En otro lugar

—Mierda!— Exclamó el joven apenas logrando despertar.

Al instante en que reaccionó pudo sentir todo su cuerpo adolorido, además de que casi no podía moverse, sus extremidades le pesaban...

—Mocoso... Hasta que al fin despiertas— Escucho la voz en su mente

—Kurama... ¿Dónde estamos? ¿Que ocurrió?— Pregunto Naruto mientras intentaba mirar en todas direcciones, pero el lugar era sumamente oscuro, sus ojos aún no se acostumbraban además había algo que los tapaba parcialmente

—Fuimos derrotados, al parecer la asesina de alguna forma logro contener momentáneamente la Bijudama que le lanzamos y usarla en un ataque kamikaze— Explico el zorro a lo que Naruto se quedó frío... El no recordaba nada desde el instante en el que se transformó.

El rubio miro mejor el sitio donde se encontraba, noto que tenía cadenas atadas a sus brazos y piernas, su cuerpo estaba vendado y tenía algún especie de sello de restricción puesto en el abdomen, además tenía una venda cubriendo parte de sus ojos por lo que la imagen no era muy clara

—Mierda... Eso quiere decir que estamos cautivos... Hinata ¿¡dónde está Hinata!? ¿¡Cuánto tiempo ha pasado!?— Empezó a preguntar el Uzumaki a lo que Kurama solo gruño

—No lo se... He estado dormido una gran parte del tiempo, mientras que he estado usando mi chakra para sanar tus heridas, sin embargo esa cosa en tu estómago la pusieron cuando vieron que ya no estabas en peligro de morir— Explico el zorro a lo que Naruto se sintió angustiado

El joven algo molesto empezó a forcejear con las cadenas pero estás simplemente no se iban a romper

—Mierda... Debe haber un modo de salir de aquí... Pero no tengo nada de fuerza, estoy muy debilitado...— Pensó el Uzumaki

—Has despertado...— Dijo una voz femenina a lo que Naruto sintió como si se le parara el corazón, debido a que no esperaba que hubiera alguien más allí... Además, la voz era familiar

—¿Quien está ahí?— Pregunto Naruto en voz alta y de forma apenas audible... Su voz estaba algo reseca y ronca, además de que su boca tenía una venda encima, cosa que asustó un poco a Ryomi ya que se oía como un espectro

—L-lo siento... No quería molestarlo...— Dijo ella algo intimidada, además Naruto parecía una momia ya que su cuerpo estaba totalmente rodeado de vendajes cubiertos de sangre coagulada, tan solo se podía ver su cabello y parte de sus ojos

—No importa... Pero, tu voz... Siento que la he escuchado antes...— Dijo Naruto mientras abría los ojos tanto como podia, pero no podía ver bien por lo que rápidamente mordió la venda que cubría su boca y empezo a retirarla con su mordida

—uh?— Ryomi observo con curiosidad como el rostro del Jinchuriki finalmente era visible, su cara aparentemente estaba bien, aunque en algunas partes aún tenía ampollas y heridas en recuperación

—Tu eres!...— Naruto miro fijamente a la chica, ella estaba al otro lado de los barrotes de su jaula, estaban apenas separados por una reja pero podía ver su rostro claramente —Natsu!—

Naruto dejo notar su ira nada más exclamar aquel nombre, a lo que Ryomi retrocedió asustada por la repentina ira del Jinchuriki.

