Momentos antes.

-Bien... parece que no hay mucha vigilancia... Supongo que todos los asesinos fueron a por Hinata- Murmuró Naruto, quien ahora estaba junto a Ryomi, ambos detrás de un muro en medio de la sede... la cual se veía desértica

-A dónde vamos? Que haremos?...- Pregunto Ryomi algo confundida, si bien habían escapado de la jaula, aun así, estaban en un terreno peligroso, seguían en la sede, además Naruto no podía usar su ninjutsu ni chakra en absoluto.

-Buscar a mi compañera, luego haremos un plan para salir todos de aquí- Contesto Naruto mientras seguia caminando con cuidado

De repente ambos sintieron un fuerte temblor, las paredes se estaban meciendo y los pasillos empezaron a dejar escapar sonidos de ecos.

-Que es eso?... terremoto!?- Pregunto Ryomi a lo cual Naruto rápidamente le hizo una seña para que dejara de caminar

-No, no es un terremoto... Es una pelea- Contesto el rubio mientras hacía que ambos retrocedieran, era como si estuviera a punto de pasar algo

De repente, uno de los muros prácticamente explotó, lanzando polvo y escombros en todas direcciones, el muro había sido atravezado de lado a lado por una figura, la cual siguió derecho y atravesó el otro muro.

-AAAHH!!?- Grito Ryomi por lo repentino ue haia sido

-Mierda... Se excedieron...- Pensó Naruto mientras obserbaba aquello...

El Uzumaki tomo de la muñeca a Ryomi, luego empezó a correr hacia el agujero en los muros, Ryomi estaba confundida, pues se estaban colocando en el ojo del uracan.

El rubio se colocó junto a la pared, y cuidadosamente asomo la cabeza para mirar... Por un lado, podía ver cómo había un enorme crater, Natsu estaba en pie, claramente herida, sangrando y con poca energía, mientras que a su lado estaba Aneko quien estaba en su forma original, sin heridas, pero respiraba pesado y se notaba agotada.

Naruto apretó la mandíbula absteniéndose de pensar cualquier cosa, era muy pronto para sacar conclusiones o dar por resuelto el asunto...

Al mirar el otro muro, pudo notar que en la otra habitación, se encontraba Hinata tirada junto a un muro agrietado, sin uno de sus brazos, y herida.

-Hina!...- El rubio estaba a punto de ir por ella, cuando de repente pudo ver cómo varias figuras aparecían de la nada en borrones de velocidad. -mierda...-

-Qu!?- Ryomi trato de hablar pero el rubio rápidamente le tapo la boca

-Shh...- Naruto tomo algo de distancia a los agujeros de los muros mientras que hacia que Ryomi también retrocediera lentamente-Lo siento... tu hermana está a solo unos metros... pero, no es una buena circunstancia para que se encuentren, solo seríamos estorbos-

El Uzumaki odiaba admitirlo, pero en retrospectiva, en este momento no tenía oportunidad contra ninguno de los ahí presentes, el sello lo tenía atado de manos, sin mencionar que ni siquiera tenía algún arma o estrategia, lo mejor que podía hacer en ese momento era mantener a Ryomi fuera del peligro.

Sin embargo... Ya los habían notado, desde el momento en que habian salido de la jaula, esto debido al gran chakra latente de Ryomi, fácil de percibir para C.

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-Parece que las 3 se estuvieron divirtiendo - Burló el Raikage mirando a la Shinigami

-Tu...- Dijo Hinata al ver al Raikage en frente de ella, la shinigami sentía ira de solo verlo... Era la primera vez que de frente desde su otra vida, justo antes de su última misión.

Eran más de 15 años sin verlo... Y al verlo sonriendo, parado en frente de ella mientras estaba herida y prácticamente fuera de combate, le hervía la sangre... Era más repugnante de lo que recordaba.

Por su lado, Natsu estaba junto a Aneko, ambas rodeadas por Darui, C y por el capitan de los pecados, quien habia invocado a 3 asesinos más para rodearlas.

-Asi que los cobardes decidieron aparecer, justo cuando la pelea acabo...- Comentó Natsu

-Lo dice la desertóra, tu traición va costarte muy caro asesina- Contesto el Raikage a lo que la pelirroja solo sonrió

-Ah, si?- Contesto sarcásticamente -No me digas, ¿ se supone que te debo algo?... Tu hiciste mi vida un infierno, y ahora se que tienes a mi hermana! No te debo nada! Mi único deber contigo, es matarte! A todos ustedes!-

El Raikage al igual que sus acompañantes, apretó la mandíbula al oír estas palabras, evidentemente la pelirroja sabía sus secretos... tal y como lo temia Isao, aún así, el moreno solo le dirigió la mirada con una sonrisa sarcástica.

-Asi que realmente lo sabes... Je... Con eso, haz cavado tu propia tumba- Declaró el Raikage mientras apretaba los puños, por su lado, Natsu empezó a liberar un ventarrón

-No me importa si muero peleando contra todos ustedes juntos, pero aquí y ahora, estoy lista para matarlos- Contesto Natsu preparándose con su Katana en mano -Aun tengo mucho chakra, puedo destruirlo todo en este momento!-

La pelirroja de solo ver a Hinata, sabía que ella no tenía más energías y estaba muy herida para pelear, mientras que ella, gracias a su constitución física, aún podía mantenerse en pie... Por muy poco.

La única forma de matar al raikage en su estado actual, probablemente sería desatar su poder destructivo, como en aquella pelea con Madara... Con ese poder, sería incluso de pulverizar la sede y gran parte del bosque...

Se requeriría una explosión bastante fuerte, sin embargo debía reprimirse, su hermana estaba encerrada en el calabozo, la destrucción que cauara, debía ser lo suficientemente grande para cubrir la habitación, pero lo suficientemente poderosa para eliminar a sus enemigos, algo que realmente nunca había hecho, y se salia de lo que alguna vez habría logrado... Pero, estaba dispuesta a intentarlo.

En eso, C dió un paso al frente antes de menear su dedo índice como seña de negacion, el como ninja sensor podía sentir el flujo del chakra de la pelirroja, sabía lo que estaba planeando..

-Sera mejor que te rindas, Kiramane, no estás en condiciones de pelear, además, puedo persivir a tu hermana a solo unos metros, puedo sentir perfectamente su chakra... Tan inofensiva, tan fragil... ¿Quieres que salga herida?- Al decir estás palabras, Natsu sintió como si el corazón se le detuviera...

