La noche cayó sobre la aldea de la hoja, bañada en Plata por la luz de la luna, la aldea durmiente y pacífica por fuera para el mundo parecería inofensiva, pero sin duda era la cuna de los más atroces y despiadados monstruos del mundo ninja, pero ni el kyubi o Luu-chan estaban incluidos en ésta afirmación.

Una baldosa del techo fue removida con un silencio absoluto, una sombra con la forma de un humano obstaculizó la belleza de la luz lunar entrante en el lugar.

Un hilo bajó por la abertura, hasta la altura de un rostro durmiente, y luego en las manos del perpetrador un frasco con líquido fue abierto y vertido en el hilo, el cual fue la vía para hacer llegar el líquido a su objetivo, la boca abierta de un niño inocente que vestía un estúpido traje de oso.

La anticipación era terrible para este hombre, ésto fue la mayor victoria del mundo ninja, ser capaz de matar al demonio kyubi, incluso superando a los anteriores hokages.

El plan era sencillo y aún así mortal, el veneno era de acción rápida y se aseguraría de que lo bebiera todo, aunque una simple gota era suficiente para matar a un hombre adulto y muy fuerte. Su victoria sería, lo que según él, lo llevaría a la grandeza.

Sinceramente no perdió a alguien o sus pertenencias en el ataque del kyubi, pues vivía en la parte occidental de la aldea en la que no había habido daños, además de que su familia se había mudado a konoha solo un mes antes del ataque, así que realmente no había un rencor personal en ésto, pero simplemente se guío por el odio al niño, si la gente lo culpaba, él igual, y si lo odiaban entonces lo odiaría también.

La gota bajaba lentamente por el hilo de la muerte y a escasos centímetros de llegar a la boca del niño un dedo enguantado detuvo el avance del veneno.

El shinobi estaba en shock, pero rápidamente eso se convirtió en rabia. ¿Cómo se atrevía alguien a evitar la muerte del mocoso kyubi? Pero esa rabia se convirtió en pánico pues había sido descubierto, así que emprendió la retirada. O eso creyó, pues al darse la vuelta para correr se encontró cara a cara con un par de ojos rojos que le helaron la sangre.

Por alguna extraña razón el hombre frente al ninja no dijo nada, ni se movió o si quiera parpadeó, solo estaba ahí, parado sin moverse, pero en sus ojos había malicia, era como si estuviera escudriñandote el alma, pero además por alguna extraña razón, también había deseo, no un tipo de anhelo sexual o añoro, sinó más bien un tipo de anhelo depredador. Un segundo más tarde perdido en esos ojos y se dio cuenta de qué era ese extraño anhelo en los ojos carmesí, era hambre. Éste hombre, este monstruo lo estaba viendo con hambre.

Como todo un shinobi experimentado, el ninja utilizó un shunshin para alejarse lo más posible del hombre y dar la alarma de un intruso en la aldea.

Aun estaba asustado así que tomó más de algunas respiraciones profundas calmar su corazón, pero eso fue el tiempo suficiente para darse cuenta que había alguien parado tras de él. No era un compañero shinobi de la hoja o un civil, ni siquiera un humano, así que volvió a usar el shunshin para alejarse aún más del hombre.

Ahora el ninja había entrado en pánico, no entendía como éste hombre lo estaba alcanzando y aún peor no había nadie al rededor como para pedir ayuda.

Un segundo después de haber huido del lugar donde estaba, una mano grande, larga Y un poco huesuda se posó en su hombro. La cara del hombre perdió todo color y vida en un segundo y aún peor fue la voz Fria en su nuca.

-Olvidaste ésto-. Dijo el hombre de los ojos rojos acercando el frasco de veneno al campo visual periférico del ninja.

El hombre trató de hablar pero ninguna palabra salió de su boca.

Oh, lo siento, al parecer no es tuyo, bueno no hay problema entonces si lo bebo dijo el hombre siniestro.