—No... Espera un momento...— Naruto miro nuevamente a la chica de pies a cabeza —No... No es ella... Aunque está oscuro, puedo ver qué sus ojos son azules, parece más frágil... Y tiene su brazo... No es Natsu... Si me fijo bien, su aspecto parece más el de una pueblerina...—

Naruto dejo escapar un suspiro algo avergonzado antes de hablar

—Lo siento, creo que me equivoqué de persona...— Admitió el Jinchuriki dejando escapar un tono un poco más amable a lo cual Ryomi también suspiro un poco más aliviada

—Eres un tipo aterrador, sabes?— Dijo Ryomi desde su sitio

—Supongo... Me lo han dicho muy seguido— Dijo el Jinchuriki a lo cual noto como la pelirroja empezaba a mirarlo de otra forma —eh?—

—Oye... Se que no es buen momento, y no nos conocemos... Pero, acabas de mencionar el nombre de "Natsu"... Dime... ¿Quien es ella?— Pregunto la chica sin rodeos... Su mirada había cambiado a una de determinación mientras que Naruto solo sintió intriga

_____________________________________________

Mientras, con Hinata

La Hyuga ahora vestía una gabardina negra de cuero, está estaba hecha a base de la piel de un oso que había matado días antes... Ahora estaba regresando a la cueva con un trozo de de tronco largo sobre su hombro

—Que es lo que estás haciendo?— Pregunto Yugito mientras observaba a Hinata, a lo que está dejo caer el tronco al suelo

—Ya paso el momento de descansar, mis heridas han sanado en su mayoría... Entonces, ahora me enfocaré en volver a la accion, por favor no me distraígas, terminaré de trabajar en la tarde— Contesto la asesina  para luego sacar un kunai

La Hyuga empezó a tallar el tronco, removiendo capas de madera con facilidad a lo que Yugito no entendía

La Jinchuriki se volteo a mirar en otra dirección, allí estaba Natsu quien parecía estar meditando sobre una roca mientras sostenía la espada en su mano

—En serio... No entiendo lo que pretenden estás 2... Durante estos 2 días, ni siquiera han hablado de como harán el ataque, o siquiera han intentado acercarse más...— Pensó Yugito

—Son asesinas... Su mentalidad no es para nada común, no trates de entenderlas— Declaro Matatabi —Talvez se están preparando individualmente antes de empezar a hacer equipo o algo asi—

_____________________________________________

Mientras, con el equipo Konoha

Todo el equipo miro fijamente a Aneko, cada uno de ellos estaba paralizado sin saber lo que acababa de ocurrir... Realmente era muy confuso

—Fue... ¿¡Un genjutsu!?... No... Simplemente fue un reflejo de nuestra imaginación, imaginamos nuestras propias muertes al sentir su aura asesina... A juzgar por la reacción de todos... Ellos también fueron asesinados...— Analizo Kakashi aterrado mientras veía a sus compañeros

Nadie se atrevió a decir nada mientras que la asesina volteo la cara y empezó a escanearlo con la mirada... Sus ojos negros, eran a oscuros como el abismo, y se paseaban sobre cada uno de los miembros del equipo

—Admito que no me había sentido tan aterrado en toda mi vida... Esa sensación me tomo por sorpresa, de un momento a otro sentí como si hubiera muerto...— Pensó Gai

—¿¡Es un monstruo!? Que estarán pensando los demás!?... Que se supone que hagamos ahora!?— Pensó Kiba teniendo un nudo en la garganta

Lo más aterrador, era el hecho de que todo había pasado en un segundo... De la nada toda aquella sensación de muerte había desaparecido tan rápido como se había presentado, ahora solo se percibia una calma alrededor de aquella misteriosa mujer... De hecho se percibía demasiada calma, lo cual era más aterrador.

—Eso fue... Fue horrible... Casi sentí que en verdad me mato...— Pensó Sasuke mientras pasaba su mano por su rostro como si intentará buscar las heridas imaginarias

Neji sentía sus manos temblar, Lee temblaba por todas partes mientras se palpaba a si mismo

—¿Quien eres tu?— Pregunto Kakashi finalmente dando un paso al frente, tomando valor y dirigiéndose a la chica

La mujer dejo de observarlos para luego mirar a los ojos a Kakashi, quien no pudo evitar sentirse nervioso ante la presión de su mirada