Su primer instinto, fue olfatear, concentrarse en su oído...

Una sensación de familiaridad llegó a ella, un aroma, una forma de respirar... C decía la verdad.

-Piensalo bien antes de tu siguiente movimiento, eres la única que puede pelear en este momento -

La asesina se paralizó... En ese momento, ella podría desatar todo su poder destructivo, pero corría el enorme riesgo de que el radio de la explosión alcanzará a quien quería salvar, no podía intentar una técnica tan poderosa sin entrenamiento, teniendo a Ryomi tan cerca...

Por otro lado, no podía intentar llevarlos lejos... ellos claramente intentarían ir por Ryomi, simplemente porque saben que su intención es salvarla...

En pocas palabras, ella estaba obligada a luchar contra los 7 juntos, en su estado actual, evitando a toda costa, que Ryomi cayera en fuego cruzado.

En pocas palabras, Natsu solo tenía 2 opciones... Rendirse o pelear en una batalla donde estaba en amplia desventaja y aún así debía reprimirse.

Era una sensación extraña... Completamente extraña, por no decir que aterradora...

Jamás se había sentido tan impotente, era una sensación que no había sentido ni en sus peores peleas, en todas ellas, su vida era la que corría peligro, en ocasiones incluso estuvo a punto de morir, pero nunca sintió algo como esto.

¿La razón? Está vez, no peleaba por ella misma o por una misión estúpida, ni siquiera por vengar a alguien... Está vez, tenía que proteger a alguien importante para ella mientras se jugaba la vida de las 2.

La pelirroja apretó su espada, la mano le temblaba, sentía que la cabeza le dolia, sentía como sus enemigos parecían satisfechos de persivir su desesperación.

Una fuerza invisible le frenaba la mano, su espada de repente era demasiado pesada para levantarla, finalmente... Decidió contestar

-Yo...- Trato de decir ella.

Pero, de repente, algo cambio en el ambiente... Todos los presentes voltearon a ver lo que pasaba, el aire de repente era más denso.

-Ustedes... Malditos cobardes, malditos desgraciados, malditos idiotas.... MALDITOS MONSTRUOS!- Grito Hinata mientras todos volteaba a verla

La Shinigami estaba colocándose en pie, con su mano sobre el suelo haciendo una flexión para levantarse... Su brazo y cuerpo temblaban, pero el aura que emitía era feroz, sus garras estaban extendidas, sus músculos tensionados...

Al levantar la cabeza, dejo ver un rostro que les Helo la sangre...

Se podía ver cómo apretaba los dientes, los mostraba de forma amenazante, con sus comillos afilados, pero daba la sensación de estar sonriendo... Su nariz y frente estaban arrugadas, como cuando un animal se dispone a atacar, las venas de su Byakugan estaban remarcadas... pero más importante, sus ojos...

Sus ojos eran lo que más miedo daban, se veían agrietados, el color blanco característico de los Hyuga había desaparecido, el iris ahora era de un tono amarillento apuntando a rojo, su pupila que siempre se mantenía blanca y en ocasiones grises, se había tornado negra y alargada...

¿era alguna clase de dojutsu nuevo?

No.

Natsu observo a la Hyuga, con solo verla, oírla y olerla, pudo entender lo que ocurría.

El corazón de Hinata estaba latiendo muy rapido, su pulso era muy potente, si una persona normal tuviera ese mismo pulso, probablemente moriría de hipertensión, su corazón colapsaría o incluso podría explotar.

Los ojos de la Hyuga, estaban así debido al aumento excesivo de la presión, aquel tono amarillo rojizo, venía del color rojo de la sangre manchando sus iris blancos, mientras que su pupila se había tornado negras y alargadas por adaptación, su cuerpo estaba mostrando sus últimos recursos para pelear a muerte, estando en su límite.

Hinata estaba irradiando su odio e irá al máximo, pero había algo diferente... No eran solamente sentimientos negativos, había algo más... Habia algo que era aún más perturbador que odio, ira o incluso sed de venganza.

Realmente si estaba sonriendo.

-¿que es esta sensación? Creo que nunca me había sentido tan... TAN VIVA!- Pensó la Hyuga mientras apretaba sus puños y sonreía -Siento calor, siento como si el dolor desapareciera, tengo un vacío en el pecho, puedo sentir mis propios latidos! Mi sangre está hirviendo! Mi inconsciente ha abierto la primera puerta del dolor! Estoy emocinada!-

En poco tiempo, la Hyuga entendió a qué se debía esta sensación...

Estaba eufórica... Se podría decir que al borde de la felicidad absoluta, pero... ¿Porque?

Por primera vez en su vida, ella realmente quería pelear, estaba emocionada por pelear. Por primera vez desde el día que se transformó en una asesina, ella estaba completamente en sintonia con sus deseos bestiales más profundos y sus instintos reprimidos.

Su moral y su consciencia, está vez estaban en completa sintonía con su deseo de asesinar, con su deseo de pelear, masacrar y causar dolor...

Ni siquiera la sed de sangre que mostró previamente a los asesinos junto a Natsu se comparaba con esto... Aquella vez estaba enojada, estaba liberando su desprecio queriando matarlos, pero en el fondo su conciencia no estaba de acuerdo, porque al fin y al cabo, los demás asesinos también eran víctimas.

Lo que sentía hacia el Raikage, hacía que todo su ser, consciente, inconsciente, salvaje o civilizado, todo estuviera en armonía...

Ella se sentía como una flama ardiendo con toda su fuerza.

Generalmente, los agresores tienen 2 clases de aura... El aura de guerrero, aquella que hace que las personas quieran seguir luchando apesar de las circunstancias, un aura que te potencia a ti mismo apartir de tu propia voluntad... Está generalmente, usada por los ninjas, guiados por el honor y la dedicación.

También, existe el aura asesina, el aura que se basa en tus intenciones de matar, su propósito es intimidar al enemigo, de esta forma matarlo con el menor esfuerzo posible, incluso sin pelear, está es usada generalmente por los asesinos, aunque en la hermandad es reprimida y solo empleada para interrogación.

Si bien, hay ninjas que emplean el aura asesina, y asesinos con espíritu guerrero, en la hermandad es muy raro ver asesinos con espíritu guerrero ya que no pelean por gusto, no disfrutan el combate, no hay ningún placer en ello... Simplemente, es por la misión.