El ninja giro su cabeza como si dentro de su cuello hubiera un mecanismo de engranajes oxidados y en mal funcionamiento, sus movimientos robóticos hicieron parecer eso.

Los ojos del ninja se ensancharon al ver como aquel monstruo bebía la botella entera de veneno y con una lengua, repugnantemente larga, limpiaba el resto del líquido en el frasco. Después de relamerse los labios el ninja pudo tener una vista general del sujeto y podría describirlo físicamente como si orochimaru hubiera conseguido despertar un sharingan. Y luego sonrió, Eso lo asustó aún más.

Un rato después.

El veneno no le hizo nada y aun peor, lo estaba persiguiendo todavía. Había escapado de él después de haber terminado su bebida y mostrar sus espantosos dientes parecidos a cuchillos. Definitivamente no era humano. Lo peor fue escucharlo decir "tengo hambre". Eso fue todo, no pararía de correr hasta largarse del pueblo, pero sin darse cuenta, habia corrido hasta el campo de entrenamiento prohibido, el bosque de la muerte.

Ya había recorrido medio bosque y estaba cansandose, pero tenía que huir, no permitiría al hombre ser atrapado. En un momento sin previo aviso el hombre se tropezó con una raíz en la oscuridad y eso fue todo. Tras él estaba ese sujeto y ahora hasta la luz de la luna pareció volverse roja.

Una pregunta salió de Aquellos labios pálidos que escondían esos aterradores dientes.

-¿Lo odias?-

No sabía de qué estaba hablando el tipo así que no respondió.

-¿Odias al chico? Si me mientes lo sabré.

-¿Que clase de pregunta es esa?.-

Alucard calló.

-Ese monstruo destruyó la aldea hace casi doce años!- gritó molesto olvidando su miedo por un segundo el cual duró demasiado poco para su gusto.

-¿Monstruo? ¿Él? Jajajajajajajajaja- rió el vampiro

-¿Que es tan gracioso?.-

-Ese niño no es un monstruo... Pero yo en cambio... Jejejeje-

-¿¡Quien eres!?- preguntó asustado.

Oh, el tiempo me dio muchos nombres pero al que respondo ahora es al que mi amo me ha dado, mi señor Naruto uzumaki, al que intentaste envenenar, él me llamó... ¡Alucard!.-

-Tú trabajas para ese demonio?.-

Él no es un Demonio, de lo contrario ya estarías muerto.

-¿¡Qué!? ¿de qué hablas?.

-Verás, debo obedecer cada una de las órdenes de mi amo así que su primera orden para mí fue "no los lastimes", y hasta el día de mi muerte obedeceré esa orden, y es la única razón por la que no te he matado pero...-

Flashback

...Luu-chan, se que debes comer y eso pero es necesario que lastimes a las personas?.-

Soy un vampiro dijo el Conde como si dijera algo obvio. Que, de hecho, lo era.

Lo sé pero lastimar a la gente no es bueno.-

-¿Y que tal las personas malas?-

-No sé....-.

-Verá, puedo ver el alma de los demás y saber exactamente si mienten o no además saber si hay alguna redención para ellos, por ejemplo si los asustara un poco y los amenacé, pero aún así intentarían hacerle daño, entonces diría yo que se tratan de personas malas.

-Quieres decir gente como bandidos, ladrones y asesinos?-

-¡Exactamente!.-

-Pero...-

-Le juro por mi lealtad hacia usted que solo me alimentaré de personas horribles, de las cuales harían un mundo más bello si desaparecieran, además eso haría que en realidad usted no se manchara las manos de sangre cuando vaya a misiones ninja-

-No sé, no estoy muy de acuerdo pero... Lastimosamente tienes que comer, ese es el ciclo de la vida, no puedo culpar a un gato por comerse a un ratón o a un pez.- dijo Naruto resignado.

Fin flashback.

