No hubo mucha acción después de la impresión inicial, básicamente Naruto había aceptado el hecho de que había un vampiro parado en su sala de estar.

Naruto no habló mucho, algo raro viniendo de alguien tan enérgico como el uzumaki. La simple idea de tener compañía hizo que ver al vampiro fuera normal.

Alucard simplemente se quedó ahí estudiando al niño, había matado a tantos durante su vida y aún más durante su muerte y nunca se dió el tiempo para observar a uno. Su propia infancia había sido mala, el sultán lo obligó a estudiar tácticas de guerra, idiomas y política pero también lo había obligado a ser literalmente su perra además de ser golpeado hasta casi matarlo, aún así nunca pidió piedad o que el sufrimiento se detuviera simplemente rogó al cielo para que su dolor lo volviera más poderoso.

Tienes hambre?

La pregunta tan aleatoria sacó al rey no muerto de sus pensamientos.

Una pequeña risa salió de los labios pálidos de alucard haciendo que Naruto frunciera el ceño.

Que dije? ¿Qué te causa gracia?

Niño soy un "vampiro"

Nota: Alucard usó el término romanji "vanpaia"

Y eso qué?

Alucard iba a informar muy amablemente que al ser un vampiro se alimentaba exclusivamente de sangre humana. Después de un segundo de contemplar la estúpida expresión en el rostro del niño lo pensó mejor ya que muy probablemente no tendría idea de que era un "vanpaia" así que tuvo que usar un término más coloquial.

Verás creo que no me expresé correctamente soy un "kyuuketsuki"

Nota: el término "kyuuketsuki" significa "demonio/espíritu chupa sangre".

El silencio reinó en la habitación por casi un minuto en el que alucard y su pequeño y tonto amo no dijeron una palabra. Llegó un punto en el que llegó a creer que el rubio se había desmayado de pié.

Naruto recobró la cordura en un momento y luego habló.

hematófago!.

Eh?...

Los animales que se alimentan de sangre se conocen como animales hematófagos. La mayoría de ellos son parásitos de los animales de los cuales se alimentan. Estas especies son vectores de enfermedades, pues transmiten de un animal a otro bacterias y virus que se encuentran en la sangre de sus víctimas. , Explicó Naruto.

La cara de Alucard tomó una expresión en blanco por un muy largo rato, en verdad este niño le había dicho "parásito". Por otro lado le resultó curioso que el mocoso tuviera en su mente un concepto así de complicado.

Como demonios sabes eso.

Lo leí en un libro una vez.

Me refería a cómo es que lo recuerdas?.

No lo hago.

La expresión en blanco del vampiro le dijo a Naruto que mínimo se requerirá una explicación.

Es que creí que los animales come hombres eran geniales y aterradores así que busqué en un libro y ahí encontré el término pero me dio un poco de asco y lo dejé de lado pero lo poco que leí se quedó en mi cabeza y luego ya no supe cómo sacarlo de ahí.

Alucard se echó a reír fuertemente pues la estupidez del niño le parecía divertida.

Oye! Reclamó el niño.

Lo siento, pero si tengo hambre aunque no te preocupes, aún sigo bajo tus órdenes

Órdenes?

"No los lastimes"

Ah... entonces de dónde sacarás comida.

Estaré bien, simplemente buscaré algo más que comer dijo el Conde.

Ramen!

Eh?

Dije Ramen, el Ramen de ichiraku es la comida de los dioses puede que te guste... No! Estoy seguro de que lo hará dijo el niño felizmente.

Déjalo, simplemente buscaré la forma de alimentarme o que generosamente me des tu sangre— dijo Alucard dando una terrorífica sonrisa que amenazaba con partirle la cara.

Naruto frunció el ceño ante ésto, no le gustaba la idea de sangrar pues obviamente si quería que su sangre saliera de su cuerpo tenía que salir herido primero y eso definitivamente no le gustaba.

No, duele mucho sacarse sangre— Replicó el niño.

Bueno lo intenté dijo el vampiro divertido. En ese momento el no muerto se dio cuenta de algo.

Oye no sé supone que te golpearon esos tipos?

Si...

Alucard giró los ojos -me refiero a que deberías estar lastimado-

Ah eso bueno, jeje, me curo rápido dijo el niño sin darle importancia.