Pero está vez... Hinata estaba emanando ambas auras, su deseo de pelear estaba al máximo, todos sus músculos y células pedían a gritos pelear, buscaban el éxtasis de luchar y ganar... Pero también, ardía de deseo de matar, al punto en que su mente imaginaba decenas de formas de asesinar al raikage, masacrarlo o destruirlo, de solo pensarlo resultaba en un éxtasis.

-Que sensación tan extraña... Siento que me está incitando a pelear con ella... Pero al mismo tiempo, siento frío en la médula... Quiere matarme- Pensó el Raikage

-No quisiera estar del otro lado de esa aura...- Pensó Natsu antes de sonreír -Bien... así que aún piensas pelear...-

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Naruto y Ryomi estaban detrás del muro y alejándose de la pelea, sin embargo ambos pudieron sentir aquella aura.

-Q-que es esto?... siento como si mi cuerpo se calentará por fuera, como una fiebre, pero mis huesos estuvieran helados...- Comento Ryomi, incluso había empezado a sudar, sentía náuseas...

-Hinata... Finalmente estás en "ese mundo"... ¿así es como te sientes?...- Pensó el rubio, el podía persivir con facilidad los sentimientos de la Hyuga... Desde su euforia, hasta su profundo odio y sed de sangre. -Eh!?-

En eso, el Jinchuriki pudo escuchar algo...

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-Raikage! Jejeje... Finalmente, estamos frente a frente, sabía que este momento llegaría, tenía que llegar... El momento, en que te haré pagar por todos tus pecados!- Exclamó Hinata, incluso Naruto y Ryomi podían escucharla

La Hyuga tomo su segunda espada con el único brazo que le quedaba y señalaba al raikage con ella

-Tu! Voy a matarte, voy a disfrutar mientras te destruyó, te daré la muerte más dolorosa y lenta que jamás le he dado a nadie, voy a disfrutarlo.. Y ni aún así, ni aunque te masacre, va a ser suficiente para que pagues todo lo que hiciste!... Me robaste mi vida, me esclavisaste, incluso me mataste... Y en esta nueva vida, te atreviste a arruinarla de nuevo... jajaja... ARDERAS EN EL INFIERNO!- Exclamo Hinata mientras se colocaba en postura de ataque con su espada en mano, irradiando electricidad y sin despegar la mirada de el -Naruto... Confío en ti, mantenganse a salvó, está vez tengo que dejarme llevar -

-No se de que demonios hablas moc.. uh!?- Antes de que el Raikage terminará de hablar, la Hyuga se había colocado frente él en un destello, propinandole una patada en el estómago, causando que expulsará todo su aire y lanzandolo a volar varios metros para después atravesar un muro, tras lo cual fue tras el

-Jefe!- Exclamó Darui, a lo cual pudo sentir como el viento había cambiado

-Mejor preocúpate por tu propia vida!- Exclamó Natsu con su katana en mano, lanzando una estocada para cortarle el cuello al moreno

Sin embargo la espada fue bloqueada, esto por Isao quien habia convocado una espada corta cubierta en roca reforzada, mientras que preparaba su mano para hacer un jutsu, estaba a punto de invocar más asesinos.

-Haz decidido mal! Tu herm...- Antes de que el asesino terminará de hablar, este recibió un potente golpe en el abdomen que lanzo a volar

-Eh?- Natsu desvío la mirada, pues ella no había lanzado ese golpe.

-Capitan... No permitire, que usted siga utilizando a los asesinos! Ni que le hagas daño a esa mujer inocente- Se trataba de Aneko, quien se había colocado en pie una vez más, esto a pura fuerza de voluntad

-Asi que no estás con ellos enana, ¿De que lado se supone que estás?- Comento Natsu mientras se cubría con su espada

Darui y C habían tomado distancia mientras que Isao se colocó nuevamente en piel, los 3 asesinos que los acompañaban también tomaron distancia, estaban rodando a las 2 mujeres

-De ninguno, solo busco salvar a los inocentes, los asesinos no tienen la culpa de lo que estos tipos hicieron- Declaró Aneko a lo cual Natsu solo hizo un gesto de disgusto

-Y lo dices ahora!?-

-No me dejaron hablar! Idiota!-

En eso, Darui se lanzo a atacar, a lo que Natsu rapidamente tomo del brazo a Aneko para usarla como si fuera un bate, ente esto Darui colocó su espada para bloquear... La enana a ver esto colocó sus pies al frente, golpeando la espada y lanzando a Darui contra un muro.

-Aneko, así que decidiste ir por la traición!- Declaró Isao

-Tu no eres nadie para hablar de lealtad- Declaró la mujer colocandose de espalda con Natsu

-Que quedé claro, no somos amigas por esto... Tu cúbreme mientras yo te cubro, en nuestro estado actual no es una pelea fácil si vamos por nuestra cuenta - Dijo Natsu mientras que Aneko solo nego con la cabeza

-Realmente dudo que alguna de nosotras tenga amigos-

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En otra zona...

-Ponte en guardia!- Exclamó Hinata mientras observaba como el Raikage se colocaba en pie

El líder de Kumo escupió sangre antes de finalmente volver a ponerse en pie

-Mocosa, aprenderás a temerle a la furia del raikage!- Dicho esto, el Raikage se quitó su bata de kage, dejando su dorso desnudo y dejando ver su cuerpo musculoso el cual luego fue recubierto con su armadura de rayo

Sin más el moreno se lanzo a atacar, la Hyuga igualmente... Ambos enemigos colisionaron, Hinata lanzo una estocada con su espada recubierta en rayos, mientras que el Raikage lanzo un puñetazo.

Una gran onda de rayos se libero en todas direcciones, el piso se agrietó y una gran nube de polvo se desató...

Al finalizar, solo se pudo ver cómo Hinata sostenía firmemente su espada mientras sonreía, la espada había sido bloqueada por los nudillos del raikage, apenas recibiendo un corte superficial pero también siendo frenado, ambos estaban forcejeando.

-Ah!- El Raikage rapidamente uso su otra mano y lanzo un puñetazo a la cabeza de la Hyuga, a lo que está se agacho

-Ja!- La Shinigami rapidamente solto su espada dejando que el Raikage se fuera de frente -Chidori!-

La asesina lanzo su Jutsu directo al estómago del raikage, sin embargo... Está apenas logro penetrarte un poco en su masa muscular.