...pero me dio permiso de comerme a las personas con el alma mala, y en tí solo veo perversidad y alegría por el asesinato sin remordimientos, o deseos de cambiar, así que te daré la oportunidad de largarte y vivir , pero recuerda siempre, que fue Naruto uzumaki el Que te salvó la vida, y se lo debes- dijo Alucard antes de darse la vuelta y comenzar a desaparecer en el bosque.

El hombre suspiró aliviado, pero rápidamente se llenó de rabia, ¿Le debía la vida a ese niño demonio? ¡eso era imperdonable! así que, en el impulso impuesto por la rabia, le lanzó un kunai con un sello explosivo dándole directamente en la última vertebra justo antes del cráneo, clavándose profundamente en su cuello y matándolo y por si no fuera poco también haciéndolo volar en pedazos.

El ninja sonrío al ver a su perseguidor muerto, pero le duró poco, pues un resplandor carmesí llenó el aire y el tipo se levantó sin cabeza mientras una risa espectral lo rodeó.

-Jajajajajajajajaja, te di la oportunidad de irte pero al parecer decidiste ser un idiota, y ahora, estás

fuera de la gracia Y el favor de mi amo, así que ahora... Jaja...podré comer- dijo el cuerpo el cual se regeneró y además, del mismo lugar donde había acunado el kunai, emergió una enorme cabeza de perro infernal con centenares de ojos rojos llenos de ansiedad por devorar la carne humana.

Está vez, por mucho que lo deseara,sus músculos no se movieron.

El enorme perro lo alcanzó abriendo sus mandíbulas y atrapando su cuerpo por completo, dejándolo imposibilitado para escapar. Alucard se le acercó y sin mediar palabras se lanzó hacia la cabeza del ninja, abriendo sus fauces para luego arrancarle la cara.

Los gritos de horror llenaron ese bosque durante la noche.

En la mañana, ropa, armas y un chaleco antibalas despedazado, fueron encontrados en el lugar por una mujer que visitaba el lugar con regularidad. el reporte al líder de la aldea, el hokage, fue el siguiente; ......y según la información recopilada por las últimas personas que hablaron con el ahora occiso. el Jounin había informado que iría al bosque a entrenar en solitario y que se reportaría a sus deberes en la mañana. Aparentemente, la causa de la muerte fue por el ataque de un animal salvaje desconocido, o varios de ellos y de especies variadas. Había Sangre del animal atacante, pero se desconoce el origen de la especie, pues el animal escapó sin dejar huellas, simplemente un rastro de sangre por el lugar y luego se desvanece....

El hokage se sostenía el puente de la nariz por ésto. realmente hoy sería un día largo. Ya de por sí tenía varios reportes de robo de los aldeanos que aún debían ser investigados, Definitivamente estaba muy viejo para este trabajo.

Por parte de Naruto su mañana era bastante normal fuera del piar del gorrión en la jaula, y un Alucard bastante sonriente alimentándolo, Todo era normal.

-Pareces feliz, ¿Algo pasó?- Cuestionó el niño.

-Solo tomé un pequeño bocadillo nocturno- dijo el vampiro.

-¿Bocadillo?.... No mataste a nadie ¿verdad?- Preguntó preocupado el rubio.

-¿Eso importa?- sonrío.

-Claro que importa! No puedes ir por la vida matando gente porque sí.- gritó el rubio.

Bueno niño, déjame decirte que le di la oportunidad de irse en paz y sin recibir un rasguño, pero estúpidamente me atacó por la espalda, y como ya te lo había dicho, pude ver que aunque lo dejara vivir seguiría siendo una mala persona por el resto de su vida, así que tomé ésto como una señal para poder usar mi derecho a alimentarme como habíamos acordado,- argumentó el vampiro.

Naruto arrugó la nariz ante ésto, no le gustaba el hecho de que Alucard se comiera a la gente, pero era verdad que debía comer, pues ,así como los humanos comían peces, aves y mamíferos, él comía malas personas.