Esto llamó la atención del conde ya que no era normal para un ser humano promedio el recuperarse tan rápido, a pesar de las excepciones como Anderson pues él había sido modificado. Talvez la habilidad del niño tenía que ver con el hecho que lo llamaran demonio, averiguaría más tarde sobre ésto.

Una hora después.

Mientras Alucard miraba como el niño tonto se metía en la cama vestido con un pijama un poco grande para su cuerpo también bastante desgastado con un gorro de hipopótamo que parecía estar comiéndose su cabeza, anhelaba que sus órdenes fueran distintas.

Oh, cierto, quieres la cama?- preguntó el niño a medio camino.

Porque querría tu cama? le preguntó al niño

Para dormir eres mi invitado no dijo Naruto como si fuera lo más obvio del mundo

Alucard simplemente no entendía a este niño humano. Le ofreció su comida y ahora le ofrecía su cama. La amabilidad no era un comportamiento del cuál estuviera muy familiarizado... ¡Su propio padre lo entregó como esclavo, por todos los infiernos!.

No duermo de noche respondió el vampiro.

No duermes de noche? Hmm... Entonces eres como esos murciégalos?

Murciégalo?

Si ya sabes esos ratones terroríficos con alas que salen de noche y chupan sangre.

Se dice murcié... Olvídado. Pero sí básicamente soy como un murciégalo gigante

Eso es genial!— dijo el niño felizmente.

Oh eso crees?- dijo Alucard convirtiéndose en una bandada de murciélagos.

Naruto se asustó obviamente escondiéndose bajo las mantas de su cama pero como todo niño curioso levantó la mirada sobre la manta y con un poco de curiosidad infantil se quedó viendo al ente malévolo en su habitación.

La mirada de Alucard sobre el niño cambio de una divertida a una de confusión, y terminó su "transformación".

¿No tienes miedo? preguntó.

Sí, pero dijiste que jamás me lastimarías así que simplemente eres aterrador pero en verdad no tengo miedo de tí Luu-chan— dijo el niño.

Luu-chan?

Así es, dijiste que te podía llamar como quisiera, así que te llamaré Luu-chan porque Alucard suena como si perteneciera a un villano de los cuentos de hadas, un monstruo malvado, muy muy malo, así que si serás mi amigo no va puedes ser malvado dijo Naruto antes de bostezar y dar las buenas noches hundiéndose en su cama.

Alucard se quedó en silencio en la oscuridad tratando de entender la situación, había decidido dejarse morir sin más, incluso pidiéndole al cielo para que lo Matara y sin embargo estaba atrapado aquí junto a este niño tonto que, al parecer, era demasiado estúpido como para tenerle miedo. Un castigo para sí mismo por sus malas acciones talvez pero sin embargo no se sentía del todo molesto de alguna manera tonta y estúpida el niño era interesante, algo parecido a lo que sintió cuando convirtió a Seras Victoria en su familiar, aunque esa vez fue más un capricho pasajero que otra cosa aunque no se arrepentía de ello.

En medio de la oscuridad una pregunta sin compromiso se hizo al aire ¿Tu amigo, Eh?... Este niño es interesante.

Dos días después.

Mientras Naruto se cepillaba para ir a dormir se dio cuenta que se había olvidado del regalo que había conseguido para su amigo, tenía una fuerte esperanza de que le gustara su regalo, pues había sido un dolor en el trasero conseguir una de estas cosas ya que tenían que ser criadas desde que eran bebés, eran muy agresivas, en especíal si la sacaste del nido y sus padres te habían picoteado los dedos y te había arañado la cara haciendo que casi te cayeras del techo con la única mano que tenías libre para sostenerte y acunar al bebé en la otra.

Mirando dentro de la caja se dio cuenta que había movimiento así que todo debería estar bien ya que a Alucard le gustaban los pájaros así que esto debería hacerlo muy feliz.

Oye Luu-chan!— dijo Naruto a una caja de color negro dentro de un armario que realmente no utilizaba.

Era un ataúd. Alucard había hecho aparecer el objeto cuando amaneció y se había metido en él para dormir según sus palabras, pero como a Naruto no le gustaría molestarlo le ofreció el sofá, después de que su solicitud de prestar su cama había sido rechazada aunque esa solicitud también fue rechazada así que le dio su propio espacio y colocaron el ataúd en el armario.