-Usaste el jutsu de Kakashi Hatake, su poder es impresionante, lograste tocarme a pesar de tener mi armadura!- Comento el Raikage antes de lanzarle un codazo en la espalda, haciendo que la mujer se estampara contra el suelo

Seguido a eso le lanzó una patada a la asesina, lanzandola a volar contra un muro.

Hinata apenas pudo recomponerse para notar como el Raikage ya estaba frente a ella, lanzandole un puñetazo a la cabeza, sin embargo ella guiada por su sexto sentido rápidamente se hizo a un lado, dejando que el puño del raikage destruyera la pared por completo

-Por supuesto... Kakashi es mi maestro, mi amigo y parte de mi crecimiento!- Exclamó Hinata antes de tomar distancia -Y no fue lo único que me enseño!-

En eso, el Raikage se percató de como tenía varios papeles bomba puestos en el abdomen, la Shinigami los había puesto al momento de esquivar su golpe

Una enorme explosión se desató... Sin embargo, una vez el humo y polvo se deshicieron, se pudo ver cómo el líder de Kumo estaba totalmente intacto

-A dónde fue!?- Pensó el Raikage, pues la Shinigami había desaparecido -Los explosivos solo eran una distracción...-

En eso, sintió como el suelo temblaba... Sin más, el brazo de Hinata salió del suelo y tomo del tobillo al Raikage.

La Shinigami rapidamente salió disparada del suelo mientras levantaba al hombre por el tobillo.

El Raikage fue arrastrado, luego golpeado contra los muros y el suelo, hasta que finalmente Hinata lo azoto con todas sus fuerzas contra el suelo

-Tsk...- El Raikage nuevamente se puso en pie como si nada, su armadura de rayo lo había protegido sin problemas de todos los ataques, apenas sufriendo daños leves en la piel

-Karaishin!- Pensó Hinata antes de desaparecer en un destello...

La mujer se empezó a mover a una velocidad imposible de persivir para el ser humano, e incluso para la mayoría de ninjas o asesinos... Sin embargo, está vez su enemigo era diferente a todos los demás, era alguien igualmente rápido y con un control igual o incluso superior del elemento rayo...

Hinata desde el plano de ultra velocidad, podía notar como el Raikage la seguía con la mirada... Cosa que ya se esperaba.

-No te pases de lista!- Pensó el Raikage mientras su chakra aumentaba, su cabello se erizaba y sus músculos se tensaban... Había pasado a la segunda fase de su armadura.

El Kage empezó a moverse también a gran velocidad... Ambos superando velocidades supremas, el Raikage la perseguía intentando conectar sus ataques

Ambos se acercaban el uno a otro, lanzando puñetazos y golpes fulminantes, ambos se movían muy rápido, por lo que está vez, Hinata no tenía que preocuparse por la inersia... Aunque el raikage era capaz de moverse muy rápido y seguir la velocidad del Karaishin, no podía igualar su velocidad... Hinata esquivaba todos sus golpes, era imposible tocarla para el Raikage

Sin embargo, a pesar de que Hinata era mas rápida, sabia que sus golpes eran menos efectivos contra el Raikage, por no decir que prácticamente no le hacía daño significativo, a diferencia de si el lograba conectar un golpe, sin mencionar que si permanecia mucho tiempo moviéndose asi de rapido, ella empezaria a quemarse.

Finalmente, ambos redugeron su velocidad... El Raikage lanzo un golpe de martillo, esto intentando golpar a la Shinigami en la cabeza, sin embargo ella rapidamente se cubrió con su brazo recubierto en chakra...

El ataque termino en una fuerte explosión, el suelo se rompió por completo, ambos empezaron a caer en medio de los escombros, estaban en caída libre hasta la zona baja de la hermandad, el subsuelo.

Hinata rapidamente se trepó a la espalda del raikage mientras empezaba a lanzarle puñetazos a la cabeza, una y otra vez... Sin embargo, el Raikage apenas si sufría daño, esto debido a la fuerza muscular de Hinata, sin embargo su armadura de rayo absorbía mucho el daño, además la constitución física del raikage era muy alta.

En medio de la gran caída, el Raikage atrapó el brazo de Hinata y tiro de el, para así tomar a la asesina con sus 2 brazos.

-Raiga bomb!-

Finalmente ambos llegaron hasta el suelo, dónde el Raikage uso todas sus fuerzas para estrellar a Hinata contra el suelo...

El piso se agrietó por completo, formando un enorme crater y desatando ondas eléctricas en todas direcciones, Hinata inmediatamente escupió una enorme cantidad de sangre y sintió como todo el cuerpo se le entumia, además de marearse.

El Raikage tomo distancia mientras esquivaba los escombro que aún caían...

-Asi que aún vives, admito que eres muy resistente, nadie había soportado mi raiga bomb- Comento el Raikage, mientras que Hinata apenas se volvía a colocar en pie con su sonrisa.

Ella estaba bastante herida, aquel golpe le había roto varias costillas, había sufrido traumatismos oseos por todas partes, sus órganos internos estaban practicamente colapsados... Pero, ella parecía ignorarlo todo mientras aún mostraba aquel espíritu de lucha

-Jeje... Por esta razón, nunca pelee contigo en mi otra vida, incluso cuando me libere del sello, tu estilo de pelea y resistencia física son un contra muy efectivo contra mis tecnicas- Admitió Hinata mientras empezaba a estirarse, esto dejando tronar sus articulaciones... Había dislocado algunos de sus huesos para evitar que se rompieran así absorber el impacto con los músculos. -Pero ya no estamos en mi mundo... soy mejor de lo que nunca fui en él-

-No se de qué mierda hablas, jamás te conocí en persona hasta ahora!- Contesto el Raikage a lo que Hinata solo sonrió antes de señalar con su mano el lugar donde estaban...

Se trataba de los calabozos o jaulas donde guardaban a todos los niños de la siguiente generación de asesinos, todos ellos encerrados sufriendo hambre y deceniendo a la locura.

-Yo estuve aquí antes... Tu, fuiste quien me encerró... Me raptaste de mi familia cuando tenía solo 4... Me encerraste aquí... Me torturaste, me convertiste en una bestia... Al igual que a todos los niños que tienes encerrados aquí... Maldito monstruo... Jamas te perdonaré, y no descansaré hasta que pagues todo- Contesto Hinata a lo que el Raikage sintió un escalofrío

Podía persivir que Hinata estaba diciendo la verdad, su odio y forma de hablar no eran un engaño... ella realmente había estado en ese lugar, sabía lo que les hacían ahi.