Naruto suspiró derrotado otra vez y preguntó -¿sabías quién era?-

-¿Porque deseas saber?-

-No lo sé, la verdad, a lo mejor, dejaré flores en su tumba o algo.-

-Solo quieres sentirte menos culpable ¿cierto?-

-De cierto modo si, digo, era una persona al fin y al cabo.- dijo el rubio viéndose bastante perturbado, lo que hizo sonreír a Alucard.

-No te lo diré dijo el vampiro divertido.

-¡Oye!-

-No es necesario que lo sepas, lo único que debes saber de él es que te odiaba. Mira, quitó una baldosa del techo e intentó matarte con veneno, lo ahuyenté y le dije que te dejara en paz, pero lo único que hizo fue maldecirte y luego me atacó, además lo único que tenía de bueno lo tengo aquí- dijo Alucard apuntando con un dedo a su cabeza.

-¿Que cosa?-

-¡Conocimiento!.-

-¿Conocimiento? ¿Cómo así? ¡no entiendo nada!.-

-Verás, cuando me "alimento" de una persona, adquiero todo su conocimiento y habilidades- dijo sonriente el vampiro.

-Entonces, eso quiere decir que ¿eres algo así como un ninja super-poderoso mega-malvado, invencible e Inmortal?.-

-Ja! Yo era más poderoso que todo eso Antes de comer. El tipo era simplemente patético, pero su conocimiento ninja era bueno, según lo que ahora entiendo. así que, quiero hacer un nuevo trato con usted, mi amo-.

-¿Un Trato? ¿Que tipo de trato?.-

-Verá, quiero tener un poco más de "libertad" para moverme por el pueblo en público, es un poco aburrido estar todo el día encerrado, de hecho pasé décadas encerrado en un sótano y luego sellado en una lápida de concreto, así que me aburro con facilidad, créeme, me pongo muy "hambriento" cuando me aburro- dijo Alucard mostrando sus horribles dientes.

-No estoy muy seguro, ya sabes, si te ven pues... Ya sabes me echarán la culpa a mí de cualquier problema en el que te metas-.

-Mira, no mataré a nadie... que no se lo merezca, les daré la oportunidad de pedir perdón y marcharse sin daño alguno, pero si ellos no lo quieren no hay nada que yo pueda hacer... Además pienso pagar por mi libertad.-

-¿Pagar?-

-Si, como dije antes tengo el conocimiento y las habilidades de un ninja, mediocre si, pero ninja de todos modos, así que, usaré eso y te entrenaré para convertirte en un ninja, aunque sea en uno medianamente mediocre-.

-Oye eso no suena bien-.Refunfuñó el rubio.

-Eres menos que repugnantemente mediocre según lo que sé que esté tipo puede hacer, así que si llegas a su nivel para tu dichoso examen puede que sobresalgas si tus compañeros son tan malos como tú.-

-¡Oye! ¿me estás llamando perdedor? Bufó el rubio molesto.

-¡No! Jamás le diría algo así, my máster-dijo Alucard divertido.

Naruto se creyó el sarcasmo del vampiro y, sopesando las opciones, le pareció una buena idea, además no era como si alguien fuera a entrenarlo voluntariamente o de la manera correcta fuera de iruka sensei. ésto era lo mejor que tenía así que ¿porqué no?.

-si lo pones de esa manera no suena tan mal-dijo el niño obviamente tratando de no parecer interesado,pero definitivamente fallando épicamente.

Alucard sonrío y le dijo -si me da una gota de su sangre cerraremos el trato.-

Naruto lo vio por un momento y luego dijo -sólo dices eso para obtener mi sangre ¿verdad?-

Alucard soltó una carcajada - jajajajajajajajaja, tenía que intentarlo-de dijo, aunque en su mente pensó, "éste niño no es tan estúpido como creía".

Horas más tarde.

El dúo se había dirigido hacia el campo de entrenamiento más cercano, en donde Naruto había practicado todos los ejercicios de la academia Durante años.

