33 [El poder destructivo...]
Algunos minutos antes
–Oye... ¿Ahora que pretendes hacer? No te entiendo– Declaró Yugito, mientras seguía a Natsu
La asesina estaba tomando otra ruta a la de antes... En realidad, estaba caminando directo al campo de batalla
–Tu solo sígueme, iremos por la shinigami. Habrá que pelear un poco, pero la necesitamos– Contesto la pelirroja
–Pero antes dijiste que...–
–Se lo que dije. Pero también dije que había cambio de planes... Aún así, no te alejes de mi, me comprometí a protegerte mientras estés conmigo, eso sigue sin cambiar– Aclaro Natsu mientras seguía su camino
Yugito se sentía muy confundida, pero se limito a seguirla
–Será mejor que apresuremos el paso, estamos muy lejos del campo de batalla, estamos a más de 40 Kilómetros...– Comentó la pelirroja antes de frenar en seco
La mujer suspiro, sabía que la Jinchuriki no tenía la suficiente energía para correr y menos a su ritmo debido a la falta de chakra...
–Talvez pueda llevarla en mi espalda... O talvez sea mejor que vayamos volando, faltan 40 kilometros... Tenemos que apresurarnos... Tengo la sensación de que algo está yendo muy mal en el campo de batalla y...– Pensó la pelirroja...
En eso, sus pensamientos fueron interrumpidos... Sus instintos le gritaban de una amenaza
Al mirar al cielo, pudo ver cómo un gran ave de color blanco sobrevolaba el área, había un hombre con bata negra sobre ella, justo en ese momento pudo ver cómo el hombre arrojaba algo directo a ellas
Se trataba de otra ave de arcilla, la cual voló a toda velocidad
–Mierda!– Pensó la asesina antes de desenfundar su espada, luego la blandio con gran fuerza arrojando un corte aéreo
El ave se partió por la mitad para después desatar una gran explosión
–¿¡Un jutsu de masa explosiva!?– Analizo la pelirroja mientras miraba la explosión, Yugito por su lado retrocedio al ver el ataque
–Que buenos reflejos, sin duda eres un asesina muy fuerte, digna de tu reputacion–
Un escalofrío recorrió todo el cuerpo de Natsu al escuchar aquella voz... Una voz gruesa, pesada y firme... La cual provenía de sus espaldas... Podía sentir una presencia muy fuerte a menos de un metro de ella
La asesina rápidamente se volteo tratando de atacar con su espada, solo para recibir un puñetazo directo en el estomago y ser lanzada contra un árbol, el cual se derrumbo
–Natsu!– Exclamó Yugito tratando de correr para ayudar
Pero antes de que ella pudiera hacer algo, una mano firme y poderosa la toma por el cabello para después levantarla del suelo
–Agh!! suéltame!– Exclamó lanzando golpes a su agresor
Sin embargo, aquella persona simplemente le propino un golpe directo al pecho, dejando a la rubia inconsciente al instante
–La captura del Nibi está completa– Sentenció aquella figura
En eso, el hombre que volaba con su ave de arcilla bajo de los cielos, y la figura arrojó a Yugito sobre el lomo del ave
–Tsk... Oigan... Esto no se ha terminado, no crean que será tan fácil!– Exclamó Natsu antes de colocarse de pie
De esta forma, pudo ver a la figura... Tenía la bata de Akatsuki, una máscara cubría su rostro... Y su cabello era largo hasta la cintura y en puntas
Se trataba del falso Madara, quien le dirigío una mirada fribola con su sharingan
–Esos ojos... Ese tipo sabía quién era yo... y sin duda es extremadamente fuerte...– Pensó Natsu antes de apretar la mandíbula
La figura dió algunos pasos al frente, a lo que Natsu no pudo evitar retroceder un paso
–¿¡Quien eres!?– Pregunto la asesina a lo que el Akatsuki se detuvo
–Mi nombre, es Madara Uchiha– Contesto el enmascarado a lo que la expresión de Natsu cambio por completo, luego se colocó en pose defensiva
–Eso es imposible! Madara Uchiha murió hace años! – Contesto la asesina mientras le apuntaba con su espada
–Subestimas mi poder, Kiramane– Contesto Madara, a lo que Natsu lo miro con desconfianza aún empuñando su espada
–Tsk... No puedo percibir si está mintiendo... Pero también puede ser un experto en la mentira...– Analizo la pelirroja
–Esta claro que desconoces el alcance de mi poder... Sin embargo, yo a ti si te conozco, Kyomo Uzumaki– Estás palabras dejaron fría a la asesina... Incluso su espada cambio de color en aquel momento, ahora siendo de un tono magenta
Ante aquella escena Madara rio
–Este sujeto... ¿Que demonios es?... Tiene un aura demasiado difícil de leer... Incluso mis instintos se sienten inseguros en su presencia...– Pensó la asesina mientras una gota de sudor bajaba por su frente
–Yo, Madara puedo ver un gran potencial en ti, como digna desendiente del clan Uzumaki. Por ello, antes que pelear contra ti, tengo una propuesta que ofrecerte– Dijo el enmascarado mientras extendía su mano en dirección a la asesina
–¿Una propuesta? ¿Que clase de propuesta?– Contesto la Uzumaki con desconfianza, a lo que Madara sonrió debajo de la máscara... Aquella sonrisa se podía ver reflejada en sus ojos... Cosa que realmente ponía nerviosa a la Uzumaki
–Unete a Akatsuki, prestanos tu poder para cumplir con nuestro objetivo... A cambio, yo te ayudaré a destruir Kumogakure, a la hermandad de asesinos... Y lo más importante, te devolveré a tu hermana... O aún mejor a toda tu familia–
Natsu tembló ante aquellas palabras, realmente la persona que tenía en frente, se sentía como un agujero negro... Una presencia imponente e inamovible
–Tsk! ¿¡Que clase de broma es esta!? No sé si realmente seas Madara! Pero mi familia está muerta, eso ya lo se!– Contesto la asesina, a lo que una risa seca escapó del enmascarado
–Tu lo haz dicho... Yo, Madara debería estar muerto... Pero, mis poderes han trascendido por mucho la vida y la muerte... Puedes verlo por ti misma– Contesto el Uchiha con un tono de burla en su voz
En eso, una figura salió de entre los árboles... Está traía una bata de Akatsuki...