A alucard no le gustaba hablar mucho simplemente se quedaba en una esquina sentándose en silencio y siendo siniestro lo que molestó al rubio y lo obligó a hablar un para de ocaciones y en todas esas conversaciones a Naruto le pareció que alucard estaba triste así que decidió darle un regalo para hacelto sentir bienvenido.

Del féretro salió el hombre de ojos rojos con aquella aura malévola que haría llorar al más hombre como si fuera un bebé.

Si?—respondió el vampiro.

Viendo que te gustan los pájaros y eso te conseguí esto dijo el niño poniendo una caja en la nariz del vampiro.

Alucard vio la caja que el niño le había dado. El día anterior le había estado preguntando todo tipo de cosas y en especial que hacía con su tiempo libre además de ser tétrico y aterrador. Su respuesta fue que no tenía nada en mente aunque le recordó su pasatiempo cuando era humano, uno que no había practicado en siglos, la cetrería. Cuidar y entrenar aves rapaces había sido, en la mayoría del tiempo, muy gratificante.

Nota: La cetrería es la actividad de cazar con aves rapaces entrenadas, especialmente con halcones, azores y otras aves de presa para la captura de especies de volatería o de tierra. El humano captura y liga al ave de presa al propio hombre, por reflejos condicionados, y la entrena en la caza y en la fidelidad.

Aparentemente Naruto se había tomado muy en serio sus palabras, la caja era pequeña así que se preguntó que clase de ave estaría criando. La tomó con anticipación y al abrirla se quedó quieto. El ave era pequeña, era plumífera y sus patas fibrosas eran muy largas para su pequeño cuerpo sin contar esos pequeños ojos negros brillantes como canicas mirándolo tontamente. Justo el mismo tipo de ave que alguna vez había tenido en sus manos para alimentar a sus feroces aves de presa que había criado alguna vez.

La mirada carmesí se dirigió al niño junto a una respuesta.

Que se supone que voy a cazar con esto? ¿Gusanos?—Dijo sosteniendo el miserable gorrión que le había ofrecido aparentemente sin haber entendido nada sobre la cetrería.  aparentemente pensando que quería un pájaro mascota.

Pero pensé que habías dicho que te gustaban los gorriones dijo Naruto confundido y un poco triste por qué aparentemente su regalo no había salido bien.

¿Gorriones? Yo dije halcones y Gavilanes dijo sin prestar atención al molesto piar del pájaro en sus manos

Naruto bajó la cabeza y dijo entonces estás molesto?

Molesto? Lo único realmente molesto es el piar de este pájaro, está hambriento y molesto por ser tratado con brusquedad dijo el vampiro atrapando una mosca en el aire y dándosela al ave.

Cuando el vampiro volvió a poner al ave en su cajita junto a una tapa de refresco llena de agua para cuando tuviera sed, no pudo evitar sonreír, ésto era patético, sin embargo al pensar en su pasado sus recuerdos lo llevaron a Seras, y solo imaginó que ella definitivamente habría abrazado al niño hasta morir por el estúpido regalo.

A la mañana siguiente Naruto fue despojado de sus sábanas una media hora antes de que el sol saliera por el horizonte. Ver la cara de Alucard no era lo más agradable de ver al despertar y realmente era aterrador a pesar de que ya lo esperaras.

Porqué hiciste eso? aún no es hora de levantarse! replicó Naruto.

-Dado que esa tonta prueba tuya es muy importante para tu futuro en esta aldea debes prepararte para ella-

Pero faltan dos meses! Reclamó el niño.

Según tus propias palabras, apestas en tus "jutsus" así que deberías estar practicando eso en lugar de simplemente quedarte dormido.

Naruto entendió el punto, pero aún así se quejó de murciégalos molestos buenos para nada que duermen todo el día mientras caminaba hacia el refrigerador.

Su molestia solamente se incrementó cuando se dio cuenta que ya no tenía huevos, cereal o leche y maldijo su suerte pues tenía que ir de compras antes de ir a la academia.

Alucard sonrío ante la perorata del niño y decidió que esta vez lo acompañaría a sus mandados pues aparentemente lo sacaba de quicio y era divertido ver al niño perder la calma por esas pequeñeces.

Naruto salió de su apartamento sin cerrar la puerta, como siempre, no era como si tuviera mucho que perder de todos modos. Mientras Naruto caminaba por las calles un perro comenzó a caminar junto a él sin que lo notara.