—Mi nombre... Es Aneko Goremane, ahora... ¿Alguno podría contestarme... Dónde estamos? Es de suma importancia— Dijo la asesina

Los ninjas respiraron ondo, tratando de recuperar la compostura... Realmente la voz de Aneko era muy suave y como la de una niña, era una voz acordé a su aspecto de niña de 13 años, lo que de alguna forma tranquilizaba y hacia el ambiente más soportable... Por otro lado, no parecía tener ninguna intención hostil

—Estamos en el país del rayo— Contesto Gai tratando de seguir la corriente

Aneko asintio antes de mirarse los brazos, notando que ahora solo eran muñones... Por lo que solo hizo un gesto de confusión

—Entiendo...— Contesto la asesina sin dejar de verse los brazos... Luego, su nariz se movió como si estuviera olfateado

La enana volteo su cabeza en dirección a Sakura, quien se puso algo nerviosa

—Oye... ¿Tu fuiste la que me curo?— Pregunto Aneko a lo cual Sakura no pudo evitar tensarse

—Em... Este... Si... Si, así fue...— Aneko asintio antes de hacer una reserencia con la cabeza

—Gracias...—

—H-hai...— Dejo escapar Sakura aún nerviosa

—Se los agradezco a todos, por lo visto estuvieron atentos a mi. Les debo una — Dijo de forma honesta

—Es muy extraña... Acaso está jugando con nosotros a propósito?— Pensó Sai mientras trataba de analizar a la mujer

—A juzgar por sus expresiones... Y el latir su corazón... Parece honesta, creo... Jamás ví un corazon asi... Creo que lo mejor será disuadirla, no podemos provocarla... Ni preguntarle cosas sin antes demostrarle que puede confiar...— Pensó Neji mientras la escaneaba con su Byakugan

El Hyuga dió un paso al frente antes de que alguien más dijera o hiciera algo

—Bien... Aneko, te gustaría comer algo? Debes estar hambrienta después de todo este tiempo— Dijo el Hyuga a lo que la asesina sonrio con aparente gracia mientras su estómago rugia

—Creo que no estaría nada mal—

—Bien hecho Neji... Es mejor que no nos vea como sus enemigos... Aunque, ella ya vio nuestras bandas ninjas... Debe saber que somos de Konoha... Ella debe estar muy alerta a nuestros movimientos...— Pensó Kakashi, esto antes de hacer una seña al equipo para que le siguieran la corriente a Neji

—Ninguno de ellos es hostil... Aunque parecen asutados, solo el chico con olor a perro y aquel con olor a tinta, parecen tener intenciones de atacarme... Pero no parecen estar listos para intentarlo... Simplemente es un reflejo de miedo...— Analizo Aneko —No tengo la intención de matar a nadie, ninguno es mi enemigo realmente... Debo dejarles ver eso... Igual no pretendo quedarme mucho tiempo aqui...—

_____________________________________________

Con Naruto

—Vale... ¿Porque quieres saber eso?— Pregunto Naruto a lo que Ryomi lo miro fijamente, ella espero un momento antes de empezar hablar

—Veras... Hace aproximadamente una semana, o bueno... No recuerdo exactamente cuánto tiempo, la verdad es que ya me es difícil saber cuánto ha pasado... Después de que me encerraron y antes de que tú llegaras, vino una de esos asesinos... Una con un aspecto muy...— La pelirroja no sabía cómo explicarlo, cual palabra usar a lo que Naruto contesto

—¿Aterradora? ¿Intimidante? ¿Horrible?— Ryomi negó con la cabeza

—No, no... O bueno, en parte si era aterradora... Pero no por su aspecto... Más bien, diría que se veía muy... Infantil. Si... Infantil, con solo verla, podría jurar que tenía 13 años como mucho, aunque sus ojos y expresión facial eran algo inexpresivos y daban  miedo, y por alguna razon estar cerca de ella era bastante incómodo...— Explico la mujer, a lo que Naruto al instante solo hizo una mueca