–¿¡Pero que demonios!?– Dejo escapar Natsu al ver de quién se trataba
–Mocosa endemoniada, en verdad eres temible– Dijo Kakuzu, quien se colocó junto al falso Madara
–¿¡Que demonios está pasando aquí!? Asesine a ese tipo... Fue hace un instante... Cómo es que ahora está ahí!?... En verdad está vivo!...– Pensó la asesina... Luego lo más rápido que pudo, ejecutó un sello manual –Kai!–
Ese fue el momento, dónde Natsu se percató, de que aquello no era un genjutsu... Realmente Kakuzu estaba en frente de ella
–Supongo que ya somos 3, Kakuzu– Dijo el sujeto que estaba sobre el ave de arcilla, quien se retiró la capucha y la máscara... Se trataba de Deidara –Asi es asesina, nosotros fuimos revividos gracias al poder de Madara Uchiha–
Ante aquella escena la pelirroja se había quedado petrificada, por primera vez en mucho tiempo, se sentía realmente ridiculizada en poder contra un enemigo...
Podía sentir que tanto Deidara cómo Kakazu decían la verdad... Podía sentir sus signos vitales, sus latidos... Sin embargo, al sentir su olor, podía notar que no era el de un vivo... Probablemente aquel edor se debía a que ya no deberían pertenecer a ese mundo... Aún así allí estaban
–Como puedes verlo, soy capaz de traer a los muertos de vuelta a la vida... Te ofresco eso, a cambio, tu formarás parte de Akatsuki... Entonces, ¿que dices?– Cuestiono el falso Madara, a lo que Natsu estaba muy confundida, paralizada... E incluso, impotente
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En otra parte del bosque, alejado del resto
–Estamos cerca del aroma! Es cada vez más intenso!– Dijo Kiba quien saltaba de árbol en árbol junto a su perro, siendo seguidos por Gai, Lee y Sasuke
–Bien! Espero que en verdad sea Yugito!– Contesto Lee con emoción
–Asi es!... Aunque... ¿Que ocurre, Sasuke? Te veo desanimado– Comentó Gai a lo que el Uchiha levanto la mirada
–Uh... No es nada–
–YA ENTIENDO!! DEBE SER POR KARIN, EH? Debes estar preocupado! je, eres todo un caballero juvenil!– Rio Gai, a lo que Sasuke solo soltó una gota de sudor
–No tiene nada que ve...–
–Animo Sasuke! Ella es una chica fuerte! De seguro ya debe estar muy saludable!!– Exclamó Lee
Ante estás actitudes el Uchiha no sabía cómo reaccionar
–je... Gracias muchachos...– Se limito a contestar antes de fingir una sonrisa... Que por cierto se veía demasiado falsa
El Uchiha miro al frente, mientras que ciertos pensamientos lo invadian
–Que extraño... Tengo un mal presentimiento... Siento que algo va a ocurrir...– Se dijo en su mente Sasuke
Sin embargo sus pensamientos fueron interrumpidos cuando Kiba grito
–LLEGAMOS!!–
El Inuzuka lanzo un Kunai a los pies de una figura encapuchada, la cual caminaba por el bosque, cosa que la hizo detenerse
–Oye! Yugito!– Exclamó Kiba acercándose a la figura y con rapidez le quitó la capucha
–¿eh? ¿Kiba?– Contesto Yugito asustada, quien dió un paso atrás tan pronto como le habían quitaron la capucha
–Bien, así que si eras tu– Dijo Kiba a la rubia
–Bien hecho Kiba!– Dijo Gai sensei al ver que la persona debajo de la capucha en efecto, era Yugito
–no! Ustedes han venido a capturarme! Alejense!– Exclamó la Jinchuriki del Nibi antes de tratar de huir
Sin embargo Kiba es rápido y la atrapa del hombro
–Oye! Tranquila! Soy yo, puedes confiar en mi–! Aclaro el Inuzuka a lo que la mujer se quitó la mano dándole un golpe, luego trato de correr, solo para tropezar y caer al suelo
–Ya veo... Debe estar agotada... Y todo indica que no puede usar su chakra– Comentó Gai acercándose a la escena
–Parece muy asustada...– Agrego Lee, también acercándose
Los 3 ninjas la rodearon, a lo que la mujer se cubrió con su capucha
–Algo no está bien...– Pensó Sasuke antes de activar su sharingan
–Alejense de mi! El Raikage es el verdadero traidor!– Exclamó la Jinchuriki
–No entiendo lo que pasa, pero será mejor llevarnosla con el resto– Dijo Gai antes de acercar su mano para tomar a la mujer de brazo
–GAI-SENSEI! NO LA TOQUEN!– Exclamó Sasuke
–Eh!?– Tanto Lee, Gai y Kiba se vieron incredulos cuando Sasuke se lanzo contra Yugito, usando un Kunai
De inmediato Yugito salto ágilmente entre los árboles, dejando a su paso un aura de rayos oscuros
–¿¡Pero que!?– Pensó Gai al ver aquello
–Esa no es Yugito!– Comentó Sasuke a lo que la encapuchada rio
–Tsk... Maldito Uchiha sangre sucia– Contesto la jinete del rayo, mientras emanaba una gran cantidad de aquellos rayos
–¿¡Quien demonios eres!?– Exclamó Kiba a lo que la mujer empezó a ejecutar un Jutsu...