-Quien demonios... Quien demonios eres tú!?- Pregunto el Raikage está vez sintiendo miedo genuino

-Yo, soy la encarnación de todos tus pecados! Soy la encargada de matarte! Soy la diosa de la muerte que tú mismo creaste! Soy un alma en pena que volvió a la vida para castigarte!... SOY HINATA HYUGA!- Una vez ella exclamó esto, ella embistio, el suelo se rompió apenas aceleró, colocandose frente al atemorizado Raikage en un segundo.

-Esta es por lo que le hiciste a Natsu!- Exclamó Hinata antes de lanzarle un puñetazo directo al estomago

Inmediatamente el Raikage salió volando por la fuerza bruta del golpe, golpeándose contra un muro.

-Agh...- El Raikage escupió sangre mientras trataba de colocarse en pie...

Al mirarse el estómago, pudo ver que su armadura de chakra se había anulado... Al ver a Hinata pudo notar que está tenía su puño recubierto en chakra, el cual formaba un león.

-No me asustas!- Exclamó el Raikage, por lo que finalmente ambos volvieron a lanzarse a pelear...

Ambos enemigos volaron uno en dirección al otro, el Raikage lanzo sus rápidos puñetazos y movimientos agresivos, mientras que Hinata empezaba a esquivarlos, algunos incluso le rozaban, haciéndole cortes en la piel... Sin embargo ella podía predecirlo, su sexto sentido, el Byakugan y sus habilidades estaban en armonía.

-Una apartura!- pensó Hinata enfocándose en su Byakugan

La Hyuga evitó un golpe más antes de su siguiente movimiento

-Esto es por Naruto!- Exclamó Hinata antes de colocarse a un lado del moreno.

El Raikage apenas pudo reaccionar cuando la Shinigami le propinó un puñetazo en el costado de su rostro, también cubierto con aquel león de chakra...

Nuevamente el moreno salió volando está vez atravezando una de las jaulas, quedando en medio de una habitación vacía, dónde se encontraba un niño, el cual claramente sufría desnutrición y estaba en el borde de la habitación, estaba llorando y claramente asustado, pero incapaz de reaccionar ante lo que veia...

-Mierda... Una técnica Hyuga de alto rango... Está anulando mi defensa para dañarme con solo su fuerza... Aunque actúa como una maniática, es más que consciente de lo que hace- Pensó el Raikage colocandose en pie, luego escupió uno de sus dientes junto a un chorro de sangre.

Hinata entro a la habitación mientras sonreía y lo miraba fijamente con aquellos ojos amarillentos, pupila negra y alargada...

El Raikage rapidamente se lanzo a atacar con más ferocidad, está vez logrando tomar a la Shinigami del cuello, tras lo cual la estampó contra el muro y empezó a correr, esto atravesando muros con el cuerpo de la mujer.

Finalmente la sometió contra un muro y le lanzo puñetazos cargados de electricidad directo al rostro, cada golpe era letal, causandole heridas a la Hyuga, quien escupía sangre y sangraba por los ojos y frente... Pero no dejaba de sonreir, al grado en que empezó a reírse

-Jajaja!- Hinata miro a los ojos al Raikage quien finalmente dejo escapar toda su ira

-ESTO SE ACABA AHORA!- Grito el preparándose para darle el golpe de gracia en el pecho, con el que pretendía atravesar de lado a lado el cuerpo de Hinata y matarla...

Una enorme explosión se desató, a lo que la pared se rompió... Sin embargo, para sorpresa del raikage su puñetazo había sido frenado, Hinata lo había parado con su mano.

El aura de rayo que recubria su puño había desaparecido, esto gracias a la técnica del puño de leon... Mientras que Hinata usaba su fuerza bruta para frenar el golpe, en el proceso la fuerza de empuje la había hecho atravesar el mudo llegar hasta otra de las habitaciones blancas dónde había un niño, el cual presentaba un aspecto más salvaje... Sin embargo, este solo se colocó en un rincón al sentir el aura de la shinigami.

-Es como si entre más la daño, más fuerte se hace... Su espíritu de lucha crece más... Lucha conmigo usando su fuerza de voluntad- Penso el Raikage al notar como Hinata lo miraba

En eso, Hinata empezó a correr en dirección al Raikage preparando su puño de leon... Finalmente desapareció en un destello...

El Raikage no se quedó atrás, ambos empezaron una pelea de Taijutsu, dónde Hinata usaba su único brazo para intentar conectar su golpe de león capaz de perforar la armadura de rayo, está reforzada con su fuerza bruta... mientras que el Raikage, iba con todo usando su estilo de lucha agresivo, basado en la fuerza bruta potenciada con chakra y velocidad...

Ambos empezaron a intercambiar golpes, ambos evitaban al máximo resultar golpeados por el otro, destellos de chakra y rayos volaban en todas direcciones, los muros y jaulas empezaban a temblar, mientras que los niños de las jaulas se limitaban a quedarse quietos en un rincón de sus habilidades, sintiendo miedo...

El Raikage lanzo un golpe directo a la cabeza de Hinata, sin embargo ella bajo la cabeza para luego lanzar un puñetazo al mentón, sin embargo el retrocedió para lanzar una patada de rayo, con lo cual Hinata rápidamente la detuvo con su mano

-AH!- La ojiperla uso toda su fuerza para levantar al Kage y estamparlo contra el suelo, lo que lo aturdió -Esta va por todos los niños a los que usaste!-

Hinata con un rápido movimiento golpeó en el pecho al Raikage, causando que el suelo temblará, pero luego volvió a levantar su puño varias veces, esto para golpear una y otra vez el mismo punto con su puño de leon

-AGH!- el Raikage vómito sangre la cual llegó asta el rostro de Hinata

Finalmente la Hyuga se detuvo, el Raikage estaba tirado en el suelo, su armadura de rayo había desaparecido y respiraba pesado, ella había golpeado su red de chakra con su Jutsu, había bloqueado su chakra.

-Jeje... Eres un viejo desgraciado! Que se siente ser el que está indefenso!? ESTA VA POR MI!- Dicho esto ella le propinó un puñetazo en el rostro con la mano desnuda, esto quebrando varios de sus dientes los cuales salieron volando junto a la sangre.