El Jinchuriki solo se rió un poco por lo irónico del asunto

—¿Que ocurre?— Pregunto Ryomi

—Nada... jaja... Bueno, es que esto es un poco... Mierda, esto es demasiado ironico... La verdad, con solo esa descripción, se de quién hablas.— Contesto el rubio fingiendo una sonrisa mientras que en su mente solo decia... —Bueno, como me ves aquí, todo lleno de vendajes y heridas... Esto fue lo que me pasó tras luchar con ella... Aunque bueno, ella tampoco estaba mejor que yo la última vez que la vi...—

Ryomi parecía muy confundida a lo que Naruto finalmente solo suspiro

—Bien... ¿Y que paso cuando ella vino? Te dijo algo? —

—Pues... La cosa es que ella estaba aquí sin permiso... Y me empezó a hablar, ella dijo que me parecía a alguien que había visto una vez... Pensé que se estaba burlando de mi, crei que solo venia a molestarme... Pero, me dijo que yo era idéntica a otra asesina, cuyo nombre era "Natsu" hasta me preguntó si éramos hermanas o algo así...— Explico Ryomi a lo que Naruto se quedó en silencio y la miro fijamente

—¿Tu tenías una hermana?— Pregunto el rubio con seriedad

—Bueno... Este... La verdad es que si, su nombre era Kyomi, pero se supone que ella murió hace años... Cuando ambas teníamos 6 años.— Contesto Ryomi a lo cual Naruto no pudo evitar empezar a hacerse una idea

—A ver... Exactamente, ¿como fue que murió?—

—La verdad... Es que nunca la vi morir... De hecho...—

**************************************

Hace 18 años...

Año 77 [Actualidad año 95]

Narra Ryomi...

En aquel entonces, toda mi familia estaba viva... Todos éramos pelirrojos, vivíamos en el país de las aguas termales... Uno de los 2 paises que quedaban ubicados en medio del país del fuego y el país del rayo...

Solíamos vivir en una pequeña finca, éramos la familia Uzumaki, una familia granjera que se ganaba la vida produciendo trigo, criando animales y vendiendo lo que producimos... Al menos así había sido por al rededor de 50 años, cuando nuestros abuelos emigraron desde otro sitio, aunque nunca nos dijeron de dónde...

Ellos se establecieron allí y con alguna riqueza que traían de su país natal, compraron aquel sitio y fundaron la finca, solía llamarse granja remolino...

El país de las aguas termales es un país muy poco reconocido y pacífico, al grado de que no siquiera tiene aldea ninja, incluso en la segunda guerra mundial no hubo conflicto allí, eso apesar de estar en mitad de 2 de los países más poderosos...

Nuestra familia próspero todo ese tiempo, aunque los abuelos murieron a la edad de 82 y 84 años por una rara enfermedad... Mis padres salieron adelante con sus vidas, ellos siguieron con la finca...

Con el tiempo, dieron a luz a 2 gemelas... Eramos mi hermana y yo, Kyomi y Ryomi... Eramos idénticas, la única diferencia física era el color de nuestros ojos, ella tenía los ojos verdes y yo azules... Aunque si hablamos de personalidad... Eramos aún más diferentes... Ella solía ser bastante tímida, reservada y tranquila... Por mi lado, solía ser bastante extrovertida, juguetona y hablaba hasta por los codos...

Aún así, Kyomi solía ser... Bastante mala con las relaciones sociales, no tenía amigos aparte de mi... Pero, a pesar de su timidez y de su apariencia frágil, solía ser muy dura si lo veía necesario.

Cuando teníamos 5, habían unos niños incluso adultos de aquel sitio que se burlaban de nuestra familia por nuestro color de cabello...

Cuando la molestaban, ella podía llorar, incluso dejarse golpear por los otros niños aunque le doliese mucho o la hirieran... Pero, cuando me golpeaban a mi, ella era la primera en salir a golpear a los que me hacían daño... Muchos empezaron a ponerle apodos por eso... Siempre eran referentes a su color de cabello.