Ante los ojos de todos, la figura explotó en un destello de luces moradas, sin dejar ningún rastro...
–Kiba! ¿¡A dónde se fue!?– Cuestionó Gai, a lo que el Inuzuka y su perro empezaron a olfatear en todas direcciones
–N-no lo sé... Desapareció por completo... Y no solo ella, todos los olores de esta área, incluso los nuestros desaparecieron... Es como si todas las partículas de edor, hubieran sido destruidas...– Analizo Kiba bastante incrédulo al asunto
–Tampoco entiendo lo que paso... Pero, el chakra de esa mujer, se veía demasiado diferente al de un Jinchuriki... Incluso demasiado diferente a cualquiera que haya visto... Y estaba apunto de ejecutar un jutsu... uno que concentraba mucho chakra en sus manos– Contesto Sasuke a lo que Gai se vio pensativo
–Es bueno que te hayas dado cuenta... Por un momento me confíe... Si ese jutsu era letal, probablemente pudo haber acabado con alguno de nosotros...– Agrego el jounin aliviado por qué no fue el caso
–Pero no entiendo... ¿Quien demonios era esa persona? ¿Porque intento engañarnos?... ¿Porque olía como Yugito?– Cuestionó Lee mientras apenas procesaba lo que había ocurrido...
–No lo sé... Pero talvez estaba ahí para desviar nuestra atención...– Contesto Kiba
–Sera mejor que regresemos con el resto del equipo... Hemos seguido la pista falsa– Finalizó Gai, a lo que los demas simplemente asintieron y empezaron a regresar por dónde habían venido
...
Aunque, lo que ninguno noto, era la presencia de un cuervo, el cual los observaba desde la rama de un árbol
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Natsu seguia petrificada ante aquellas palabras y aquella escena que tenía en frente... Madara se había quedado en silencio esperando a su respuesta...
–Ese tipo... Sin duda es imposible para mí vencerlo... Si no acepto moriré... Aún así... Esa propuesta... En verdad ha revivido a los muertos... ¿Está podría ser mi oportunidad de...?– De la nada, los pensamientos de la pelirroja son interrumpidos cuando Madara se lanza contra ella
La pelirroja rápidamente se coloca a la defensiva y trata de lanzar un corte con su espada, sin embargo el enmascarado le atrapa la muñeca con una gran fuerza, para después arrojarla por los aires, cayendo a varios metros
–tsk!– La asesina se volteo a ver a Madara, solo para ver cómo este ahora tenía su Katana en una de sus manos...
La hoja de la espada se había tornado de un color morado oscuro, casi flameante
–Interesante arma, hecha de un acero especial y que actualmente es muy difícil de encontrar... Ludorium... También conocido como el metal que siente... se dice, que el filo y la dureza de las armas hechas con este mineral, son tan fuertes como la voluntad de su portador, un mineral demasiado raro... y que pocos han sido capaces de desatar su verdadero potencial, siendo en su mayoría destruidas– Comentó Madara mientras examinaba el arma y paseaba uno de sus dedos por la hoja afilada –Sin duda, esta arma es el vivo reflejo tuyo...–
Natsu se colocó de pie mientras miraba atentamente al Uchiha quien finalmente suspiro, pero ahora era con cierta ironía en sus aires
–Sin embargo, creo que ambos sabemos, que una espada rota nunca podrá liberar todo su verdadero potencial... Hasta en eso te pareces a tu espada... También estás rota– Señalo Madara –Tu ojo izquierdo ya no funciona, tu brazo derecho fue amputado, y por lo que veo, eres incapaz de mover tu pierna izquierda por ti misma, por ello usas el viento a su alrededor para moverla–
–¿Que demonios?...– El falso Madara rio mientras movía la espada entre sus manos
–Y aún así, eres tan peligrosa como para matar a 2 Akatsuki... Eres un arma rota, que su poder depende de su voluntad y sentimientos, con un gran potencial oculto... Si te unes a Akatsuki, me encargaré de liberar todo tu potencial... Puedo devolverte tu brazo, ademas arreglare tu ojo y tu pierna... Y si lo deseas, también la espada– Finalizo el falso Madara antes de sonreír bajo la máscara
La tensión del ambiente era muy alta, Natsu podía sentir el sudor bajando por frente
–Elige... La vida que te ofrezco, o la muerte... Todo lo que tienes que hacer, es dejarme a Yugito y serás parte de la organización– Agrego el Uchiha a lo que Natsu miro al suelo
–La destrucción de la hermandad... Mi hermana... Mi familia...– Pensó la asesina mientras apretaba su puño, al grado que le temblaba
Tras un momento de meditarlo, la asesina se fijó en la espada rota...