Alucard parecía un joven delgado, algo pálido, con el cabello sujeto en una cola de caballo alta y con la banda ninja de konoha atada a su frente, traía el uniforme estándar de un chunnin y el chaleco jounin, lo que lo haría pasar como un shinobi promedio en el mejor de los casos.

Naruto había preguntado por ésta transformación, pero Alucard simplemente dijo "henge" aunque en realidad era un cambio de forma verdadero y no un estúpido genjutsu de un novato.

Bien veamos que es lo que tienes dijo el hombre.

Naruto se colocó en una postura de combate y atacó a alucard. Fue simplemente patético. Incluso sin entrenamiento ninja Alucard pudo haber detenido cada uno de los ataques del rubio sin siquiera molestarse en intentarlo. Basado en el conocimiento del "ninja" que se comió, las posturas estaban terriblemente mal hechas, su balance era pésimo su fuerza era mediocre y su velocidad era medianamente decente, pero aún rayaba en lo patético. Definitivamente habían estado reteniendo al chico hasta volverlo básicamente carne de cañón, si por algún milagro éste niño sobrevivía a los primeros días como genin, definitivamente una misión fuera de la aldea lo volvería un blanco viviente. quien le dijo que su ropa era algo que debería exhibirse con orgullo, definitivamente quería muerto al niño.

Su puntería era relativamente normal para su nivel, aunque le faltaba la fuerza necesaria para hacer que su puntería tuviera excito en atravesar un equipamiento de combate.

En los tres jutsus de la academia era pésimo, mediocre en el mejor de los casos, su control de chakra era muy pero muy malo y eso sin contar su estúpido jutsu personalizado qué en retrospectiva era lo más "normal" que el niño podía hacer, simplemente vergonzoso.

Alucard estaba desesperado, definitivamente el niño había fallando en todo, y si hiciera una prueba escrita probablemente no habría forma de que aprobara, aunque por otro lado, el chico no recibió el apoyo de nadie y los que si lo apoyaron simplemente lo estaban saboteando, sería un trabajo duro si quería que el niño fuera repugnantemente más bajo que mediocre antes de terminar las próximas dos semanas.

Y bien soy genial o qué? Preguntó sonriendo el rubio.

-¿Te digo la verdad o seguimos siendo amigos?-

El ánimo del niño cayó.

-¿Tan mal?-

Un adolescente sin talento podría matarte-

Pero me esfuerzo mucho en la academia, no es como si las lecciones de historia sean importantes, pero entreno muy duro todos los días para llegar a ser el ninja más poderoso de todos y que así la gente de este pueblo me respete

Alucard suspiró.

Bien, lo que sea por no estar encerrado todo el día dijo resignado.

Alucard, el ave de Hermes, no era conocido por su amabilidad o su paciencia así que para Naruto éste entrenamiento fue básicamente un infierno. Corrió hasta el cansancio, luego hasta vomitar y luego aún más hasta llegar a desmayarse. Lo mismo ocurrió con todo el entrenamiento físico, abdominales, sentadillas, lagartijas, puñetazos, patadas, lanzamientos de kunais y shurikens, entre muchos otros entrenamientos. Naruto fue sometido a un entrenamiento del que incluso Gai sensei no saldría ileso.

Sus únicos descansos fueron cuando se desmayó, y eso no fue lo peor, pues Alucard había entendido como realizar genjutsus y a soltar su intención asesina, así que los combinó en una bastarda forma de tortura psicológica/física, que le lanzó a Naruto sin parar desde que comenzó el entrenamiento, con cada horror posible que pudo imaginar. Y eso ya era malo pués provenían de la retorcida mente de un demonio que había devorado a tres millones, cuatrocientos veinticuatro mil, cuatrocientos setenta y ocho almas. Solo en los infiernos encontrarías algo cercano a ese tipo de horror pero debido a que Naruto era tan decidido, terco o estúpido, no desistió de seguir adelante.