Bueno, ya me estoy alargando con esto...

En aquel tiempo, se estaba llevando a cabo la tercera gran guerra ninja, la cual había empezado cuando teníamos 3 años.

Hasta aquel momento, la guerra no nos había afectado jamás apesar de lo larga que había sido y de los conflictos entre Konoha y Kumo...

Pero como dije, solo hasta aquel momento...

**************************************

Era un día lluvioso y tormentoso... Eran las 2 de la tarde, a aquellas horas el sol debería brillar... Sin embargo debido a la gran nube negra que cubría el cielo era imposible verlo.

Tal era la lluvia que el suelo era un barrial, la finca se estremecía con cada trueno...

La familia Uzumaki por su lado, se encontraba en el interior de la cabaña donde vivía, era un lugar acogedor y tranquilo, incluso era cálido.

Los padres se encontraban sentados en el sofá hablando de quién sabe que, mientras las 2 niñas jugaban en el suelo...

—Piedra!— Exclamó Ryomi solo para ver qué su hermana había sacado papel

—Yo gane— Declaro Kyomi a lo cual la ojiazul grito

—Pero la piedra le gana a todo! No entiendo cómo el papel puede ganarle!?—

—Bueno, el papel envuelve a la piedra—

—y que? No la rompe, en cambio piedra si que puede romber la tijera y al papel, y además la tijera corta el papel... ¿Por qué el papel siquiera está en este juego?—

—Si... Pero entonces no tendria sentido el juego si la piedra le ganará a todo, se supone que sea un triple punto muerto— Explico Kyomi a lo que Ryomi solo sonrió

—Bueno, entonces e teoría gane pero por jugabilidad tu tienes la victoria— Contesto ella con una sonrisa

—Mas bien... No sabes perder— Dijo Kyomi con una mirada fulminante

De repente un trueno rosono por todo el lugar, las ventanas temblaron y  Ryomi no pudo evitar temblar del susto

—Maldicion, no habia visto un clima tan malo desde hace 7 años.— Declaró el padre antes de levantarse del sillón y acercarse a la ventana —A este paso, el agua inundara todos los cultivos y probablemente se filtrara adentro de la casa—

En eso, la expresión del padre cambio...

—Mierda...—

—¿Que ocurre cariño?—

El padre no respondió, simplemente corrió hasta la puerta donde se coloco un abrigo... Sin decir nada, abrió la puerta dejando que el frío del exterior y gotas de lluvia entrasen a la casa

Luego el hombre corrió en medio de la tormenta, lo cual preocupo a su familia quienes rapidamente se acercaron a la ventana...

Las 3 parecían sorprendidas al ver e motivo detrás de aquello...

El padre Uzumaki regreso tan rápido como pudo, estába totalmente empapado por la lluvia y sus piernas estaban llenas de barro... Aún más importante, sobre su hombro traia a otro hombre, uno que vestía con un chaleco táctico, un saco y pantalón azul oscuro, y una banda de Konoha... Se trataba de un ninja

Aquel ninja estaba apenas consciente, sangre salía por su boca, estaba todo mojado y se notaba débil.

La madre de la familia rapidamente preparo el sofá y el padre lo acostó allí

—Espera un momento chico! Estás herido, voy a tratar tus heridas!— Declaro el padre

El ninja apenas pudo murmurar algo, sin embargo nadie le ha la entendido...

_____________________________________________

Horas después...