–Enfrentar a alguien mucho más fuerte que tú para proteger a otros... Je... Eras una idiota Seiko... Los idiotas suelen vivir poco– Se dijo a si misma la pelirroja
Finalmente una carcajada escapó de la pelirroja, cosa que intrigo a Madara
–ja...jajajajajaja... Claro que acepto... Eso es lo que diría, si fuera la misma persona de antes– Contesto Natsu antes de dejar escapar su aura asesina seguida de un ventarrón –Pero ya no soy esa, ¡he hecho un juramento a la antigua portadora de esa espada!... y más importante aún le he dado mi palabra a Yugito de que la protegería!–
El aura asesina se extendió mientras que el aire empezaba a mover la hierva de los alrededores de forma muy violenta, incluso el cabello del enmascarado se meneaba por el ventarron
–¿Enserio, pretendes retarme aún con la oferta que te he hecho y con la diferencia de nuestros poderes?– Cuestiono Madara
–Conoces a la yo del pasado... Pero no conoces a la yo actual, yo no soy como ustedes... Es mas, ya puedo decir que me das asco... Y no me importa quién seas o lo que me ofreces... Solo se que estás usando lo que me importa para tratar de convertirme en tu esbirro... ¡No perdonaré tal falta de respeto! ¡y más te vale quitar tus sucias manos de mi espada!– Contesto la asesina a lo que se lanzo contra Madara
El Uchiha dejo escapar una pequeña carcajada debajo de su máscara mientras empuñaba la espada rota, Deidara estaba a punto de lanzar una ave de arcilla y Kakuzu iba a atacar... Pero el enmascarado, les hizo una seña para que no intervinieran, a lo que Deidara junto a Kakuzu simplemente empezaron a volar sobre el ave de arcilla, tomando distancia y llevándose a la inconsciente Yugito
–No dejaré que se la lleven!– Exclamó Natsu
–Je... Entonces, déjame ver cómo bailas!– Exclamó Madara antes de lanzarse también directo a chocar contra Natsu
Los brazos de los oponentes chocaron, a lo que la pelirroja lanzo varios golpes rápidos con su pierna, que fueron bloqueados con el antebrazo de Madara
Antes de que la pelirroja pudiera hacer algo más, el Uchiha la lanza a volar con una fuerte patada en el costado de su cuerpo
–AAAH!– Exclamó Natsu en el aire antes de lanzar varios shurikens imbuidos en chakra de viento e impulsados con su magnetismo
–Con esos pasos jamás podrás tocarme– Comentó el Uchiha antes de blandir la espada rota, y de un solo movimiento todos los shurikens fueron cortados como si no fuesen nada
La asesina se coloco en la rama de un arbol antes de apuntar su mano en dirección a Madara
Una poderosa rafaga de viento a precion salió disparada contra el Uchiha, tal era la fuerza que las rocas y árboles alrededor se empezaban a pulverizar por la fricción
–katon... Gouka mekkyaku– Madara hizo un par de sellos antes de expulsar una poderosa llamarada de tamaño colosal
El bosque de inmediato fue sumido en un gran incendio mientras que el viento y el fuego chocaron como 2 fuerzas de la naturaleza... Una gran cantidad de llamas volaron en todas direcciones, junto a corrientes de aire caliente, todo mientras ambas técnicas forcejeaba
–Mierda... Es muy poderoso! Mi aire está siendo rechazado!– Pensó Natsu al notar como su técnica empezaba a retroceder ante la llamarada
Finalmente una gran explosión se desató, quemando más árboles en los alrededores, el terreno de batalla fue cubierto por el humo del incendio
–Tsk! ¿¡A dónde fue!?– Pensó Natsu mientras trataba de buscar a su oponente con la mirada, pero le era imposible, el humo era muy denso y su olfato estaba obstruido por el olor a quemado
De la nada, Madara apareció justo detrás de ella para luego propinarle un puñetazo en la cara
Inmediatamente la pelirroja fue disparada por los aires, saliendo del humo y cayendo en un lago cercano
–No creí que fueras tan sentimental asesina, ¿sacrificar tu vida para salvar a alguien que ni siquiera conoces? Je... La nueva tu es estupida– Dijo el enmascarado mientras aterrisaba de pie sobre el agua del lago
Natsu salió violentamente del agua para después colocarse de pie, tenía sangre saliendo de la boca y su mejilla estaba lastimada
–No pienso permitir, que alguien que confío en mi vuelva a morir... Y menos, si le prometí que la protegería!– Dicho esto, la asesina apretó su puño...