Fue una sorpresa ver que el niño se volvía a levantar, el niño era un idiota, pero hasta Alucard debía admitir que el niño tenía pelotas.

Al anochecer.

Después de casi matarlo, Alucard tuvo que literalmente arrastrarlo hasta su apartamento, siendo sujetado únicamente por la pierna sin misericordia. El espectáculo fue horrible, pero realmente a nadie pareció importarle.

Naruto no comió nada después del desayuno, así que posiblemente tendría hambre, y siendo que Alucard no era alguien de cocinar simplemente colocó agua al fuego y la dejó hervir. Tres minutos después un Ramen instantáneo fue puesto en el piso junto al "posible" cadáver de Naruto. Eventualmente el niño recobró la conciencia y trató desesperadamente de levantar su cabeza, pero contra todo deseo de vivir, no pudo, simplemente no podía.

-Luu-chan ¿Me ayudas?-. Suplicó el niño.

-Te traje aquí no? Dijo el vampiro como si hubiera hecho un acto heroico o algo así.

Naruto casi llora por ésto, pero tenía que intentar lo que fuera-No me puedo mover- dijo el niño agonizante con lágrimas a punto de ser derramadas.

-Bien- dijo el vampiro con aburrimiento, yendo a la cocina y volviendo con un popote flexible que puso en la taza y regresando al sofá, sin hacer el más mínimo esfuerzo por parecer preocupado por el niño.

Naruto a duras penas y pudo comer por el popote, ya que se atoró con demasiada frecuencia con los fideos, pero al parecer era lo mejor que podía obtener del vampiro, por fin empezaba a comprender a que se refería Alucard cuando dijo que los demonios eran el tipo de personas con las que realmente no quisieras relacionarte, porque para el rubio definitivamente Alucard se estaba comportando como uno.

Esa noche Naruto durmió en el piso pues se desmayó poco después de haber terminado de comer, lo que en sí fue una enorme hazaña.

Alucard por su parte salió a dar un largo paseo, la luna era hermosa y la noche tranquila, definitivamente aburrida para un ser de destrucción como Alucard pero pronto se vió lejos de la aldea, simplemente había salido por la pared, atravesándola como un fantasma, varios kilómetros después de las afueras de la aldea un grupo de 5 bandidos había atacado a una comerciante que viajaba a casa a estás horas de la noche y se estaban divirtiendo con ella. Ya casi no tenia ropa y los tipos simplemente se la arrancaban a tirones. Obviamente estaba aterrorizada por esto y no podía defenderse, pero el terror se apoderó de ella cuando una enorme sombra roja como la sangre cubrió el lugar.

-Jajajajajaja, no deberían salir a pasear y divertirse de noche, hay monstruos en los alrededores- dijo una voz malévola.

-¿Quién eres? ¿dónde estás maldito?_ gritó uno de ellos.

Solo alguien que tiene mucha hambre dijo la voz justo antes de que perros infernales salieran de las sombras y devoraran a los bandidos.

La escena fue brutal y una pesadilla en carne viva. La mujer estaba horrorizada y no tenía idea de que hacer pues estaba rodeaba de bestias infernales que se lanzarían sobre ella cuando terminaran de comerse a esos malditos.

De repente entre las sombras apareció Alucard y sonriendo dijo vete mientras acariciaba la cabeza de una de esa abominaciones.

La mujer estaba aterrada peri huyó por su vida pero se congeló al oir aquella voz.

-¡Oye!-

La mujer volteó.

-Hazme un favor... No se lo digas a nadie- dijo el vampiro llevando su dedo a su boca.

Casi de inmediato la mujer corrió pero al mismo ritmo que corrió así también se detuvo, se volteó y preguntó -¿A quién debo agradecer? -

Alucard sonrió y dijo -A mi señor-

-¿Y quien es tu señor?-

-Naruto Uzumaki-

Continuará.