-Eres un monstruo...- Contesto el Raikage, a lo que Hinata sonrió antes de propinarle otro puñetazo

-CLARO QUE SI! EN ESO ME CONVERTISTE!-

Hinata finalmente se colocó de pie y pisoteo el rostro del raikage

-Eres un miserable, una persona horrible, esto no es ni la décima parte de lo mínimo que mereces... Una vez que te mate, me encargaré de que Bee sepa la verdad, pero tranquilo... No pienso hacerle daño, el a diferencia tuya no es un monstruo- Una vez dicho esto, el Raikage apretó sus puños antes de tomar la pierna de Hinata

-No tienes derecho a mencionar su nombre! No permitire que te acerques a Bee, aunque me cueste la vida!- Dicho esto el Raikage uso su fuerza bruta para levantar a Hinata por la pierna, rápidamente se levantó y la estampó contra el suelo

-Ugh!...-

El Raikage dió un salto mientras empezaba a desatar su furia, usando todas sus fuerzas, volvió a recubrirse de rayo, paso seguido hizo una patada de guillotina decendente, con esta golpeando de lleno a la Hyuga quien escupió sangre y quedó clavada al suelo

-Me importa una mierda tu odio hacia mi, o quien seas! No permitire que nadie toque a mi hermano!- Grito el Raikage antes de pisotear el brazo de Hinata, esto rompiendolo y dejándo a la asesina postrada en el suelo -Dile adiós a tu truquito de anular mi chakra!-

-Jajaja! Raikage-sama! Así que quieres alargar esta lucha!? Eso solo hace que disfrute más este momento! Tu muerte será más satisfactoria!- Exclamó Hinata

-YA CALLATE!- Exclamó el Raikage antes de levantar a la mujer por el dorso -RAIGA BOMB!-

El líder de Kumo uso toda su ira y fuerza para estrellar a la Hyuga contra el duro suelo, provocando que está escupiera sangre y quedará tirada en el suelo

-Mierda... No puedo moverme...- Pensó Hinata al sentir un enorme dolor, había sentido como todos sus órganos prácticamente habían colapsado, se había roto varios huesos... Pero lo peor es que ya no podía sentir sus extremidades

-AHORA NO VAS A SONREIR!?- Exclamó el Raikage antes de colocar a la mujer sobre su hombro y empezar a correr mientras atravezaba muros.

Finalmente el Raikage atravesó una pared, la cual conectaba con un laboratorio donde rompieron varios equipos, y finalmente lanzo a Hinata contra el suelo, formando un crater

Está vez, la Shinigami estaba respirando pesado y se encontraba inmóvil en el suelo

-Ahora muérete!- Grito el Raikage cargando su puño por completo en rayo y lanzando un golpe contundente a la cabeza.

Hinata podía ver cómo aquel ataque se acercaba lentamente... Su cuerpo ya no respondía, ella simplemente no podía moverse

-Asi que así terminará?... Siento que moriré... pero... mi sangre aun hierve, mi espíritu arde... siento cada rincón de mi cuerpo resistiéndose a morir... Aún así, ese golpe viene a mi... va a volarme la cabeza...- Pensó Hinata mientras veia como se acercaba.

Entonces sus ojos se cerraron... Pudo verlo entonces...

Su vida estaba pasando frente a sus ojos, podía verlo... Pero, no era aquella vida como asesina... Lo que veía, era su nueva vida, a sus padres, su familia, sus amigos, Sasuke, Kakashi, Obito, los amigos de Konoha, los Jinchuriki... Incluso la propia Natsu estaba allí... Pero sobretodo, podía ver a Naruto... Todos ellos le gritaban...

"HINATA!"

-NO PUEDE ACABAR ASI! No! Naruto!... Aún no te lo he dicho!... AMIGOS!... NO DEBO MORIR AQUI! NO DESPUES DE TANTO ESFUERZO!-

Al abrir los ojos, Hinata no vio al raikage, no vio el laboratorio, no vio a sus amigos ni a Naruto...

Frente a ella, se encontraba la silueta de sus padres, quienes tenían un aspecto más joven y levitaban en el aire...

Al ver atrás de ellos, se encontraba otro Hyuga, muy parecido a su padre, pero con una tes de piel más oscura... Era su abuelo, pero igualmente se veía más joven.

-Que es!?...-

Al ver bien dónde estaba, pudo ver una larga fila de personas, la mayoría eran Hyugas... pero, muchos de ellos no podía ni reconocerlos, hombres, mujeres, todos... Había una que hasta era idéntica a ella, pero con una cicatriz en el rostro.

Pero... Habían algunos, que tenía aspecto diferente, eran pálidos, su cabello era blanco dividido por un especie de corte en forma de rayo, en sus frentes tenían 2 marcas en forma de puntos... Hinata pudo reconocerlos vagamente gracias a una misión previa, se trataban de ninjas del clan Kaguya... había al menos 3 de ellos en aquel lugar, al igual que los Hyuga todos se veían jóvenes.

Pero, finalmente la atención de la Hyuga se desvío a 2 personas... Las personas más raras que había en aquel sitio...

Una era un hombre joven de tes muy palida, sus ojos eran blancos, claramente un Byakugan, su cabello también era blanco y tenía 2 cuernos que sobresalían de su frente...

La otra persona, era una mujer de complexión delgada, su piel era totalmente blanca como la nieve, su rostro era fino, cabello blanco largo que llegaba hasta el suelo, tenía 2 marcas en su frente, también poseia cuernos, además de un tercer ojo similar a un sharingan en su frente.

-que es este lugar!?- Pensó Hinata...

Todos lo que estaban ahí, estaban en fila, no parecían verla a ella ni que estuvieran conscientes, solo eran imagines... Cómo estatuas...

Detrás de aquella mujer de cabello largo, no habia nadie más...

Pero, junto a ella habia un hombre, el primero que veía que no tenía el Byakugan ni rasgos del clan Kaguya, detrás de el, habían más y más... Era una larga fila, que llegaba hasta seres primitivos, monos, animales pequeños...

Entonces, Hinata pudo entenderlo... Lo que estaba viendo, era su ascendencia... Era todo su árbol genialogico, desde el ser más primitivo hasta sus padres...

Era su origen, miles de generaciones juntas, todo para formar su linaje, el cual siguió hasta crearla a ella... Todas las personas que veía allí, eran de una u otra forma parte de ella...

Pero... ¿porque estaba viendo esto?

