivar.

—Lo recuerdo, Blood me dio eso y creí que lo usó con todos —gruñe y pasa sus manos por su cabello castaño varias veces— y tú lo sabias.

—Fue petición de Alexandro.

—¡¿Y de qué sirvió?! ¡Debiste decirme Nicolaik!

—Existes Maxius —le recuerda— agradecele a Blood...

—Agradecer, no Nicolaik —lo apunta— Los dos teníamos que existir, los dos teníamos planes a futuro al ser libres de aquí. Blood no volverá, mi eternidad no pienso soportarla sin él.

—Maxius...

—¡Al carajo tú plan! ¡Esta noche iré a matarla! —lo señala— como líder, cometes los peores errores que solo afectan a otros. Bravo —le aplaude— le fallaste a Madre otra vez.

Empuja a Kyve al interponerse en su camino hasta irse por las escaleras.

—No quiso decir eso, Nico. Es afectación para todos.

—Tiene razón, Sasha.

—A Maxius le costará superarlo pero debemos apoyarlo.

Nicolaik se voltea y con una mano en su barbilla, se aleja de ellos.

—Estará bajo nuestra vigilancia y Kyve, esta noche irás a la Guarida y les ordenarás a todos, mañana por la noche salir a drenar mientras nosotros, actuamos nuestra parte correspondiente.

—Lo haré, Nicolaik.

Sasha esta por seguirlo cuando Kyve la detiene. Con su mirada, le advierte y ella molesta, desiste su idea y permanece en su lugar.

Al llegar a la ventana, Nicolaik se detiene con sus manos en sus bolsillos delanteros.

—Madre, en una ocasión me contó sobre la Noche Eterna, un plan que nunca llevó acabo —habla entre el silencio. Tanto Kyve y Sasha lo escuchan con atención—. La oscuridad apoderarse de todo el Mundo. No más esperar a salir, no más ocultarnos de día —gruñe cuando detecta movimiento en la calle frente a la Mansión— aseguró un Baker lograrlo —sonríe con malicia cuando observa a Carolina acompañada de Joan regresar a casa. El pequeño Baker sonriente tras abrazar una caja de galletas— por ella lograré la Noche Eterna.

No deja de observarlo hasta que Carolina por Joan, abre la reja y ambos cruzan.

Sin embargo, el pequeño Baker al esperar a su madre, observa hacia la Mansión justo hacia la ventana.

—Nicolaik —resuena la voz de Sasha.

—Es lo que necesitamos, a ese crio —le responde sin verla.

—A ese crio, lo tendrán bajo mis condiciones.

El vampiro desde la ventana, se voltea al escuchar la voz de Jhon y lo observa con una copa de sangre en su mano desde la sala. Cerca de Kyve y de Sasha.

—He escuchado sus planes que me involucran, ese niño es mi hijo aunque no me importe —se encoge de hombros— me corresponde cazarlo.

—No vas a matarlo Jhon.

Él ríe siniestro.

—Nicolaik, creí que eras más astuto —Jhon le da un trago a su copa— les ayudaré a sustraerlo de su madre con una unica condición —lo señala siendo evidente su larga uña— cuando no requieras más su don y con ayuda de Scarlet, lo vas a convertir.

—¿Qué? ¡Eso nunca! —espeta Sasha— Baker que sean Vleid si contigo es suficiente.

Nicolaik con velocidad se acerca él siendo mayor la altura.

—Creí que no había aprecio ¿Tú humanidad te afecta, Jhon?

—No —él le responde y le sostiene la mirada— He probado demasiada sangre y ninguna es mi favorita. Ustedes, no dejan de hablar de una conexión, perfecto. Existe una distinta conexión entre padre a hijo —sonríe dejando sus colmillos en evidencia— cuando el crio esté aquí bajo su encierro, me dejarás beber de él y después, convertirlo, será mi donante idóneo.

—Es tú hijo —le dice Kyve sin creerlo.

Jhon se encoge de hombros y lo ignora.

—Mi oferta caduca, Nicolaik y yo mismo mataré a su madre. Eso es debilidad para esta humanidad oculta.

El vampiro líder observa cada uno hasta decidir.

—Es un trato Jhon —extiende su pálida mano hacia él y tras dudar, Jhon Vleid la acepta—. Joan Baker será un nuevo hijo para Scarlet Vleid.