Los padres habían estado atendiendo las heridas de aquel extraño, el cual tras un tiempo logro recuperar la consciencia... Mientras, las 2 hermanas se habian limitado a observar

—Cielo santo... Es un alivio que estés bien, joven— Declaro la madre, a lo que el ninja asintio con la cabeza

—Se los agradezco... Creí que iba a morir...— Declaro el Shinobi quien había recuperado la consciencia, tenía el dorso desnudo y vendas en varias zonas

—Wow! Así que eres un ninja! Genial!— Exclamó Ryomi de forma juguetona

—Viendolo de cerca no me parece tan "genial", está todo cubierto de vendas y sangre— Comento Kyomi causado que todos la mirarán fijamente, pues la ojiverde no era muy acertiva

—Jovencita, más respeto por el señor— Dijo el padre a lo que el ninja solo rio antes de levantar la mano

—No, no... De hecho tiene razón, no es tan genial... Si lo fuera no sería una profesión tan peligrosa— Afirmó el Shinobi

—Hablando de eso... Cómo es que resultaste tan herido? Es por la guerra?— Pregunto la madre

—Si... Soy un ninja de Konoha... Digamos que tuve que huir de Kumo y mi equipo no sobrevivio... En verdad esto de la guerra es una mierda— Explico el ninja —De hecho, estaba a punto de morir por la tormenta y mis heridas... Gracias...—

—No hay de que, aunque no apoyemos la guerra, ni la violencia... No me gustaría dejar morir a alguien si es que tengo la opción de hacer algo al respecto— Dijo el padre

—Se los agradezco... Aunque jeje... Puedo comentarles algo gracioso?... Ustedes... Su cabello rojizo... Me recuerdan a una compañera de la academia, una tipa algo violenta pero, buena persona a fina del dia— Comento de forma ironica el ninja antes de hacer un gesto de dolor por sus heridas

—oh, si? Eso es curioso jejeje...— Contesto el padre

—Oye... Joven, puedo preguntar... ¿Porque tu chaleco trae el símbolo de nuestra familia enla espalda?— Cuestino la madre levantando el chaleco táctico y señalando el símbolo que traía en la espalda

—Eh?... Eso quiere decir que ustedes son...—

En eso, la conversación se vio interrumpida... Una figura muy rápida y oscura atravezo la ventana...

—MIERDA!— Exclamó el ninja colocándose de pie y colocándose el chaleco tan rápido como pudo

—Konohiro Sarutobi, hijo del tercer hokage, no pensaste que ibas a escapar tan fácilmente, verdad?— Declaró aquella criatura... Para todos, era como ver un demonio... Vestía de negro, tenía una máscara blanca sin diseño alguno, su cabello era castaño oscuro... Y tenía un aura sumamente intimidante

Se trataba de un asesino

—Malditasea! Todos! Corran!— Exclamó el ninja antes de tomar un Kunai

Los Uzumaki rápidamente trataron de correr hacia la puerta, pero otra criatura voló con rapidez atravezando la puerta a una velocidad suprema...

Kyomi y Ryomi observaron con horror la escena que había ocurrido frente a ellas... Las cabezas de su padres volaron por los aires antes de caer al suelo... Las 2 niñas se habían quedado paralizadas del miedo, Kyomi tenia la sangre de sus padres manchandole la cara...

—Nadie sale de aquí, me temo que han ayudado a un espía, por lo tanto ustedes no pueden vivir— Declaro el asesino recién llegado

—Alejate de ellas! Son solo unas niñas!— Exclamó el Shinobi

—Matalas rápido y sin dolor— Declaro el primer asesino

—No, no... Ellas son especiales... De hecho, está familia es especial... Desde lejos, pude sentir sus chakras... Tienen una cantidad de chakra absurda, siendo tan solo unos civiles... Y ese cabello rojo... Jejeje... Que sorpresa...— Declaró el segundo asesino sonriendo bajo la máscara

—En ese caso... Creo que el doctor estará complacido de tenerlas, está recolectando niños para el nuevo programa, esto es una buena noticia—

—Alejence de nosotras, malditos demonios!— Exclamó Kyomi con los ojos llenos de lágrimas y voz temblorosa, esto colocándose delante de su hermana, quien estaba paralizada del miedo... Pues, estaban frente a los cadáveres e sus padres...