Las garras y colmillos de la pelirroja empezaron a crecer, mientras que su cabello empezaba a ondear con violencia, sus músculos se remarcaron y su pupila se dilató... A lo que Madara se llevó una mano al menton, parecía curioso
–Vaya... Parece que haz evolucionado... Esa transformacion, implica que haz superado tus propios límites físicos y mentales, debiste haber pasado por una situación en extremo traumatica mientras te aferrabas a la vida, para haber despertado esa forma... Eres la tercera persona que lo ha logrado... Ustedes los experimentos de la hermandad, si que son interesantes!– Sonrió Madara a lo que Natsu se lanzo contra el
Una corta pelea de Taijutsu inicio, dónde la pelirroja atacaba con ferecidad y Madara se cubría, la bata de Akatsuki se rasgaba en las mangas por los movimientos violentos de la pelirroja... Está vez, realmente parecía que Natsu era más rápida y fuerte, siendo que Madara se podía defender gracias a su sharingan
La asesina lanzo arañazos con las garras, pero Madara simplemente los esquivo, para finalmente atrapar la muñeca de la asesina
–Sin duda eres más fuerte, pero ese no es tu verdadero potencial– Dicho esto, Madara tomo la espada rota y trato de apuñalar a la pelirroja
Sin embargo, Natsu solo gruñe antes de lanzarle un cabezaso al enmascarado haciendo que su máscara se agriete y retroceda, en ese momento la asesina aprovecha para propinarle una patada al estómago, en ese momento aprovecha para tomar su espada de regreso, la cual nuevamente se tiñó de color rojo
–No tienes ningún derecho a empuñar está espada! Y no me importa tu opinion!– Contesto Natsu antes de correr directo a Madara y tratar de cortarlo con su espada
El Uchiha simplemente se agachó para luego lanzarle una patada al menton, la asesina es lanzada varios a varios metros del suelo, a lo que el Uchiha se coloca en frente de ella y la toma del cabello para luego lanzarla de forma muy violenta al agua
–Katon Goukakkiō no jutsu– Madara tomo aire antes de disparar su poderoso ataque de fuego
En pocos segundos, el gran lago fue reducido a vapor, los árboles de los alrededores se quemaron... Quedando solo un gran crater humeante de tierra quemada donde solía estar el lago
–AGH!– Exclamó Natsu, quien salió disparada del vapor directo contra el Uchiha
La asesina tenía la ropa desgarrada y chamuscada, se podía ver cómo parte de su piel estaba quemada, sin embargo seguía atacando sin importarle aquello
Lanzando cortes con su espada, pero siendo evitados por el Uchiha, quien simplemente parecía bailar sin siquiera ser tocado por la espada, ni siquiera por su hoja de viento invisible
–Tsk... Que le pasa a este sujeto!? Puede ver todos mis movimientos y se mueve con demasiada fluides! Será cosa del sharingan!– Pensó Natsu antes de hacer que su espada se recubriera en chakra de viento y finalmente lanzo una estocada
Sin embargo, Madara se movió más rápido evitando el corte para luego propinarle un golpe en la cara, inmediatamente la pelirroja salió a volar al bosque y choco contra un árbol, sin soltar su espada
–Nada mal, hasta lograste golpearme 2 veces, sabes bailar jejejej... Pero si tuvieras tu otro brazo y tú pierna funcionando, de seguro podrías hacerlo mucho mejor, tu cuerpo está desequilibrado apesar de que tienes más fuerza que yo– Burlo el Uchiha mientras se acercaba a la asesina –Yo podría haberte curado, y aún mejor te ofrecía poder, a tu familia, una alianza... Pero ¿prefieres esto?–
Natsu se colocó nuevamente de pie, ahora respirando pesado... Su ojo izquierdo estaba reventado y botaba sangre por la frente y el párpado, tenía varias heridas en el resto de su cuerpo, más que nada las quemaduras
–Tu y yo... No nos parecemos en nada, Madara, nuestros valores e ideologias son muy diferentes, jamás me unire a ti– Contesto la asesina antes de apretar su agarre en su espada... Las heridas de su cuerpo y de su rostro empezaron a cerrarse, incluso la piel quemada sanaba dejando solo pequeñas manchas de irritacion, y las hemorragias se cortaron a lo que Madara rio
–Que desperdicio, ahora... Admira una pequeña muestra del poder que te ofrecía!– Dicho esto, Madara ejecutó sellos manuales –Mokuton Jukai Kōtan!–
Ante la mirada atonina de Natsu, el suelo empezó a temblar en los alrededores, una gran cantidad de árboles salieron destrozando todo el terreno y dejándola rodeada en un radio de 20 metros
Como si fueran seres pensantes, las ramas empezaron a avanzar a gran velocidad en dirección a la pelirroja para atacarla
–N-no puede ser... ¿¡Mokuton!? ¿¡Este tipo es un dios!?– Pensó Natsu mientras veía como aquellas ramas se aproximaban en todas direcciones
Al ver ello, apretó el agarre en su arma, el viento a su alrededor también empezó a moverse mientras ella se coloca en postura defensiva
–EN FIN! NO ME IMPORTA! NO PIENSO MORIR AQUI!– Exclamó mientras lanzaba múltiples cortes con su espada
El viento se movía con cada vez más violencia, el piso se agrietaba, rocas volaban en todas direcciones, todo mientras las ramas de los arboles eran rebanadas