La misión "ir de compras" se denominaría aburrida en muchos sentidos para la gran mayoría de personas. Para Naruto era un reto. Evadir las miradas de desprecio, entrar a los lugares correctos, que aún así le cobraban demás y básicamente sobrevivir a los intentos de sabotaje tan descarados de las personas del pueblo. Era un desafío pero éste día en particular fue extraño. Las personas no le dieron esas miradas despectivas, más bien se quedaban en blanco y volvían a sus asuntos casi como si se tragaran sus palabras o simplemente lo ignoraran, que no era muy distinto a su diario vivir, pero ésta vez fue como si ni siquiera estuviera ahí.

La misión terminó muy bien. Después de pasar por ichiraku Naruto regresó a casa con las compras intactas y sin ningún inconveniente. Muy raro para el rubio que al tener la capacidad de atención de una mosca lo desestimó de inmediato.

Para sorpresa del rubio se encontró con algo muy extraño. La puerta de su apartamento estaba abierta y al parecer había alguien en su apartamento lo cual no sería raro si Luu-chan no estuviera durmiendo.

Naruto como todo un ninja en entrenamiento, usó su conocimiento shinobi para... entrar corriendo al apartamento como un retrasado mental gritando a todo pulmón y sosteniendo un kunai en la mano.

Para sorpresa del niño, en el apartamento había un hombre vestido como un comerciante y en específico uno de los que había visitado esa misma mañana. Lo más raro era que traía una caja de madera donde normalmente recibe productos y la estaba colocando en el suelo. El rubio se quedó muy confundido ante la falta de reacción del hombre, además de que después de dejar de verlo a él y fijarse en el contenido de la caja se dio cuenta que dentro habían exactamente las mismas cosas que había comprado solo que el doble de ellas.

Naruto intentó preguntar qué demonios había pasado pero el tipo parecía estar como zombie y salió de la casa sin decir palabra. Naruto iba a seguir con el cuestionamiento pero solo entonces vió los ojos del tipo... Eran rojos. Si un civil cualquiera viera ésto definitivamente lo relacionaría con el clan Uchiha, pero había algo raro y era que además de que todos los Uchihas habían sido exterminados por Itachi Uchiha y el único que quedaba en el pueblo era Sasuke, no había marcas negras adentro simplemente parecían brillar en un tono rojo demoníaco que de alguna manera le parecía familiar.

El hombre se fue y Naruto miró dentro de casa. Grande fue su sorpresa al ver que no solo estaba lo que le había comprado al hombre sinó que también habían otras cosas que había comprado o visto en las tiendas. Un conjunto nuevo de kunais y shurikens que parecían realmente caros, exactamente los mismos que había estado observando hasta que el tendero lo corriera del lugar y hubiera quedado en blanco y vuelto adentro sin decir una palabra. Vio que además había escrito algo en una nota en la caja y era que las armas eran de metal conductor de chakra. Hasta Naruto sabía que eso era sumamente costoso y la cosa no paró ahí ya que también encontró una camiseta de malla metálica, una piernera porta-shurikens ajustable, Barras de raciones ninja, pastillas de alimento, pastillas de soldado, pastillas de sangre, un botiquín de bolsillo, un ninjato(una espada corta) 2 docenas de bombas de humo, 2 más de etiquetas explosivas, 24 metros de alambre ninja, una docena de pergaminos de almacenamiento, un par de sandalias nuevas, guantes de combate, un traje completo shinobi, camisa, pantalones, chaqueta con capucha y máscara con filtro para gas. Todo esto sorprendió al niño aunque había algo más raro pues también había una pijama estilo botarga haciendo parecer que se trataba de un oso, además había otro gorro para dormir, que parecia como si un pez se estuviera comiendo su cabeza, una jaula bastante grande para aves y un saco enorme de semillas para aves.

Al rubio le pareció muy raro que todo esto estuviera aquí así que iba a preguntarle al único testigo ocular acerca de lo ocurrido.

-¡Luu-chan! ¿Estás ahí?- dijo Naruto tocando la puerta del armario.

Estoy aquí— dijo una voz profunda pero no desde el armario sino desde una esquina de la casa, en específico, en la esquina superior en donde la pared se juntaba con el techo.