—Que niña tan valiente jejeje...— Declaro uno de los asesinos

—Suficiente! Estilo de fuego, jutsu de cenizas ardientes!— Exclamó el ninja antes de liberar una enorme nube de ceniza, llenando por completo la casa...

El ninja rápidamente corrió hasta las niñas, las tomo en sus brazos y salió de la casa tan rápido como pudo

—Sueltame! Mis padres están allí!— Exclamó Ryomi con los ojos llenos de lágrimas

—Lo siento! En serio... Pero tienen que huir!—

El sarutobi rapidamente se llevó a las niñas hasta el bosque, dónde las dejo, esto en medio de la tormenta y de la tarde oscura

—Rapido! Corran! Siento lo que pasó, esto es culpa mía... Pero, solo queda esto, corran tan lejos como puedan, tiene que esconderse, yo me encargaré de distraer a esos asesinos!— Declaro el ninja...

Ante estas palabras, Kyomi rápidamente tomo la mano de su hermana y ambas empezaron a huir...

A pesar de que apenas eran las 5 de la tarde, el cielo estaba sumamente oscuro por la tormenta... El piso del bosque era resbaladizo, estaba haciendo mucho frío y la lluvia no paraba de caer con fuerza...

—Tengo que matar al menos al asesino con habilidad e sensor... O esas niñas seran capturadas...— Penso Sarutobi tomando su kunai —Aunque está claro que no sobreviviré a esta pelea... En serio, lo siento con esta familia... Padre... Asuma... Lo siento...—

Sin más el Shinobi corrió en dirección a la casa, de dónde salieron los 2 asesinos... Así, empezó una feroz batalla en medio de la tormenta...

Fuego, rayos, agua... Choques de acero, sangre, sudor... La última batalla de aquel ninja queriendo darlo todo...

Sin embargo, aunque fuera un Jounin de alto rango, se estaba enfrentando a 2 asesinos Spartan...

La finca termino en llamas con aquella batalla... El joven sarutobi finalmente pereció con graves heridas, aunque claro... Al menos había podido matar al asesino sensor...

Mientras, el otro spartan había empezado a correr en direccion al bosque al cual habian huido las niñas...

_____________________________________________

—Mamá! Papá!— Grito Ryomi con lágrimas en los ojos , mientras corría en medio del bosque bajo la lluvia, tanto ella como su hermana sabían que estaban siendo perseguidas...

La niña de ojos azules cayo al suelo tras chocar con una piedra, lastimándose la pierna, ante tal impotencia estaba a punto de empezar a partir en llanto

—Levántate Ryomi! Tenemos que salir de aquí!— Exclamó otra pelirroja, Kyomi. La cual ayudo a levantar a la otra y ambas huyeron tan rápido como podían en medio de aquel bosque y de la lluvia

Ambas corrieron, hasta que llegaron al borde de un precipicio

—hermana! No hay salida!— Exclamó la de ojos azules, a lo que la otra miro en todas direcciones tratando de buscar una salida

Algo dentro de Kyomi, un especie de sensación inexplicable... Le decía que su perseguidor no estaba lejos, por lo que la pequeña tuvo que pensar rápido...

—Escapa! Yo los distraeré!— Exclamó, y antes de que su hermana respondiera algo, la pequeña de ojos verdes tomo una liana cercana que se veía resistente, la ato de la mano con rapidez y arrojó a su hermana al precipicio en la dirección donde se veían más arbustos

—Kyomi!!— Exclamó la chica mientras caía y que ella la miraba con seriedad, se pudo ver cómo la liana se tensiono y ella cayó en los arbustos

Aunque Kyomi no lo había notado, aquella caída le había dislocado el brazo a Ryomi y de paso le había hecho un corte en la muñeca... Sin embargo, estaba viva...