La asesina corrió directo a las ramas mientras estás aún crecían, y ella seguía lanzando cortes tan rápido como le era posible hasta que simplemente estaba tan cubierta de ramas que no podía seguir corriendo
–Es inútil, aunque las cortes mil veces, estás ramas seguirán creciendo– Comentó Madara
–callate!– Exclamó Natsu mientras lanzaba movimientos mucho más agresivos, en los cuales cortaba la madera incluso a 10 metros de distancia, estaba cortando en 360° grados, tanto las ramas que veían del frente, derecha izquierda o atras, pero seguía llegando más y más madera, la cual la rodeaba poco a poco
–¿Que tal si hacemos las cosas más divertidas?– Burlo Madara antes de escupir una gran bola de fuego, recubriendo todo en llamas
–Ugh!– Natsu podía ver cómo las ramas aún se movían en plena combustion, cada vez que las cortaba, parecía que el fuego se intensificaba debido al uso de su aire
Entre más se movía para defenderse, más difícil se hacían las cosas
–Tsk... No puedo respirar... Y siento como el calor me debilita...– El sudor recubría el cuerpo de la asesina, mientras que sus movimientos se hacían más lentos y torpes, al mismo tiempo sus piernas temblaban
–Veo que estás alcanzando tu límite– Comentó el enmascarado mientras algunas de las ramas incendiadas empezaban a rasguñar a su oponente
La pelirroja podía sentir como la madera ardiente quemaba su piel... Apenas y podía moverse con suficiente habilidad para no ser atravesada de lado a lado por ellas y morir
–Si sigo así... Voy a morir...– Se dijo a si misma la asesina mientras su mirada se volvía borrosa –Necesito... Respirar...–
Una de las ramas se clavo en su pierna izquierda, a lo que ella intento cortarla, solo para que otra más pequeña le perforara el brazo de lado a lado en el bíceps
–AGH!– Exclamó antes de soltar su espada, la cual cayo al suelo
–Se acabo– Pensó el enmascarado
Entonces una gran rama con una punta afilada voló para clavarse en el abdomen, mientras otras de menor tamaño volaban en todas direcciones para acabar con el trabajo...
–No moriré... No... No lo haré!– Exclamó la pelirroja mientras botaba sangre por la boca –ARDERE AL MAXIMO!–
–¿Eh?–
En eso, una poderosa ondea de choque fue liberada por la Uzumaki
Las ramas de los alrededores se empezaron a desmoronar, la nariz de la asesina sangro aún más, al igual que sus ojos, varias venas se remarcaron en su frente, todo mientras gritaba a todo pulmón de forma desgarradora
–Este poder... Su chakra está ardiendo...– Pensó Madara mientras observaba con su sharingan
El chakra de la Uzumaki empezaba a ser visible, era un manto de chakra que la recubría y se dispersaba en el aire como si fuera una flama, mientras que las ramas seguian atacando, pero eran destruidas al instante por las corrientes de aire
–MAXIMO ESFUERZO!– Exclamó mentalmente la asesina mientras las corrientes de viento se intensificaban y el aura flameante crecía más y más extendiéndose
Las ramas de los alrededores eran reducidas a astillas mientras trataban de acercarse, los árboles de los alrededores empezaban a caerse por la fuerza de los vientos
–Jajaja! Es un poder increíble! Tenía razón sobre tu potencial!– Exclamó Madara emocionado mientras notaba que el chakra de la asesina estaba en todas partes, era muy visible, incluso sin en sharingan
A la distancia, Kakuzu y Deidara se habían alejado de la pelea, ya estaban a kilometros... Cuando depronto pudieron ver aquella aura flameante desde lo lejos, seguida de una fuerte corriente de viento
–¿¡Que es eso!?– Exclamo Kakuzu mientras se cubría los ojos, el polvo junto a pequeños escombros de roca y árbol volaba hasta allí... Sin mencionar, que podía sentir aquella aura asesina en el aire, apesar de estar realmente lejos
–Jo! Esto debe ser arte!– Exclamó Deidara con una sonrisa
El ave de arcilla se tambaleaba en el aire debido a las violentas corrientes de viento
Madara por su lado se colocó de pie a algunos metros en frente de Natsu
–DEJAME VER DE LO QUE ERES CAPAZ!– Exclamó Madara mientras que su cuerpo era cubierto por la caja torácica de su Susanoo azul
–AAAAAHHH!!!– Grito la asesina a todo pulmon finalmente desatando todo su poder, incluso se podian ver flamas volando a su alrededor, el aire se estaba moviendo tan rápido que empezaba a entrar en combustión
–Katon: Gouka mekkyaku!– Exclamo Madara antes de disparar una gran muralla de fuego
Finalmente, un gran poder destructivo fue desatado por la pelirroja, una gigantesca explosión de aire comprimido fue liberada, destruyendo todo a su paso a decenas de kilometros a la redonda, el bosque fue reducido a polvo y astillas... El gran muro de llamas de Madara, fue arrastrado casi al instante en que la explosión se libero
Desde lejos se podía ver la explosión resultante, era como ver un enorme domo que se volvía más y más grande, arrastrando polvo, humo y fuego en los bordes
–jajaja! Mira eso! Es una obra maestra!– Exclamó Deidara mientras analizaba con su visor