Naruto lo buscó con la mirada y encontró un pequeño murciélago colgante en el techo. No era la primera vez que veía murciélagos en su apartamento, de hecho tuvo que sacar a varios de ellos hace años, pero éste era diferente, pues sus ojos brillaban con un color rojo sangre que le helaría los huesos hasta el mismísimo Madara Uchiha.

-¿Luu-chan?-

Alucard salió del techo, se convirtió en niebla y se reformó frente a Naruto arrodillado -Ordene my master.-

-¿Que pasó aquí?- dijo el niño sin tomarle importancia a la cortesía del vampiro.

-Cortesías.- respondió Alucard.

-¿Cortesías?- preguntó Naruto de vuelta.

Verá, en mi vida anterior fui un Conde, un gobernante Muy poderoso, uno que no mostraba piedad ante mis enemigos, y todo aquel que me faltase el respeto era destruido, mataba a sus familiares frente a ellos, les despojaba de todos sus bienes, destruía sus casas, y luego, los condenaba a morir empalados, lastimosamente sus órdenes no me permiten ejecutar a quienes cometan el sacrilegio de faltarle el respeto a mi amo, como debería ser, así que en cambio les hago pagar sus pecados con algo de valor similar, sus pertenencias, la mayoría de estos tributos son de parte de aquellos que tuvieron el descaro de levantarle la voz y tratar de agredirlo o engañarlo diciendo que el precio que estaba pagando por sus víveres era justo, cuando en realidad era el triple. Lo que hice fue que se le entregara exactamente por lo que había pagado y en el caso de los idiotas que lo trataron mal pues simplemente pagaron con lo mejor que tenían- Explicó Alucard.

-Luu-chan eso se llama robar y está mal, además, ¿como fue que conseguiste que te dieran todo esto si estabas aquí?.- Preguntó el rubio.

Te seguí, además Yo no lo llamaría robo más bien lo llamaría retribución, mira sé que eres joven y aún no entiendes porque las personas son crueles pero el castigo a los que nos hacen daño es la muerte, así que toma esto como un escarmiento para ellos, tarde o temprano se darán cuenta de que se trataba de un mal "karma" por tratarte mal.

Pero no puedo quedarme con todo ésto.

¿Prefieres ir y devolverlo personalmente para ser acusado de robo y ser aún más odiado? Dijo el vampiro.

El silencio reinó en la habitación por un lado tiempo hasta que un suspiro derrotado selló el pacto de silencio entre ambos cómplices.

Naruto selló todo el equipo ninja hasta saber exactamente qué iba a hacer con el. Sabía sellar pues era algo enseñado en la academia pero como era de esperarse fue saboteado por su sensei y Naruto como venganza selló todo el trabajo escolar del profesor de meses de labor, y lanzó el pergamino por la ladera de la montaña hokage.

La comida fue almacenada en el refrigerador y en la alacena que jamás en su vida había resguardado tantos bienes.

Naruto realmente se sentía mal por esto pero Alucard tenía razón, no podía simplemente devolverlos y pedir una disculpa. Este era un robo, pero, aún sin ser él un participe directo, era tan culpable como alucard.

Después de que todo estuviera en su lugar Naruto se sentó en el sillón de su sala viendo la botarga de oso en sus piernas. Estaba mal robar, pero sin duda esto se veía genial pues su pijama era en el mejor de los casos solo harapos. Después de meditar por un buen rato Naruto se obligó a tomar la ropa y probarsela, no era como si le estuviera haciendo daño a alguien.

La botarga era cálida y suave. Intentó ponerse el gorro pero no se sentía bien pues la cola del pez apuntaba hacia atrás hasta que Naruto la volteó hacia adelante y se ajustó perfectamente. Luego se puso la capucha de la botarga y se dio cuenta que se complementaban pues ya con todo en su lugar parecía como si un pez intentara huir de la boca de un oso y era increíble. A Naruto no se le pasaba por la mente cómo era que su invitado tenebroso tendría un gusto tan extraño por un pijama y la verdad era que no lo tenía realmente alucard había pensado en algo que hubiera hecho chillar de emoción a Séras Victoria, y esto fue lo más ridículo y cursi que pudo encontrar.

Naruto camino hasta la cocina para agradecerle a su invitado cuando se dio cuenta que en la mesa había una jaula de pájaros con un nido improvisado de trapos, un pequeño recipiente con agua y otro con semillas para aves. Naruto sonrío ante esto pues su regalo había sido bienvenido.

Continuará