Ella estaba en su límite, al borde de la muerte, pero al mismo tiempo reusandose a morir, con su espíritu de lucha al máximo, con sus sed de sangre latiendo a todo poder... Su sangre estaba hirviendo, sus instintos salvajes esta vez eran dominados...

Su cuerpo estaba respondiendo, necesitaba sobrevivir, necesitaba bloquear aquel puñetazo que terminaría con su vida, tenía su brazo roto e inmovilizado, sus piernas ya no podia moverlas... Estaba prácticamente invalida debido al daño excesivo, al punto de no poder moverse...

Pero, la respuesta para salir de aquel aprieto, estaba allí... En el fondo de su genoma, entre sus genes recesivos dormidos...

Finalmente, Hinata abrió los ojos, nuevamente estaba frente a aquel puñetazo...

-Eh!?- El Raikage se sorprendió de lo que ocurría, un fuerte estruendo se escuchó, el piso se undio más y se escuchó un crujido.

-Esto es...- Hinata se sorprendió tanto como el Raikage, su muñón que solía ser el brazo izquierdo, se habia abierto y de el se había formado un brazo esquelético, apenas tenía tegido múscular cubriendolo, el suficiente para permitirle movilidad.

Aquel brazo nuevo había bloqueado el puñetazo del raikage usado la técnica del puño de leon.

-Que diablos es esta cosa!?- Exclamó el Raikage sorprendído

Sin embargo Hinata no desaprovecho la oportunidad, por lo que rápidamente desvío el brazo del raikage, seguido a esto sus nuevos dedos se transformaron en garras afiladas y alargadas

-Chidori!- La asesina uso nuevamente el jutsu eléctrico, está vez con sus garras... De un solo tajo lanzo un arañazo a la cara del moreno, quien terminó retrocediendo y gruñendo de dolor

-Maldita perra!- Exclamó el hombre, quien estaba sangrando.

Hinata se colocó en pie nuevamente, sintiendo como sus huesos rotos volvían a unirse, era una sensación algo desagradable y dolorosa, sobretodo por qué internamente tenía hemorragias y órganos colapsados.

El Raikage se volteo a verla, dejando ver su rostro... El hombre tenía heridas profundas que cubrían la mitad de su cara, pero más importante habia perdido su ojo derecho

-Eso es por lo que le hiciste a Konoha hace 3 años!- Exclamó Hinata antes de lanzarse a atacar con 2 puños de leones gemelos acompañando de su super velocidad

La hyuga lanzo un puñetazo directo a lo que el Raikage solo tuvo tiempo de colocar su antebrazo para bloquearla, sin embargo el puñetazo drenó por completo la armadura de chakra de esa zona, seguido a eso el puñetazo dió de lleno...

El Raikage salió volando varios metros mientras gruñía de dolor.

Su brazo ahora estaba roto y tenía perforaciones de nado a lado, al ver a Hinata pudo notar como está sacaba huesos afilados de sus nudillos, eran como garras, además su esqueleto estaba reforzado, dándole una fuerza de ataque mayor que antes

-Eso fue por mentirle a todo el mundo!- Grito ella empezando a correr...

La Hyuga era frenética, su sed de sangre era incluso peor que antes... Era la sed de violencia propia del clan Kaguya, Hinata estaba embriagada de solo oler la sangre del raikage, embriagada de ver su rostro de dolor, de tener el poder para masacrarlo

-AH!- El Raikage también se lanzo a atacar...

La pelea era intensa, Hinata peleaba de la forma más brutal, usando su velocidad, Byakugan y sexto sentido para esquivar los golpes del raikage, mientras que empezaba a conectar golpes muy agresivos.

Usando sus leones gemelos anulaba fácilmente la armadura del raikage, para así propinarle golpes juken... pero con sus dedos afilados y alargados.

Claramente el Raikage estaba sufriendo apuñaladas en sus puntos de chakra y en órganos internos, está vez su armadura de rayo ni su masa muscular podían protegero de los violentos ataques.

-Muerete!- Exclamó el Raikage tratando de agarrar a la asesina por el cuello, sin embargo Hinata saco una espada de hueso por su mano, está recubierta en rayo... y de un solo tajo le cortó el brazo al raikage

-Y ESTO!... ESTO ES POR RUMO!- Exclamó la Hyuga antes de apuñalar en el estómago al raikage con su espada de hueso, atravesando lo de lado a lado.

Seguido a eso, lo tomo con ambos brazos, lo subió sobre su espalda.

-AAAAH!- Grito Hinata antes de saltar con todas sus fuerzas atravesando el techo con el cuerpo del moreno

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Natsu y Aneko por su parte habían barrido el suelo con sus 6 oponentes, dejandolos gravemente heridos en el suelo.

Realmente no había sido una pelea muy larga, aunque ambas estaban heridas y bastante agotadas, algo que las caracterizaba era su resistencia sobrehumana.

-Esto habría sido mas fácil si no hubiéramos consumido nuestras energías pelando entre nosotras, idiota- Comento Natsu mientras obserbaba el cadáver de C, quien ahora estaba en el suelo con los brazos mutilados, el cráneo undido y una herida profunda en la garganta.

-Dale con eso...- Contesto Aneko antes de dejarse caer al suelo antes de señalar a un lado-Honestamente no quería matar a nadie mas, exepto a ese tipo, se disculpaba mucho sin realmente estar arrepentido...-

Se podía ver cómo Darui tenía quemaduras de segundo y tercer grado por todo el cuerpo, tenía su espada rota y clavada en la espalda, además de varios proyectiles de cabello perforando sus piernas, brazos y abdomen en zonas vitales.

Isao por su lado... estaba clavado al muro, aún seguía vivo pero gravemente herido, al grado de ya no tener sus brazos. Simplemente estaba vivo, porque Aneko lo había decidido.

Mientras que los otros 3 asesinos, estaban inconscientes en el suelo, con heridas fuertes pero no en puntos vitales, nuevamente Aneko había impedido que los matarán.