En eso, se percató de cómo el ave de arcilla empezaba a desintegrarse por la violencia de la técnica, la masa se estaba rasgando por los fuertes vientos
–Sera mejor que nos alejemos!– Contesto Kakuzu mientras tomaba a Yugito y la colocaba en su espalda
–bien! Solo dame un... ¿¡Eh!?–
Ante la mirada atónita de ambos Akatsuki, Natsu salió volando en línea recta desde el centro de la explosión, era un proyectil humano que viajaba a gran velocidad, tenía su espada en la boca y su mano libre estaba extendida en dirección a ellos
–NO SE IRAN!– Exclamo la pelirroja
En un movimiento instantáneo la mujer corto las distancias, destrozo el ave de arcilla, y golpeo a Kakuzu partiendolo en 2 y dejando que cayera al vacio... Y con suma habilidad, tomo a Yugito para después seguir volando hasta desaparecer de la vista de los Akatsuki
–mierda!– Pensó Deidara mientras caia, al vacío y se preparaba para crear una nueva ave
Tras un momento de caída libre, el Akatsuki logro crear un búho en el cual detuvo su caída
–No puedo ver a dónde se fue! Cruzo muy rápido!– Exclamó el Akatsuki mientras intentaba usar su visor para encontrar a la pelirroja pero no podía ver nada y la explosión aún generaba corrientes de aire que le impedían a su búho mantenerse estable
Después de algunos momentos, la explosión finalmente se disipó... Dejando solamente un enorme cráter en la region, era un gigantesco agujero en el cual ya no había ni una sola alma, incluso el cielo encima de aquella nube había quedado vacío, las nubes habían formado un círculo perfecto
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A lo lejos...
–De dónde vino eso! Es una fuerte corriente de viento! Puedo sentir algo raro en ella!– Exclamó Gai mientras el y su equipo se tapaban los ojos –Esta onda de choque... La fuente debe ser muy poderosa... Incluso más que el Hirudora...–
La corriente que había llegado hasta ellos, era tan fuerte que el aire estaba caliente, levantaba polvo y hacían mecer las hierbas con violencia... Pero, por suerte para ellos, estaban fueran del rango de la explosión, solamente habían sido tapados con una nube de polvo
–No se de dónde vino eso... Pero, puedo ver mucho chakra en el aire... está por todos lados– Contesto Sasuke mientras usaba su sharingan
–¿¡Creen que algo malo ocurrió con el equipo de Kakashi-sensei!?– Comentó Lee preocupado
–No lo creo... Este aire proviene del sur... Ellos fueron al norte... Aún asi... Percibo un olor a sangre en este aire..– Contesto Kiba
–Lo mejor será que... Eh!?– En eso, Gai fue interrumpido, cuando depronto una explosión se desató en frente de ellos
–Al fin nos volvemos a ver! Bestia!– Exclamó Kisame mientras salía del humo
–Tu!... Tu eres!– Contesto Gai al ver quién estaba en frente
–Oh, si que soy yo... Ya es momento de devolverte aquella patada que me diste!– Contesto el tiburón de Akatsuki a lo que Gai lo señalo con seriedad
–Tu! ¿¡Quien eres!?– Exclamó Gai, a lo que Kisame se quedó en silencio... Algo decepcionado
–Asi que no me recuerdas... Parece que en verdad tienes la inteligencia de una bestia, pero no importa, te haré recordarme a golpes!– Exclamó el Akatsuki mientras empuñaba su arma
–Tengan cuidado! Ese tipo tiene un chakra increible– Agrego Sasuke mientras todo el equipo se colocaba a la defensiva
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En alguna colina lejana
–Ugh... Que fue lo que ocurrió...– Dijo Yugito mientras se colocaba de pie, le dolía la cabeza, por lo que se llevó la mano a la frente –Eh!?–
En eso, la Jinchuriki se asustó al ver cómo sus manos estaban cubiertas de sangre, y no solo eso, tenía sangre en otras zonas...
Casi entrando en pánico empezó a palparse a si misma, tras lo cual noto que esa sangre no era suya
–Parece que despertaste...– Comentó una débil voz
La Jinchuriki volteo la mirada, inmediatamente pudo ver a Natsu tirada en el suelo, la asesina respiraba pesado, su ropa estaba totalmente desgarrada dejando ver qué tenía múltiples heridas y quemaduras, tenía un agujero en el brazo donde había sido perforada con la rama al igual que en su pierna izquierda, mientras que su espada estaba tirada a un lado de cabeza
–Natsu!– Yugito se acercó rápidamente a la asesina mirando de cerca todas sus heridas
–No te preocupes... He sobrevivido a peores, además no me estoy desangrando... vivire– Contesto la pelirroja apenas consciente tratando de sentarse en el piso, pero no podía ni apoyarse de su brazo o de sus piernas, estaba muy debil
–¿¡Que fue lo que ocurrió!? Cómo es que!?...– Trato de preguntar la rubia, a lo que la asesina le hizo una señal para que se callara
–Te dije que no gritaras o nos podrían encontrar... Fuimos atacados, nos defendí y hemos salido vivas... Eso es lo que importa – Contesto Natsu
–Estas muy herida... Y se nota que también estás muy agotada...– Contesto Yugito... Después de ver el estado de su acompañante, no podía dudar de que en verdad, la pelirroja le estaba ayudando...