—No mueras Ryomi! Te encontraré! Lo prometo!— Dicho esto, la chica de ojos verdes corto la liana con sus dientes y luego corrió en dirección opuesta directo hacia sus perseguidores

Kyomi trato de gritar o llamarla, sin embargo con aquella caída y el dolor en sus brazo, ella ni siquiera podía hablar por el dolor, ni siquiera emitír un sonido...

Al final, ella quedó bajo los arbustos completamente inconsciente por el dolor...

Mientras que Kyomi, corrió en la dirección en la que sentía que venía el asesino, esto con la intención de desviar su atención...

Al final, Kyomi fue capturada e ingresada al programa de asesinos, mientras que Ryomi... Despertó mas de 13 horas después, herida del brazo y sin su familia...

Ryomi algo enferma por la lluvia, adolorida y completamente deprimida y los ojos llenos de lágrimas, camino tanto como pudo atravesando el bosque... Esto hasta llegar a la aldea más cercana, la cual estaba en la frontera del país de las aguas termales y del país del fuego... Esto mientras que en su mente, solo estaba la imagen de su familia muerta... Solamente con la vaga idea de que era la única que había sobrevivido...

**************************************

Narra Ryomi

Aquel día, perdi todo... A mí familia... La finca a la que tanto esfuerzo le invirtieron...

Mi hermana se sacrificó para distraer a los perseguidores... En mi brazo y muñeca, tengo el constante recuerdo de aquel dia, mi brazo no volvió a ser el mismo, siempre tiembla y es débil... Y mi muñeca... Tiene una cicatriz circular que la rodea.

Cada vez que veo esa cicatriz, recuerdo aquel día...

Yo... Trate de vivir una vida normal, sin embargo siempre me sentí observada, era difícil dormir... A veces, tuve la sensación de ver a esos asesinos merodeando cerca de mi casa, me daba miedo, así fue al menos hasta ahora, 18 años después... Los asesinos volvieron por mi, y no se que quieren...

Pero, aquella asesina con aspecto de niña espectral... De alguna forma me devolvió la esperanza... La esperanza de que mi hermana estuviera viva...

**************************************

Naruto se quedó en silencio, no sabía cómo sentirse al respecto... Era una perspectiva completamente nueva

—Esa Natsu... Incluso ella, siendo la asesina tan despiadada y sanguinaria que es... Al final del día, no deja de ser como Hinata... Ella no eligió esa vida...—

El rubio miro a Ryomi a los ojos, luego la vio de pies a cabeza... Claramente era la hermana de Natsu

—Yo jamás perdone a Natsu por matar a Rumo, y francamente jamás olvidaré eso... Pero, tampoco puedo culparla del todo, no es justo... En la otra vída... Hinata probablemente habría matado a la mayoría de personas que quiero, solo haciendo su trabajo... Incluso mato a Sasuke... Los asesinos de las nuevas generaciones... Ellos no son el verdadero enemigo...— Naruto apretó la dientes de enojo

—¿Ocurre algo?—

Naruto miro a Ryomi ante de simplemente dedicarle una sonrisa

—Ryomi, verdad?... Bien, te diré la verdad... Tu hermana sigue viva, ella es Natsu, está claro— Declaro el Uzumaki a lo que Ryomi no pudo evitar que sus ojos se llenaran de lágrimas mientras miraba a los ojos al rubio

Apesar de lo herido y aterrado que podía llegar a verse Naruto... El brillo de sus ojos azules, su voz... E incluso el aura que desprendía, hacía que la chica se sintiera tranquila... Ella no sabia describir el sentimiento que tenía en aquel momento.

—Ryomi, te prometo... Que cuando salgamos de aquí, volverás a verla! Yo, Naruto Uzumaki prometo que así será!— Declaro el Jinchuriki con su clásica sonrisa mientras que los ojos de Ryomi se llenaban de lágrimas... Claramente, lo que veía en Naruto, era esperanza...

Fin Capitulo 44