-No es necesario acabar con más asesinos... Ellos son víctimas... Merecen vivir la vida que les fue arrebatada- Cometo Aneko a lo que Natsu solo hizo un gesto

-Eres muy sentimental, somos máquinas asesinas diabólicas y...- En eso, la asesina pudo escuchar algo a espaldas de ella

-Kyomi!?- Al escuchar aquel nombre, al escuchar esa voz... Rápidamente Natsu se volteo con sus ojos abiertos de par en par

-H-hermana...- Fue lo único que pudo soltar la asesina pelirroja, podía ver qué detrás de ella junto al agujero en el muro, se encontraba Ryomi, está acompañada por Naruto

-REALMENTE ERES TU!- Exclamó la chica mientras sus ojos se aguaban

Sin más, Ryomi salió corriendo en dirección a Natsu y sin esperar a nada le dió un fuerte abrazo, esto ignorando su aspecto o que estuviera cubierta en sangre, mientras que sus ojos derramaban torrentes de lagrimas

-ESTAS VIVA! ESTAS VIVA! EN VERDAD ERES TU!- Exclamó la pueblerina

-Y-yo...- La mente de Natsu empezó a llenarse de recuerdos... Su vida empezaba a cruzar frente a sus ojos... Los cuales terminaron llenándose de lágrimas y sin aguantar más, la asesina devolvió el abrazo.

-Hermana!- Exclamó ella con sus ojos llenos de lágrimas, sintiendo la calidez y su corazón latir con fuerza, pero no de adrenalina o emociones de batalla... Era felicidad genuina...

-Vaya máquina de matar...- Murmuró Aneko sarcásticamente para luego sonreír -Lo sabía! Eran hermanas!... eh?-

En eso, Naruto se acercó a la escena... El rubio y la enana cruzaron miradas, ambos sintiendo un momento de incomodidad para finalmente simplemente voltear la mirada, simplemente era mejor no hacerlo.

En eso, los 4 sintieron un fuerte temblor...

-Eso es...- Estaba a punto de decir Aneko

Finalmente a varios metros de ellos, el suelo estallo liberando trozos de roca y polvo.

Antes de que el polvo se asentará, el Raikage salió volando por los aire chocando contra una columna

-Asi que lo logro...- Comento Natsu

Naruto por su lado se había quedado en silencio, simplemente obserbando

Aneko de colocó de pie antes de mirar a la responsable

Mientras que Ryomi estaba horrizada con la escena

Hinata estaba allí en pie, cubierta de su propia sangre, llena de heridas y moretones, con sus ojos amarillentos y de pupila negra, con los colmillos extendidos, el cabello alborotado erizado y levitando, mientras que tenía un brazo nuevo, con los músculos y vasos sanguíneos expuestos y con garras afiladas.

Era algo macabro de ver, sin mencionar su aura...

-Hinata...- Murmuró Naruto, sin embargo ella fue capaz de escucharlo...

-Naruto...- Murmuró ella antes e voltear

Al ver a Naruto, rápidamente toda aquella ira y aura desaparecieron... Su Byakugan se desactivo, ella cayó de rodillas al suelo mientras su cabello dejaba de levitar y ella empezaba a toser sangre, sus garras al igual que los colmillos regresaron a su estado original, mientras que los músculos dejaron de tensarse, quedando tendida en el suelo

-Agh... mierda...- Comentó ella sintiendo como todo su cuerpo temblaba, sentía el nuevo brazo ardiendo debido a la falta e piel y lo sencibles que era, sentía el sabor metálico por su nariz y boca.

Sus ojos aún se mantenía algo amarillos, mientras que la pupila había desaparecido, aparte tenía decenas de fibras musculares reventadas y tendones rotos, ya no podía ni moverse.

Después de toda aquella intensa pelea... Finalmente se había relajado solo un poco, dejando que su cuerpo colapsara, ella estaba a punto de caer inconsciente.

Sin embargo, Naruto rápidamente se acercó a ella y la tomo por su mano buena

-Naruto... L-lo derrote?... estás bien?...- Pregunto ella con la voz ronca y debilitada.

-Tranquila... Ya hiciste suficiente, lo hiciste muy bien... Me salvaste...- Comento Naruto antes de darle un beso en la frente, a lo cual Hinata sonrió débilmente antes de caer inconsciente.

El rubio soltó suavemente a la Hyuga antes de empezar a caminar hasta colocarse junto al raikage, quien respiraba pesado y no podía ni moverse debido a las heridas que le habían provocado en sus puntos vitales, pero seguía consciente...

-Ahi está, cultivaste lo que cosechaste- Declaró Naruto observando al Raikage... -Ahora, estás mordiendo el polvo, a punto de morir y dejando atrás a tu hermano... Si tan solo te hubieras dedicado a ser un buen líder y a protegerlo en vez de hacer toda esta mierda...-

A diferencia de Hinata, Naruto no sentía odio del todo por el Raikage, no porque le agradará o porque pensará que lo que hizo no estuvo mal... Si no, porque en su otra vida, habían llegado a respetarse mutuamente, esto debido a su relación con Bee...

No eran amigos, pero era aterrador para Naruto ver cómo las circunstancias cambian a la gente... Cómo los amigos y enemigos, tan solo dependían de que perspectiva te tocaba vivir... Sentía pena por el.

-Maldito mocoso... ¿¡Te atreves a mirarme desde arriba y a cuestionarme!?... USTEDES NO SABEN TODO LO QUE HE SACRIFICADO! YO HICE ESTO POR MI GENTE! NO SABEN LO QUE ES PENSAR EN SU PUEBLO Y EN BUSCAR LO MEJOR PARA EL!- Grito el Raikage, a lo cual Aneko empezó a acercarse lentamente

-Quedate aquí Ryomi, hay una última cosa que tengo que hacer... Será mejor que mires a otro lado- Dijo Natsu antes de darle un beso en la frente a su hermana y también empezó a acercarse

Las 2 asesinas se colocaron frente al herido Raikage, quien solo las miro con desprecio

-Sucias traidoras, ustede...- Antes de que pudiera decir algo más, Natsu le drenó el oxígeno, evitando que pudiera seguir hablando, pero permitiendo que siguiera consciente

-Ya cierra la boca, no estoy aquí para escucharte lloroquear- Comento Natsu antes de cerrar su puño, causando que uno de sus pulmones explote y a su vez oa espalda le explote sacando sus órganos internos y provocando un enorme dolor... ella lo había dejado con vida a propósito, evitando dañar demasiado su corazón con la explosion.

El Raikage tenía un rostro de agonía, parecía querer gritar su último aliento, pero Aneko simplemente le propinó un puñetazo en el rostro, la fuerza fue tal que la cabeza del Raikage voló por los aires con una parte de su vertebra colgando, dejando su cuerpo inerte en el suelo.

Finalmente, ninguna de las 2 asesinas comento nada, simplemente le dieron la espalda al cadáver mientras que Naruto miraba con pena el cuerpo

Fin Capitulo 49