–Me he quedado sin chakra... Aún así, será mejor movernos... No podemos quedarnos aquí, o nos encontraran– Declaró la asesina, por lo que Yugito asintio –Mierda... Me siento ridícula... No puedo moverme... Y como estoy ahora, se que no podré caminar debido a mi pierna izquierda... No tengo chakra para moverla...–
Sin esperar a más, la rubia coloco la espada de vuelta en la funda que la pelirroja traía en la cintura, luego puso a la asesina en su espalda, con su brazo por encima de su hombro
–¿Que estás ha...?– Trato de preguntar Natsu pero fue interrumpida
–Sera mejor que descanses... Yo me encargo del resto...– Contesto Yugito, a lo que la pelirroja dejo escapar un suspiro
–Gracias...–
–Yo soy quien debe agradecerte...– Contesto Yugito, solo para notar que la pelirroja se había quedado dormida con la cabeza recostada en su hombro, ante lo cual la rubia solo sonrio
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Mientras, en el crater...
–Son duda... Tenía un poder increible, tuve que usar la segunda forma del Susanoo y aún así fue destruido– Comentó Madara
El Uchiha salió de entre los escombros de árbol y roca, su bata de Akatsuki estaba rasgada desde su hombro izquierdo hasta la cadera derecha, dejando ver una armadura femenina en su dorao y su brazo expuesto, bastante delgado para ser de un hombre...
Al caminar un poco, su máscara se empezó a desmoronar, pues estaba muy dañada debido a la explosion, hasta que finalmente se cayó por completo, aún así su cabello cubría gran parte de su cara
–Esa explosión a dispersado su gran chakra por todos lados... No puedo ver a dónde se fue, no hay olores ni huellas... Ha logrado escapar– Pensó para si la Uchiha –je... Kiramane... Resultaste divertida, eres el segundo asesino que logra divertirme–
–Ahi estás, pensamos que tú...– Dijo Kakuzu mientras bajaba junto a Deidara en aquel búho de arcilla... Pero se había quedado callado al notar el rostro de quién estaba allí... Y su mirada... Lo había intimidado
–Silencio anciano, era claro que algo como eso no iba a matarme, no soy tan débil como ustedes– Está vez, ya no se escuchaba aquella voz gruesa... Ahora se escuchaba la voz de una mujer, pero no dejaba de ser imponente e intimidante, era una voz autoritaria... A la cual claramente Kakuzu temia... Más que nada, porque podía ver su rostro...
–La Jinchuriki escapó... La asesina...– Trato de decir Deidara, a lo que Madara simplemente suspiro y negó con la cabeza
–No importa, sabemos que la Jinchuriki está viva, estará a salvó, la recuperaremos despues...– Contesto la Uchiha para luego dirigirles una mirada fulminante con su sharingan
Tanto Kakuzu cómo Deidara no pudieron evitar dar un paso atrás, y derramar sudor frio al sentir aquella mirada, ver aquel rostro y mas aun sentir aquella aura que emanaba, cargaba un aire muy penetrante y siniestro
–Hemos terminado aquí. Kakuzu, esta claro que tienes prohibido hablar de lo que pasó aquí... Si lo haces o siquiera lo piensas, te regresaré de la forma más dolorosa posible al infierno del que te traje– Dijo la mujer a lo que ambos Akatsuki se se agacharon en señal de respeto
–Hai...–
En eso, Madara levanto la mirada viendo en otra dirección... Deidara y Kakuzu también... Era una sensación de muerte, era una sensación monstruosa que de la nada cubría el ambiente
–¿¡Que es eso!? Está aura... Siento asco... ¿¡Que demonios es esa sed de sangre!?– Exclamó Kakuzu mientras fruncía el seño...
Para el anciano ya era suficiente tener a Madara a un lado, quien de por sí ya le daba miedo... Ahora, aquella aura... Era el colmo
–je... Es un sed de sangre, muy pesada... Debo decirlo, me gustaria destruirla, hacerla explotar... Porque realmente es muy repugnante– Comentó Deidara más calmado que su compañero, pero el también se sentía intimidado por aquella sensación y por el hecho de tener a la falsa Madara a su lado
Por su lado, Madara solo rio
–Vaya, vaya... Esto me trae buenos recuerdos... parece que algo divertido está ocurriendo cerca de aquí...– Comentó Madara
–¿Que haremos?– Pregunto Kakuzu, a lo que la Uchiha solo se alzó de hombros
–Es momento de irnos– Dicho esto, la mujer simplemente desapareció en el aire de forma instanea
Fin Capitulo 33
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